Cáritas | Cooperación • 28 Junio 2019

 

Apoyo a familias y reconstrucción en Indonesia

 

Ayudamos a las comunidades a recuperar sus medios de vida tras la catástrofe

 

 

 


 

 

 

Una visión rápida del proyecto

  • Quién lo hace: Cáritas Indonesia con el apoyo de la red internacional Cáritas.
  • En qué consiste: apoyo a la población afectada por los terremotos de septiembre de 2018.
  • A quién va dirigido: familias que perdieron sus hogares y medios de vida.

 

 

Indonesia es una zona extremadamente vulnerable a desastres naturales debido al frecuente paso de tifones, el aumento del nivel del mar y la naturaleza volcánica de las islas.

La elevada densidad de población y la rápida industrialización presentan serios problemas medioambientales, a los cuales se da escasa prioridad debido a los altos niveles de pobreza y escasos de recursos. Uno de los problemas más inmediatos es la deforestación a gran escala (legal e ilegal). Se está destruyendo rápidamente el patrimonio natural indonesio lo cual empeora las perspectivas de futuro de este pueblo, pero también a corto plazo: los incendios relacionados con la deforestación causan una intensa niebla en partes del oeste de Indonesia, Malasia y Singapur, ocasionando problemas de salud y polución en las ciudades.

La sobre explotación de recursos marinos, hace que sean cada vez más escasos y sus tasas de reposición van en descenso. Los problemas medioambientales asociados con la rápida urbanización y el desarrollo económico, son como siempre asumidos por las capas más humildes de la población, incluyendo la contaminación atmosférica, la congestión de tráfico, la gestión de residuos y de las aguas residuales.

La deforestación y destrucción de suelos vegetales convierte a Indonesia en el tercer emisor de gases de invernadero del mundo, contribuyendo de manera decisiva a la aceleración del cambio climático. La destrucción de hábitats amenaza la supervivencia de especies indígenas y endémicas, incluyendo 140 especies de mamíferos identificados como amenazados, y 15 identificados como críticos.

Indonesia es un escenario donde un desarrollo rápido y mal entendido está acabando con el patrimonio natural, cultural y genético de manera muy acelerada.

En el plano social, el país enfrena también importantes desafíos. Tristemente, existe actividad de diversos grupos terroristas, incluido el Estado Islámico. El nivel de alerta por riesgo de amenaza terrorista es elevado en todo el país. El número de atentados se ha incrementado en los últimos meses y no se descartan nuevos ataques en cualquier punto del país, especialmente en periodos o fechas festivas para las principales religiones como Ramadán, Navidad o Año Nuevo.

Existen enfrentamientos interreligiosos en Sulawesi Central (Célebes Central). Esta región se caracteriza por la coexistencia de comunidades islámicas y cristianas indonesias, lo cual en el pasado ha originado distintos conflictos y ha hecho que la región sea objeto de diversos actos terroristas. En Papúa debe prestarse particular atención en esta región en la que un movimiento separatista local ha efectuado en el pasado secuestros de extranjeros en zonas remotas. Finalmente, el Mar de Célebes: Kalimantán Oriental, Sulawesi Norte, con especial atención al archipiélago Sangihe-Talaud, en la ruta marítima Manado-Davao. Existe riesgo de accidentes marítimos, piratería, y operaciones de grupos terroristas en estas aguas y en la costa.

El viernes 28 de septiembre 4 terremotos en la isla de Célebes afectaron a las poblaciones de Palu y Dongala. Uno de ellos alcanzó los 7,4 en la escala Richter y provocó un potente tsunami y cientos de réplicas en los siguientes días. Al menos 2.101 personas fallecieron, 4.438 fueron heridos graves ingresados y 173,552 tuvieron que desplazarse. Además del desplazamiento causado por la devastación del tsunami, el terremoto causó grandes daños estructurales, desplazando familias a refugios dañados e inseguros. Actualmente comienza la temporada de lluvias y con ello aumenta el riesgo de deslizamientos de tierra, inundaciones y enfermedades por contaminación del agua.
Respuesta de Cáritas

La respuesta de Cáritas se ha orientado a atender las necesidades básicas de entre 2.000 y 3.000 familias según la línea de acción.

  • 2.000 familias afectadas por el desastre recibieron enseres, herramientas y kits de emergencia,
  • 3,648 familias afectadas por desastres naturales han recibido asistencia en efectivo para costear sus necesidades. Cada beneficiario recibió el dinero en efectivo en función de los daños de sus casas.

El 26 de octubre de 2018 el gobernador de Sulawesi Central declaró el período de transición de respuesta de emergencia a la fase de reconstrucción. Durante este periodo de 60 días el gobierno preparó zonas de seguridad para la construcción de refugios temporales. Después del terremoto los principales desafíos eran asegurar los refugios temporales, abastecer agua potable y recuperar los medios de vida de las familias.

Caritas Indonesia (Karina) y Caritas Manado entendieron esta situación y trataron de ayudar a las comunidades para continuar su vida con medios de subsistencia. La entrega de efectivo está diseñada para cubrir la falta de ingresos regulares para la comunidad afectada durante los períodos de transición y recuperación. Aunque los mercados locales han sido funcionales, los medios de vida para las personas que trabajan como agricultores no lo han sido todavía. Los canales de riego rotos no han sido reparados y la producción agrícola ha sido dañada durante el terremoto. Por lo tanto, Cáritas ayudará a las comunidades afectadas a cubrir las necesidades diarias de las familias hasta que se recupere la normalidad.