Loli Aguilar,  la nueva directora en Málaga  de Proyecto Hombre es una “voluntaria” de cualquier cosa por donde circule el Bien. En la lucha antidroga ha encontrado su vocación. Proyecto Hombre celebra sus 30 años de vida con dos actos los días 27 y 29 de noviembre.

Llevo en esto mucho tiempo. Ya en el año 1985 me fui a Roma para aprender a luchar contra la plaga que se avecinaba.

-¿A Roma?

Allí empezó el gran movimiento que luego se llamó “Proyecto Hombre”. La Iglesia nunca ha sido ajena a este problema de la “huida”.

-¿Drogarse es huir?

Claro.

-¿De qué?

De una sociedad que produce monstruos.

(Loly tiene las ideas claras)

Han desaparecido las fronteras entre el bien y el mal. Han quitado a Dios de las estructuras sociales… El hombre se refugia en la droga; una forma de huir.

-¿Cómo es el drogadicto?

Generalmente, un hombre, de poco más de treinta años, con hijos, que se siente incapaz de luchar en la vida. Últimamente, hay muchísimas mujeres también entregadas a la droga.

-Cuénteme…

Mujeres maltratadas que soportan, además, la soledad. Al final, se refugian en la droga.

-¿Por qué aguantan malos tratos?

Por amor. La mayoría de ellas, sienten la necesidad de conservar la estructura familiar donde viven sus hijos.

Dicen que cada vez hay más niños drogadictos

Son un grupo creciente. Aumenta a toda velocidad. Niños de entre trece y dieciocho años que, por diversas razones, no encuentran otro camino.

(La voz de Loli suena triste. Digo, por decir…)

-Hay un autor, llamado de Giorghiu, convencido de que vivimos en la “Hora 25” La hora inexistente. El día sólo tiene 24.

Estoy de acuerdo. ¡De acuerdo, por completo!

(José Luis Navas – Diócesis de Málaga. Foto: S. Fenosa)