La Conferencia Episcopal Ecuatoriana analizará la crisis provocada por el presidente Correa con Mons. Arregui

(El Universo/InfoCatólica) Mons. Fausto Trávez, presidente de la CEE, ha concedido la siguiente entrevista al diario El Universo:

¿Cómo toma el anuncio del jefe de Estado sobre que envió una carta de protesta a la Nunciatura Apostólica por las declaraciones de Arregui?

El día jueves nos reuniremos para no solamente tratar ese tema, hay muchísimo de qué tratar para sacar adelante al país, porque, como hermanos que somos, necesitamos ayudar a toda la gente ante los problemas que está viviendo el país. No solamente son políticos, son bastante serios: la bajada del (precio del) petróleo, los paros, la frontera con Colombia, el Cotopaxi, la caída de la bolsa en China.

¿Cuál podría ser la propuesta de la CEE de cara a estos diversos problemas?

Que tenemos que unirnos; tenemos que estar unidos mediante la fraternidad, el diálogo y la comprensión, porque si nos ponemos a juzgar, a atacarnos, nos desunimos más y creamos otro frente de lucha en vez de solucionar los que ya tenemos.

¿Se toma como un ‘ataque’ el envío de la carta de protesta hacia el arzobispo Arregui?

No sé de la carta, no sé qué contenido (tiene); no vi el sábado tampoco (la sabatina presidencial). Yo no puedo tomar la palabra de toda la CEE, pero me parece que todo ciudadano, no solamente él (en alusión a Correa), estamos en el derecho de dirigirnos a la Santa Sede. Naturalmente, la Santa Sede comprobará y verá videos (para decidir).

¿Cuál sería el trámite en la Nunciatura Apostólica?

De la carta que no conozco no sé tampoco; no sé cuál sería.

La CEE consideró una ofensa lo dicho por Mera, e informó que esperaba una disculpa. ¿Se ratifica en esta postura?

Nosotros creemos que él como persona culta, preparada y muy católica, como él mismo se manifiesta, (debe) acercarse a monseñor Arregui y hacer las paces, eso yo creo.

¿El gesto de paz también debería venir de Correa?

Yo creo que de todos los ecuatorianos. Ahora no tenemos tiempo para estar en discusiones y menos todavía en dividirnos. Eso sí, yo digo a todos los ecuatorianos que nos unamos. No quiero culpar a nadie, porque la equivocación más grande de un líder es buscar culpables; ante los problemas hay que buscar soluciones.

La temática propuesta por el Gobierno para el diálogo es ‘equidad y justicia social’. ¿A la Iglesia católica le interesaría aportar?

Necesariamente. Todos los documentos de la Iglesia y la doctrina social de la Iglesia están tendiendo siempre a la igualdad y a la ayuda mutua. Lo que el papa Francisco dijo últimamente: la gratuidad, que se refiere al amor. Luego, pues, la cooperación mutua y la subsidiariedad; son los temas que el papa ha dicho en su última visita a Ecuador.

La CEE abogó por el diálogo cuando en junio pasado, y a días de la llegada del papa, había manifestaciones contra el régimen. ¿Por qué cree usted que entonces no hubo objeciones del Gobierno a este pronunciamiento?

Ahí sí no puedo decir por qué será; tendrán sus razones y habría que preguntarles a ellos. No me imagino cuál será su propósito. (I)