Mundo
13 de febrero del 2012

Los obispos de México rectifican: ya no piden tregua a los criminales durante la visita del Papa, sino que se arrepientan

El arzobispo de León, José Guadalupe Martín Rábago, precisó, a nombre de los obispos de México y en el preámbulo de la visita del Papa Benedicto XVI al país, que de los criminales no se espera una tregua, sino que se arrepientan de sus actos y no sigan agraviando.


 

Ha dicho, "Dios está siempre dispuesto a perdonarlos, solo les pide que reconozcan sus errores, que se arrepientan de ellos y no ofendan más agraviando a sus hijos, que reparen los daños y se retiren de esta actividad de muerte", dijo durante una rueda de prensa en la Catedral de León, municipio de Guanajuato en el centro del país, que visitará el Papa del 23 al 26 de marzo próximo.

"Los obispos de México hemos expresado nuestro repudio a la violencia y apelado a la unidad nacional para fortalecer el Estado de derecho y la defensa de la vida humana", agregó.

Hace justo una semana, Martín Rábago había dicho que "a los que hacen mal, si de alguna manera mi palabra llega hasta ellos, (quiero) decirles que tomen en cuenta el tiempo que vamos a vivir, que es tiempo de paz y de gracia (durante la visita del Papa)".

Por su parte, el arzobispo de León considera que resulta inapropiado emplear el término tregua, ya que ello equivaldría a decirle a "todos los que se dedican a hacer el mal, que durante tres días no lo hagan, pero después vuélvanlo a hacer. Jamás, jamás pensaríamos así".