Un teólogo de Estados Unidos asegura que las investigaciones sobre Jesús de Nazaret serán el principal legado de Benedicto XVI. Los capítulos del II tomo
Roma Jueves, 03 de Marzo de 2011 01:00 El teólogo Matthew Levering, de la Universidad Ave Maria (Florida), asegura que los estudios sobre Jesús de Nazaret “serán el gran legado de Benedicto XVI, al igual que la teología del cuerpo es el legado de Juan Pablo II”. El vaticanista de ‘Il Foglio’, Paolo Rodari, se hace eco de estas palabras en un artículo sobre el libro del Papa.
El 10 de marzo se presenta en Roma “Jesús de Nazaret, segunda parte. Desde la entrada en Jerusalén a la resurrección”. Participarán en el acto el cardenal Marc Ouellet, prefecto de la Congregación para los Obispos, y el escritor Claudio Magris. La obra ya está traducida a siete idiomas: alemán, italiano, inglés, español, francés, portugués y polaco, y consta de nueve capítulos y un epílogo.
Los capítulos son: 1. La entrada a Jerusalén y la expulsión de los mercaderes del templo. 2. El discurso escatológico de Jesús, en el que están presentes la destrucción del templo y de Jerusalén, el juicio final y el fin del mundo. 3. El lavatorio de los pies y el misterio de la traición de Judas. 4. La oración sacerdotal de Jesús y sus raíces bíblicas. 5. La Última Cena y la institución de la Eucaristía. 6. Getsemaní, la voluntad de Jesús y la voluntad del Padre. 7. El proceso a Jesús ante el Sanedrín y ante Pilato. 8. La crucifixión, la sepultura y la muerte como expiación. 9. La resurrección y su significado histórico, el enigma de la tumba vacía, los testigos y las apariciones de Jesús. El epílogo está dedicado a la ascensión de Jesucristo a los cielos.
Después de este segundo tomo de “Jesús de Nazaret”, quedará todavía un tercero por publicar. El primero de la serie abarcó desde el bautismo de Jesús en el Jordán hasta la transfiguración. Aún falta la tercera parte de la obra, que versará sobre el nacimiento, infancia y comienzo de la predicación de Jesucristo. El Papa empezó a escribir el tercer tomo durante el verano pasado en Castelgandolfo.
