Red Iberoamericana de

Estudio de las Sectas

Contacto

Nº 221

29 de Nov. 2011

 

1. Benedicto XVI: el desafío de las sectas y la hechicería en África.

2. Las sectas, un desafío al ecumenismo en Iberoamérica.

3. Una nueva editorial católica española arranca con un libro sobre las sectas.

4. Estados Unidos: el asalto de los mormones.

5. Asesinan en México a un predicador de los testigos de Jehová.

6. Japón ratifica la condena a muerte a un adepto de la Verdad Suprema.

7. La masacre de Guyana: ¿suicidio o asesinato en masa?

8. Los rosacruces se dan a conocer en España con conferencias.

9. Crecen en España las santerías con camuflaje católico.

10. Muere en Perú un turista francés por el consumo ritual de ayahuasca.

 

 

1. Benedicto XVI: el desafío de las sectas y la hechicería en África.

FUENTE: Santa Sede – Ecclesia

 

 

La entrega y publicación del correspondiente documento papal tras la II Asamblea Especial para África del Sínodo de los Obispos, celebrado en Roma en octubre de 2009, fue el argumento principal de la visita apostólica de Benedicto XVI al pequeño país de Benín, situado en el Golfo de Guinea, que ha tenido lugar entre el 18 y el 20 de noviembre de 2011.

El documento

“La Iglesia en África al servicio de la reconciliación, la justicia y la paz”. Como explica en la revista Ecclesia su director, Jesús de las Heras, “Vosotros sois la luz del mundo… Vosotros sois la sal de la tierra” (Mt 5, 13.14) fue el lema de la II Asamblea especial para África del Sínodo de los Obispos, que tuvo lugar en Roma del 4 al 25 de octubre de 2009.

Medio año antes, concretamente el 19 de marzo, en Yaoundé, capital de Camerún, el Papa Benedicto XVI hizo entrega a la Iglesia católica africana del Instrumentum laboris de la asamblea sinodal. Los padres sinodales concluyeron sus trabajos con la presentación al Papa de 54 proposiciones.

Y ahora, este mismo Sínodo hizo regresar al Papa Benedicto XVI a África. Las aludidas proposiciones de los padre sinodales, los quehaceres en el aula sinodal y los trabajos previos, más la reflexión del Santo Padre y las orientaciones de la secretaría general del Sínodo de los Obispos y de su específico consejo postsinodal, se han de concretar ahora en un documento pontificio de gran relieve: la exhortación apostólica postsinodal que Benedicto XVI firmó el sábado 19 de noviembre en la catedral de Ouidah y entregó al episcopado africano el día siguiente, domingo 20, en Cotonou.

Como hacemos siempre en Info-RIES con los documentos papales que abordan de alguna manera el tema de las sectas, recogemos aquí las alusiones a este fenómeno en la exhortación apostólica postsinodal Africae munus. En el documento pueden leerse las siguientes reflexiones sobre la acción de las sectas sobre el mundo juvenil, las iglesias autóctonas, el sincretismo, las religiones tradicionales africanas y la hechicería. Todos estos textos sirven para interpretar desde el Magisterio católico el complejo pluralismo religioso en África en todo lo que se sale del mundo de las Iglesias cristianas y de las religiones tradicionales.

Sectas y jóvenes

63. Queridos jóvenes, pueden tentaros reclamos de todo tipo: ideologías, sectas, dinero, drogas, sexo fácil o violencia. Estad alerta: quienes os hacen estas propuestas quieren destruir vuestro porvenir. No obstante las dificultades, no os dejéis desanimar y no renunciéis a vuestros ideales, a vuestra dedicación y asiduidad en la formación humana, intelectual y espiritual. Para alcanzar el discernimiento, la fuerza necesaria y la libertad para resistir a esas presiones, os animo a poner a Jesucristo en el centro de toda vuestra vida mediante la oración, y también mediante el estudio de la Sagrada Escritura, la práctica de los sacramentos, la formación en la Doctrina social de la Iglesia, así como a participar de manera activa y entusiasta en las agrupaciones y movimientos eclesiales. Haced crecer en vosotros el anhelo de fraternidad, de justicia y de paz. El futuro está en manos de quienes saben encontrar razones sólidas para vivir y para esperar. Si lo queréis, el futuro está en vuestras manos, porque los dones que el Señor ha dispensado a cada uno de vosotros, fortalecidos por el encuentro con Cristo, pueden ofrecer al mundo una esperanza autentica.

“Iglesias independientes”

90. A lo largo de estas últimas décadas, la Iglesia en África se ha preguntado con insistencia sobre el nacimiento y la expansión de comunidades no católicas, llamadas a veces también autóctonas africanas (Independent African Churches). Con frecuencia se derivan de iglesias y comunidades eclesiales cristianas tradicionales que adoptan aspectos de las culturas tradicionales africanas. Estos grupos han aparecido recientemente en el panorama ecuménico. Los pastores de la Iglesia católica deberán tener en cuenta esta nueva realidad para promover la unidad entre los cristianos en África y, por tanto, encontrar una respuesta adecuada al contexto con vistas a una evangelización más profunda, para hacer llegar de modo eficaz la verdad de Cristo a los africanos.

Sectas y sincretismo

91. En África han surgido también en los últimos decenios muchos movimientos sincretistas y sectas. A veces es difícil discernir si son de inspiración auténticamente cristiana o simplemente fruto del capricho de un líder que pretende poseer dones excepcionales. Su denominación y su vocabulario se prestan fácilmente a la confusión, y pueden inducir a error a los fieles de buena fe. Aprovechando estructuras estatales en elaboración, la erosión de la solidaridad familiar tradicional y una catequesis insuficiente, numerosas sectas explotan la credulidad y ofrecen un respaldo religioso a creencias religiosas multiformes y heterodoxas no cristianas. Destruyen la paz de los cónyuges y sus familias a causa de falsas profecías y visiones. Seducen incluso a los políticos. La teología y la pastoral de la Iglesia debe individuar las causas de este fenómeno, no sólo para frenar la «sangría» de fieles de las parroquias que se van a otros grupos, sino también para constituir la base para una respuesta pastoral apropiada, en vista de la atracción que estos movimientos ejercen sobre ellos. Esto significa, una vez más: evangelizar en profundidad el alma africana.

Religiones tradicionales africanas y hechicería

92. La Iglesia convive cotidianamente con los seguidores de las religiones tradicionales africanas. Estas religiones, que hacen referencia a los antepasados y a una forma de mediación entre el hombre y la Inmanencia, son el terreno cultural y espiritual del que provienen la mayoría de los cristianos conversos, y con el que mantienen un contacto diario. Conviene elegir entre los convertidos algunos bien informados, con el fin de que puedan ser guías para la Iglesia en el conocimiento cada vez más profundo y preciso de las tradiciones, la cultura y las religiones tradicionales. Será así más fácil conocer los verdaderos puntos de ruptura.

Además, se llegará también a la necesaria distinción entre lo cultural y lo cultual, descartando los elementos mágicos, causa de división y ruina en la familia y en la sociedad. En este sentido, el Concilio Vaticano II ha precisado que la Iglesia «exhorta a sus hijos a que, con prudencia y caridad, mediante el diálogo y la colaboración con los seguidores de otras religiones, dando testimonio de fe y vida cristiana, reconozcan aquellos bienes espirituales y morales, así como los valores socioculturales que se encuentran en ellos». Con el fin de que los tesoros de la vida sacramental y de la espiritualidad de la Iglesia se puedan descubrir en toda su profundidad y se transmitan mejor en la catequesis, la Iglesia podría examinar, con un estudio teológico, ciertos elementos de las culturas tradicionales africanas que son conformes con las enseñanzas de Cristo.

93. Puesto que se apoya en las religiones tradicionales, se percibe hoy un cierto recrudecer de la hechicería. Renacen los temores y se crean lazos de sujeción paralizante. Las preocupaciones sobre la salud, el bienestar, los niños, el clima, la protección contra los malos espíritus, llevan en ocasiones a recurrir a prácticas tradicionales de las religiones africanas que están en desacuerdo con la enseñanza cristiana. El problema de la «doble pertenencia» al cristianismo y a estas religiones sigue siendo un desafío. Para la Iglesia en África, es necesario guiar a las personas a descubrir la plenitud de los valores del Evangelio, mediante la catequesis y una profunda inculturación. Conviene determinar cuál es el significado profundo de las prácticas de brujería, identificando las implicaciones teológicas, sociales y pastorales que conlleva este flagelo.

ARRIBA

 

2. Las sectas, un desafío al ecumenismo en Iberoamérica.

FUENTE: Secretaría RIES

 

 

El sacerdote dominico Pedro Fernández Rodríguez, miembro de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES) acaba de publicar en Edibesa (Madrid) un libro titulado El poder de la palabra y la debilidad del diálogo. Treinta años de ecumenismo (1970-2000). Fernández, que ha sido durante muchos años profesor en la Facultad de Teología de San Esteban (Salamanca), y también en la Facultad de Teología de San Dámaso (Madrid), ahora es penitenciario de la basílica de Santa María la Mayor (Roma).

En su última obra resume más de una treintena de encuentros y congresos ecuménicos internacionales a los que asistió entre los años 1970 y 2000, señalando los diálogos que se llevaron a cabo, quiénes fueron sus protagonistas y otros muchos detalles que hacen del libro un buen referente para tomar el pulso la historia reciente del empeño por la unidad de los cristianos.

Al comienzo del libro relata lo tratado en el Congreso “Evangelización y ecumenismo”, que se celebró en 1991 en Guadalupe (Cáceres, España). Al final de su crónica explica cómo se abordó el fenómeno de las sectas en el contexto del ecumenismo. Por su interés, reproducimos un extracto a continuación.

Los nuevos grupos religiosos (sectas)

No abundan los estudios concretos sobre sectas en las naciones iberoamericanas, de tipo sociológico o de tipo teológico. En general, se puede decir que el origen de la expansión de las sectas de Iberoamérica está en los vacíos de la pastoral católica; por ejemplo, cuando se enfatiza el compromiso socio-político o el análisis científico, se reducen el celo apostólico y la dedicación espiritual.

Ahora bien, los textos oficiales sobre las sectas, como el romano y el español, engloban quizá en el mismo término de sectas los nuevos grupos religiosos, algunos de tipo cultural, en relación con la “Nueva Era”. Un estudio sociológico de las sectas es hoy día previo a su estudio teológico.

Los documentos aludidos son: “Sectas o nuevos movimientos religiosos. Informe Progresivo del Secretariado Romano para la Unidad”, mayo de 1986; el material enviado a Roma desde Iberoamérica, para preparar este Documento Vaticano sobre las Sectas, se encuentra en la Universidad Gregoriana. Y el Comunicado de la Comisión Episcopal de Relaciones Interconfesionales sobre “las Sectas y Nuevos Movimientos Religiosos”. Diciembre de 1989.

Las sectas hay que estudiarlas dentro del estilo de vida norteamericano, y como una manifestación de la nueva religiosidad popular. ¿Podemos decir que las sectas destruyen la cultura ya existente, o que gestan una nueva cultura, por ejemplo, en Iberoamérica? Las sectas son un fenómeno religioso ambiguo, que ha de ser estudiado en los ámbitos de la posmodernidad, del fundamentalismo religioso y la nueva religiosidad popular, y representan un reto a las Iglesias históricas en cuanto al modo actual de vivir el evangelio.

Por eso, admitida la amplitud del mundo sectario, hoy se prefiere hablar de nuevos grupos o movimientos religiosos. De todos modos, sabemos que las sectas en Iberoamérica desean hoy día sustituir a la Iglesia católica, animadas por el éxito numérico de su proselitismo y su rápido crecimiento.

Pero, las sectas, ¿tienen algún significado teológico en la historia de la salvación? ¿Nos dice Dios algo a través de las sectas? La gente necesita, no sólo medios para vivir, sino también razones para vivir; las sectas responden también a estas necesidades humanas. En fin, el gran reto de la Iglesia católica en Iberoamérica no son las sectas, sino la evangelización del mismo pueblo cristiano y sencillo de aquellas naciones; y no se trata de una cuestión ecuménica, sino de un compromiso misionero.

Indirectamente, sí es una situación ecuménica, en cuanto que hay que evangelizar sin ofender a otros cristianos o creyentes, de las religiones que sean, y hay que estar abiertos a asumir los aspectos positivos de las sectas, que son respuestas a las carencias de nuestras comunidades católicas.

ARRIBA

 

3. Una nueva editorial católica española arranca con un libro sobre las sectas.

FUENTE: InfoCatólica

 

 

El pasado 22 de noviembre se presentó en Madrid una nueva editorial católica: Vita Brevis. En el acto público, que tuvo lugar en los salones de la Parroquia de Nuestra Señora del Sagrado Corazón de Jesús, regentada por los Misioneros del Corazón de Jesús, en la avenida Pío XII, participaron algunos de los editores, dos autores de los primeros libros y representantes del portal digital InfoCatólica. De este medio tomamos la crónica.

El acto dio comienzo con una oración introductoria que condujo el P. Luis Santamaría, miembro de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES), tras la cual tomó la palabra Bruno Moreno, editor de Vita Brevis y miembro del consejo de redacción de InfoCatólica. Moreno Ramos explicó que una de las razones que le llevaron a fundar la nueva editorial fue el constatar que "había muchas personas que escriben muy bien pero no encontraban editorial que les publicara porque las editoriales comerciales exigen ciertas previsiones de ventas". "Vimos la necesidad", aseguró Bruno Moreno, "de crear una editorial que se fijara ante todo en lo bueno que fueran los libros en vez de en el dinero que se pudiera sacar de ellos".

El editor de Vita Brevis explicó que también había observado que hay muchos autores católicos antiguos que no han sido reeditados y que, por razones comerciales, es difícil que una editorial se plantee hoy recuperarlos. Vita Brevis pretende publicar ese tipo de obras: "Si tiene éxito, bien. Y si no, pues no pasa nada", afirmó Bruno Moreno, quien recordó que hoy hay más facilidades para la edición de libros a demanda, aunque la nueva editorial también está llegando a los habituales circuitos de distribución comercial.

P. Luis Santamaría: ¿Qué ves en la noche?

El P. Luis Santamaría, sacerdote de la diócesis de Zamora (España) y miembro de la RIES (Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas) presentó su libro ¿Qué ves en la noche? Religión y sectas en el mundo actual. El sacerdote señaló que "cuando los profetas de la secularización habían anunciado, una y otra vez, que iban a pasar de ser profetas a forenses de la religión y que la misma iba a quedar difunta del todo, sin embargo hemos visto que lo religioso ha pervivido y no ha quedado recluido en las conciencias y las sacristías de unos pocos reductos de confesiones religiosas, sino que resurge en todo lo que se ha dado en llamar el ‘supermercado espiritual’, el ‘retorno de los dioses’, etc.".

El P. Santamaría explicó que a día de hoy conviven las religiones tradicionales con el auge de las sectas, el esoterismo, las ciencias ocultas, supersticiones, etc. "Con el tiempo de crisis que estamos viviendo", aseguró el sacerdote, "todo esto ha aumentado. Cualquiera que se pase por las ferias de ciencias ocultas que se celebran en Madrid cada año cuentan con la participación de más gente". Recordó entonces el adagio latino que dice que "la corrupción de lo mejor es lo peor". El sacerdote zamorano explicó que en su libro aborda todo esa temática, así como películas con contenido religioso, incluidas las que manipulan la figura de Jesús o de la Iglesia.

El acto continuó con un turno de preguntas el público presente y finalizó con la firma de libros por parte de sus autores mientras se consumía el catering preparado al efecto. Entre los presentes figuraban varios sacerdotes y periodistas como Pablo Ginés (Forum Libertas, Religión en Libertad y La Razón) o blogueros como Francisco José Fernández de la Cigoña (Intereconomía).

ARRIBA

 

4. Estados Unidos: el asalto de los mormones.

FUENTE: ABC

 

 

Escritores y cantantes de éxito, dos aspirantes a la Casa Blanca y hasta un musical en Broadway… Más publicidad que nunca para la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (IJSUD). Así se encabeza el artículo que ha escrito Emili J. Blasco, corresponsal en Washington del diario ABC, y que se ha publicado el pasado 13 de noviembre.

Un gran cartel en Times Square de Nueva York, el mayor escaparate de anuncios del mundo, proclamaba «I’m a mormon» (Soy mormón) hace unos meses. Coincidía con el estreno del musical «The Book of Mormon», el gran éxito de Broadway de esta temporada, crítico con los mormones, pero ocasión para la Iglesia de los Santos de los Últimos Días (LDS, según el acrónimo en inglés) de darse más a conocer y superar viejos prejuicios. Al fin y al cabo, la mayor objeción puesta contra los mormones es la poligamia, y eso es algo que la LDS Church abandonó en el siglo XIX.

Lo mormón, en general, provoca recelo, comenzando por EE.UU., donde se discute que realmente sean cristianos (se les tilda de culto [cult, en inglés, es el equivalente del término castellano “secta], no de religión). Pero cuando se sabe que Stephenie Meyer, la creadora de la saga «Crepúsculo», pertenece a la LDS, como también Ryan Gosling, que acaba de estrenar «Los idus de marzo» (coprotagonizada con George Clooney), o Brandon Flowers, líder de «The Killers», entonces a los mormones se les ve de otra forma. Eso es precisamente lo que pretendía la campaña «I’m a mormon»: poner cara y ojos a sus fieles, rompiendo el estereotipo de los chicos que por parejas, con sus camisas blancas y chapita negra, recorren países extranjeros durante dos años de misión proselitista.

Y la cara que más está saliendo en los medios es la de Mitt Romney, ex gobernador de Massachussetts, que el año que viene puede convertirse en presidente de los Estados Unidos. Él mismo marchó de joven a hacer proselitismo a Francia un par de años y luego ejerció de «obispo» laico de su congregación. Es el favorito en las primarias republicanas, donde entre los aspirantes se encuentra otro mormón, Jon Huntsmann, ex-gobernador de Utah, Estado en el que viven dos de los casi seis millones de mormones estadounidenses.

Influencia electoral

Romney ya intentó la nominación hace cuatro años, pero entonces su etiqueta de mormón fue utilizada en contra suya por sus adversarios. Ahora no parece pesar tanto. Es cierto que aún el 36% de los estadounidenses se sentirían «poco o nada cómodo» con un presidente mormón, cifra sólo superada por un presidente musulmán (59%) o ateo (60%). Pero ya hay otros mormones en destacados puestos políticos, como Harry Reid, portavoz de la mayoría demócrata en el Senado. En el Congreso hay 18 mormones. 

«La gente está comenzando a conocernos mejor. Estamos creciendo y cada vez es más probable que la gente conozca a un miembro de nuestra fe como amigo, colega o vecino», declara desde Salt Lake City, capital de Utah, el portavoz de la LDS, Eric Hawkins. Aunque hace cuatro años la Iglesia de los Santos de los Ultimos días se volcó con Romney, ahora guarda neutralidad, no solo porque de momento hay dos candidatos mormones, sino también porque quiere que no se le identifique demasiado con los republicanos (el tícket McCain-Palin obtuvo en 2008 el 78% de los votos en Utah). «Somos políticamente neutrales», insiste Hawkins.

La mejor percepción sobre los mormones en EE.UU. la atribuye Hawkins al hecho de que se empieza a entender que ciertamente son seguidores de Jesucristo, por más que se guíen por las revelaciones que supuestamente tuvo Joseph Smith en 1830. Pero un reciente reportaje publicado por The Washington Post revelaba otra poderosa razón: la habilidad con la que han utilizado internet para controlar su propia imagen. Si se teclean en Google, en inglés, las palabras «iglesia» y «Antiguo Testamento», por ejemplo, la dirección de LDS.org aparece listada en los primeros lugares. Y curiosamente ocurre lo mismo con términos que nada tienen que ver con la religión: «amigo», «mujer joven», «responsabilidades familiares»…

Podría decirse que la LDS aplica a rajatabla los Siete hábitos de la gente altamente efectiva, libro escrito por el mormón Stephen Covey y que ha vendido 14 millones de ejemplares en todo el mundo. Al menor rechazo hacia el mormonismo también puede haber contribuido el hecho de que la propia crisis de la institución matrimonial da menos argumentos contra la poligamia, como se ha visto con el éxito de la serie «Big Love». Debido a la persecución legal a la que los mormones eran sometidos por lo que ellos llaman el «matrimonio plural», en 1890 se dejó esa práctica, aunque la mantienen de modo ilegal algunos elementos disidentes.

Matrimonio casi obligatorio

Casarse, en cualquier caso, es prácticamente obligatorio. Según los mormones, en la otra vida tendrán mayor gloria quienes se hayan casado (estén «sellados») y formado una familia. Eso explica que más de ochocientos jóvenes mormones solteros del área de Washington (la que registra mayor concentración de mormones fuera de Utah) acudan varias veces a la semana a la misma iglesia de Cristal City, junto a la capital estadounidense. No se les permite participar en los mismos actos de culto que las personas casadas. Ahí, en un edificio de oficinas de aspecto muy funcional convertido en capilla, intentan encontrar pareja. Se les ve los domingos, para los actos religiosos; entre semana tienen estudios bíblicos y algunas actividades de diversión.

Este martes, por ejemplo, acudió Christine, de 22 años, que asegura que en su entorno familiar una chica de su edad se siente intranquila si aún no se ha casado. «Está bien esto de no tener una fecha límite», afirma, en referencia al hecho de que en Washington, precisamente porque muchos están siguiendo carreras profesionales, no existe la misma presión para un pronto matrimonio que la que puede haber en otros lugares del interior del país. A la salida de esta«capilla de la calle 23», como la llaman, es fácil abordar a grupos de jóvenes mormones, dispuestos a utilizar otros idiomas aprendidos durante su tiempo de misión en el extranjero.

«Los mormones creen en estupideces, pero nos caen simpáticos», dicen Trey Parker y Matt Stone, creadores de «South Park», y autores junto Robert López, letrista de «Avenue Q», del musical «Book of Mormon». Esa frase puede reflejar bien el momento del mormonismo en EE.UU.: es difícil que su credo no sea visto como algo «inventado», pero ya no provocan la animadversión del pasado.

ARRIBA

 

5. Asesinan en México a un predicador de los testigos de Jehová.

FUENTE: Milenio – El Porvenir

 

 

Un predicador de los Testigos de Jehová murió al recibir un impacto de arma de fuego en el pecho, en calles del municipio de Allende (Nuevo León, México). Los hechos se registraron cerca de las 09:00 horas del pasado 8 de noviembre, cuando el hombre identificado como Andrés Hernández Sánchez, de 40 años de edad aproximadamente, circulaba en su camioneta en el camino conocido como Privada Las Cruces, a la altura del kilómetro 236 de la Carretera Nacional.

En ese punto, según explica el diario Milenio, presuntamente fue atacado por hombres armados y la víctima trató de ponerse a salvo. Según las investigaciones y por las manchas de sangre en el pavimento, se estableció que el hombre herido caminó desde su camioneta hacia la salida del camino a la Carretera Nacional, pero al no resistir cayó a mitad de éste.

Elementos ministeriales y de servicios periciales de la Procuraduría de Justicia, sólo detectaron un impacto de arma de fuego cuyo calibre no se reveló y llevaron el cuerpo al anfiteatro del hospital Universitario. Vecinos del sector señalaron que era conocido por todos ya que predicaba en el Álamo, además de ser un trabajador que limpiaba algunas fincas en el sector de Allende.

Según el diario El Porvenir, en las primeras investigaciones de las autoridades, se estableció que el ahora occiso viajaba en su camioneta por la Privada Las Cruces, cuando su auto se apagó, por lo que descendió del mismo para ver lo que había ocurrido. En el momento en que el predicador bajó del auto, sintió la lesión, por lo que corrió para pedir ayuda hasta llegar al sitio en donde fue encontrado.

ARRIBA

 

6. Japón ratifica la condena a muerte a un adepto de la Verdad Suprema.

FUENTE: Efe

 

 

El Tribunal Supremo de Japón ratificó el pasado 18 de noviembre la pena de muerte para Tomomasa Nakagawa, uno de los responsables de la secta Verdad Suprema, autora, entre otros, del atentado con gas sarín en el metro de Tokio que en 1995 causó 13 muertos y más de 6.000 intoxicados.

Según la agencia local Kyodo, en una noticia de la que se hace eco Efe, el Supremo desestimó el recurso interpuesto por Nakagawa, de 49 años, al que se le imputan en total 25 muertes en once atentados perpetrados entre 1989 y 1995, algo por lo que fue condenado a la pena capital en octubre de 2003.

A Nakagawa, un licenciado en Medicina que entró en la secta la Verdad Suprema poco después de graduarse, se le considera uno de los autores del atentado de Tokio de 1995 y también de los ataques del año anterior con el mismo gas en unos apartamentos de la provincia de Nagano (centro), en los que murieron siete personas. Además, se le acusa de estar implicado en el secuestro y asesinato en 1989 de los tres miembros de la familia de un abogado que preparaba un pleito contra la secta.

En total en los últimos años la Justicia nipona ha procesado a 189 miembros de la Verdad Suprema y emitido condenas de muerte para 12 de ellos, incluido su gurú, Shoko Asahara, de 56 años, sin que por el momento ninguna de las ejecuciones se haya llevado a cabo. Otros cinco seguidores de la organización religiosa fueron condenados a cadena perpetua por alguno de los crímenes cometidos por el grupo.

El más conocido de los ataques de la secta fue el perpetrado con gas sarín en el metro de Tokio el 20 de marzo de 1995, cuando cinco seguidores de Shoko Asahara rasgaron con las puntas de sus paraguas unas bolsas que contenían el letal gas y sembraron el caos. Los trenes estaban abarrotados de personas que se dirigían a trabajar, por lo que el ataque intoxicó a casi 6.300 personas, de las que 13 murieron.

Está previsto que hoy, 21 de noviembre, el Tribunal Supremo se pronuncie sobre el recurso interpuesto por Seiichi Endo, de 51 años y también condenado a muerte, en el último de los casos criminales relacionados con la secta que siguen abiertos. La Verdad Suprema se renombró a sí misma “Aleph” en 2002 y se distanció públicamente de la secta original alegando que sus enseñanzas se basan en el budismo y el yoga.

Una mirada al pasado de la secta

Endo, que hoy tiene 51 años, era uno de los colaboradores más estrechos del líder de la secta, Shoko Asahara, y estaba encargado del programa de desarrollo de armas químicas del grupo. En los últimos quince años, los tribunales nipones han procesado a 189 miembros de Verdad Suprema, emitido cinco condenas de cadena perpetua y confirmado 13 penas de muerte, entre ellas la de Asahara.

De momento, ninguna de las ejecuciones se ha llevado a cabo porque la ley nipona establece que todas las sentencias de los cómplices del delito deben ser firmes antes de poder aplicarse la pena capital. El atentado fue ejecutado por cinco miembros de la secta que, de manera coordinada, perforaron con sus paraguas varios paquetes de sarín en cinco trenes del metro de Tokio durante la hora punta matutina del 20 de marzo de 1995.

El líquido, transparente e inodoro, que derramaron los paquetes alcanzó casi al instante el estado gaseoso y se propagó por los vagones en pocos minutos. A causa de la inhalación de esta sustancia que ataca el sistema nervioso 13 personas murieron y unas 6.300 resultaron intoxicadas, muchas de las cuales sufren hoy graves secuelas físicas. El plan fue aparentemente ideado por Asahara para desviar la atención de la Policía nipona, que tenía previsto inspeccionar los locales de la organización el 22 de marzo.

La secta Verdad Suprema (Aum Shinrikyo, en japonés) se gestó en 1984, cuando su líder, cuyo nombre real es Chizuo Matsumoto, abrió un pequeño seminario de yoga en el barrio tokiota de Shibuya. Asahara captó como subalternos a varios miembros de la elite universitaria nipona, lo que impulsó el crecimiento de la estructura económica y organizativa de la asociación.

A través de los "dojos" de meditación que abrió en todo el país, Aum captó a miles de fieles y en apenas una década se había transformado en una poderosa organización subdividida en "ministerios", con capacidad para producir agentes químicos y armas ligeras y que incluso llegó a adquirir un helicóptero militar ruso. Pese a estar en el punto de mira, solo a raíz del atentado lograron las autoridades ligar a la organización con otros delitos, entre ellos otro ataque con sarín que mató a ocho personas en la provincia de Nagano en 1994 o el asesinato de un abogado y su familia en 1989.

Los procesos judiciales abiertos desde 1996 han dejado muchos aspectos de la trama sin despejar, incluyendo la motivación de los atentados, en parte porque Asahara, hoy de 56 años, ofreció testimonios muy confusos antes de ser condenado a muerte definitivamente en 2006. Tampoco han sido aclarados otros incidentes como el asesinato a cuchilladas y retransmitido en directo por las cámaras de televisión de Hideo Murai, "ministro de ciencia" de Aum, a cargo de un miembro de la "yakuza" (mafia) que se suicidó poco después en su celda.

Las víctimas del atentado de Tokio y sus familias han sido los primeros en afirmar que los procedimientos no han logrado sacar a la luz la verdad y han pedido que el caso no caiga en el olvido. La secta, que se refundó con el nombre "Aleph" en 2002 y se distanció públicamente de la original, cuenta hoy con unos 1.000 seguidores y continúa bajo vigilancia de la Agencia de Seguridad e Inteligencia nipona.

El rastro de la tragedia queda patente en el Metro de Tokio, que hoy cuenta con muchas más cámaras de vigilancia y solo recientemente volvió a instalar papeleras después de que fueran retiradas por seguridad. Aún se mantienen en el suburbano tokiota, que transporta a más de 6 millones de personas al día, los avisos para que los usuarios informen de cualquier anomalía, así como algunos carteles con las fotos de tres integrantes de la secta que siguen en busca y captura.

Además, muchos tokiotas rememoran aún la tragedia cada vez que evitan sentarse cerca de un objeto olvidado en un vagón, mientras que algunos de los que viajaban en los trenes atacados aquel 20 de marzo siguen sin ser capaces de tomar el metro a día de hoy.

ARRIBA

 

7. La masacre de Guyana: ¿suicidio o asesinato en masa?

FUENTE: La Vanguardia

 

 

El 18 de noviembre de 1978, se suicidaban en Guyana 914 integrantes de una secta religiosa de origen norteamericano, la Iglesia del Templo del Pueblo. Treinta y tres años después, el diario La Vanguardia recuerda la masacre en un artículo firmado por Teresa M. Amiguet

Tachada como la masacre del siglo, causó gran conmoción. Con el paso del tiempo el suceso continúa siendo un misterio. No debemos olvidar que se trata probablemente de la primera ocasión en la que los medios audiovisuales de comunicación desempeñaban un papel determinante en un suceso de estas características.

Tras los acontecimientos del día 18 y el primer recuento de víctimas, el 20 de noviembre de 1978 el Departamento de Estado de EE.UU. confirmaba los hechos y cifraba en 400 el número de muertos. En San Francisco, familiares de los miembros, dominados por el pánico asaltaban las comunas de la secta reclamando información sobre el posible fallecimiento de sus hijos o hermanos.

El 28 de noviembre, soldados norteamericanos enviados a Guyana descubrían nuevos cadáveres y se notificaba la cifra definitiva de víctimas: 919, entre ellas más de 300 niños. Jim Jones, líder y creador de El Templo del Pueblo, se hallaba entre ellas. El reverendo Jim Jones era un hombre delirante, un visionario que se creía mezcla de Cristo y Lenin, el único Dios sobre la Tierra. La matanza de Guyana fue consecuencia de su locura y su ansia de poder. Pero… ¿se trató de un suicidio colectivo o de una matanza?

El líder del Templo del Pueblo había elegido la costa noreste de Sudamérica para establecerse con sus seguidores. Decidió dejar California porque estaba convencido de la inminencia del estallido de una guerra nuclear. Sólo la remota Guyana saldría indemne de la hecatombe. Por ello fundó allí Jonestown (Pueblo Jones), una granja de 140 hectáreas, acompañado de sus más fervientes seguidores su esposa y su hijo de 19 años.

Sus fieles en Guyana rondaban el millar. El 70 por ciento eran de raza negra, un 25 por ciento blanca, el resto pertenecían a diversas etnias. En la comunidad reinaba la armonía racial. Jones predicaba un credo evangélico de tipo pentecostal, leía a Marx y exhibía la Biblia. La comuna se autoabastecía, sus miembros cultivaban y criaban ganado, fabricaban incluso su propia indumentaria y calzado. Educaban a sus hijos y atendían a enfermos y ancianos. Así pues, ¿qué desencadenó la tragedia?

Con su imagen de ídolo pop de la época, Jones lideraba a sus fieles con un socialismo utópico que en los agitados años sesenta no gustaba a la CIA. Por ello, decidió enviar a Jonestown al congresista norteamericano, Leo Ryan, acompañado de tres reporteros de la NBC, un desertor de la secta y once norteamericanos, más familiares de los fieles, junto al diplomático Richard Dwyer, de la embajada de Estados Unidos en Guyana. Su solapado objetivo era investigar las actividades de la secta, en concreto los supuestos malos tratos infligidos a algunos de sus miembros, grabando un informativo en directo.

Nada hacía prever la masacre. Jones les recibió con un espectáculo musical que pronto se trocó en tragedia. Acompañado de un selecto grupo de sus fieles les tendió una emboscada en la que varios murieron acribillados o quedaron gravemente heridos.

Este hecho desencadenó el caos. Según los expertos que estudiaron el caso durante años, Jones se percató de que había llegado a una situación sin salida y decidió apelar al “suicidio revolucionario”. Explicó a sus fieles que su sociedad había sido destruida, y que era preferible matarse a seguir viviendo. Les aseguró que, de todas formas, se reencontrarían en otra vida, después de una reencarnación.

La mayoría de las víctimas murieron al ingerir cianuro potásico mezclado con zumo de uva. Los niños fueron las primeras víctimas. La muerte por envenenamiento de cianuro es sumamente dolorosa, como confirmaba el patólogo forense que cubrió el suceso en 1978, William Eckert, en una entrevista concedida a La Vanguardia por lo que al ingerirlo las víctimas gritaban doloridas. El reverendo Jones, megáfono en mano les increpaba: “debéis morir con dignidad”.

Durante un tiempo se divulgó la noticia de que el líder continuaba con vida, pero el FBI lo negó tras analizar sus huellas dactilares. Había muerto de un tiro en la cabeza. Testigos de su muerte afirmaron que murió balbuceando el nombre de su madre. Su esposa se encontraba junto a él. Tenía 47 años.

Su última víctima sería Michael Prokes, ex-jefe del gabinete de prensa de la secta. Un año después, tras una rueda de prensa en la que intentaba justificar la masacre, se negó a contestar a un periodista que le interrogaba sobre el asesinato del congresista Ryan y confesó haber formado parte de la “escuadra de la muerte” que sobrevivió al desastre. Se encerró en el lavabo y se pegó un tiro. Sus últimas palabras sentenciaron: “Los compañeros que se quitaron la vida lo hicieron porque no tenían elección posible y porque no querían permanecer en los infestados “ghettos” de Norteamérica”..

ARRIBA

 

8. Los rosacruces se dan a conocer en España con conferencias.

FUENTE: La Nueva España

 

 

Francisco Casanueva Freijo (Santiago de Compostela, 1953) es miembro de la dirección internacional de la “legendaria” Escuela de la Rosacruz Áurea y promotor de la creación de la Fundación Rosacruz en España, de la que ahora es presidente honorífico. El pasado 3 de noveimbre estuvo en el palacio de Valdecarzana de Avilés para ofrecer una conferencia pública y al día siguiente lo hizo en el Ateneo Jovellanos de Gijón.

Reproducimos la entrevista que le hizo Félix Vallina en el diario asturiano La Nueva España, con el titular «Queremos acabar con la imagen de secta que algunos nos cuelgan». En ella pueden verse con claridad varios de los aspectos más destacados de esta corriente esotérica. Además, afirma que el movimiento al que representa, la Escuela de la Rosacruz Áurea, cuenta con mil adeptos en España.

-¿Podría explicar sin extenderse en demasía que es exactamente la Escuela de la Rosacruz Áurea?

-Es una escuela espiritual y por lo tanto se centra en el estudio y la potenciación de las cualidades espirituales del hombre. Todos somos alumnos, no hay maestros y todos estamos para aprender, por eso lo llamamos escuela.

-¿Cuáles son sus orígenes?

-Los orígenes históricos demostrados datan del siglo XVII; la orden se creó en 1604 en el sur de Alemania. A raíz de ahí se publicaron una serie de libros, los manifiestos rosacruces, que fundamentalmente son tres: la «Fama Fraternitatis», la «Confessio Fraternitatis» y «Las Bodas Alquímicas». Sobre todo el primero, tuvo un impacto importante porque es una llamada a los gobiernos y a los intelectuales de Europa para intentar una reforma en profundidad de la sociedad.

-¿Qué papel juega la religión dentro de la Rosacruz?

-La Rosacruz es una filosofía, pero todo lo que tiene que ver con la espiritualidad también está ligado a la forma en la que se expresaba esta espiritualidad en la Edad Media, en el Renacimiento y en el siglo XVII, que era básicamente a través del cristianismo. En realidad, en aquella época no había ni un científico, ni un filósofo, ni casi ninguna persona que no fuera cristiano de una u otra tendencia.

-¿Y los miembros de la Rosacruz son cristianos?

-No pertenecemos a ninguna iglesia cristiana, pero nos apoyamos en los valores éticos del cristianismo, que en realidad consideramos que son los mismos que los de todas las corrientes religiosas de la historia de la humanidad. La Rosacruz es una escuela europea y, como es lógico, hay muchos valores cristianos, pero esto no quiere decir que los elevemos a dogma.

-Hay quienes dicen que ustedes son una secta.

-Los hay que piensan que todo lo que se sale de lo ortodoxo ya es una secta. Pero nosotros no somos ninguna secta, que en el sentido estricto de la palabra tiene que ver con un grupo que se separa. El cristianismo, por ejemplo, sí que es una secta del judaísmo. No somos una sociedad secreta, ni tenemos normas secretas… En definitiva, no tenemos una actitud sectaria, al contrario.

-¿Los miembros aportan dinero a la causa?

-Me parece que la cuota es de doce o trece euros. El elemento económico no es fundamental, aunque es cierto que todas las actividades que hacemos las pagamos de nuestros bolsillos y no recibimos ningún tipo de subvención.

-¿Con cuántos miembros cuentan en Europa?

-Hay unos 15.000.

-¿Y en España?

-Unos mil.

-¿Hay alguno en Asturias?

-Sí. Tenemos alrededor de cien miembros.

-¿Ha venido a Avilés buscando nuevas incorporaciones?

-Sólo venimos para que la gente pueda conocernos. Luego, al que le interese tiene posibilidades de asistir a otras charlas o cursillos. Lo que nos importa es acabar con esa imagen de «secta» que nos cuelgan algunos, somos personas normales que buscamos una vida equilibrada. La sociedad moderna a veces es depredadora, consume los recursos sin ningún tipo de consideración.

-¿Qué hay que hacer para formar parte de la Escuela de la Rosacruz?

-Hay muchas formas de acercamiento. La más básica es la que nosotros conocemos como la figura del simpatizante, que es aquel que asiste a un cursillo de cinco charlas en las que explicamos nuestros fundamentos. Una vez que una persona ha participado en esas actividades y está interesada en profundizar más se puede hacer alumno, pero si no le interesa se borra y ya está.

-Se trata de una orden iniciática, ¿en qué consiste esa iniciación?

-La parte iniciática, o la escuela de misterios, ya es la escuela interna. Tenemos tres espacios: uno para impartir conferencias destinadas al público en general -la escuela exterior-, otro para los simpatizantes y alumnos, y un tercero, la escuela interna, para los alumnos que llevan una serie de años y se interesan por pasar a la parte práctica y no quedarse en la teórica. En esta última es donde se realiza el proceso de iniciación.

-La pregunta era para tratar de dejar claro cómo es esa iniciación, ¿se trata de un secreto?

-No es que sea secreta, pero no es algo que se pueda decir en cuatro palabras. No es una iniciación ceremonial como por ejemplo en la masonería, es una cosa interna.

ARRIBA

 

9. Crecen en España las santerías con camuflaje católico.

FUENTE: Alba

 

 

Crucifijos sumergidos en agua, aceites para atraer el dinero y provocar mal de ojo, invocaciones al diablo, velas negras, adivinación, remedios, purificaciones y maleficios... Hay de todo en una santería. Nos lo cuentan José Antonio Fúster y Javier Torres en un amplio reportaje publicado por el semanario católico español Alba.

Tiendas abiertas al público, “pasen y vean”, en la que una suerte de religión panteísta africano-caribeña camuflada en el catolicismo se abre paso ofreciendo soluciones rápidas para los males cotidianos. Sus santos sincréticos, que no son católicos, son parte del negocio. Un negocio peligroso. Apenas hay dos tipos de tiendas para las que la crisis es negocio: la compra de oro a un precio por debajo del mercado y las santerías, unos comercios que ofrecen soluciones rápidas a personas en crisis...

La Iglesia ha dado la voz de alarma ante el auge de un fenómeno pseudorreligioso que hasta hace poco se circunscribía a los círculos de pobreza de naciones caribeñas y africanas, pero que ha llegado a Occidente con vocación de permanencia, gracias a la inmigración. A simple vista, una santería, una cualquiera, es una tienda corriente, a pie de calle, con luces de neón y escaparates en los que se apiñan santos, pócimas, iconos y friegas que se autoproclaman eficaces para solucionar cualquier problema. La santería dice que todo lo cura y todo lo arregla a cambio de dinero y ofrendas. Mal de amores, familia, problemas laborales, rachas de mala suerte... Un flujo constante de clientes, la mayoría mujeres, entra y sale, entra y mira, entra y compra un remedio para un mal de ojo o un tantito...

A simple vista, las santerías son solo anaqueles abarrotados de velas, aceites, hierbas y figuras de santos: san Pedro, san José, san Manuel, la Virgen de la Caridad del Cobre, san Cosme y san Damián, san Gabriel, la Virgen de Regla... Y velas blancas y negras, crucifijos, collares de cuentas, remedos de rosarios... Podría parecer una mezcla entre una herboristería y una tienda caótica de artículos religiosos.

Santa Rita y la fidelidad

En una de esas santerías del centro de Madrid, las diferencias se observan con precisión. Los dependientes son sacerdotes santeros, babalaos, la cúspide (si la hubiera) de la pirámide santera.

Estos babalaos son teólogos de la prosperidad. Modernos charlatanes que por un precio de 69 euros la sesión, evalúan a la persona que acude a ellos y la inician en el uso de ofrendar a los santos para espantar los males. Nada tiene de malo recurrir a los santos, pero estos no lo son. Un santero que mire a los ojos de la Virgen de la Caridad del Cobre, en realidad mira a Yemayá, “la creadora del mundo”. Otro ejemplo: Obbá, la diosa de la fidelidad conyugal, es Santa Rita, patrona de los imposibles. Es sincretismo y pantomima.

Modernos charlatanes que por un precio de 69 euros la sesión, evalúan a la persona que acude a ellos y la inician en el uso de ofrendar a los santos para espantar los males. Cuando los franceses y los españoles llenaron la Antilla de negros arrancados de África, fueron evangelizados deprisa, mal y a golpe de culata. Muchos simularon la conversión y buscaron rasgos comunes en las imágenes católicas para poder venerar a sus santos africanos. La diferencia esencial, según un babalao de una santería del centro de Madrid, es que sus santos sí que ayudan a la gente, no como los católicos. “Digamos que no tardan tanto”.

El grave problema tantas veces denunciado por la Iglesia es que la santería asegura que esos santos africanos, santos sincréticos con apariencia católica, ‘acuden’ a la interpelación del babalao e interactúan en una comunicación instantánea que compromete a una persona angustiada que hipoteca su futuro siguiendo a ciegas el camino que marca un santero; algo condenado por el catecismo de la Iglesia. Los babalaos consultados no niegan la mayor: “Es una ayuda inmediata que en el 98 por ciento de los casos libera a la persona de sus problemas”.

Para el diagnóstico, los santeros utilizan algo llamado ukele: un collar con cuentas como conchitas de mar que, según ellos, es un completo sistema de comunicación binario (unos y ceros, sí o no) entre el sacerdote y el santo al que se interpela. Así, mientras el cliente revela sus angustias, el babalao va tirando el ukele sobre la mesa y lo interpreta y apunta en un papel una retahíla de ceros, unos y cruces hasta darle un diagnóstico claro de sus males. El santero no adivina. Podría hacerlo -dicen los babalaos- pero no deben. Como si dijeran: yo lo sé todo, pero no te lo puedo decir hasta que tú no me lo digas.

Otra diferencia fundamental entre una santería y... cualquier otra tienda, es que los santeros pasan consulta en habitaciones pequeñas en la trastienda o en los sótanos del comercio, en los que la parafernalia sincrética deja paso a los genuinos iconos africano-antillanos: puros sobre vasos de ron, elefantes, figuras agigantadas de hombres de raza negra, machetes clavados en la tierra de una maceta, calaveras en postes, copas de agua en las que se sumerge un crucifijo, santitos anónimos en los que apoyan naipes y cartas del tarot ,platos en el suelo en el que vive el sincrético Elegguá, “el dueño de los caminos y el destino; el que abre o cierra el camino a la felicidad...”.

Hasta ahora, entre puros y calaveras, los santeros podrían pasar por simples charlatanes, pero la Iglesia ha alertado de ciertas herejías santeras que llegan a divinizar a la Virgen María y desorientan a los creyentes hasta conseguir que Benedicto XVI haya instado a los católicos a profundizar en el conocimiento de la Biblia para rechazar a tanto falso dios. Pero el auténtico problema de la santería se llama maleficio: el coqueteo con el demonio.

Maleficios y demonios

Dicen los santeros que reciben poderes para invocar a los muertos, realizar conjuros y llamar al diablo (si es necesario). Cuando una persona entra en la consulta de un babalao, va dispuesta a que un collar de cuentas con 256 posiciones evalúe su problema y le determine un camino -un remedio, ofrendas, sacrificios- que deberá seguir para sacudirse el maleficio que le persigue. Maleficio, sí.

Casi todas las personas que van a ver a un santero, saldrán del encuentro convencidas de que sus problemas de salud, dinero o amor, son por causa de la acción de un demonio sobre ellas. El ukele no falla. Para un santero, una racha de mala suerte o una relación amorosa que peligra llevan la marca del diablo que se ha instalado cerca de esa persona por la acción de un maleficio. Los santeros se defienden asegurando que ellos son sacerdotes de una religión que -en principio- ha jurado hacer el bien y salvar a la humanidad (a un precio por sesión de 69 euros).

Para ellos, el babalao es el único capacitado para invocar a ese demonio, debilitarlo hasta que abandone a esa persona y librarle del maleficio. Ellos dicen que nada en ese ritual desmerece las prácticas de los exorcistas de la Iglesia católica. Pero no está tan clara esa coincidencia. Si dirigir la vida de una persona con una cuenta binaria con 256 posiciones ya es peliagudo, bordear asuntos de enfermedad y dolor revela la cara más oscura de la santería.

Una santera consultada por este semanario se puso extraordinariamente seria cuando se le preguntó por la relación entre un maleficio, el diablo y la enfermedad. “Es política de la casa que cuando alguien viene a la santería buscando una remedio para una enfermedad grave, se le derive a un hospital; sin embargo.... a título personal... yo he visto cosas increíbles... Yo mismo saqué de la muerte a la viejita que fue la que me crió. Llegué con ella al hospital y ella estaba muerta, pero conseguí que volviera. El médico me dijo que aquello era imposible... Con ayuda de mis santos la logré mantener a mi lado más de cinco años, pero al final vi que sufría, que imploraba la muerte... Y la dejé ir”.

Sin embargo, esa política de la casa de una de las santerías consultadas no es la misma buena práctica de otros comercios y otros babalaos. Según ellos mismos denuncian a micrófono cerrado, a diario, en cientos de casas de toda España, autoproclamados santeros y sacerdotes de Olofin, el dios todopoderoso, juegan con los crédulos y los desesperados a sanar enfermedades imposibles con complicados rituales y sangre de animales.

Los santeros aseguran que la enfermedad en una persona anciana es la forma que tiene Olofin de prepararnos para la muerte. Sin embargo, en una persona joven, la enfermedad grave indica que hay maleficios muy poderosos, diablos muy duros, una opresión demoníaca muy fuerte...Estas prácticas generan desconfianza entre las personas, que al final, y por unos pocos euros más, buscan santeros o pseudosanteros sin escrúpulos para ser ellos los primeros en servirse del ocultismo y la invocación maléfica.

De momento, la crisis económica, y también la crisis de valores que azota España, ha estimulado el negocio hasta convertir a las santerías en uno de los pocos comercios que disfrutan de un panorama despejado y unos beneficios consolidados. Los santeros y babalaos, que son personas que viven por encima de los demás en países tan pobres como Cuba, ya se han instalado en la clase media acomodada en España. De momento, ellos reconocen que la mayoría de sus clientes son inmigrantes cubanos y venezolanos, antillanos con problemas; pero también empiezan a beneficiarse de la desesperación de decenas de miles de españoles -canarios en su mayoría-.

Uno de estos babalaos lo reconoce sin titubeos y sin complejos: “El comunismo jamás ha podido con nosotros, y tampoco podrá la Iglesia Católica. Poco a poco, los españoles comenzarán a creer en la santería. Esto es imparable”.

ARRIBA

 

10. Muere en Perú un turista francés por el consumo ritual de ayahuasca.

FUENTE: La República – La Región

 

 

Al promediar las ocho de la mañana del pasado 25 de noviembre, en las instalaciones del lodge “Espíritu de Anaconda”, ubicado en la carretera de penetración de Iquitos (Perú), el ciudadano francés Fabrice Epiene Pierre (39) fue hallado sin vida en una habitación en cuyo interior se encontraron varias botellas de brebaje de Ayahuasca, por lo que las autoridades presumen que habría falleció por una sobredosis de la planta alucinógena, aunque no se descarta la hipótesis de que puede haber ocurrido una mezcla con medicamentos.

Según informa el redactor Daniel Carbajal en el diario peruano La República, en el albergue, el propietario Guillermo Arévalo Valera desconoció el motivo de la muerte del turista, que arribó a la ciudad el pasado 23 de noviembre sin ninguna compañía, logrando internarse en la casa espiritual porque presuntamente estaba enfermo.

Hasta el lugar llegaron efectivos policiales de la División de Carreteras, quienes constataron el hecho y pusieron de conocimiento a los miembros de investigación de la comisaria 9 de octubre, y en coordinación con el fiscal de turno del Ministerio Público, Miguel Gasterlu, se ordenó el levantamiento del cadáver en presencia de agentes de la División de Criminalística.

Asimismo, fuentes policiales informaron que encontraron al extranjero con el dorso desnudo, vistiendo un pantalón beige, tirado en un colchón con la boca ensangrentada, y el cuarto con varias botellas de ayahuasca. Tras el hallazgo fueron intervenidos los dos curanderos del lugar Walter Martínez Guimarai y Hugo Ochavano Sanantino, quienes fueron llevados como parte de las primeras pesquisas policiales.

El representante del Ministerio Público sostuvo que esperará el certificado de la necropsia de ley para determinar las causas de la muerte para que el personal de DIVINCRI, realice las pericias correspondientes.

Las informaciones publicadas con posterioridad por el diario La Región señalaban que en las próximas horas (del 28 de noviembre), el ciudadano francés que fue encontrado muerto el último sábado en el albergue “Espíritu de Anaconda”, ubicado en el kilometro 4 de la carretera de penetración Los Cedros, altura del kilómetro 14 de la carretera Iquitos Nauta, estaría siendo llevado a la Lima para luego repatriar sus restos a Francia.

Las investigaciones aún continúan entorno a la muerte del turista que llegó a Iquitos para experimentar nuevas aventuras, entre ellas recorrer el Amazonas y ser parte del ritual del Ayahuasca. Según datos alcanzados a este diario, son muchos los turistas que se alojan en este albergue, a quienes antes de participar del ritual del Ayahuasca, les entregan un documento para que indiquen si es que sufren de alguna enfermedad, o si están tomando algún medicamento, para evitar darles la pócima, es por eso que el responsables del albergue dijo no tener responsabilidad de lo ocurrido.

La policía y el ministerio público continúan investigando este caso, e incluso las muestras obtenidas de los vasos y botellas conteniendo el Ayahuasca que encontraron al interior del bungalow donde fue hallado el cuerpo del turista, fueron enviadas a los laboratorios de la policía para los análisis respectivos.

ARRIBA

 

La RIES es una red de expertos y estudiosos católicos sobre el fenómeno sectario y la nueva religiosidad, presentes en España y Latinoamérica, y abarcando las zonas lusoparlantes. Pretende ofrecer, también con este boletín informativo, un servicio a la Iglesia y a toda la sociedad. La RIES no se responsabiliza de las noticias procedentes de otras fuentes, que se citan en el momento debido. La RIES autoriza la reproducción de este material, citando su procedencia.