Regentado, desde hace 2 años, por los frailes de San Juan

Valdedios recupera su aire contemplativo de siempre

Se trata de una congregación, fundada en 1975, que combina la vida contemplativa y activa

Manuel Robles, 27 de febrero de 2011 a las 09:13


 

(Manuel Robles).- A mediados de febrero, en Asturias llueve, hoy  hace una temperatura agradable, pero se nota en el ambiente la humedad. El periodista que es de clima seco, leonés por más señas, se va haciendo mayor y siente, cada día más, la humedad de esta tierra asturiana. Los lunes estos frailes de San Juan, lo dedican al silencio y a la oración, hacen lo que tienen que hacer, pero en silencio. E periodista llega a Valdedios a la hora de comer, me recibe el superior P. Tarsicio Lamarie, que me invita a comer y, acto seguido, me lleva al refectorio. Todos los religiosos están en silencio y cada uno debe servirse los alimentos. La comida es sencilla: tortilla a la española, ensalada, salchichas y pastel o fruta. Como no es domingo no hay vino ni café.

-Nosotros somos contemplativos y activos. Para nosotros la oración y la unión con Dios es algo natural en nuestra vida de monjes. Sin embargo, esa búsqueda de la unión con Dios, no nos separa del mundo, porque también nos sentimos llamados a la acción. Para nosotros son muy importantes los trabajos cotidianos que tenemos que realizar en el monasterio, pero también esa búsqueda de la verdad que lleva consigo la inteligencia del hombre en este mundo nuestro. Unir la contemplación y la acción son dos caras de la misma moneda para estar siempre unidos a Dios.

El P. Tarsicio es un fraile francés, alegre, sonriente, de maneras sencillas, que habla muy bien español. Siempre pensó en formar una familia, dedicarse a la ingeniería electrónica y aprovechar la vida que sólo se vive una vez, pero Dios se metió en su vida sin avisar, y acabó de monje de San Juan y luego sacerdote. Este fraile que ya parece un español de toda la vida es el que satisface mis deseos de conocer lo que encierra Valdedios.

-Valdedios es un monasterio muy conocido de los asturianos, ahora nos hace falta que sea conocido en toda España, porque este lugar desde mayo a octubre es muy bonito y aquí se puede descansar de las carreras de la vida. Se podría decir que comenzó su andadura con Alfonso IX de León y Doña Berenguela, el 27 de noviembre de 1200. Aquí había una pequeña iglesia conocida con el nombre de San Salvador, construida por Alfonso III el Magno, durante el siglo IX. Este iglesia que esta bastante bien conservada, se la conoce como el "Conventín", y es una joya del arte prerrománico asturiano.

En tiempos de Fernando III de Castilla (1218) se construyó la abadía, que llegó a ser muy importante, pero con la muerte del rey santo comenzó el declive que llegó hasta los siglos XIV y XV, luego volvió a resurgir con su incorporación a los Cistercienses de Castilla. En el 1522 sufrió una inundación por desbordamiento del río Valdedios que acabó con el claustro y su entorno, aunque se salvó la iglesia del monasterio.

Con la invasión francesa y las sucesivas desamortizaciones se acabó con la vida monástica de Valdedios, siendo suprimido el 11 de octubre de 1835, por el ministro Mendizábal, aunque permanecieron tres monjes hasta que murieron en 1862. Luego fue adquirido por la Archidiócesis de Oviedo y de 1923 a 1951 pasó a ser seminario diocesano, para quedar abandonado a partir de los años 50.

En 1986, por acuerdo entre el Principado de Asturias y la Archidiócesis de Oviedo, se inició la restauración actual, y el 29 de julio de 1992, la Santa Sede, por medio de el cardenal Martínez Somalo lo convirtió en priorato conventual cisterciense con miras a su revitalización. Esta revitalización no llegó a producirse, y en 2008 se suspendió el priorato, así de la mano de Carlos Osoro, arzobispo de Oviedo, llegaron los monjes de la Comunidad de San Juan el 21 de febrero de 2009.

-Nuestro orígenes como orden religiosa vienen de Francia. Nuestra Congregación fue fundada por el dominico P. Marie Dominique Philippe, en el año 1975, para difundir el espíritu del apóstol San Juan. En nuestra espiritualidad tres cosas son esenciales: la contemplación, la vida en comunidad y la búsqueda de la verdad. En Valdedios estamos cuatro sacerdotes y cinco novicios, que son todos mejicanos y de habla hispana. Actual mente, la congregación la componemos alrededor de 1000 monjes con las dos ramas de hombres y mujeres. A los que hay que añadir unos 3000 laicos que, sin salir de su vida corriente, participan del espíritu de la Comunidad de San Juan.

-Integrarnos en la diócesis de Oviedo es fundamental porque no somos religiosos "de pata libre" que dicen los españoles. Por nuestro carisma, que también conjuga la vida activa, podemos colaborar en la vida pastoral de la diócesis donde trabajamos, siempre que el obispo nos lo pida. Ahora tenemos un encargo pastoral en la Universidad de Oviedo, y de momento no atendemos parroquias, pero siempre estamos dispuestos a ayudar a los sacerdotes diocesanos que nos lo pidan.

-Para nosotros Valdedios no es un lugar incómodo. La verdad es que está apartado de las grandes ciudades, pero a nosotros que somos monjes esto nos ayuda, no nos perjudica. Una de las razones por las que estamos en Valdedios es porque nuestra orden necesitaba un noviciado de habla hispana y este lugar reúne las condiciones para ser noviciado. ¿El frío? La zona donde viven los monjes está bastante bien acondicionada, este lugar no es muy frío, lo que hemos notado todos nosotros que somos de clima seco es la humedad. Si que es cierto que la humedad en este valle es muy penetrante. Ahora no utilizamos la Iglesia del monasterio, para nuestras celebraciones tenemos una capilla adaptada. A partir del mes de junio es cuando volvemos a la Iglesia del monasterio.

-Las obras en el Conventín comenzaron en mayo del 2010 bajo la dirección del arquitecto gijonés, Javier Felgueroso Carrascal, y se acabarán en el mes de febrero de este año. El retraso en la finalización de las obras, que debían haber terminado en diciembre del pasado año, se debe a los problemas de la colocación de la teja romana original. Todos tenemos ganas de acabar para que el Convetín pueda ser admirado de todos los que vienen a Valdedios.

-Si es cierto por aquí pasa el Camino de Santiago que va hacia Oviedo. El monasterio cuenta con una hospedería y un albergue de peregrinos. Tenemos un total de 22 camas en la hospedería y 19 en el albergue. Llevamos aquí dos años y estamos aterrizando, pero uno de nuestros desafíos es potenciar desde el monasterio el Camino de Santiago que se dirige a Oviedo y el Camino de Santiago que va por toda la costa asturiana, conocido como Camino del Norte.