Maratón de fe por lsa calles pontevedresas

Los jóvenes católicos de Pontevedra reciben la Cruz de la JMJ Madrid 2011

 

La Cruz de los Jóvenes llegó ayer a la ciudad de Pontevedra para ser recibida y portada por decenas de escolares y adolescentes vinculados a las distintas parroquias. Éstos la trasladaron por tramos hasta la basílica de Santa María y posteriormente hasta el convento de Santa Clara. Tras la visita de la Cruz a Santiago para participar en el rito de cierre de la puerta santa, volverá a la ciudad del Lérez para pernoctar en la residencia de ancianos Virgen del Camino.

31/12/10 9:01 AM


 

(S. Regueira/Faro de Vigo) La Cruz de los Jóvenes fue un encargo especial del Vaticano: debía representar el símbolo de la fe católica en el altar mayor de la basílica de San Pedro durante el año jubilar de la Redención y al finalizar 1984, el Papa quiso entregarla a los jóvenes para que difundiesen el mensaje cristiano.

Desde esa fecha miles de jóvenes de todo el mundo han portado a hombros este símbolo, que había recalado en España en distintas ocasiones y que llegó ayer por primera vez a Pontevedra.

Felicidad entre los jóvenes católicos

Fue recibida en la plaza del Muelle, a donde llegó acompañada del Icono de la Virgen María. Ambos símbolos fueron flanqueados por bandas de cornetas de las cofradías de Semana Santa y numeroso público, especialmente juvenil, quiso arroparlos en su primer periplo por la ciudad del Lérez.

Tanto la Cruz de los Jóvenes como el Icono de la Virgen fueron portados a hombros por grupos de jóvenes vinculados a las distintas parroquias y escolares del municipio. Éstos no ocultaban su alegría por la llegada a la ciudad de un símbolo viajero “que indica el compromiso de la Iglesia con los jóvenes”, indica uno de los adolescentes que ayer portó el Icono durante uno de los tramos. La comitiva recorrió la calle Arzobispo Malvar y las escalinatas de Santa María para acceder a la basílica por la puerta principal.

Vigilia juvenil

El principal templo de la ciudad fue escenario momentos después de una vigilia juvenil (aunque pudieron sumarse a la misma todos los fieles interesados) que dio paso a una nueva andadura por la ciudad de la Cruz de los Jóvenes. Ésta recorrió a continuación diversas calles y varias de las principales plazas del centro histórico antes de detenerse ante la iglesia parroquia de San Bartolomé y, finalmente, la procesión concluyó en el convento de Santa Clara.

Fue un maratón de fe en el que los jóvenes fueron los grandes protagonistas y que continuará hoy y mañana con turnos de oración en el convento de Santa Clara y en la residencia de Ancianos. Y es que en el convento pontevedrés de Santa Clara la Cruz de los Jóvenes permanecerá hasta el mediodía de hoy. Hasta entonces podrá ser visitada por los particulares y grupos organizados, según confirmaron ayer los organizadores del programa de actividades.

Éstos recuerdan que “al coincidir esta visita de la Cruz de los Jóvenes a Galicia con la ceremonia de clausura del Año Santo compostelano, se tendrá en cuenta de una forma especial en este acto simbólico, incluyendo la cruz en el rito de cierre de la puerta santa, en la catedral de Santiago”. Una vez que finalicen estos oficios religiosos en el templo compostelano la Cruz de los Jóvenes regresará a la ciudad de Pontevedra, en este caso a la residencia de ancianos Virgen del Camino.

Fin de Año en el Asilo

La Cruz de los Jóvenes pasará en el Asilo la última noche del año 2010 y allí recibirá el año nuevo, en una jornada en la que también podrá ser visitada libremente. Al igual que sucederá esta mañana en el convento de Santa Clara, grupos, asociaciones y parroquias de la ciudad han organizado turnos de oración en el la residencia de ancianos para venerar a la Cruz de los Jóvenes y al Icono de la Virgen.

Los organizadores de los actos conmemorativos de la llegada de la Cruz y el Icono de la Virgen a Pontevedra recordaron ayer que este símbolo ha viajado en los últimos años a numerosos países del mundo, desde Alemania a Estados Unidos, Australia, Filipinas, Argentina, Canadá o la República Checa, presidiendo todos los actos de las Jornadas Mundiales de la Juventud, inclusive la que tuvo lugar en Santiago de Compostela en el año 1989.