11.03.12

Anuncio anticatólico en el New York Times

 

El viernes 9 de marzo el New York Times publicaba un anuncio a toda página (52.000 USD) de la Freedom From Religion Foundation contra la Iglesia, por haber plantado cara al mandato anticonceptivo de Obama y defender la libertad religiosa de todos los estadounidenses.

Planteado como una carta abierta a los católicos progres y los simplemente nominales, les conmina a enfrentarse a «la hora de la verdad»: ¡es la hora de abandonar la Iglesia Católica!. Con la falta de respeto habitual y que un medio como en NYT no se hubiese atrevido a publicar sobre judíos, musulmanes y diversas denominaciones protestantes, en especial las que tienen «obispesas» y «obispesos».

Llena de lugares comunes: «¿Quieres libertad reproductiva o volver a la Edad Media?, ¿eliges entre las mujeres y sus derechos o los Obispos y sus errores?, ¿de qué lado estás?», si tenéis tiempo leer el argumentario, es tronchante (hacer click en la imagen para agrandarla). Destaco el que a mi me parece párrafo nuclear:

Si imaginas que puedes cambiar la Iglesia desde dentro –conseguir atenuar la postura sobre el control de natalidad, los derechos de los homosexuales, el gaymonio, la investigación con células madre embrionarias–: te estás engañando. Si quieres ser «buen católico» entonces estarás haciéndole «mal» a los derechos de las mujeres. Te engañas si piensas que la Iglesia variará la Doctrina de la Inmaculada ContraCepción [sic]

En aununcio termina con un «pensamiento» de lo más cariñoso:

Como miembro de una «manada» de un club abiertamente antidemocrático, ¿no es el momento de actuar de una vez? Por favor, váyase de la Misa [sic]

En medio, lo que cabría esperar: Inquisición, pederastia, propagadora del SIDA, la muerte de Manolete, la mayonesa cortada… vamos, todo lo que da de sí ese tipo de personas. Y claro, no podía faltar, como buenos obamitas el sacarle un poco de lustre al líder.

Bill Donohue, presidente de Catholic League, se preocupa por «la escalda en el discurso del odio dirigido a los católicos». Totalmente de acuerdo con Donohue, pero no está de más recordar que ya Jesucristo nos lo adelantó. Nada nuevo.

Es tiempo de mujeres y hombres recios, es tiempo de santos. Supongo que si alguno decide hacer caso al anuncio en realidad no lo hace, porque ya había dejado la Iglesia hace tiempo. Un católico normal se siente tan poco interpelado con el anuncio que está muy bien que definan claramente el target: el católico progre. Y es una pena, porque a los pecadores nos viene de perlas cualquier caricia o capón que nos haga querer recapacitar, pero no hay por dónde cogerlo.

Eso sí, se me ocurren un par de publicaciones españolas, y parte de sus lectores, que harían bien, y nos harían bien, en aceptar la carta de la FFRF, con la verdad se gana mucho. Esa carta no sólo colmaría sus expectativas, es que les retrata en su mediopensionismo.