21.06.12
La fábula del chofer de tres idiomas, según Jesús Bastante
A las 9:23 AM, por Tomás de la Torre Lendínez
Categorías : General
Ayer acabó la reunión de la comisión permanente de la Conferencia Episcopal Española. Para el reportero escritor de novelas e inventor de fábulas eclesiales Jesús Bastante el único tema importante tratado en la reunión fue colocar a dedo en la sede de la calle Añastro al chofer de monseñor Martínez Camino. El cargo alcanzado es vicesecretario para Asuntos Generales de la CEE,
Con las neuras contrarias al obispo secretario, el señor Bastante inventa y pone en boca de los trabajadores de la Casa de la Iglesia lo que nadie dice, pero él si tiene licencia para suponer que el chofer, que domina tres idiomas, será un guardián del “bunker”, como tilda a la sede de la Conferencia Episcopal.
¿Quién es este chofer elevado a tan alto cargo?.
Es un sacerdote excelente, de 42 años, valenciano de cuna y de diócesis, con varios títulos universitarios conseguidos en Roma, entre ellos doctor en Sagrada Teología, con varios idiomas en su lengua, con una amplia experiencia pastoral en tierras de Valencia, cuyo nombre es don José Gascó Casesnoves.Dentro de la fábula del señor Bastante afirma que el nombramiento ha “pillado” de improviso a los obispos moderados de la Conferencia Episcopal, quienes están absolutamente enfadados.
¿Desconoce, el señor Bastante que la comisión permanente del episcopado está compuesta por una amplia mayoría de obispos, entre cuyos trabajos está aprobar los nombramientos para la Conferencia Episcopal?
Lo dice así el Reglamento Interno:
14º.- “Nombrar a los directores de los Secretariados de las Comisiones Episcopales, a propuesta de su Presidente, después de haber oído al Secretario General.”
Para rematar la faena de la fábula del chofer, el escribiente Bastante hace esta revolera:
“En todo caso, ahora regresa por la puerta grande y, sin duda, para ayudar a cerrar el círculo de colaboradores -"el búnker", como algunos lo denominan- que gobiernan, con mano de hierro, la Casa de la Iglesia en los dos últimos trienios de Rouco Varela al mando.”
Con este lenguaje de “bunker”, más propio del tardofranquismo, que de los tiempos actuales, el señor Bastante se retrata él sólo, sin la ayuda de nadie. Es un fabulador, un inventor de historias de asuntos paraeclesiales, muy lejos de lo que es la información religiosa sobre la Iglesia Católica en España.
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Tomás de la Torre Lendínez