Benedicto XVI reconoce los avances y dificultades en el ecumenismo

El Papa afirma que sobre la fe no se puede discutir como sobre la política

 

Al recibir en el Vaticano a los miembros del Consejo Pontificio para la Unidad de los Cristianos, con motivo del su 50 aniversario, el Papa Benedicto XVI dijo ayer que el camino hacia la unidad de los cristianos sigue teniendo puntos «difíciles», pero «no se detiene», y argumentó que no se puede negociar sobre la fe como si fuera un asunto político. El Papa subrayó que la unidad de los cristianos «no la hacen» ellos, sino que llegará desde Dios.

19/11/10 10:08 AM


 

(Agencias/InfoCatólica) El Papa reiteró el «compromiso» de la Iglesia Católica en trabajar en aras de la unidad de los seguidores de Cristo, separados desde hace casi mil años. El Santo Padre reconoció que sigue habiendo “situaciones problemáticas o puntos difíciles” en el diálogo ecuménico, pero subrayó que eso no significa que el camino, sobre todo en Occidente, haya perdido “impulso”.

El Obispo de Roma aseguró que la Iglesia Católica “prosigue con pasión el diálogo, buscando profundizar de manera seria y rigurosa en el común patrimonio teológico, litúrgico y espiritual y afrontar con serenidad y compromiso los elementos que aún nos dividen”. “La meta del camino ecuménico continúa siendo la misma. No se trata de un compromiso político en el que entra en juego la habilidad de negociar o la mayor capacidad de encontrar compromisos y a través de buenos mediadores y de un cierto tiempo llegar a acuerdos aceptables”, afirmó Benedicto XVI.

Plegaria, oración, penitencia

El Papa agregó que en la fe no se da esa capacidad negociadora existente en la política y que para que avance el diálogo ecuménico es necesaria la plegaria y la penitencia. Benedicto XVI subrayó que la unidad de los cristianos “no la hacen” ellos, sino que llegará desde Dios. No obstante, ello no impide que disminuya el compromiso de los cristianos para que se produzca cuando antes.

El Pontífice señaló que el diálogo con las Iglesias Ortodoxas y las Antiguas Iglesias Orientales, la Iglesia católica lo hace con “pasión, intentando profundizar de manera seria y rigurosa en el común patrimonio teológico, litúrgico y espiritual”. Añadió el Papa que “con los ortodoxos se ha llegado a tocar un punto crucial: el papel del obispo de Roma en la comunión de la Iglesia; y la cuestión eclesiológica está en el centro del diálogo con las antiguas Iglesias Orientales. La presencia de nuevas situaciones problemáticas o de puntos difíciles para el diálogo no debe interrumpir y la acción ecuménica”.