La UE pide al ejecutivo egipcio restaurar la calma

El Gobierno condena la violencia en El Cairo y defiende la libertad de credo

Se ha saldado con doce muertos y decenas de heridos

Redacción, 09 de mayo de 2011 a las 16:46

 

El Gobierno ha condenado hoy los actos de violencia contra dos iglesias coptas en El Cairo, en los que se han registrado doce muertos y decenas de heridos, y ha reafirmado su compromiso con "la libertad de credo y de religión sin ningún tipo de discriminación". En un comunicado emitido por el Ministerio de Asuntos Exteriores, el Ejecutivo muestra sus condolencias a las familias de los fallecidos y de los heridos, y valora los esfuerzos del Gobierno egipcio para determinar las responsabilidades y prevenir actos de este tipo en el futuro.

Elogia además la voluntad de las autoridades egipcias para que impere la tolerancia religiosa y el respeto a las libertades individuales.

Por su parte, la alta representante de la Unión Europea (UE), Catherine Ashton, ha condenado hoy la violencia religiosa en Egipto y ha reclamado al Gobierno interino de este país que actúe de inmediato para restaurar el orden y acabar con ese tipo de ataques.

Ashton también ha pedido a las autoridades egipcias que "lleven a los responsables de la violencia ante la justicia", según indicó en un comunicado.

En los últimos días, musulmanes y cristianos coptos han mantenido duros enfrentamientos que, de momento, se han cobrado la vida de veinticuatro personas y han llevado al ejército a detener a cientos de personas.

"Estoy gravemente preocupada por las muertes y los heridos resultantes de los choques violentos en el exterior de una iglesia copta en El Cairo", ha asegurado la máxima responsable de la diplomacia europea.

Por ello, Ashton ha urgido al Gobierno egipcio -interino desde la renuncia en febrero del presidente Hosni Mubarak- que ponga fin a los enfrentamientos y restaure la calma en el país.

"Condeno sin reservas la violencia y mis pensamientos están con las familias de los fallecidos y todas las víctimas", ha añadido.

La alta representante ha celebrado que los líderes religiosos de ambas confesiones hayan llamado "a la calma y a la moderación", y ha recordado que la libertad de culto es "un derecho humano universal que debe ser protegido".

Para Ashton, la libertad religiosa está "intrínsecamente ligada a la libertad de opinión y expresión" y "contribuye a la construcción de una sociedad democrática y plural".

(Rd/Efe)