Editorial \ Reflexiones en frontera

En el encuentro con la Virgen de Guadalupe, Dios despertó la esperanza de su hijo Juan Diego, la esperanza de un Pueblo, dijo el Papa

RV | 09/12/2016 | REFLEXIONES EN FRONTERA, jesuita Guillermo Ortiz


 

San Juan Diego, el indio que la Virgen de Guadalupe eligió para encontrarlo y mimarlo con la ternura de Dios en el Tepeyac, se celebra el 9 de diciembre.

“Solo los humildes tienen esperanza” dijo Francisco el 7 de diciembre. Y en el Santuario de la Virgen de Guadalupe, el 13 de febrero de 2016, a pocos metros del lugar del encuentro de la Madre de Dios con Juan Diego, el Obispo de Roma dijo que “así como se hizo presente al pequeño Juanito, de esa misma manera se sigue haciendo presente a todos nosotros; especialmente a aquellos que como él sienten “que no valían nada” (cf. Nican Mopohua, 55). Esta elección particular, digamos preferencial, no fue en contra de nadie sino a favor de todos.”

“En aquel amanecer de diciembre de 1531 se producía el primer milagro… en ese encuentro, Dios despertó la esperanza de su hijo Juan, la esperanza de un Pueblo. En ese amanecer Dios despertó y despierta la esperanza de los pequeños, de los sufrientes, de los desplazados y descartados, de todos aquellos que sienten que no tienen un lugar digno en estas tierras”.

Rogamos a Juan Diego que interceda ante la Madre de Dios por todos nuestros oyentes y amigos de las redes sociales. ¡Bendición!