12.10.10

Los rosacruces y "su" camino de Santiago

A las 12:23 PM, por Luis Santamaría
Categorías : Rosacruces

 

Estamos en el Año Santo Jacobeo, que pone en el centro de la mirada de los creyentes la sede compostelana, donde se custodian los restos del apóstol Santiago el Mayor. Millones de peregrinos acuden a venerar el sepulcro apostólico, en una ruta que desde la Edad Media ha sido uno de los focos de peregrinación cristiana principal. El Congreso mundial que se ha celebrado hace unos días en Santiago de Compostela da buena cuenta de ello.

Pero era raro que no salieran a la luz las viejas reivindicaciones esotéricas y mistéricas del Camino de Santiago. Hoy mismo, 12 de octubre, cuando se celebra con solemnidad en España la fiesta de la Virgen del Pilar (recordando esa aparición de santa María al apóstol a las orillas del Ebro), el diario La Voz de Avilés nos trae la sorpresa de algo que ya está muy visto.

Se trata de una entrevista, cuyo titular ya llama la atención, desde luego: “El Camino de Santiago es hoy en día un negocio y eso es fantástico”. ¿Y quién lo dice? ¿Un hostelero? No. Un profesor de Arte, Jesús Zatón. Pero da la casualidad (que no es tal) de que es el Bibliotecario de la Fundación Rosacruz. Un movimiento esotérico que hunde sus raíces en el siglo XVII, y que según el periódico es “una entidad sin ánimo de lucro que tiene como objetivo la investigación y divulgación del conocimiento hermético y gnóstico en general".

Jesús Zatón ofreció en Avilés una conferencia “para abundar en aspectos poco conocidos del Camino de Santiago". Es decir, para explicar la interpretación esotérica y hermética de esta ruta de peregrinación cristiana. Lo sorprendente es que lo hiciera en un ámbito académico, que tendría que ser serio: el Centro de Servicios Universitarios de la ciudad asturiana. De hecho, en la fotografía puede leerse, tras el ponente, “Universidad de Oviedo".

Ya en la primera pregunta, inducido por el entrevistador, el bibliotecario rosacruz explica que “podemos hablar de la ruta del Camino de Santiago desde la época del Neolítico o el Paleolítico. Lo que yo defiendo es que el Camino de Santiago nació por un movimiento religioso y político, pero que en él es fundamental el papel de los constructores itinerantes”. Aquí puede verse ya el tema de los albañiles medievales como garantes de un saber escondido, precisamente lo que está en la base del rosacrucismo y la masonería, movimientos de cuño esotérico.

Esto queda confirmado por otra declaración de Zatón: los constructores “dotaron al camino de un aspecto esotérico oculto a través de la escuela de los misterios que enlazan con la Gran Tradición y que va más allá de lo que la ciencia actual quiere reconocer. Han dejado su mensaje en la piedra con una iconografía que trae de cabeza a los investigadores. Es un mensaje oculto que está por descubrirse”.

Y lo siguiente es la reinterpretación esotérica de la historia de España y de la historia del cristianismo en nuestro suelo, como es típico en algunos de estos grupos esotéricos. Leemos que el bibliotecario rosacruz dice que “hasta el año 1100 la iglesia no tenía tanto poder en España. Antes de la entrada de Cluny, con la liturgia romana, ya había cantidad de lugares católicos que no seguían esta tradición. Los constructores itinerantes estaban protegidos por organizaciones como los templarios, que tenían un contenido esotérico que se plasma en sus obras. En esa época hay una gran influencia de la tradición celta en el cristianismo”. Los rosacruces, como todas las sectas esotéricas, al final vienen a ser la versión originaria del cristianismo, y los herederos de las tradiciones templarias y semejantes.

Continúa con esas reinterpretaciones mistéricas, cuando habla sobre el “legado oculto” (que han recibido ellos, y transmiten de forma esotérica, claro): “se trata de un cristianismo mucho más abierto que, con los mismos símbolos, tiene diferentes significados. De cara a fuera, la interpretación es la misma, pero encierran una segunda interpretación. Por ejemplo, la serpiente hablando al oído de alguien se interpreta como un mensaje del demonio, pero también tiene la interpretación de la transmisión del conocimiento, porque la serpiente siempre ha sido símbolo de la sabiduría”. ¿Abierto? ¡Pero si es algo oculto por definición, sólo para iniciados!

También puede verse en sus palabras el carácter gnóstico del pensamiento rosacruz, que aunque emplee palabras cristianas, las vacía de contenido, al primar el conocimiento de algo secreto sobre la fe: en cuanto a los principios de los constructores, “son iguales a los del cristianismo: morir al mundo en lo que a deseos se refiere y resucitar en el sentido de regenerarse. Pero la iglesia católica se bastaba de la fe, mientras que el conocimiento se basa en saber cómo eres por dentro, cómo te comportas, para proceder después a un cambio mental, de la emoción y del pensamiento”. Todo reducido a lo simbólico.

El comentario final, que ofrece el titular del artículo de prensa, tampoco tiene desperdicio: “El camino hoy en día es un negocio y eso es fantástico. Ha pasado épocas en la que ha estado totalmente olvidado. Aunque sea desde un punto de vista ortodoxo, es genial porque se consigue que perduren los lugares y los símbolos. Aunque yo prefiero la vía del conocimiento que la peregrinación del dolor que propone el cristianismo actual”.

Hay muchos ejemplos más, por parte de autores, de sectas y de corrientes esotéricas, neopaganas y de la Nueva Era, de vaciar de contenido cristiano el Camino de Santiago y ofrecer esta visión “oculta". Éste es uno reciente, y por eso lo hemos traído a este lugar.