Benedicto XVI invita a vivir el cristianismo "con simpatía"
El Papa pide en Venecia "una nueva generación de políticos para el bien común"
Subraya "la importancia de la familia, fundada sobre el matrimonio fiel y abierto a la vida"
Redacción, 07 de mayo de 2011 a las 21:48
Benedicto XVI ha viajado este sábado a las ciudades de Aquileia y Venecia (norte de Italia) y ha pedido a los cristianos que promuevan "el amor a la vida, desde su concepción hasta su fin natural" y demuestren, en la sociedad actual, "la importancia de la familia, fundada sobre el matrimonio fiel y abierto a la vida".
El Pontífice ha realizado este sábado su 22 viaje pastoral dentro de Italia, la primera vez que se dirige a Venecia y Aquileia. El Papa ha llegado a la ciudad de Aquileia en torno a las 16 y hacia las 20,00 horas ha llegado en helicóptero a la Plaza de San Marcos de Venecia.
Este domingo por la mañana, el Papa se dirigirá de nuevo a la Catedral de San Marcos para celebrar una misa con los venecianos y recitar el habitual ángelus desde la Plaza central de la ciudad. Por la tarde, Benedicto XVI viajará por primera vez en góndola desde la Plaza de San Marcos hasta la Basílica de Santa María de la Salud, una góndola que ya utilizó Juan Pablo II en su viaje a Venecia en 1985. En esta Basílica, el Papa dirigirá un discurso al mundo de la cultura y el arte.
El Obispo de Roma ha recordado en Aquileia que "el empeño pastoral" de la promoción de la familia "es más urgente ante la crisis cada vez más difundida de la vida conyugal y de la caída de la natalidad". "En este contexto", ha declarado el Papa, la fe cristiana "debe afrontar nuevos desafíos" como "la búsqueda muchas veces exasperada del bienestar económico, en una fase de grave crisis económica y financiera, el materialismo práctico o el subjetivismo dominante".
En este contexto, ha explicado el Pontífice, los cristianos están llamados "a promover el sentido cristiano de la vida" sobre todo a través "de las obras de amor y de las elecciones de la vida a favor de personas concretas" en particular "a través de las más débiles, frágiles e indefensas".
Además, el Papa ha destacado que "los cambios culturales actuales" piden a los fieles a ser "cristianos convencidos, dispuestos a responder a quien os pregunte las razones de vuestra esperanza".
Benedicto XVI ha subrayado también que "el masivo fenómeno del turismo y de la inmigración, la movilidad territorial y el proceso de homologación provocado por la acción persuasiva de los medios, han acentuado el pluralismo cultural y religioso".
En este sentido, el Pontífice ha afirmado que es necesario que "los cristianos propongan la belleza del acontecimiento de Cristo" en un diálogo "franco y sincero con los no practicantes, los no creyentes y con los creyentes de otras religiones" aunque sin "renegar nada del Evangelio en el cual creen".
El Papa ha pedido también a los fieles que se impliquen también "en los varios ámbitos sociales, en modo particular en el ámbito político" puesto que "éste necesita más que nunca personas, sobre todo jóvenes, capaces de edificar una vida propicia".
El Pontífice ha invitado a los fieles a vivir el cristianismo "con simpatía, comunicando en vuestro mismo estilo de vida ése humanismo que tiene sus raíces en el cristianismo" para construir "una 'ciudad' más humana, más justa y solidaria".
RECUERDA QUE VENECIA ES UN PUENTE ENTRE ORIENTE Y OCCIDENTE.
Por otra parte, ante miles de peregrinos congregados en la Plaza de San Marcos de Venecia, el Papa ha destacado que los fieles tienen el deber "de buscar y custodiar siempre la armonía entre fe y razón" que permite "a la conciencia percibir el verdadero bien".
Benedicto XVI ha pedido también que "las elecciones de la comunidad civil sean siempre inspiradas a los principios éticos correspondientes a la profunda verdad de la naturaleza humana" y ha declarado que el hombre "no puede renunciar a la verdad sobre sí mismo" que lleva a "un sentido de la responsabilidad personal, la solidaridad hacia los demás y la honestidad en las relaciones laborales y económicas".
El Pontífice ha recordado que la ciudad de los canales ha sido siempre "un cruce de caminos de personas y comunidades de toda cultura, lengua y religión" y "ha correspondido siempre a la especial vocación de ser puente entre Occidente y Oriente". Por ello, el Papa ha invitado a los peregrinos a crear "puentes de diálogo entre pueblos y naciones".
"En nuestra época, con sus nuevas perspectivas y sus complejidades" ha recordado el Pontífice, la ciudad italiana "está llamada a asumir importantes responsabilidades en orden a la promoción de una cultura de acogida y de generosidad", una cultura "que tiene su base en el Evangelio".