19.09.12

Gracias, Carrillo

A las 1:00 PM, por Juanjo Romero
Categorías : General

Madrid en la Segunda República (Archivo de ABC)

Ayer murió Santiago Carrillo, líder stalinista del PCE, quería unirme al coro de agradecimientos por tu aportación a la historia de España.

Gracias, Carrillo, por haber fracasado en tus propósitos, de no ser así muchos hoy no podríamos darte las gracias.

Gracias por fracasar en el Golpe de Estado de 1934. Como recordaba Pedro Fdez Barbadillo, allí pusiste en práctica el «Decálogo del joven socialista» que te acompañó toda tu vida:

8.- La única idea que hoy debe tener grabada el joven socialista en su cerebro en que el socialismo sólo puede imponerse por la violencia, y que aquel compañero que propugne lo contrario, que tenga todavía sueños democráticos, sea alto, sea bajo, no pasa de ser un traidor, consciente o inconscientemente.

10.- Y sobre todo esto: armarse. Como sea, donde sea y por los procedimientos que sean. Armarse. Consigna: Ármate tú, al concluir arma si puedes al vecino, mientras haces todo lo posible por desarmar a un enemigo.

Gracias por fracasar en el intento de convertir a España en una «república soviética» más. Lástima que no puedan adherirse a mi las decenas de miles niños, mujeres y hombres que vil y cobardemente ordenaste asesinar. Mi pueblo, Madrid, es un perpetuo homenaje a personas como tú: 225 checas en las que hacinabas a «disidentes» para torturarlos, juzgarlos sumarísimamente y luego darles «paseíllo» o un destino atroz como Aravaca, Paracuellos o Torrejón de Ardoz. Terminaste huyendo, no sin antes denunciar a tu propio padre. Propio de los de tu especie.

Gracias por fracasar en el intento de traernos de nuevo «el paraíso socialista», no luchabas por traer la democracia, lo hacías por «la dictadura del proletariado». Tampoco podremos contar en el coro con los innumerables «camaradas» purgados personalmente, quizá, al igual que en la Guerra Civil, es uno de los grandes factores para que otros comunistas más preparados hubiesen dado otro rumbo a los acontecimientos.

Gracias por hacer fracasar al PCE (Partido Comunista de España) hasta volverlo una anécdota extraparlamentaria, una pena que no dejasen que Gaspar Llamazares rematase [sic] la jugada. Te empeñaste y lo conseguiste. Probablemente sin el ejemplo de tu vida y tu ideología los comunistas españoles no se habrían desplomado de los 23 diputados del 79 a los 4 del 82 y luego a la nada de Izquierda Unida. El mundo debe reconocer que te adelantaste casi una década a la desaparición de las «repúblicas democráticas» y «repúblicas populares».

En prueba de agradecimiento me permito republicar la primera esquela en la que aparece tu nombre. Piensa en que si las ‘malísimas‘ Cortes preconstitucionales te amnistiaron en 1977, ¡qué será de la Misericordia del Señor!. Descansa en paz, cuentas con mis oraciones.

Esquela con motivo del 70 aniversario de las matanzas de Paracuellos, Torrejón y Aravaca