29.12.10

SIDA no; preservativos… tampoco

A las 12:16 AM, por Eleuterio
Categorías : General, Defender la fe
 

Gracias al nuevo servicio que hace poco ha introducido InfoCatólica y que ha dado en llamar “Todas las noticias en un solo clik” he tenido conocimiento de una noticia que resulta, sobre todo, clarificadora para: despistadores profesionales y despistados al respecto del tema del SIDA y del preservativo.

Así, para que los despistadores profesionales, siempre al acecho de Benedicto XVI, dejen de causar malestar en el seno de la Iglesia católica, la Congregación para la Doctrina de la Fe ha tenido que salir al quite del intento de tergiversar las cosas al respecto del SIDA y de la humana remediación del mismo.”Sobre la banalización de la sexualidad. A propósito de algunas lecturas de ‘Luz del mundo’” (último libro-entrevista del Santo Padre con Peter Seewald) según informaba el Vatican Information Service (VIS).

Queda claro, por una parte, que la Iglesia católica, no estima buena ni benéfica la existencia del SIDA. Por eso trata de remediar, lo que puede, tal enfermedad asistiendo a las personas infectadas por tal virus. Duda sobre eso ninguna ni se puede admitir, siquiera, que nadie la plantee.

Por tanto: SIDA no.

¿Y lo otro? o, lo que es mismo, ¿Qué método se ha de utilizar para que mengüe, como poco, tal enfermedad?

A la pregunta de Seewald ¿”Significa esto que la Iglesia católica no está por principio en contra de la utilización de preservativos?” (porque podría pensarse que eso era lo que decía el Santo Padre al respecto) responde Benedicto XVI que Es obvio que ella no los ve como una solución real y moral. No obstante, en uno u otro caso pueden ser, en la intención de reducir el peligro de contagio, un primer paso en el camino hacia una sexualidad vivida de forma diferente, hacia una sexualidad más humana”.

¿No se entiende esto?

Pues para los que no quieran enterarse o procuren mirar para otro lado tirando, de paso, la piedra contra la cabeza de Benedicto XVI, lo siguiente debería hacer callar muchas bocas: “Es decir, la mera fijación en el preservativo significa una banalización de la sexualidad, y tal banalización es precisamente el origen peligroso de que tantas personas no encuentren ya en la sexualidad la expresión del amor, sino sólo una suerte de droga que se administran a sí mismas”.

Esto lo dice el Santo Padre, porque en la teoría llamada ABC (Abstinence, Be faithful, Condom, Abstinencia, Fidelidad y Preservativo) hay bastantes comportamientos antes del uso del preservativo y la Iglesia católica tiene la obligación de defender los que entiende adecuados a su doctrina y moral.

Así, quien se abstiene no tiene que utilizar el preservativo; quien no se abstiene pero es fiel tampoco tiene que hacer uso del preservativo. Ahora bien, en quien no se abstiene y no es fiel el uso del preservativo es, en todo caso, expresión de una disfunción moral que debería corregir. Tal es la certeza de la verdad que no ha de doler decir porque es insoslayable.

De aquí, que la Nota citada sobre el tema en cuestión, dice la CDF lo que sigue:

A este respecto, el Santo Padre afirma claramente que los profilácticos no son ‘una solución real y moral’ del problema del sida, y también que la ‘mera fijación en el preservativo significa una banalización de la sexualidad’, porque no se quiere afrontar el extravío humano que está en el origen de la transmisión de la pandemia”.

Por tanto: preservativo, tampoco.

Eleuterio Fernández Guzmán