El pasado día 4 de marzo eran martirizadas en Adén, capital de Yemen, cuatro Misioneras de la Caridad, las populares monjas de la Madre Teresa de Calcuta. Fue durante un asalto cometido por hombres uniformados que entraron en el convento y asesinaron a 13 personas más, también por motivos religiosos. El mismo grupo terrorista mantiene secuestrado al P. Tom Uzhunnalil, salesiano. Los cristianos conocemos bien hasta qué punto el brutal conflicto está llevando a Yemen a convertirse en un estado fallido y a colocarlo al borde del colapso.

Se presenta ahora un interesante informe de UNICEF en el que nos deja helados el titular que afecta a los niños. Cerca de seis niños son heridos o mueren cada día Niños de tan solo diez años son reclutados para combatir en un país en riesgo de convertirse en estado fallido El brutal conflicto y una situación humanitaria que se deteriora rápidamente están devastando las vidas de los niños de Yemen y han llevado al país al borde del colapso.

El impacto de la violencia y el conflicto en Yemen y sus niños, destaca que la violencia tiene graves consecuencias para los niños, así como el empeoramiento de una situación humanitaria que ya antes era precaria. El citado informe ha verificado más de 1.560 incidentes de violaciones graves contra los niños en Yemen.

Como resultado de éstas, más de 900 niños murieron y más de 1.300 fueron heridos solo el año pasado, lo que supone una media de seis niños muertos o heridos cada día. Estas cifras son casi siete veces más altas que las de 2014. Con más de 50 ataques a escuelas confirmados, los niños fueron también asesinados cuando estaban en el colegio o en su camino hacia o desde la escuela. Estas cifras son solo la punta del iceberg, ya que únicamente muestran los casos que UNICEF ha podido confirmar. “Los niños están pagando el precio más alto por un conflicto que no han provocado.

Han sido asesinados o mutilados en todo el país, y ya no están seguros en ningún lugar de Yemen. Incluso jugar o dormir se ha vuelto peligroso”, dijo Julien Harneis, representante de UNICEF en Yemen. A medida que la guerra se intensifica, el reclutamiento y uso de niños en los combates sigue aumentando. Los niños están adoptando papeles mucho más activos, como operar en puestos de control y llevar armas. reitera su llamamiento a todas las partes del conflicto para que pongan fin a la lucha en Yemen y alcancen una solución política.