Cáritas | Cooperación internacional • 11/01/2021

 

La crisis en Burkina Faso no da tregua

 

El número de personas que han sido forzadas a huir de sus hogares ha superado el umbral del millón

 

 

 


 

 

Tras más de dos años de violencia e inseguridad para la población civil, en Burkina Faso la crisis humanitaria no da tregua.

Actualmente el número de personas que han sido forzadas a huir de sus hogares ha superado el umbral del millón, con consecuencias devastadoras sobre las poblaciones más vulnerables. La mayoría está obligada a vivir en condiciones de extrema precariedad, con acceso limitado a alimentos, agua, refugio adecuado y atención sanitaria.

La violencia ha causado un aumento exponencial de la inseguridad alimentaria en el país, con 3,3 millones de personas que la sufren y con 535.000 niños y niñas desnutridos.

La significativa disminución de actividades económicas en las regiones del Sahel, del Norte y limítrofes, está limitando de manera critica las actividades de subsistencia y desmantelando los medios de vida de grandes segmentos de la población.

La casi totalidad de los menores desplazados se ha quedado sin acceso a la educación: desde que empezó el conflicto, 2.500 centros escolares han tenido que cerrar, privando a unos 350.000 niños y niñas al acceso a la educación. No hay suficiente disponibilidad de estructuras educativas que los puedan acoger a todos y sus familias difícilmente pueden hacer frente al pago de los gastos escolares.

Además, las comunidades de acogida se enfrentan a ulteriores desafíos, como a los problemas de desnutrición y las enfermedades infecciosas por falta de acceso a agua potable.

 

Programa de ayuda humanitaria de Cáritas y la UE

“Hemos huido y lo hemos perdido todo”, afirma un beneficiario recién llegado a Sebba, comuna de la región del Sahel, del programa de asistencia humanitaria de emergencia de Cáritas Española, en colaboración con OCADES Caritas Burkina y con el apoyo técnico y financiero de la Unión Europea.

Gracias a este programa de asistencia humanitaria, se está distribuyendo dinero en efectivo a las personas desplazadas más necesitadas y a hogares en situación de vulnerabilidad que forman parte de las comunidades de acogidas. Un total de 3.040 personas están recibiendo la ayuda vía un SMS, canjeable en los negocios de comunicación y telefonía de sus localidades. Se trata de una metodología sencilla y accesible, que garantiza satisfacer algunas de las necesidades básicas más urgentes, como son la compra de alimentos, de medicamentos, el pago de un alquiler o los gastos escolares de los niños y niñas.

Gracias a la aceptación que tienen los equipos diocesanos de OCADES Caritas Burkina por parte de la población local, el programa está alcanzando los objetivos de asistencia alimentaria en zonas de difícil acceso debido a la inseguridad. La participación de la población local y la transparencia con la que se desarrolla el programa son esenciales para la seguridad de los equipos y las personas beneficiarias.

En el vídeo que abre el post, podrás escuchar directamente los testimonios de algunas de las personas que hasta la fecha han participado en el programa.

Actualmente, Cáritas Española complementa las acciones del programa manteniendo abierta la campaña de emergencia “Cáritas con la crisis alimentaria del Sahel”, con el mismo objetivo de asistir a las familias desplazadas internas con programas de distribución de alimentos o transferencia de efectivo, para asegurar su seguridad alimentaria y garantizar la sostenibilidad de los medios de vida en las comunidades de acogida.