Servicio diario - 17 de mayo de 2016


 

El Papa en Sta. Marta advierte de los ‘trepadores’ en la Iglesia que buscan subir alto
Posted by Redaccion on 17 May, 2016



(ZENIT – Ciudad del Vaticano).- El papa Francisco ha recordado en la homilía de la misa celebrada esta mañana en Santa Marta que el camino que indica Jesús es el del servicio, pero a menudo en la Iglesia se busca poder, dinero y vanidad. Asimismo ha subrayado que los cristianos deben vencer la “tentación mundana” que divide a la Iglesia y ha advertido sobre los “trepadores” que tienen la tentación de destruir al otro “para subir alto”.
De este modo ha recordado, tal y como se lee en el Evangelio del día, que Jesús enseñaba a los discípulos el camino del servicio, pero ellos se preguntaban quién era el más grande entre ellos. Jesús –ha precisado el Santo Padre– habla en un lenguaje de humillación, de muerte, de redención y ellos hablan en un lengua de trepadores: ¿quién subirá más alto al poder?
Al respecto, el Papa ha indicado que esta es “una tentación que tenían”, eran “tentados por la forma de pensar del mundo mundano”. Se preguntan quién era el más grande mientras que Jesús les pide ser el último, “servidor de todos”.
En esta misma línea, el Pontífice ha asegurado que “en el camino que Jesús les indica para ir adelante, el servicio es la regla. El más grande es el que sirve, el que está más al servicio de los otros, no el que presume, que busca el poder, el dinero… la vanidad, el orgullo… No, estos nos son grandes”. Y así ha advertido de que en toda comunidad –en las parroquias o en las instituciones– siempre está este deseo de trepar, de tener el poder.
También en la Primera Lectura, de la Carta de Santiago, ha añadido Francisco, advierte sobre las pasiones por el poder, las envidias, los celos que destruyen al otro.
Y este es el mensaje también para la Iglesia hoy. Mientras el mundo habla de quién tiene más poder para mandar, Jesús afirma haber venido al mundo “para servir”, no “para ser servido”.
De este modo ha explicado que la envidia y los celos destruyen todo. Por eso ha recordado que esto sucede hoy en cada institución de la Iglesia: parroquias, colegios, episcopados… “Las ganas del espíritu del mundo, que es espíritu de riqueza, vanidad y orgullo”, ha señalado.
Jesús –ha aseverado– ha venido al mundo para servir y nos ha enseñado el camino en la vida cristiana: el servicio, la humildad.
Por otro lado, el Pontífice ha precisado que “cuando los grandes santos decían que se sentían muy pecadores es porque habían entendido este espíritu del mundo que estaba dentro de ellos y habían tenido muchas tentaciones mundanas”. Ninguno de nosotros puede decir: ‘No, yo soy una persona santa, limpia’, ha precisado Francisco.
Por esto, ha explicado que todos somos tentados por nuestras cosas, somos tentados de destruir al otro para subir más arriba. “Es una tentación mundana, pero que divide y destruye la Iglesia, no es el Espíritu de Jesús”, ha añadido.
A finalizar la homilía, el Santo Padre ha invitado a pensar en las muchas veces que hemos visto esto en la Iglesia y en las muchas veces que nosotros hacemos esto. Y por esta razón, “pedir al Señor que nos ilumine, para entender que el amor por el mundo, es decir por este espíritu mundano, es enemigo de Dios”.



Entrevista de La Croix al Papa: Islamismo, inmigración, integración y terrorismo
Posted by Redaccion on 17 May, 2016



(ZENIT – Roma).- El diario francés La Croix entrevistó al papa Francisco, el 9 de mayo. En la entrevista del periodista Sébastien Maillard, publicada este lunes, le pregunta sobre el terrorismo islamista, los migrantes, el laicismo, la crisis de las vocaciones, los escándalos de la pedofilia, el caso del cardenal Barbarin y la relación con los lefebvrianos. En la pregunta sobre un posible viaje apostólico a Francia, el Papa recuerda que la ‘hija primogénita de la Iglesia’ hoy es una ‘periferia para evangelizar’.
El terrorismo islamista fue uno de los temas, y Francia conoce bien las heridas después de los ataques de noviembre en París, y antes a la redacción de Charlie Hebdo.
El Santo Padre invita a un examen de conciencia: “Sería mejor interrogarse sobre el modo en el cual un modelo demasiado occidental de democracia ha sido exportado a países como Irak, donde anteriormente existía un poder fuerte”. O en Libia “donde existe una estructura tribal”. Y recordó que un libo dijo recientemente que estaban acostumbrados a dictador como Gadaffi, y ahora tienen cincuenta.
Europa y la islamofobia, fue la segunda respuesta del Papa, y precisa que se trata más de “miedo por el Isis y su guerra de conquista que en parte es tomada del islam”. Aunque reconoció que “la idea de la conquista es parte del espíritu islámico”, pero “se podría interpretar según la misma idea de conquista el final del evangelio de Mateo, cuando Jesús envía a sus discípulos a todas las naciones”. Entretanto Francisco asegura que “la convivencia entre cristianos y musulmanes es aún posible” y afirma que “yo vengo de un país en donde conviven bien”.
La inmigración en Europa y el terrorismo es otro de los temas tratados, y sobre la capacidad del Viejo Continente de recibir tantos refugiados. “Esta es una pregunta responsable, porque uno no puede abrir las puertas de manera irracional” aunque la pregunta de fondo es, asegura el Papa “por qué ahora hay tantos migrantes. Los problemas en la base son las guerras en Oriente Medio y en África y el subdesarrollo del continente africano, que provoca hambre”.
“Si hay guerras se debe a los fabricantes de armas, que podrían ser justificados por motivos de defensa, y sobre todo los traficantes de armas. Si existe tanta desocupación es por falta de inversiones que creen trabajo, del que África necesita tanto”.
De todos modos “la peor forma de acogida que puedan tener los inmigrantes es la ser puestos en un gueto” señala Francisco.
“Pensemos en Gregorio Magno, que había negociado con pueblos desconocidos como los bárbaros, los cuales después se han integrado…”. Precisa también que los terroristas de Bruselas “eran hijos de inmigrantes que crecieron en un gueto”. Además la necesidad de integrar es más necesaria que nunca, “porque hoy debido a una búsqueda egoísta del bienestar, Europa está viviendo el grave problema de una natalidad en disminución”.


Entrevista de La Croix al Papa: Economía de mercado, eutanasia, objeción de conciencia y laicismo
Posted by Redaccion on 17 May, 2016



(ZENIT – Roma).- El Santo Padre en la entrevista a La Croix, hecha el 9 de mayo y publicada ayer, aborda otros temas que proponemos a continuación.
El sistema económico mundial hoy indica el Papa, ha caído en la idolatría del dinero, en donde “más del 80 por ciento de las riquezas de la humanidad están en un 16 por ciento de la población”. El Santo Padre asegura que “un mercado completamente libre no funciona” y si bien “los mercados en sí son un bien, necesitan una tercera parte o un Estado que los controle y equilibre. O sea, lo que es necesario es una economía social de mercado”.
Eutanasia, uniones civiles y objeción de conciencia entran también en la entrevista. Sobre cómo tienen que comportarse los católicos Francisco señala: “Es el Parlamento quien discute, argumenta, explica, expone las razones”, y añade que “es así que una sociedad crece”. Cuando una ley es aprobada, el Estado tiene que respetar las conciencias. Así Francisco reitera “el derecho a la objeción de conciencia”, que es necesario reconocer “en el interior de cada estructura jurídica, porque es un derecho humano”. Esto vale “también para un funcionario público que es una persona humana”. El Estado –asegura el Papa- tiene que tener en consideración las críticas. “Esta sería una verdadera forma de laicismo. No se pueden dejar de lado los argumentos planteados por los católicos diciendo simplemente ‘que hablan como un cura’. No, estos se apoyan en el pensamiento cristiano que en Francia se ha desarrollado de una manera notable”, precisa Francisco.
Sobre el laicismo, el Papa asegura que “los Estados tienen que ser laicos y los confesionales acaban mal, están contra la historia”. “Yo creo que la versión del laicismo tiene que ser acompañado por una ley sólida que garantice la libertad de religión”. Y añade que “cada uno debe tener la libertad de expresar la propia fe”: si la mujer musulmana quiere usar el velo “debe poder hacerlo” y esto vale “si un católico quiere usar una cruz”.
Es importante entretanto “no exagerar con el laicismo” porque “lleva a considerar las religiones como sub-culturas, en vez de culturas con plenitud de derechos”. Francisco expresa su temor de que esta actitud, un patrimonio del iluminismo, siga existiendo. “Francia tiene necesidad de dar un paso hacia adelante en este tema, para aceptar que la apertura a la transcendencia es un derecho de todos”.
La falta de vocaciones, es otro de los temas abordados en la entrevista. Y el Santo Padre recuerda que Corea “fue evangelizada durante 200 años por los laicos”. Una demostración de que para la evangelización no son necesarios los curas.
Por lo que se refiere al cardenal Philippe Barbarin, acusado recientemente por cubrir un caso de sacerdotes pederastas, antes de haber llegado como obispo de la diócesis en cuestión, el Santo Padre reitera: “Como ha dicho Benedicto XVI es necesaria la tolerancia cero”. Ahora Barbarin “no tiene que renunciar”, porque “sería un contrasentido, una imprudencia. Se verá después de la conclusión del proceso, pero ahora significaría admitir su culpabilidad”.
Y sobre los lefebvrianos, el Papa indicó que el superior de la Fraternidad San Pío X, Mons. Bernard Fellay “es un hombre con el cual se puede dialogar”. También aseguró que son “católicos en camino hacia la plena comunión” y que es necesario proceder en el diálogo “lentamente y con prudencia”.


Pésame del Santo Padre por el fallecimiento del cardenal Coppa
Posted by Redaccion on 17 May, 2016



(ZENIT – Ciudad del Vaticano).- Un “estimado hombre de Iglesia” que “ha testimoniado sabiduría pastoral y afectuosa atención a las necesidades de los otros, yendo al encuentro de todos con bondad y mansedumbre”. Es el recuerdo que con “profunda conmoción y sincera admiración” el papa Francisco refleja en el telegrama de pésame por la muerte del cardenal Giovanni Coppa, fallecido este lunes en Roma a los 90 años.
El funeral será celebrado este miércoles en la Basílica de San Pedro por el cardenal decano, Angelo Sodano, y al finalizar el papa Francisco acudirá para presidir el rito de la ‘última commendatio’ y de la ‘valedictio’.
Nacido en la localidad italiana de Alba, fue ordenado sacerdote en 1949 y en el 1952 comenzó su servicio en la Santa Sede en la Cancillería Apostólica. En 1958 le trasladaron a la Secretaría de Estado y algunos años después participó en el Concilio Vaticano II como experto latinista, que lo llevó a colaborar en la redacción de documentos con “trabajo generoso y competente”, subraya el papa Francisco.
Fue consagrado obispo por Juan Pablo II el 6 de enero de 1980. Diez años después fue enviado como nuncio apostólico en la entonces Checoslovaquia, por tanto asume en 1993 el cargo de representante pontificio en la República Checa y Eslovaquia, siendo nuncio en Praga hasta 2001.
Benedicto XVI lo creó cardenal en el Consistorio del 24 noviembre de 2007 y el pasó sus últimos años en el Vaticano. Tras su fallecimiento, el colegio cardenalicio queda compuesto por 214 cardenales, de los cuales 114 electores y 100 no electores.



Congreso en el Vaticano pide acceso sanitario para los niños con Hiv
Posted by Redaccion on 17 May, 2016



(Ciudad del Vaticano – ZENIT).- El cardenal Peter Kodwo Appiah Turkson en un congreso sobre asistencia médica pediátrica señaló que “en diversas partes del mundo y en particular en muchas regiones de África la atención médica para los niños enfermos de Sida es aún un privilegio para pocos”.
El purpurado lo dijo sin medias tintas, durante el encuentro con directores de industrias y productos farmacéuticos que se realizó en el Vaticano, este lunes 16 y martes 17 de mayo. Y pidió “respuestas concretas al drama del poco acceso a los diagnósticos y curaciones” de la enfermedad provocada por el virus del Hiv.
El presidente del Pontificio Consejo Justicia y Paz subrayó que el testimonio de los misioneros es claro sobre la falta de asistencia ante la difusión del Sida, pero también de patologías como la malaria y la tuberculosis, llamadas enfermedades huérfanas porque ignoradas por productores de fármacos y la falta de interés ante un escaso retorno económico.
Por ello el cardenal en el Año del Jubileo de la Misericordia, señaló que es necesario “tomar en consideración la difícil situación de estos niños no solo con la inteligencia del mercado pero también con la inteligencia del corazón”
Mejorar los tratamientos médicos en la edad pediátrica requieree no solamente que se involucren “los gobiernos nacionales, los entes de las Naciones Unidas, los grupos religiosos y las empresas privadas”, pero también la conciencia de que existe una obligación moral y de que son necesarios valores basilares que guíen decisiones y acciones.


La JMJ de Cracovia podría recibir a 30 mil jóvenes españoles
Posted by Redaccion on 17 May, 2016



(ZENIT – Madrid).- La Jornada Mundial de la Juventud de Cracovia, que se realizará del 26 al 31 de julio próximo, podría recibir a al menos 30 mil jóvenes españoles. Así lo ha anunciado la Conferencia Episcopal Española (CEE), que través del Departamento de Pastoral de Juventud de la Comisión Episcopal de Apostolado Seglar, se está preparando para dicho encuentro.
Hasta el momento han realizado la preinscripción a través de la web oficial de la JMJ, 30.000 jóvenes pertenecientes a las diócesis españolas, movimientos y congregaciones de ámbito nacional. En el departamento ya se ha recibido la inscripción formalizada y el pago de 7.200 jóvenes.
En una nota publicada este martes por la CEE, precisan que las diócesis que hasta el momento cuentan con una mayor presencia inscrita son las diócesis de Madrid, Getafe, Pamplona, Valencia, Toledo y Sevilla.
Los obispos que acompañarán a sus jóvenes desde distintas diócesis de España son 54. Algunos de ellos “han sido invitados a dar las catequesis en lengua castellana que tendrán lugar en diversas parroquias de Cracovia en las mañanas del miércoles, jueves y viernes, durante las Jornadas”, anuncia la CEE.
Las opciones para el viaje propuesto desde el Departamento son tres. En primer lugar está la opción “peregrinación larga”. Se trata de dieciséis días realizando un itinerario espiritual-cultural, por varias ciudades de Centro-Europa, hasta llegar a Cracovia. Comenzarán por Berlín y Praga, para finalizar, después de acabar la JMJ, en Viena. Estos mismos jóvenes, participarán en los Días en las Diócesis. Durante cinco días convivirán con familias locales en la ciudad de Poznan (Polonia). Después de esos días viajarán a Cracovia para la Jornada Mundial. Las 870 plazas que se ofrecieron para esta propuesta, fueron completadas en el mes de enero.
La segunda propuesta es del 20 de julio al 1 de agosto, comenzando Poznan para los Días en la Diócesis, viviendo en familias y acudir después a la JMJ. A esta opción se han inscrito 500 jóvenes y todavía existen algunas plazas.
El tercer viaje, más corto, inicia el día 24 de julio, directamente para participar en los días de la JMJ en Cracovia. También existen plazas en esta propuesta.
El día 25 de julio todos los grupos viajarán al Santuario de la Virgen de Czestochowa, para la santa misa en la fiesta de Santiago Apóstol. Esta celebración será presidida por el cardenal Ricardo Blázquez, arzobispo de Valladolid y presidente de la CEE. Al finalizar la eucaristía tendrá lugar un encuentro festivo en ese mismo lugar, con la participación de grupos de música cristiana como La Voz del Desierto, Jesús Cabello, Toño Casado o el padre Damián. También se escuchará el testimonio de jóvenes participantes en el encuentro.


“Un buen médico o psicólogo sabrá orientar hacia un sacerdote y viceversa”
Posted by Rocío Lancho García on 17 May, 2016



(ZENIT – Roma).- ¿Es posible diferenciar los problemas psicológicos de las dificultades espirituales? ¿Cómo se alcanza una personalidad madura? ¿Se pueden controlar la ansiedad y el estrés? Son algunas de las preguntas a las que el profesor Wenceslao Vial responde en su libro “Madurez psicológica y espiritual”. Este sacerdote y médico, docente en la Pontificia Universidad de la Santa Cruz en Roma, asegura que “nuestra inteligencia y voluntad se asientan en el espíritu”. Cuando vivimos de acuerdo con ellas, sin dejarnos arrastrar por impulsos momentáneos, sentimientos o estados de ánimo, “somos más libres y equilibrados”. Asimismo, indica que “gran parte de la madurez consiste en comportarnos según lo que realmente somos y crecer en la dirección de un proyecto vital hecho propio: es decir, ser buenas personas”.
¿De qué forma el cuidado de la vida espiritual ayuda a la serenidad y al equilibrio de las personas?
— Profesor Wenceslao: La dimensión espiritual refuerza la estructura de nuestra personalidad, hace que tiemble menos y resista ante los vientos o terremotos de las contrariedades. En ella se despierta la búsqueda del sentido de la vida y de lo que nos ocurre, que es el primer paso de la religiosidad: del anhelo innato que tenemos por Dios. Con ella también nos abrimos a quienes nos rodean. Esta apertura es propia de quien camina hacia la madurez y ha dejado de preocuparse solo por lo inmediato, por el “mío, mío…” de los niños pequeños.
Quien tiene la fortuna de encontrar a Dios y de aprender a quererle, ve más claro el objetivo de su vida. Se preocupa del presente con la esperanza de alcanzar una meta. Los cristianos, además, cuentan con Alguien que cambió la historia: por Él saben con certeza que Dios es bueno y misericordioso, que no pueden odiar a nadie en su nombre, que desea que le tratemos cada día y que nos espera en el cielo. Cristo es la fuente de serenidad, porque al conocer su ejemplo vemos quiénes somos y lo que estamos llamados a ser. Para muchos brilla un nuevo sol al leer el Evangelio, lo que requiere tiempo.
¿Y cómo se relacionan el espíritu y el equilibrio…?
— Profesor Wenceslao: Nuestra inteligencia y voluntad se asientan en el espíritu. Cuando vivimos de acuerdo con ellas, sin dejarnos arrastrar por impulsos momentáneos, sentimientos o estados de ánimo, somos más libres y equilibrados. Y en esto se descubre, paradójicamente, que el verdadero equilibrio requiere tensión: la tensión positiva de una persona que se esfuerza por tallar su modo de ser con la razón y la voluntad, por crecer en las virtudes, por amar, por perdonar, por sacrificarse en beneficio de otros.
¿Cómo se pueden diferenciar los problemas psicológicos de las dificultades espirituales?
— Profesor Wenceslao: El sufrimiento es similar. Una grieta en la dimensión física, psíquica o espiritual afecta a toda la persona. La angustia, el agobio, la pena o desconcierto de quien padece una depresión pueden ser iguales a las de quien no encuentra el sentido de su vida, o de quien solo piensa en sí mismo y cómo obtener placer; o quizá sean estos problemas, que llamaríamos espirituales, la causa de las molestias… De todos modos, quien pide luces a Dios, profundiza y estudia, conseguirá más fácilmente discernir por sí mismo y ayudará a otros con más eficacia. Este es uno de los motivos por los que he escrito el libro.
No hay recetas prefabricadas. En ocasiones es evidente un fallo psicológico de base, otras veces la razón del malestar se descubre en un problema moral, o es la incoherencia, por ejemplo de una doble vida, la que nos rompe. En cualquier caso, habrá que tener en cuenta a la persona en su dimensión espiritual, su mundo de relación con Dios y con los demás, que puede ser normal o estar alterado por un proceso patológico o una deformación.
“Lo suyo parece un problema de conciencia moral”, le dijo un médico a una persona que vino a verme: si es cierto, ¡cuánto bien puede hacer un comentario así! Y lo mismo he comprobado en el otro sentido: “Mira, lo que te pasa tiene seguramente muchas causas, pero te beneficiarás de un apoyo psicológico, o al menos duerme mejor, haz ejercicio regularmente, sonríe tres veces al día…”. Ante la duda, un buen médico o psicólogo sabrá orientar hacia un sacerdote a quien le pide auxilio; y un sacerdote o director espiritual, a su vez, sabrá orientar en algunos casos hacia un profesional de la salud.
Ansiedad, estrés… ¿Es posible aprender a controlarlo?
— Profesor Wenceslao: Es posible y necesario. Un poco de estrés o de ansiedad puede ser útil. Muchas veces nos han ayudado a estudiar con más decisión un examen o a correr para huir de un peligro. Otras, sin embargo, hemos experimentado el freno de los nervios: el pulso se acelera, se seca la boca y las palabras no vienen en el examen oral…, el sueño no llega a causa de ideas obsesivas, los pies no se mueven por el miedo paralizante ante un coche a toda velocidad…
El primer paso es no centrarse demasiado en el síntoma: cómo estoy, cómo me encuentro, cómo me siento; sino salir de uno mismo, mirar y servir a los demás. Luego, hay que cuidar algunos aspectos fisiológicos, como el sueño. Ayudarán la actividad física, un paseo agradable, las lecturas entretenidas (y no sólo “interesantes”), el cambio de actividades para no hacer siempre lo mismo… Es importante disfrutar de la vida sin concentrarse en el “disfrute”, en el placer fácil y de poca duración, sino en la vida misma: no dejarla pasar soñando con alternativas. Y, en lo posible, afrontarla desde la mañana con buen humor: que no parezca, nos diría el Papa Francisco, que nos lavamos los dientes con vinagre.
Hay que identificar las causas del estrés: tal vez el activismo, una labor frenética que contamina el propio tiempo y no deja espacio para los demás. Cuando, a pesar de los esfuerzos, notamos el freno de los nervios, será conveniente una consulta médica, pues hay numerosos factores psicofísicos capaces de producir ansiedad, y muchos remedios.
¿Cómo se alcanza una personalidad madura?
— Profesor Wenceslao: Somos siempre personas y tenemos una personalidad: una forma de ser, que nos define ante nosotros mismos y ante los demás. Se va impregnando en el cuerpo y en el alma. Gran parte de la madurez consiste en comportarnos según lo que realmente somos y crecer en la dirección de un proyecto vital hecho propio: es decir, ser buenas personas.
No es como la madurez de los vegetales, que avanza sin retroceder, al calor del sol. Hay gente madura que vuelve a estar verde, buenas personas que dejan de serlo. Se requiere esfuerzo y tiempo, es un proceso que dura toda la vida. Hay que armarse de paciencia. Lo logra quien se empeña hoy y ahora por ser quien es. Si se transcurren las jornadas en el aburrimiento y la inactividad, como una fruta colgada de la mata, quizá nos sorprenderemos un día en el suelo, tristes y agrios. Aún entonces hay remedio, pero es mejor prevenir.
Nosotros no maduramos solos. Necesitamos de cuidados, de educación, del tiempo de los demás… Primero del cariño de los padres, luego, de quienes nos rodean y de la sociedad. Cuando se pone en peligro la identidad de los niños, y se los confunde en aspectos esenciales, como hacerles dudar de si son hombres o mujeres, se les causa un daño enorme, como ha puesto hace poco de relieve el colegio norteamericano de pediatría.
¿Se pueden superar adicciones, como por ejemplo, a las drogas o internet?
— Profesor Wenceslao: Se pueden superar, pero sobre todo prevenir. Muchos esclavos de las drogas o de la pornografía le darían la razón a Aristóteles. Decía el filósofo que quien lanza una piedra, podría no haberlo hecho y eso estaba en sus manos; una vez tirada, sin embargo, ya no hay vuelta atrás… El vicio esclaviza, pues impide cortar con lo que hace daño, como el borracho que es incapaz de no beber. Hay, sin embargo, medios para arrancar las cadenas: el arrepentimiento, la ayuda de personas especializadas y una motivación grande.
Para esta motivación es clave la responsabilidad: saber que alguien espera una respuesta de nosotros. El amor a ese alguien hace descubrir medidas concretas. Quien quiere de verdad salir de una alergia, pone todos los medios: consulta al alergólogo, busca qué substancias provocan la reacción…, qué medicamentos o vacunas aplicar… Quien desea superar la adicción, identifica el problema, se aleja de él, usa lo que está a su alcance para no seguir haciéndose daño a sí mismo y a su entorno. Si uno sabe que internet le perjudica, se cuida más. Un consejo eficaz es no acceder a internet al estar cansado, pues son momentos de defensas más bajas; y terminar el día dirigiéndose a un Tú real, a Dios y a quien queremos, y no a la masa anónima de las redes.
¿Es el inconsciente un espacio impenetrable?
— Profesor Wenceslao: En el ser humano no hay espacios o almacenes impenetrables. A veces se da demasiada importancia a recuerdos, imágenes, conflictos, traumas, que se dicen “reprimidos”, arrojados en un pozo oscuro de la psique. Se descuida, en cambio, el rico contenido consciente, al que todos tenemos acceso. Es verdad que en algunos casos hay elementos que desde las profundidades psíquicas hacen daño, y que en ocasiones se llega a ellos con la ayuda de expertos. Pero con mayor frecuencia, son aspectos bien claros y visibles los que causan tristeza, desasosiego, desesperanza… malestar psicológico.
Las mismas “profundidades” pierden oscuridad cuando entra en ellas la luz de Dios, el Espíritu Santo. El examen de conciencia cristiano, que no es introspección sino esfuerzo de sinceridad con uno mismo, con Dios, revela en la mayoría de los casos qué hace sufrir. Para esto es necesario el silencio, conseguir concentrarse y llegar a esas emociones que quizá fueron enterradas vivas, o a las faltas de coherencia que hicieron descarrilar hasta nuestros pensamientos.
¡Qué bueno es cortar con el exceso de ruido inevitable, con los mensajes y urgencias ineludibles, la publicidad interminable, los teléfonos móviles inapagables, los videojuegos impostergables!… Tantos “ables” que impiden oír a Dios y centrarse en lo importante. Con nuestras limitaciones y miserias, alcanzaremos la madurez, formándonos bien, rezando y con la ayuda de la gracia. Y para todo esto hace falta tiempo, que es mucho más que el oro.
Wenceslao Vial, sacerdote y médico, profesor de Psicología y vida espiritual, Pontificia Universidad de la Santa Cruz, Roma. www.psicologiaevitacristiana.com



Gendarme vaticano presenta nuevas pruebas en el juicio Vatileaks2
Posted by Redaccion on 17 May, 2016



(ZENIT – Roma).- El proceso Vatileaks 2 por filtraciones de documentos reservados de la Santa Sede se aproxima a su conclusión. Este lunes fue la catorceava audiencia en la que los jueces escucharon cuatro nuevos testigos, entre los cuales el vicecomisario del Cuerpo de la Gendarmería del Estado de la Ciudad del Vaticano, Gauzzi Broccoletti, que realizó el análisis forense del material informático secuestrado durante la investigación.
De los acusados estaban presentes: monseñor Ángel Lucio Vallejo Balda; la italiana Francesca Immacolata Chaouqui; y el secretario de Vallejo, Nicola Maio; acompañados de sus abogados. En cambio los periodistas Emiliano Fittipaldi y Gianluigi Nuzzi no estuvieron en el tribunal pero sí representados por sus abogados.
El comisario de la Gendarmería vaticana ilustró la parte informática, los intercambios de correos electrónicos y whatsapp, de la extinta comisión COSEA, creada por el papa Francisco para estudiar los organismos económicos de la Santa Sede.
Gauzzi explicó que fue necesario crear una red para gestionar la documentación, que llegaba al correo del sacerdote Vallejo Valda y a la ICloud central al que todos tenían acceso. Recordó que el sistema informático había sido realizado por Corrado Lanino, el marido de Chaouqui, con un costo de 110 mil euros.
Cada documento creado por COSEA era enviado al correo de Vallejo Balda y se bloqueaba con una contraseña que creaba Lanino y a la que tenían acceso todos los miembros de la comisión porque era guardada en la ICloud. También precisó que 86 de esas contraseñas –como ya confesó monseñor Vallejo en su interrogatorio– fueron enviadas por whastapp al periodista imputado, Nuzzi. A continuación, el gendarme enumeró los documentos que aparecen en el libro de Nuzzi “Vía Crucis”.
La información más novedosa del interrogatorio fue la lectura por parte del vicecomandante de una serie de e-mails de Francesca a monseñor Vallejo y a Nicola Maio. En estos correos electrónicos la imputada adjuntaba anticipaciones de los reportajes sobre el Vaticano que el otro periodista imputado, Emiliano Fittipaldi, iba a publicar en “L’Espresso”, el semanario para el que trabaja.
En la conclusión de la audiencia la abogada de la relaciones públicas Chaouqui señaló no tener en su dossier la pruebas presentadas por el gendarme, por lo que el presidente del tribunal dispuso el final de la audiencia y convocó la sucesiva para este martes.
Fueron escuchados también tres testimonios: Fabio Schiaffi, adepto al protocolo de la Prefectura de asuntos económicos; Lucia Ercoli, oficial sanitario del Vaticano; y Mons. Vittorio Trani, capellán de la prisión italiana Regina Coeli.
En la audiencia de este martes estaba previsto el interrogatorio de dos peritos y otro testigo, pero no se ha realizado. El presidente del tribunal ha informado esta mañana que después del testimonio del gendarme Gauzzi, que ha aportado pruebas no conocidas por la fiscalía ni por la defensa de los imputados, se pospone la próxima audiencia para el día 24 de mayo, para que se puedan preparar las eventuales observaciones y peticiones.




Comentario a la liturgia dominical
Posted by Antonio Rivero on 17 May, 2016



P. Antonio Rivero, L.C. Doctor en Teología Espiritual, director espiritual y profesor en
el Centro de Humanidades Clásicas de la Legión de Cristo, en Monterrey (México).
Idea principal: ¿Quién es Dios?
Síntesis del mensaje: Toda nuestra vida cristiana gira –o debería girar- en torno a la Trinidad Santa. Nos levantamos y nos acostamos en el nombre de la Trinidad. Trabajamos y sufrimos en el nombre de la Trinidad. Celebramos y participamos en los sacramentos y hacemos oración en el nombre de la Trinidad. Comemos y compartimos nuestro pan en nombre de la Trinidad Santa. Toda nuestra vida debería ser un diálogo entre nosotros y el Padre, hecho por medio de Jesucristo, a la luz y con el sostén del Espíritu Santo.
Puntos de la idea principal:
En primer lugar, un poco de historia. Cuenta san Gregorio de Nisa, que en sus tiempos del siglo IV era imposible ir a la plaza del mercado a comprar pan, a las termas a darse una sauna, a los cambistas a hablar de dinero, etc., sin irse todos a la greña a cuenta del misterio de la Trinidad. Informan los historiadores que Constantino tenía su imperio en dos partidos mal avenidos: los arrianos, cuyo jefe Arrio, clérigo sin mitra ni báculo, sostenía que el Padre es Dios pero el Hijo no; y los atanasios, cuyo jefe, Atanasio, clérigo también sin mitra ni báculo, sostenía que el Hijo es tan Dios como el Padre. Y aquello era “guerra civil” a la vista. Cuenta la historia de la Iglesia que el emperador Constantino, ya en vilo y con el imperio en un brete, convocó el primer concilio ecuménico para que los obispos de la Iglesia se batieran el cobre por la Trinidad y, de paso, le salvaran el imperio. 20 de mayo del año 325 en la ciudad de Nicea, en la Turquía asiática: el emperador Constantino –corona imperial a la cabeza, manto de cola y arrastre, empaque oriental- entró en la sala conciliar por entre las 318 mitras y báculos de los padres sinodales, subió el estrado y felicitó al legado del Papa Silvestre I, que era español: el gran Osio, obispo de Córdoba. Allí, a cuentas de la Trinidad, el Papa se jugaba la unidad de la Iglesia y Constantino la unidad del imperio. Nicea, 19 de junio de 325: el gran Osio dio con esa palabra mágica, luminosa y clave, y solucionó el problema: “homoúsios” (= consustancial). El Hijo, pues, es consustancial al Padre y viceversa, es decir, el Hijo es Dios igual que el Padre. Fin del concilio. Y dice el historiador eclesiástico, Eusebio de Cesarea, que Constantino dio a los obispos un banquete imperial y a sus súbditos una orden imperial: o aceptación del concilio o destierro de por vida.
En segundo lugar, ¿cómo se acercan los teólogos a este misterio de la Trinidad? Observan por las mirillas que el Padre, en efecto, ejerce autoridad sobre el Hijo y sobre los hombres. Autoridad que no autoritarismo. Paternidad que no paternalismo que mima, agobia y no hace crecer a los hijos. Y le dice al Hijo: ésa es la situación de los hombres y este es mi plan de redención, y el redentor eres tú. Y nos dice a nosotros: yo soy el Padre que os amo y quiero la felicidad de todos vosotros; pero cumplid mis mandatos para que seáis felices y me hagáis feliz. Siguen los teólogos y observan al Hijo y su obediencia, que es una, grande y libre (pero sin yugo ni flechas, como en el escudo español). Y escuchan al Hijo decir: “Yo hago siempre la voluntad de mi Padre” (Jn 8, 29), “el Padre y yo somos uno” (Jn 10, 30), “…llevo tu ley en mi corazón” (Heb 10, 7 y Salmo 39, 9). Y no cansados de reflexionar y meditar, los teólogos oyen el aletear del Espíritu, que en vuelo rasante sobrevoló el caos previo a la creación del mundo, que habló lo mismo a los patriarcas en las grandes teofanías que a los profetas y caudillos de Israel, que bajó sobre Jesús y las aguas del Jordán, que llegó a los apóstoles a bordo del huracán. El Espíritu es energía, vitalidad, actividad. Es luz que nos guiará a la verdad completa (evangelio).
Finalmente, nosotros, por ser bautizados, somos portadores de la Trinidad. Rápido se percibe cuando uno está lleno de ese Dios y valora lo espiritual más que lo material, el alma más que el cuerpo, el cielo más que la tierra, al prójimo como a Dios y a Dios más que a nadie y sobre todas las cosas. Y a ese Dios Uno y Trino debemos adorar con toda el alma; amar con todo el corazón; agradecer con todo el ser y corresponder llevando una vida según el Espíritu. Por ser portadores de la Trinidad hasta nos gloriamos de los sufrimientos, pues sabemos que el sufrimiento engendra la paciencia, la paciencia engendra la virtud sólida, la virtud sólida engendra la esperanza, pues Dios nos ha infundido el amor en nuestros corazones por medio del Espíritu (2ª lectura). Y vivimos felices, pues las delicias de ese Dios Uno y Trino son estar con los hijos de los hombres (1ª lectura).
Para reflexionar: ¿Acepto a Dios como misterio? ¿Rezo a Dios en términos vagos, o me relaciono de persona a persona con el Padre, o con Jesús, o con el Espíritu Santo? ¿Hago todo en nombre la Santísima Trinidad: trabajo, estudio, descanso, sufrimiento, éxito y fracasos?
Para rezar: Himno de las primeras Vísperas de la Solemnidad de la Santísima Trinidad
Dios mío, Trinidad a quien adoro!
La Iglesia nos sumerge en tu misterio;
te confesamos y te bendecimos,
Señor Dios nuestro.
Como un río en el mar de tu grandeza,
el tiempo desemboca en hoy eterno,
lo pequeño se anega en lo infinito,
Señor, Dios nuestro.
Oh, Palabra del Padre, te escuchamos;
oh, Padre, mira el rostro de tu Verbo;
oh, Espíritu de amor, ven a nosotros;
Señor, Dios nuestro.
¡Dios mío, Trinidad a quien adoro!,
haced de nuestros almas vuestro cielo,
llevadnos al hogar donde tú habitas,
Señor, Dios nuestro.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu:
Fuente de gozo pleno y verdadero,
al Creador del cielo y de la tierra,
Señor, Dios nuestro. Amén.
Cualquier sugerencia o duda pueden comunicarse con el padre Antonio a este email: arivero@legionaries.org


El incurable vicio argentino de tirarle la manga a Bergoglio
Posted by Redaccion on 17 May, 2016



Por Luis Badilla. Terre d’America
¡Otra vez lo mismo! Apenas fue elegido el cardenal Jorge Mario Bergoglio y durante largos y fastidiosos meses, en Argentina, desde la entonces presidente Cristina Kirchner hasta el último posible interesado, intentaron por todos los medios posibles involucrar al Papa Francisco en las luchas internas de la política y el debate social, que desde siempre agita y polariza -no pocas veces de manera agresiva y vulgar- a esta gran nación sudamericana.
Sería imposible hacer un listado de las declaraciones, gestos, fotos, indiscreciones infundadas, falsedades y fanfarronerías que trataron de convertir al Papa argentino en “apoyo” de cualquier cosa o contra cualquier cosa, especialmente por algunos que durante años atacaron al arzobispo de Buenos Aires con todo tipo de agresiones, de manera elegante e institucional o menos elegante y nacional-popular. Después, a comienzos de 2015, comenzó un período de mayor calma y sensatez en esta dinámica alocada y absurda, como si hubieran tomado seriamente conciencia de que el ministerio del Papa, Obispo de Roma, merecía un extricto respeto y la condena de cualquiera que pretenda tratar a Francisco como “recurso de bajo costo” en favor de intereses partidarios.
Pero ahora, desde hace algunas semanas, parece que este permanente tirar la manga del Papa en favor de los propios intereses se ha vuelto a poner de moda. A veces daría la impresión, leyendo la prensa argentina, que hay alguien del otro lado del Tévere que da pie para este juego que atenta irresponsablemente contra la figura y el rol del Papa.
En los medios del país sudamericano ya se pueden leer, ayer y hoy, los primeros artículos que denuncian el tema de manera alarmada y preocupada. Hablan sobre el “doloroso rol” que algunos le atribuyen al Papa Francisco con fines mezquinos: usar su misión y su figura como proyectil contra los adversarios.
Al mismo tiempo lanzan una advertencia correcta y oportuna: que la prensa internacional no tome como verdad indiscutible cualquier cosa que se lea en la prensa argentina presentando al Santo Padre como respaldo o sponsor de intereses partidarios, dentro de los palacios del poder en Buenos Aires o en los debates públicos, con acusaciones y contracusaciones en mérito a los asuntos más dispares.
Considerando el recrudecimiento puramente propagandístico que se está verificando, es mejor atenerse a los hechos y dejar tranquilo al Papa Francisco, por respeto a su ministerio y a su persona, y por respeto a la Iglesia.


Beata Blandina (María Magdalena) Merten – 18 de mayo
Posted by Isabel Orellana Vilches on 17 May, 2016



(ZENIT – Madrid).- «Dios no requiere obras extraordinarias; solo desea amor», hizo notar esta religiosa. La suya fue otra vida de ocultamiento en Cristo, sendero que en 1987 le llevó a los altares, tras haberlo recorrido sobrenaturalizando las acciones cotidianas. Nació el 10 de julio de 1883 en la localidad germana de Düppenweiler de Saarland. Era la penúltima de diez hermanos. Sus padres, John y Catherine, humildes campesinos, habían fraguado la educación de sus hijos al abrigo de la fe. Y Magdalena fue sumando años viendo como algo natural cómo se vivían en su hogar las prácticas piadosas que compartía con gran fervor: la misa, la recepción de los sacramentos y el rezo del rosario. Fueron germen de su vocación.
Culminó brillantemente sus estudios de magisterio en el Instituto de Marienau en Vallendar, y ejerció la docencia en Morscheid, Hunsrück desde 1902 a 1908. Era una reputada profesional que iba dejando a su paso la estela de su bondad, suscitando la estima de sus alumnas. Prudente, entregada, y singularmente devota de la Eucaristía, sobre todo desde que a sus 12 años recibió la primera comunión casi seguida de la confirmación, tenía su corazón dispuesto a cumplir la voluntad divina. Los niños, particularmente los indigentes, estuvieron en su punto de mira. Su labor con ellos era completa: vestido, alimento, enseñanza…, realizado todo en medio de proverbial delicadeza, exquisitez y generosidad. A su buen hacer académico añadía la riqueza de una visión alumbrada por la fe, que le instaba a orientar a sus alumnas a transitar por el camino del amor a Cristo Redentor y a María, así como la devoción por la Eucaristía. En ella se cumplía lo que dice el evangelio: «de la abundancia del corazón habla la boca».
Abiertos los brazos a Cristo, a sus 25 años dio un paso decisivo tendente a su consagración. El 2 de abril de 1908, junto a su hermana Elise, se convirtió en religiosa ursulina del convento de Calvarienberg en Ahrweiler. Allí tomó el nombre de Blandina (en honor de una mártir cristiana de la primera era) del Sagrado Corazón. Profesó en 1910. Su director espiritual, el jesuita padre Merk, le dio el visto bueno para que añadiera a sus votos de pobreza, castidad y obediencia, el de «ser víctima». Hacen falta altas dosis de valentía y fortaleza, muchísimo amor para enfrentarse al dolor a cara descubierta. Magdalena estaba en posesión de estas gracias. Le sobraban arrestos para acoger lo que Dios hubiese dispuesto para su vida. Ella misma recogió por escrito su impresión de que Cristo aceptaba su ofrenda al profesar perpetuamente el 4 de noviembre de 1913. Entonces hizo notar: «En este día me consagré al Divino Redentor y creo que Él aprobó el sacrificio».
Adoptaba frente al dolor una actitud infrecuente, ofreciéndose en libación por exclusivo amor a Dios. Cuando lo habitual es –si no se ofrece resistencia al sufrimiento– aceptarlo sin más, un tercer y selecto grupo que no está afectado por patología alguna, integrado también por personas anónimas que no han alcanzado la gloria de Bernini, da un paso edificante, poderosamente conmovedor. Porque no conviene olvidar que no hay nada a lo que se le tema más en esta vida que a cualquier gama de dolor físico, o el global sufrimiento en el que aquél se inscribe. Cristo mismo tembló en el Huerto de los Olivos. De modo que un gesto como el de la beata, y de quienes han determinado, no ya unir sus sufrimientos a los de Cristo, sino reclamarlos por amor a Él, no es baladí precisamente. Magdalena no pondría cota alguna a su particular holocausto. Y a ello le ayudaría la oración y la contemplación de la Eucaristía. De otro modo no podría haber soportado, como lo hizo, con paciencia y completo abandono en las manos del Padre, lo que debió afrontar.
Como religiosa su misión siguió estando en la enseñanza. Era una persona entrañable que ejercía de forma competente su labor, y sabía infundir en las alumnas las virtudes evangélicas que ella practicaba, ya que, por encima de todo, se dejaba llevar por sus ansias de santidad. Los rasgos de inocencia, modestia y piedad hicieron que ya desde niña fuese tomada como una especie de ángel por quienes la conocieron. Se distinguía por su fe, espíritu de oración –aunaba contemplación y acción–, que enriquecida por la Eucaristía y devoción mariana, alentaban el quehacer apostólico que realizaba en el aula.
Fue destinada a la escuela de Saarbrücken, y allí aparecieron los primeros síntomas de la enfermedad pulmonar, incurable en la época, que le llevaría precozmente a la muerte; Dios se apiadaría de ella acortando su vida. De regreso a Trier en 1910, ciudad a la que se trasladó por consejo médico con objeto de hacer frente a la tuberculosis, no desatendió su trabajo. Además de ejercer la docencia, asumió nuevas responsabilidades hasta que la enfermería se hizo completamente indispensable y vivía recluida en ella. En otoño de 1916 la lesión avanzaba de manera implacable y fue trasladada al hospital de Merienhaus. Su ofrenda victimal tomaba forma. Colindante la enfermería a la capilla, con gran sentido del humor –que nunca perdió, como tampoco la alegría–, altas dosis de conformidad, paciencia y paz interior, hacía notar: «Jesús y yo somos vecinos». En ese tiempo aprendió que «el dolor es la mejor escuela de amor». Así es.
Con gran esperanza asumió que pronto llegaría su muerte considerando que era una «alegre noticia». Murió en el convento de Trier el 18 de mayo de 1918. Tenía 35 años, y llevaba 11 de vida religiosa. Seguramente por su forma de morir a sí misma, como indica el evangelio, rodeada de esa fulgurante luz que desprende la falta de notoriedad cuando todo discurre en el anonimato a los pies del Redentor, ha sido denominada por su biógrafo «una oculta esposa de Cristo». Fue beatificada por Juan Pablo II el 1 de noviembre de 1987.