Se temía que se hubieran suicidado

Aparecen sanos y salvos los miembros de una secta apocalíptica en Los Ángeles

 

Un grupo de 13 inmigrantes salvadoreños, miembros de una supuesta secta y cuya desaparición había hecho temer que planearan un suicidio colectivo, fueron encontrados hoy sin daños en un área al norte de Los Ángeles, informó la Policía del condado. La policía encontró el domingo rezando en un parque de la zona de Los Angeles a los miembros de la secta que habían desaparecido tras dejar cartas en que se despedían de sus familias porque pronto verían a Jesucristo.

20/09/10 8:33 AM


 

(Agencias/InfoCatólica) Después de una búsqueda frenética, agentes del alguacil del condado de Los Angeles encontraron a los cinco adultos y ocho niños al mediodía en el parque Jackie Robinson de Palmdale, la localidad donde viven, dijo el vocero policial Steve Whitmore. Al parecer, todos gozaban de buena salud, agregó.

El grupo había desatado una amplia búsqueda policial en el sur de California luego de que sus familiares encontraran cartas que hablaban de un próximo suceso apocalíptico y de que sus integrantes pronto verían a sus parientes fallecidos en el cielo.

Según la Policía, uno de los maridos aseguró que su esposa había sido captada por una secta que le había “lavado” el cerebro.

El hombre indicó que su mujer le había dejado un monedero y al abrirlo encontró un mensaje en el que mencionaba una próxima reunión con seres queridos fallecidos, lo que despertó la alarma de que el grupo planeara un suicidio colectivo.

Una especie de secta

El grupo era una “especie de secta”, según dijeron funcionarios policiales. Lo dirigía Reyna Marisol Chicas, de 32 años, residente de Palmdale en el condado de Los Angeles, dijo el jefe de policía Mike Parker.

El grupo dejó teléfonos móviles, documentos de identificación y de propiedad, así como cartas en las que sus integrantes dijeron que esperaban lo que muchos cristianos llaman la segunda venida de Cristo.

“Básicamente, las cartas dicen que todos van a ir al cielo a encontrarse con Jesús y sus familiares muertos”, señaló el portavoz de la policía Steve Whitmore. “En algunas de las cartas decían adiós”.

Los objetos fueron encontrados en la cartera que una de las integrantes dejó con su esposo el sábado, tras pedirle que rezara. Finalmente, el hombre revisó el contenido y, junto al esposo de otra de las integrantes, se comunicó con las autoridades, dijo Parker.

Los esposos les dijeron a los agentes que creen que Chicas les “lavó el cerebro” a los miembros del grupo. Uno de ellos expresó temor de que intentaran hacerse daño, dijo Parker.

Uno de los niños tiene tres años y los demás tienen entre 12 y 17 años.

Chicas era miembro de la Iglesia de Cristo Miel, una congregación cristiana en Palmdale, pero dejó el grupo hace unos dos años sin dar mayor explicación, señaló el pastor Felipe Vides, quien agregó que las autoridades se habían comunicado con él buscando información sobre los desaparecidos.

“Nosotros la vimos siempre, hasta donde se puede decir, normal, tranquila”, le dijo Vides a The Associated Press el domingo. “No vimos ninguna anormalidad en ella”.

Secta de inmigrantes

La congregación tiene unos 400 miembros, en su gran mayoría inmigrantes latinoamericanos, indicó el pastor salvadoreño. “Nos sorprende y nos da tristeza que la gente actúe de esa manera”, señaló Vides. “Realmente no es... correcto. Nosotros somos cristianos, pero no nos enseña la Biblia cosas semejantes a éstas”.

Al parecer, Chicas formó su propio grupo religioso, dijo Parker. Entre 12 y 15 personas solían reunirse en su casa de Palmdale, una ciudad de unos 139.000 habitantes. Una noche, hace como una semana, se quedaron allí hasta las 2:00 de la mañana, dijo el vecino Cheri Kofahl.

“Tenemos aquí un grupo que está practicando aspectos ortodoxos y no ortodoxos del cristianismo”, señaló Parker. “Obviamente esto pertenece a lo no ortodoxo”.