«Cada cinco minutos muerte un cristiano a causa de su fe»

Beatificadas en Gerona tres religiosas mártires de la Guerra Civil Española

 

El Cardenal Angelo Amato destacó que las hermanas dieron su vida aunque «no eran una amenaza». Algo que se repite en la actualidad ya que, según ha dicho el Cardenal, «cada cinco minutos muere un cristiano a causa de su fe». «Los cristianos están llamados en todos los tiempos a dar testimonio de fidelidad y alegría», ha destacado.

6/09/15 8:57 AM


(ACI/Blanca Ruiz) Unas 1300 personas acudieron a Gerona (España) para la beatificación de las hermanas Fidela Oller, Josefa Monrabal y Facunda Margenat, que fueron de las primeras víctimas mártires por la persecución religiosa durante el verano de 1936, poco después del inicio de la Guerra Civil Española.

Concelebrando con el Cardenal Amato, Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, se encontraba el Obispo de Gerona, Mons. Francesc Pardo, y el Cardenal Antonio Cañizares, Arzobispo de Valencia; ya que la causa de beatificación comenzó en esa diócesis donde dos de ellas fueron asesinadas.

Según ha recordado el Cardenal Amato durante la homilía, las hermanas Fidela, Josefa y Facunda «no eran una amenaza para nadie pero fueron asesinadas porque el enemigo de Dios y del hombre entró en el corazón del hombre en modo del odio para suprimir a quienes hacían el bien».

El Cardenal Amato también ha explicado que los tiempos de persecución de los cristianos aún no han terminado ya que, según ha dicho, «son la minoría más perseguida del mundo». El Purpurado ha destacado que anualmente los cristianos asesinados por causa de su fe son más de 100 mil, «cada cinco minutos muerte un cristiano a causa de su fe».

«Lo que nos recuerda que los cristianos son llamados en cada tiempo a dar testimonio de fidelidad y alegría», ha precisado. También ha asegurado que «el martirio no se improvisa, ya que antes de su sacrificio supremo las tres religiosas eran ejemplares y auténticas siervas de la caridad de Dios hacia los enfermos».

Tres hermanas de Europa, África y América Latina, una por cada continente en el que el Instituto está presente, llevaron las palmas que simbolizan el martirio durante la ceremonia de beatificación.

La hermana Fortunee Mokabirasa de Rwanda representaba a África y declaró a ACI Prensa que «estas tres hermanas son una grandísima motivación para que el resto sigamos sirviendo a los enfermos hasta entregar la vida como hicieron ellas».

Las hermanas del Instituto presentes en Gerona estuvieron acompañadas por otras congregaciones como las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, quienes afirmaron a ACI Prensa que les une el carisma del cuidado a los enfermos, pero sobre todo «la unión en Cristo, porque formamos parte de la misma Iglesia».

Entre las autoridades civiles presentes en el acto se encontraba Jorge Fernández Díaz, Ministro del Interior, el alcalde de Gerona y la presidenta del Parlamento de Cataluña, Nuria Gispart, entre otros.

Los más de 7.000 euros recaudados a través de las inscripciones se han destinado íntegramente a Ayuda a la Iglesia Necesitada y Médicos Sin Fronteras que trabajan con los afectados por la persecución religiosa en Siria y por la crisis migratoria del Mediterráneo.

El Instituto de Religiosas de San José de Gerona

Fundado en 1870 por la venerable Maria Gay Tibau, el Instituto de Religiosas de San José de Gerona (IRSJG) desarrolla su tarea en los ámbitos de la salud, la educación y la asistencia geriátrica, llevando a cabo una labor de acompañamiento en la enfermedad, la vejez y la marginalidad.

Actualmente, el Instituto está presente en tres continentes -Europa, América Latina y África-, desarrollando el legado de la fundadora de »aliviar el dolor y sembrar la paz» entre los más desfavorecidos. Más de 400 hermanas colaboran en las 54 comunidades que el Instituto tiene repartidas por el mundo.

La obra social del Instituto tiene como finalidad la atención en los centros de proximidad europeos así como la asistencia de las necesidades de países y zonas de África y América Latina. Destacan proyectos concretos como los centros de asistencia y promoción de la salud en Rubare, Nyarusange, Kolondom y Bata en territorio africano así como a Aguablanca, Arequipa y Lima en América Latina.

La acción de la obra social impacta de forma positiva en más de 200.000 personas anualmente.