Servicio diario - 24 de julio de 2016


 

El Papa reitera su condena a los “deplorables actos de terrorismo y de violencia”
Posted by Sergio Mora on 24 July, 2016



(ZENIT – Ciudad del Vaticano).- El santo padre Francisco reiteró nuevamente este domingo su condena a los “deplorables actos de terrorismo y de violencia” que se registraron en los últimos días.
Lo hizo este domingo después de rezar la oración del ángelus, desde la ventana de su estudio que da a la Plaza de San Pedro, llena de de fieles y peregrinos
Se manifestó “nuevamente conturbado por las tristes noticias de los deplorables actos de terrorismo y violencia” en los cuales “han perdido la vida numerosas personas inocentes”.
Y se mostró cercano a las familias de las víctimas y a los heridos, y los invitó a unirse a su oración, porque esta tiene que ser más insistente ante las dificultades que parecen insuperables.
“En estas horas nuestro ánimo se encuentra una vez más turbado por las tristes noticias relativas a los deplorables actos de terrorismo y de violencia que han causado dolor y muerte. Pienso a los dramáticos hechos de Munich en Alemania y de Kabul en Afganistán, donde han perdido la vida numerosas personas inocentes.
Estoy cerca de las familias de las víctimas y de los heridos. Les invito a unirse a mi oración, para que el Señor inspire a todos propósitos de bien y de fraternidad.
En la medida que las dificultades más parecen insuperables y oscuras las perspectivas de seguridad y de paz, tanto más insistente tiene que volverse nuestra oración”.
En este momento el Santo Padre rezó un Ave María, la cual fue acompañada por el numeroso público allí presente.
Leer el texto completo del ángelus


Francisco: la JMJ de Cracovia será para los jóvenes el Jubileo de la Misericordia
Posted by Redaccion on 24 July, 2016



(ZENIT – Ciudad del Vaticano).- El papa Francisco recordó este domingo después de rezar la oración del ángelus, que miles de jóvenes desde todos los rincones del mundo se están dirigiendo a Polonia para la Jornada Mundial de la Juventud que se realiza en la ciudad de Cracovia desde el martes 27 hasta el domingo 31 del presente mes de julio.
Desde el miércoles el Santo Padre estará en Polonia, pero antes de ir al evento de los jóvenes visitará en silencio y oración dos campos de exterminio del nazismo, Auschwitz y Brikenau, en los que fueron asesinados aproximadamente 1,1 millones de personas, y donde sus únicas palabras serán las que escribirá al final la visita en el libro de los huéspedes ilustres.
El Papa señaló que con los jóvenes reunidos en Cracovia celebrará el Jubileo de la Misericordia, con la intercesión de Juan Pablo II. E invitó a los que no logran ir, a seguir el evento a través de los medios de comunicación.
A continuación las palabras del Papa
«Queridos hermanos y hermanas, en estos días tantos jóvenes desde cada parte del mundo, se están encaminado hacia Cracovia, donde se realizará la XXXI Jornada Mundial de la Juventud.
También yo partiré el miércoles próximo para encontrar a estos muchachos y muchachas y celebraré con ellos y para ellos el Jubileo de la Misericordia, con la intercesión de Juan Pablo II.
Les pido que me acompañen con la oración. Desde ahora saludo y agradezco a todos los que están trabajando para recibir a los jóvenes peregrinos, junto a numerosos obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas.
Un pensamiento especial lo dirijo a tantísimos jóvenes de la misma edad, que no pudiendo estar personalmente seguirán el evento a través de los medios de comunicación. ¡Estaremos todos unidos en la oración!».


“La palabra ‘Padre’ es el secreto en la oración”. Texto completo del ángelus del papa Francisco – 24 de julio de 2016
Posted by Sergio Mora on 24 July, 2016



(ZENIT – Ciudad del Vaticano). El papa Francisco rezó este domingo la oración del ángelus desde la ventada de su estudio que da hacia la plaza de San Pedro, donde se encontraban miles de files y peregrinos.
A continuación las palabras del Santo Padre, texto completo
«¡Queridos hermanos y hermanas, buenos días!
El Evangelio de este domingo se abre con la escena de Jesús que reza solo, apartado; cuando termina los discípulos le dicen: “Señor enséñanos a rezar”. Y él responde: “Cuando rezan digan Padre…”. Esta palabra es el secreto de la oración de Jesús, es la llave que él mismo nos da para que podamos entrar también nosotros en esa relación de diálogo confiado con el Padre que ha acompañado y sostenido su vida.
Al nombre de “Padre”, Jesús asocia dos pedidos: “sea santificado tu nombre, venga tu reino”. La oración de Jesús, y por lo tanto la oración cristiana es antes de todo hacerle un lugar a Dios, dejándole manifestar su santidad en nosotros y haciendo avanzar su reino a partir de la posibilidad de ejercitar su señoría de amor en nuestra vida.
Otros tres pedidos completan esta oración que Jesús nos enseña, el Padre Nuestro. Son tres preguntas que expresan nuestras necesidades fundamentales: el pan, el perdón y su ayuda en las tentaciones. No se puede vivir sin pan, no se puede vivir sin en perdón y no se puede vivir sin la ayuda de Dios en las tentaciones.
El pan que Jesús nos hace pedir es aquel necesario, no lo superfluo es el pan de los peregrinos, del justo, un pan que no se acumula y no se desperdicia, que no vuelve pesada nuestra marcha.
El perdón es sobre todo el que nosotros mismos recibimos de Dios: solamente la conciencia de ser pecadores perdonados por la infinita misericordia divina puede volvernos capaces de cumplir concretos gestos de reconciliación fraterna.
Si una persona no se siente pecador perdonado, nunca podrá hacer un gesto de perdón o de reconciliación. Se inicia del corazón donde nos sentimos pecadores perdonados. El último pedido “no nos abandones en la tentación”, expresa la conciencia de nuestra condición, siempre expuesta a las insidias del mal y de la corrupción. ¡Todos conocemos qué es una tentación!
La enseñanza de Jesús sobre la oración sigue con dos parábolas, con las cuales Él toma como modelo la actitud de un amigo hacia otro amigo y el de un padre hacia su hijo.
Ambas nos quieren enseñar a tener plena confianza en Dios, que es Padre. Él conoce mejor que nosotros mismos nuestras necesidades, pero quiere que se las presentemos con audacia y con insistencia, porque este es nuestro modo de participar a su obra de salvación.
¡La oración es el primero y principal ‘instrumento de trabajo’ en nuestras manos! Insistir con Dios no sirve para convencerlo sino para robustecer nuestra fe y nuestra paciencia, o sea nuestra capacidad de luchar junto a Dios por las cosas realmente importantes y necesarias. En la oración somos dos: Dios y yo a luchar juntos por las cosas importantes.
Entre estas hay una, la gran cosa importante que Jesús nos dice hoy en el Evangelio, pero que casi nunca nos planteamos, y es el Espíritu Santo. “¡Dóname el Espíritu Santo!”. Y Jesús lo dice: “Aunque ustedes sean malos, saben dar cosas buenas a vuestros hijos, cuánto más el Padre vuestro del cielo dará el Espíritu Santo a quienes se lo piden”. ¡El Espíritu Santo! Tenemos que pedir que el Espíritu Santo venga a nosotros. ¿Pero para qué sirve el Espíritu Santo? Sirve a vivir bien, a vivir con sabiduría, con amor, haciendo la voluntad de Dios. ¡Que linda oración sería que en esta semana cada uno de nosotros le pidiera al Padre: “Padre, dame el Espíritu Santo”.
La Virgen nos lo demuestra con su existencia, toda animada por el Espíritu de Dios. Nos ayuda ella a rezar al Padre unidos a Jesús, para vivir no de manera mundana, sino de acuerdo al Evangelio, guiados por el Espíritu Santo».
El Santo Padre reza la oración del ángelus y después dirige las siguientes palabras:
«En estas horas nuestro ánimo se encuentra una vez más turbado por las tristes noticias relativas a los deplorables actos de terrorismo y de violencia que han causado dolor y muerte.
Pienso a los dramáticos hechos de Munich en Alemania y de Kabul en Afganistán, donde han perdido la vida numerosas personas inocentes.
Estoy cerca de las familias de las víctimas y de los heridos. Les invito a unirse a mi oración, para que el Señor inspire a todos propósitos de bien y de fraternidad.
En la medida que las dificultades más parecen insuperables y oscuras las perspectivas de seguridad y de paz, tanto más insistente tiene que volverse nuestra oración”».
El Papa reza un Ave María, acompañado por todos los presentes.
«Queridos hermanos y hermanas, en estos días tantos jóvenes desde cada parte del mundo se están encaminado hacia Cracovia, donde se realizará la XXXI Jornada Mundial de la Juventud.
También yo partiré el miércoles próximo para encontrar a estos muchachos y muchachas y celebraré con ellos y para ellos el Jubileo de la Misericordia, con la intercesión de Juan Pablo II.
Les pido que me acompañen con la oración. Desde ahora saludo y agradezco a todos los que están trabajando para recibir a los jóvenes peregrinos, con numerosos obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas.
Un pensamiento especial lo dirijo a tantísimos jóvenes de su edad, que no pudiendo estar personalmente seguirán el evento a través de los medios de comunicación. ¡Estaremos todos unidos en la oración!».
Y ahora les saludo a ustedes, queridos peregrinos provenientes de Italia y de otros países. En particular los de São Paulo y de São João de Boa Vista, en Brasil; al coro “Giuseppe Denti” de Cremona; a los particular a la peregrinación en bicicleta de Piumazzo a Roma, enriquecido por un empeño de solidaridad.
Saludo a los jóvenes de Valperga y Pertusio Canavese, Torino: sigan probando a vivir y no a dar vueltas, como han escrito en sus camisetas.
A todos les deseo un buen domingo. Y por favor no se olviden de rezar por mi. “¡Buon pranzo e arrivederci!”».


El pésame del Santo Padre por el atentado en Alemania
Posted by Redaccion on 24 July, 2016



(ZENIT – Ciudad del Vaticano).- El santo Padre Francisco expresó su dolor por las víctimas del atentado del viernes en Munich en un telegrama enviado por el cardenal secretario de Estado, Pietro Parolín, al arzobispo de Munich, el cardenal Reinhard Marx, y dado a conocer hoy por la Oficina de prensa de la Santa Sede.
A continuación el texto completo
«Su eminencia cardenal Reinhard Marx
arzobispo de Munich y Frisinga.
El papa Francisco ha tomado conocimiento con consternación de las noticias del terrible hecho de violencia que sucedió en Munich, en el cual diversas personas ,especialmente jóvenes han encontrado la muerte y otras están gravemente heridas.
Su Santidad participa al dolor de los sobrevivientes y les expresa su cercanía en el sufrimiento. Y en su oración confía los difuntos a la misericordia de Dios; manifiesta su profunda participación a todos quienes han sido golpeados por este atentado y agradece a las fuerzas de socorro y del orden por su empeño atento y generoso.
El papa Francisco le reza a Cristo, el Señor de la vida, que dé a todos alivio y consolación. Y les imparte a ellos la bendición apostólica como signo de esperanza.
Card. Pietro Paroli. Secretario de Estado».


“¡Por favor, nunca más terrorismo, es un callejón sin salida!” exclama el Papa
Posted by Redaccion on 24 July, 2016



(ZENIT – Roma).- Rezo por todas las víctimas del terrorismo en el mundo. ¡Por favor, nunca más terrorismo, es un callejón sin salida!
Lo escribió anoche el papa Francisco en su cuenta de Instagram, la red social y aplicación para subir fotos y videos, con más de 300 millones de seguidores en diciembre de 2014.
En los últimos días se registraron en Europa dos sangrientos atentados, el de Niza, donde un camión arrolló el domingo pasado a una multitud en se encontraba en la Promenade des Anglais, saliendo de los festejos por la fiesta nacional de Francia, provocando 84 muertos. Y el de este viernes en Munich, con un saldo provisorio de 10 personas muertas y 21 heridos.
Atentados estos, movidos más por odio y frustración que por las ideologías, en el primer caso islamista y xenófoba en el segundo.
En cambio el atentado de ayer sábado en Kabul fue de clara matriz terrorista islámica. Al menos 80personas murieron y 231 resultaron heridas con las explosiones durante una manifestación de la minoría étnica hazara.
“Dos combatientes del ISIS detonaron sus cinturones explosivos en una concentración chiíta en el barrio Dehmazang”, reivindicó el Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés).
De cualquier signo que los atentados sean el Papa reza por las víctimas y pide ¡Por favor, nunca más terrorismo, es un callejón sin salida!
El mensaje en diversos idiomas.
DE: Ich bete für die Opfer der Terroranschläge auf der ganzen Welt. Macht endlich Schluss mit dem Terrorismus! Es ist ein Weg ohne Rückkehr! *
EN: I pray for all victims of terrorism in the world. Please, no more terrorism! It is a dead-end street! *
PT: Rezo por todas as vítimas do terrorismo no mundo. Por favor nunca mais terrorismo, é uma rua sem saída! *
ES: Rezo por todas las víctimas del terrorismo en el mundo. ¡Por favor, nunca más terrorismo, es un callejón sin salida! *
ITA: Prego per tutte le vittime del terrorismo nel mondo. Per favore, non più terrorismo! E’ una strada senza uscita! *
FR: Je prie pour toutes les victimes du terrorisme de par le monde. Il faut abandonner, j’en conjure les auteurs, cette voie sans issue!


Santiago el Mayor, 25 de julio
Posted by Isabel Orellana Vilches on 24 July, 2016




(ZENIT – Madrid).- Este galileo, hijo del Zebedeo, compartía el mismo nombre con otro de los apóstoles: el descendiente de Alfeo. Santiago era natural de Betsaida donde pudo nacer hacia el año 5 d. C. en una acomodada familia de pescadores. Fue uno de los elegidos personalmente por Jesús, quien le invitó a seguirle cuando se hallaba ganándose el sustento en el lago de Genesaret. Su hermano Juan, el «discípulo amado», que compartía con él la faena, también fue objeto de llamamiento en ese instante, y se apresuraron a ir en pos del Maestro por el que entregarían su vida. La inmediatez de su respuesta, dejando trabajo y familia al momento sin sopesar los riesgos ni detenerse a pensar racionalmente, signos que se manifestaron antes en Pedro y en Andrés, es una de las características del seguimiento, testimonio vivo para quienes son sorprendidos por Jesús en cualquier recodo del camino. Comprendieron en ese minuto que supuso el cambio radical de sus vidas lo que encerraba el espíritu inserto en sus palabras: «os haré pescadores de hombres». De algún modo entendieron que implicaban mucho más que sobrenaturalizar su oficio; les colocaba en el disparadero hacia el paraíso prometido.

A Santiago el Mayor se le atribuye haber aparecido en diversas batallas. (Catedral de Córdoba – Wiki commons Marshall Henrie)
Da idea de cómo sería el temperamento de estos jóvenes pescadores el sobrenombre que Cristo les dio: «boanerges», esto es, «hijos del trueno». Algunos pasajes evangélicos reflejan su primitivo carácter impulsivo e inmaduro. También una cierta osadía, no exenta de ingenuidad, pero en todo caso envuelta en la ambición y su inseparable egoísmo cuando secundaron a su madre en la petición de prebendas que hizo para ellos. El Redentor respondió con infinita paciencia, haciéndoles una observación que fue profecía. ¿Serían capaces de beber el cáliz? Su respuesta afirmativa fue corroborada por Él, y se cumplió en Santiago con su cruento martirio, pero el objeto de la conversación: saber si podrían ser encumbrados en el cielo uno a la derecha y otro a la izquierda, estaba en manos del Padre. Indudablemente, la impetuosidad y la pasión bien encauzadas son fuente de gracias. Así que la volcánica vehemencia que albergaba el corazón de estos hermanos tuvo en Jesús la vía genuina para seguir creciendo en la línea adecuada. Los dos despertaron el anhelo de incontables personas que, seducidas por esa cascada inagotable de pasión por lo divino que apreciaban en ambos, se dispusieron a entregar a Dios sus vidas.
Santiago, junto a su hermano Juan, y a Pedro, conforman una privilegiada tríada dentro de la comunidad de los Doce. Fueron testigos de momentos singulares que a otros discípulos les fueron vedados. Acompañaron al Redentor en instantes gloriosos y también dolorosos. Contemplaron la Transfiguración en el Monte Tabor, que ardientemente desearon haber podido prolongar, y de no haber sucumbido al sueño los tres habrían apreciado su terrible agonía en Getsemaní porque eran los que se hallaban más cerca de Él en esos momentos. Santiago estaba presente cuando Jesús devolvió milagrosamente la salud a la suegra de Pedro y resucitó a la hija de Jairo. Tuvo la gracia de ver al Maestro, ya Resucitado, al producirse su aparición en las orillas del lago de Tiberíades y se encontraba en Jerusalén en el momento de la venida del Espíritu Santo.
Tras la Resurrección, los discípulos dieron inicio a una labor evangelizadora que a algunos les condujo muy lejos de las fronteras en las que se habían movido. Según la tradición, Santiago llegó a España, dejando la huella de la fe directamente recibida de Cristo en dos lugares emblemáticos: Galicia y Zaragoza (la antigua Cesaraugusta). Primeramente habría pasado por la tierra gallega y una vez sembrado allí el evangelio se trasladaría a Zaragoza. En las orillas del río Ebro descansaría de las intensas jornadas apostólicas junto a un grupo de siete seguidores, los «Varones apostólicos», los únicos que se habían convertido. Afligido ante la dureza de corazón de las gentes en las que había hecho mella el paganismo, obtuvo el consuelo de la Virgen que se le apareció en esas riveras el 2 de enero del año 40 d. C. Se hallaba de pie, sobre una columna de luz rodeada de ángeles. Después de asegurarle que obtendría grandes frutos apostólicos, le encomendó que erigiese una iglesia levantando un altar justamente en el lugar donde estaba el pilar en el que reposaba. Acompañó su petición con la promesa de que Ella permanecería hasta el fin de los tiempos en ese sitio, «para que la virtud de Dios obre portentos y maravillas por mi intercesión con aquellos que en sus necesidades imploren mi patrocinio». Además, le indicó que regresara a Jerusalén después de materializar su ruego. Dicho esto, María desapareció y quedó la columna de jaspe en torno a la cual se edificó la iglesia solicitada, actual basílica de la Virgen del Pilar en la ciudad de Zaragoza.
Santiago volvió a Jerusalén, como Ella le había pedido, y el año 41 fue martirizado durante la persecución del rey Herodes Agripas. Fue el primer discípulo mártir. Luego, siempre según la tradición, su cuerpo, inicialmente sepultado en Jerusalén, fue trasladado por sus discípulos a Galicia. Sus restos se veneran en la catedral de Santiago de Compostela. Los estudiosos no se ponen de acuerdo a la hora de ratificar la fiabilidad de estos hechos. Además, hay discordancias como la datación de fechas que no encajan en la historia. Pero lo cierto es que la que se ha considerado su tumba dio lugar a la Ruta Jacobea, una de las corrientes más fecundas de la historia a todos los niveles espirituales y culturales, incesantemente recorrida por millares de peregrinos que acuden a visitarla desde hace siglos. Esta es la realidad incuestionable; no precisa ser contrastada. Otras vías, que tampoco están corroboradas, subrayan nuevas trayectorias del apóstol Santiago que pudo llevarle a Cartagena y a Lérida. Es el patrón de España y de otros muchos países del mundo, objeto siempre de gran veneración, especialmente en Latinoamérica.