Entre ellos, un obispo legionario

La Santa Sede nombra a los cuatro consejeros que asistirán al Delegado Pontificio para los Legionarios de Cristo

 

La Santa Sede ha nombrado a los cuatro consejeros que asistirán a Mons. Velasio De Paolis, S.C, Delegado Pontificio para congregación de los Legionarios de Cristo. Se trata de los padres Agostino Montan (CSJ), Mario Márquez (diocesano), Gianfranco Girotti (OFMConv) y Mons. Brian Farrell, LC, obispo secretario del Pontificio Consejo para la Unidad de los cristianos. La función de los consejeros está recogida en el decreto de nombramiento del Delegado Pontificio. Además, se confirma que el delegado para la rama consagrada del Regnum Christi será Mons. Ricardo Blázquez, arzobispo de Valladolid.

26/09/10 12:02 PM


 

(InfoCatólica) Se trata de los padres Agostino Montan (Josefino de Murialdo, profesor de Derecho canónico en la Pontificia Universidad Lateranense), Mario Márquez (diocesano), Gianfranco Girotti (Franciscano conventual, regente de la Penitenciaría apostólica) y Mons. Brian Farrell, LC, secretario del Pontificio Consejo para la Unidad de los cristianos.on el nombramiento de los consejeros del delegado pontificio para los Legionarios de Cristo, la Santa Sede confirma su propósito de proporcionar a Mons. De Paolis la ayuda necesaria para que pueda desarrollar con éxito la tarea que le fue encomendada por el Papa Benedicto XVI, tras el escándalo surgido al darse a conocer la vida de pecado del fundador de la Legión de Cristo y el Regnum Christi.

En el decreto de nombramiento de Mons. De Paolis, se afirmaba que “la autoridad concedida por el Santo Padre al Delegado Pontificio, muy amplia y que se ha de ejercer en nombre del mismo Sumo Pontífice, se extiende a todo el Instituto: a todos los Superiores, a los diversos niveles (dirección general, provincial y local) y a todas las comunidades y a cada religioso. Tal autoridad implica todos los problemas propios del Instituto religioso y puede ser ejercitada siempre que el Delegado lo considere necesario para el bien del Instituto mismo, incluso derogando las Constituciones”.

Además, se preveía ya que “el Delegado, en el cumplimiento de su misión, está acompañado por cuatro consejeros personales, que lo asisten en la realización de su trabajo, según las circunstancias y las posibilidades y que pueden ser encargados para tareas específicas, particularmente para visitas ad referendum. Con su ayuda, el Delegado Pontificio individua los temas principales, los discute, los aclara a medida que se presentan en el camino que él ha sido llamado a conducir”.