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El mundo visto desde Roma

Servicio diario - 8 de octubre de 2012

Nueva Evangelización para la transmisión cristiana de la fe

Con qué lenguaje comunicar en un mundo golpeado por el tsunami del laicismo
Presentado a la prensa el itinerario de temas que debatirá el Sínodo

¿Qué se hará durante el Sínodo de los Obispos?
Los asistentes trabajarán durante tres semanas intensas

Inaugurada la XIII Asamblea del Sínodo de los Obispos para la Nueva Evangelización
Con intervenciones del papa Benedicto XVI y del cardenal de Hong Kong

'La Nueva Evangelización es una nueva forma de misión en la Iglesia'
Declaraciones de monseñor Benedito Beni dos Santos, padre sinodal por Brasil

Exclusiva

'Tenía el deber de estar al lado de esta familia de amigos, ya fueran culpables o no'
Declaración del sacerdote Paolo Morocutti, amigo de Paolo Gabriele

Mundo

El premio nobel de Medicina al japonés Yamanaka y al británico Gurdon
Dos modos de afrontar la investigación genética: clonación o células madre pluripotentes inducidas

Entrevistas

¿Por qué, en condiciones extremas, unos se 'humanizan' y otros se convierten en 'bestias'?
"La felicidad inadvertida", del profesor José B. Freire, tiene algunas sorprendentes respuestas


Nueva Evangelización para la transmisión cristiana de la fe


Con qué lenguaje comunicar en un mundo golpeado por el tsunami del laicismo
Presentado a la prensa el itinerario de temas que debatirá el Sínodo
Por H. Sergio Mora

CIUDAD DEL VATICANO, lunes 8 de octubre (ZENIT.org).-La 'relación anterior a la discusión' o sea el programa sobre los temas que deben ser profundizados por los participantes en el Sínodo de Obispos para la nueva evangelización y la transmisión de la fe, fue presentada hoy a los periodistas, en la Sala de Prensa de la Santa Sede.

Intervinieron el cardenal estadounidense, Donald William Wuerl, arzobispo de Washington, relator general del sínodo, y el presidente del Pontificio Consejo de las Comunicaciones Sociales, el arzobispo italiano Claudio Maria Celli. Después de la presentación dieron amplio espacio a los periodistas allí presentes.

El cardenal Donald William recordó que el laicismo "fue como un tsunami que arrolló al mundo occidental" minando sus estructuras, amenazando la visión cristiana e instituciones como la familia y el matrimonio.

La idea de "aceptar un orden natural y trabajar por el bien común se ha debilitado", y la nueva evangelización nos llama a "difundir la verdad del evangelio" y "lo que esto significa para el mundo".

"Un evento alentador en ese panorama --dijo su eminencia- es que hay una nueva generación de jóvenes que están buscando respuestas, y estas se encuentran en el mensaje de Cristo". Además "es necesario llegar a las personas que piensan que conocen el mensaje cristiano, si bien en realidad están subcatequizados. Lo veo en Estados Unidos, donde hay dos generaciones con este problema", dijo.

Por su parte el arzobispo italiano, Claudio María Celli subrayó que son necesarias una serie de actitudes de fondo para trasmitir la fe, como la confianza, la audacia, y la alegría, con la conciencia de que el "Espíritu sopla donde y como quiere". Por ello "la Iglesia mira al futuro con mucha esperanza".

El arzobispo Celli expresó el deseo de que este sínodo "nos ayude a soñar y esperar", "más allá de nuestras disertaciones y reflexiones, recordar cuánto Dios ama al hombre y el camino de esta humanidad y se pone a su lado". Recordó también que "el papa tiene esta capacidad de hacernos recordar cuáles son las cosas que tienen importancia".

Concluyó, recordando que si la Iglesia no evangeliza traiciona su vocación. "El problema que me planteo es con qué lenguaje lo hacemos", porque "no se trata de una problemática tecnológica". Y recordó que existieron "grandes comunicadores con pobres y limitados instrumentos".

Sobre la capacidad de los padres sinodales y su conocimiento del problema, el arzobispo de Washington fue muy claro: "nadie vino impreparado, traemos nuestra experiencia pastoral. Debemos entender qué cosas están funcionando en los diversos lugares". Y precisó que, en la nueva evangelización para la transmisión de la fe, habrá que trabajar en dos niveles: llegar a los que se alejaron, para traerlos nuevamente al rebaño; y a los jóvenes adultos que no se han apartado, que quieren dedicar la vida al sacerdocio o a la Iglesia, qué son mucho más de los que eran hace veinte años.

ZENIT preguntó al cardenal que si bien el desafío es cómo comunicar con los medios digitales y en un contexto de subcatequización existente, parecería que los instrumentos para la nueva evangelización ya existen. El arzobispo de Washington precisó que justamente es necesario identificar el idioma común y "volver a proponer''. Por ello fue creado un pontificio consejo sobre la nueva evangelización. "Tenemos contenidos riquísimos, entretanto muchos elementos son mal comunicados, debido también a la velocidad de las comunicaciones que se sobreponen a la capacidad de la Iglesia de explicar sus propuestas.

"En mi archidiócesis nos dimos cuenta de que tenemos que lograr dar una información inmediata, porque el contenido tiene una calidad y la mediación al trasmitirlo muchas veces lleva otro mensaje".

¿Demasiada voluntad de estar en coloquio con el mundo ha hecho perder a los católicos su identidad y orgullo? preguntó otra periodista. El purpurado estadounidense respondió que los católicos tienen que reapropiarse de su identidad para llevar el evangelio a un mundo que en realidad no lo conoce.

Sobre el peligro de que el sínodo se olvide de los otros cristianos y por lo tanto de su vocación ecuménica, el cardenal William, recordó que "uno de los grandes desafíos es el contraste existente entre la secularización y la fe en Cristo. Con frecuencia veo que con partners ecuménicos tenemos mucho en común, mucho más que con el mundo secularizado que no ve a un Dios trascendente". "Entretanto --prosiguió- uno de los desafíos de hoy para la Iglesia es la identidad. No se puede establecer un diálogo ecuménico sin ella".

¿Y las personas de otras religiones o no creyentes? Es parte de la vida de la Iglesia llevar el evangelio al mundo, indicó el cardenal. Por ello como resultado del sínodo "me gustaría ver una nueva confianza en la veracidad de nuestra fe. Y si creemos en Jesucristo y en la sucesión apostólica, esta confianza nos ayudará a entablar diálogo con personas en torno nuestro. Sea a nivel individual que institucional". En necesario además "que las instituciones, como escuelas, universidades, etc. tengan conciencia de que llevan adelante algo más además que la tarea específica".

Respondiendo siempre a las preguntas, consideró de gran importancia la existencia y trabajo de los nuevos movimientos, eclesiales, "signo de la obra del Espíritu Santo".

Una agencia de noticias británica le preguntó al arzobispo de Washington si los casos de abusos sexuales habían causado la crisis que vive hoy la Iglesia, a lo que el cardenal William respondió que dichos hechos seguramente causaron desconfianza hacia el clero. Por ello en este momento de reflexión se recuerda que el Vaticano II, planteó el problema: "¿estoy viviendo la fe en su plenitud?"

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¿Qué se hará durante el Sínodo de los Obispos?
Los asistentes trabajarán durante tres semanas intensas
CIUDAD DEL VATICANO, lunes 8 octubre 2012 (ZENIT.org).- Las próximas tres semanas serán días de intensa reflexión y trabajo para los asistentes a la XIII Asamblea del Sínodo de los Obispos. La misa de inauguración de ayer marcó la pauta con la homilía del santo padre Benedicto XVI, quien hizo una clara distinción entre la Nueva Evangelización y la Misión Ad gentes, aunque insistió sobre la necesidad de que ambas, junto al trabajo evangelizador que ya se realiza en las parroquias con los “practicantes”, se complementen y caminen juntas.

Hoy lunes comenzaron los trabajos en el aula sinodal con la Primera Congregación --o sesión--, que contó con la asistencia del papa, quien la preside por derecho. Durante la sesión de inauguración tomó la palabra el santo padre, así como el cardenal John Tong Hon, obispo de Hong Kong en China, presidente delegado de Benedicto XVI. También fue la ocasión para que el Secretario del Sínodo de los Obispos, monseñor Nikola Eterovic, diera su “Relación” –o informe ejecutivo desde el último Sínodo.

En camino al documento final

Tal como ha informado a la prensa la Secretaría del Sínodo, están previstas 23 Congregaciones Generales y 8 Sesiones de los Círculos menores. En la primera reunión, los miembros de los 12 Círculos menores, divididos según las lenguas oficiales del Sínodo, escogerán a un Moderador y un Relator. Como indica el nombre, el Moderador deberá moderar las discusiones, mientras que el Relator deberá exponer el contenido esencial de los resultados de dichas discusiones en la Congregación General del viernes 19 de octubre.

De entre los varios acontecimientos significativos, se han destacado los siguientes eventos:

-El primer día de los trabajos, 8 de octubre, está prevista también la relación del Relator General, en este caso el cardenal Donald William Wuerl, arzobispo de Washington, Estados Unidos. En la Sesión de la tarde están programadas breves intervenciones de representantes del episcopado de los cinco continentes sobre el tema de la Asamblea Sinodal. Estas deberían indicar en síntesis cómo han percibido el tema sinodal las realidades de las Iglesias particulares de cada continente.

--El 9 de octubre, en la Congregación General de la tarde, el cardenal Marc Ouellet PSS, prefecto de la Congregación para los Obispos, referirá acerca de la recepción de la Exhortación Apostólica Postsinodal Verbum Domini, resultado de la XII Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos que tuvo lugar en octubre de 2008.

--El miércoles 10 de octubre, su gracia Rowan Douglas Williams, arzobispo de Canterbury y primado de toda Inglaterra y de la Comunión Anglicana, en la Congregación General de la tarde, se dirigirá a la Asamblea para ilustrar desde el punto de vista anglicano el desafío de la nueva evangelización y de la transmisión de la fe cristiana. 

--El viernes 12 de octubre, Werner Arber, profesor de Microbiología en el Biozentrum de la Universidad de Basilea, Suiza, y presidente de la Academia Pontificia de las Ciencias, expondrá algunas reflexiones sobre la relación entre ciencia y fe. También intervendrá en la Congregación General de la tarde. Las citadas intervenciones deberían animar el debate libre que está previsto para el final de cada Congregación General de la tarde.

Durante la celebración eucarística del 11 de octubre, el patriarca ecuménico Bartolomé I se dirigirá al obispo de Roma Benedicto XVI y a todos los participantes en la Santa Misa con la cual iniciará el Año de la Fe.

Al comienzo de los trabajos, los padres sinodales elegirán a los miembros de la Comisión del Mensaje, compuesta por doce miembros, de los cuales el presidente, el cardenal Giuseppe Betori, arzobispo de Florencia, Italia, y el vicepresidente, monseñor Luis Antonio G. Tagle, arzobispo de Manila, Filipinas, fueron nombrados por el santo padre. Su santidad nombrará a otros dos miembros, mientras que los ocho restantes serán elegidos por los padres sinodales.

Esta Comisión preparará un Mensaje (Nuntius) que una vez aprobado por los padres sinodales será publicado para informar al Pueblo de Dios sobre los temas tratados durante la Asamblea Sinodal. (javv)

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Inaugurada la XIII Asamblea del Sínodo de los Obispos para la Nueva Evangelización
Con intervenciones del papa Benedicto XVI y del cardenal de Hong Kong
CIUDAD DEL VATICANO, lunes 8 octubre 2012 (ZENIT.org).-Un repique de campanas indicaba las 9 horas en el reloj de la basílica de San Pedro. Era la hora prevista para el inicio del trabajo de la XIII Asamblea especial del Sínodo de los Obispos sobre la Nueva Evangelización, inaugurada en el Aula del Sínodo por el papa Benedicto XVI, quien la preside por derecho.

Los padres sinodales, junto a los expertos, auditores y delegados fraternos asistieron a la Primera Congregación general, donde rezaron y escucharon la meditación del santo padre, y los discursos del presidente delegado, el obispo de Hong Kong, cardenal John Tong Hon y del secretario general del Sínodo de los Obispos, monseñor Nikola Eterovic.

La confesión de la fe nutre la evangelización

En la meditación correspondiente a la Hora Tercia, rezada en el aula del Sínodo, el papa Benedicto XVI dijo que las columnas de la Nueva Evangelización son la Confessio y la Caritas, entendidas ambas a partir del Evangelium, en un camino que lleva a la aparición del buen fuego del anuncio que debe ofrecerse a los demás.

A la confesión cristiana, dijo el santo padre, pertenece también la disposición a sufrir la Confessio, que lleva en sí el concepto del martirio. Esto porque expresa la voluntad del testigo hasta el sacrificio de la vida, asegurando de este modo su credibilidad. Por eso dijo el papa que la confesión debe estar en el corazón y en la boca, para que sea pública, porque la fe que se lleva dentro debe ser comunicada a los demás y confesada.

En otra parte de su reflexión, hizo ver a los presentes que todo lo anterior presupone la Caritas, que es el amor que se convierte en pasión. Y recordó que el cristiano no debe ser tibio, dado que ese el mayor peligro.

Hizo ver cómo en la palabra Evangelium está ya el sentido del anuncio de una victoria, del bien y de la alegría, que en el contexto de la evangelización debe convertirse en justicia, paz y salvación. Para el papa, esta es una palabra que hoy sigue siendo válida, cuando muchas personas se preguntan si detrás de las nubes de la historia hay un Dios, si este es acaso una realidad o son solo hipótesis.

Para el cristiano, Dios está ahí y sólo esta existencia es fuente de salvación; pero hay más, porque Dios nos ama, habló y se mostró a sí mismo, fueron parte de sus palabras. A esto añadió que todo aquello sigue siendo la base del anuncio, y es el mensaje que la Iglesia aún tiene que ofrecer.

Invitó a los presentes a no olvidar la oración, porque si Dios no actúa, las cosas de los hombres son insuficientes. En resumen, aseguró que Dios puede iniciar un proceso de renovación, por lo que a los hombres les espera la tarea de cooperar con disponibilidad, poniendo en juego todo su ser, para así hacer visible la presencia de Dios.

La nueva evangelización: misión de testigos

En su intervención, el presidente delegado le hizo llegar al papa el saludo de toda la asamblea, a la vez que le agradecía por la convocatoria a la Asamblea sinodal.

Haciendo referencia al cincuenta aniversario del Concilio Vaticano II, el cardenal Tong Hon recordó que así como entonces, cuando la Iglesia fue invitada a “echar las redes”, hoy debe ver a la Iglesia primitiva como un modelo de evangelización, especialmente en las tres cualidades que la caracterizaba: didache, koinonia y diakonia, en referencia a las palabras griegas: doctrina, comunión y servicio, respectivamente.

Para relacionar esto con nuestros días, marcados por un fuerte secularismo e indiferencia ante lo religioso, el alto prelado chino se refirió a lo que vivieron las Iglesias que peregrinan en Hong Kong, Macao y en otras partes del territorio de la China. Y contó que durante los acontecimientos del año 1997, en que las excolonias tuvieron que regresar al país-continente, muchos católicos de Hong Kong buscaron apoyo espiritual en la Iglesia ante la incertidumbre del futuro.

La decisión entonces fue involucrarlos en la catequesis, en cursos bíblicos y teológicos para profundizar su fe y ser evangelizadores. A la fecha, contó Tong Hon, son cerca de mil los catequistas voluntarios con que cuentan y solo en la próxima Vigilia Pascual, recibirán el bautismo trescientos nuevos adultos. Un fenómeno similar se viene dando también en Macao, que ha visto aumentar el número de bautizados en los años recientes.

Como hijo de una cultura donde los relatos traen una carga de sabiduría, el presidente delegado quiso animar a los presentes con otra “anécdota evangelizadora”. El relato se centró en el caso de un párroco rural del norte de China continental, quien separó a sus parroquianos en dos misiones diferentes. A los bautizados recientes les dio la misión de llevar a sus familiares y amigos no católicos a la catequesis; mientras a los católicos más antiguos les encomendó enseñar el catecismo a los catecúmenos. Durante el proceso, el párroco rezaba con fervor en el templo, mientras esperaba los frutos de este impulso misionero. ¿El resultado? Fueron mil los bautizos que administró en ese año…

A modo de moraleja, el purpurado destacó que en la Iglesia primitiva, como en los ejemplos compartidos, la “didache” ha cumplido un rol de suma importancia, porque al ser una vivencia personal de Jesucristo encarnado, crucificado y resucitado, al cristiano lo convierte en un testigo ante los demás.

“Porque debemos ser testigos fervientes de nuestra fe --dijo--, en un mundo materialista donde tenemos el problema de muchos católicos alejados de la Iglesia”. (javv)

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'La Nueva Evangelización es una nueva forma de misión en la Iglesia'
Declaraciones de monseñor Benedito Beni dos Santos, padre sinodal por Brasil
Por Maria Emília Marega

CIUDAD DEL VATICANO, lunes 8 octubre 2012 (ZENIT.org).- Tras la concelebración de inauguración del sínodo sobre “La Nueva Evangelización para la transmisión de la fe cristiana”, monseñor Benedito Beni dos Santos, de la diócesis de Lorena, Brasil, afirmó que la nueva evangelización “es una nueva forma de misión en la Iglesia”. Sobre la realidad de su país reveló que existe un florecer vocacional. Por ello, piensa que están preparados para contribuir a la misión de la Iglesia en Europa.

Monseñor Benedito Beni dos Santos, obispo nombrado por el papa para representar a Brasil en la Asamblea, conversó con ZENIT, nada más terminar la ceremonia de apertura del sínodo.

¿Cuál es la aportación de la Iglesia de Brasil a este Sínodo?

--Mons. Beni: La Nueva Evangelización camina en Brasil de un modo especial a través de la Misión Permanente de la Iglesia y de las nuevas comunidades y movimientos. Creo que este Sínodo reunirá todas las experiencias de Nueva Evangelización que ya existe en la Iglesia y proporcionará al santo padre un material amplio y profundo, para que pueda elaborar en su carta postsinodal un proyecto de Nueva Evangelización.

¿Cómo será su participación durante la Asamblea?

--Mons. Beni: Cada obispo presente en el sínodo hace una intervención que debe durar unos cinco minutos en la Asamblea General. Luego, hay una aportación que cada obispo hace en la reflexión por grupos lingüísticos. En mi intervención pretendo mostrar que la Nueva Evangelización es una forma de misión en la Iglesia, por tanto, no implica a un grupo de especialistas sino a todos los bautizados. También me propongo mostrar que la Nueva Evangelización ya camina en América Latina, a través de la Misión Permanente, y en Brasil mediante los movimientos y nuevas comunidades, sobre todo.

¿Cuál es el papel del laico en el contexto de la Nueva Evangelización?

--Mons. Beni: Los laicos ejercen un protagonismo en la Nueva Evangelización, basta recordar que los laicos están comprometidos en la Misión Permanente de la Iglesia, los laicos son miembros de los movimientos y nuevas comunidades. Hay espacios en la sociedad a los que el obispo no logra llegar, ni el sacerdote, pero los laicos están presentes en el día a día, a través de su trabajo, de sus actividades.

¿Como se da este protagonismo en la práctica?

--Mons. Beni: En primer lugar, en cuanto a testimonio del Evangelio, los laicos ya evangelizan todos los espacios de las ciudades. Está claro que un proyecto de Nueva Evangelización debe ser una cosa planificada, debe incluir la preparación de los laicos para que puedan ejercer la misión de la Iglesia. Sobre todo, la familia tiene un papel muy importante en la evangelización. Los padres son los primeros evangelizadores de los hijos, por tanto, el padre y la madre necesitan ser catequistas. La familia debe también ser evangelizadora de otras familias.

La preparación del laico...

--Mons. Beni: La Iglesia ha trabajado mucho en ese sentido, pero creo que el Sínodo aportará una nueva contribución en el plano teórico y en el de la experiencia, la vivencia. Brasil también se está preparando bien para el Año de la Fe, sobre todo se está difundiendo mucho la doctrina del Concilio Ecuménico Vaticano II.

El Concilio Vaticano II...

--Mons. Beni: El Concilio Ecuménico Vaticano II fue realizado para la renovación de la Iglesia y esa renovación no se hace en 50 años, se necesitan muchos años; por tanto, doy fe de que volver al espíritu y la enseñanza del Vaticano II en este momento es muy importante para toda la Iglesia, y el catecismo es uno de sus frutos principales.

El Catecismo de la Iglesia Católica...

--Mons. Beni: El catecismo no es simplemente un libro religioso, ni un manual de teología. El catecismo es el documento de la fe, muestra aquello que la Iglesia cree y aquello que cada uno de nosotros debe creer porque nuestra fe es transmitida por la Iglesia; está hecho de tal modo que motiva a la persona a vivir la fe. El conocimiento del catecismo de la Iglesia católica es uno de los objetivos del Año de la Fe y contribuirá mucho en la profundización y el fortalecimiento de la fe y también a que la Iglesia pueda cmplir bien su misión de evangelizar.

Dicen que ha llegado el momento de que América Latina evangelice a Europa. ¿Qué podría decir de esa afirmación?

--Mons. Beni: Está claro que la evangelización necesita agentes y en América Latina tenemos a mucha gente trabajando en la evangelización. Hay un florecimiento de las vocaciones al sacerdocio, a la vida religiosa, las nuevas comunidades y movimientos. Mientras tanto, Europa está en medio de un proceso muy grande de secularización, las vocaciones se están volviendo raras. Doy fe de que en este sentido misionero, de traer a Europa misioneros laicos, consagrados, e incluso presbíteros, América Latina puede contribuir a la misión de la Iglesia en Europa.

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Exclusiva


'Tenía el deber de estar al lado de esta familia de amigos, ya fueran culpables o no'
Declaración del sacerdote Paolo Morocutti, amigo de Paolo Gabriele
CIUDAD DEL VATICANO, lunes 8 octubre 2012 (ZENIT.org).- En relación al sacerdote amigo del exmayordomo de Benedicto XVI, condenado a 18 meses de prisión por la justicia vaticana, la familia de Paolo Gabriele ha hecho público un comunicado. El sacerdote Paolo Morocutti han cumplido en todo momento su papel de amigo, independientemente de su culpabilidad, afirma la nota hecha pública por la abogada defensora del exmayordomo.

En un comunicado al que ha tenido acceso ZENIT, se dice que: “La familia Gabriele lamenta el modo impropio con el que los medios de comunicación han difundido el nombre de don Paolo Morocutti. Don Paolo ha sido siempre un amigo de la familia que ha desempeñado el único papel de estar cerca de la señora Gabriele y en especial de los niños, en los momentos más difíciles y dolorosos de este asunto. Por esto renueva a don Paolo su profunda gratitud”.

Con estas palabras, la abogada Cristiana Arrù, abogada de Paolo Gabriele, ha aclarado definitivamente el papel del sacerdote Morocutti, amigo de siempre de la familia Gabriele. Es el sacerdote, amigo de la familia, que ha acompañado, tras el arresto de Gabriele, a la mujer y a los hijos en los momentos más difíciles.

Como sacerdote, comenta don Paolo, “tenía el deber de estar junto a esta familia de amigos, independientemente de la culpabilidad de Paolo; mi tarea era la de defender a la mujer y sobre todo a los niños de las continuas presiones mediáticas; esto es lo que he hecho, plenamente consciente de mi responsabilidad sacerdotal”.

“El haber presentado a Paolo a otro sacerdote, porque me lo pidió, me parece la cosa más normal y natural del mundo”, concluye.

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Mundo


El premio nobel de Medicina al japonés Yamanaka y al británico Gurdon
Dos modos de afrontar la investigación genética: clonación o células madre pluripotentes inducidas
MADRID, lunes 8 octubre 2012 (ZENIT.org).- Dos científicos de primer orden han sido premiados conjuntamente con el premio nobel de Medicina 2012. Mientras el británico ha dirigido sus investigaciones preferentemente hacia las células madre embrionarias y la clonación, el japonés inició una nueva línea prometedora porque en ella no hay necesidad de destruir embriones humanos.

El médico japonés Shinya Yamanaka está considerado el padre de las llamadas células células madre pluripotentes inducidas (iPS), que poseen la capacidad de convertirse en cualquier tipo celular especializado.

Especialista en cirugía ortopédica, de 50 años, logró en 2006 generar las células madre pluripotentes inducidas (iPS) con características que, hasta entonces, los investigadores creían que sólo poseían las células madre embrionarias.

Sus primeros logros los hizo a partir de células adultas obtenidas de la piel de ratones, y para 2007 había conseguido generar con éxito células iPS también a partir de células de piel humana. El descubrimiento, una verdadera revolución, superó el uso de las células madre embrionarias, cuya obtención plantea problemas éticos y conlleva grandes dificultades.

Actualmente es director del Centro para la Investigación y la Aplicación de Células iPS de la Universidad de Kioto, donde lleva a cabo su trabajo con el objetivo, afirma, de contribuir al desarrollo de la medicina regenerativa.

El año pasado, durante una visita a España para recibir el premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en Biomedicina, confesaba que se lanzó a buscar la alternativa de crear células iPS ante el nacimiento y crecimiento de sus hijas, que le recordaron que "cualquier ovocito fecundado puede desarrollarse y convertirse en un ser humano".

Yamanaka considera que la investigación de las células iPS aún está en sus pasos iniciales, ya que todavía se debe constatar que son seguras y eliminar los riesgos antes de su aplicación clínica.

En varias ocasiones el científico japonés ha criticado las patentes que restringen el uso de las nuevas tecnologías en medicina y ha sostenido que éstas deben ser accesibles también a aquellos con menos recursos.

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Entrevistas


¿Por qué, en condiciones extremas, unos se 'humanizan' y otros se convierten en 'bestias'?
"La felicidad inadvertida", del profesor José B. Freire, tiene algunas sorprendentes respuestas
Por Nieves San Martín

MADRID, lunes 8 octubre 2012 (ZENIT.org).- ¿Quien podría decir hoy que no aspira a la felicidad? Sin embargo, si se hace una encuesta en la calle, cada persona cifrará su felicidad en cosas muy diferentes, en objetos materiales, estados de ánimo, casi siempre en objetivos que dependen de las circunstancias. Un especialista en el trabajo de Viktor Frankl, el médico judío internado en un campo de concentración, José Benigno Freire, profesor de Psicología de la Personalidad en la Universidad de Navarra, afirma en cambio que la felicidad está en el meollo del propio ser humano y allí hay que buscarla, cuidarla y desarrollarla, no sin fatiga.

Para probarlo, el profesor Freire emprendió una búsqueda de lo que llama “felicidad inadvertida”, en el ambiente menos propicio del mundo y tal vez de la historia: los campos de concentración nazis. Así ha dado forma a un relato apasionante a través del análisis de los testimonios de los internados en esos lugares del horror más abyecto.

El libro “La felicidad inadvertida”, de la editorial Eunsa, de la Universidad de Navarra, es el resultado de este verdadero rastreo de “trozos de felicidad” que resultarían increíbles si no es porque los mismos prisioneros los han dejado escritos: momentos de ternura, de contemplación de la belleza, de generosidad, que relatan los protagonistas, con dulces palabras en claro contraste con la grisura de la cotidiana lucha por la supervivencia.

Como un especialista en gemas, que va recogiendo piedras preciosas que reflejan una luz más alta, José Benigno Freire ofrece ese tesoro descubierto, envuelto en un itinerario de seis pasos que llevan, cada vez en un escalón más alto, al encuentro de la “felicidad inadvertida” y la superación del desencanto de la vida cotidiana.

ZENIT ha repasado, en esta entrevista con el profesor José Benigno Freire, esos pasos que conducen a la superación del desencanto.

Usted habla de "nostalgia de lo cotidiano" en un campo de concentración, una nostalgia que humaniza, y extrae una lección para el hombre de a pie. ¿Cuál?

--Prof. Freire: Resultaba curioso que, en los escasos momentos de un cierto sosiego o tranquilidad, los prisioneros regresaban con añoranza a su vida anterior. Y no se acordaban de sus éxitos o de sus logros sociales o personales; generalmente recordaban detalles menudos de la vida habitual: el sofá de casa, una ducha en agua caliente, la calidez del pan recién hecho, el beso nocturno al despedirse de la madre… Unos detalles que Primo Levi describió con una expresión agraciada: sentían dolor de hogar. Esta experiencia no debe interpretarse en clave emotiva, porque eran los sentimientos de unas personas que vivían con la muerte escondida detrás de un cercano amanecer. En esas condiciones uno no está para lirismos sentimentales. Por lo tanto, constituyen un valor objetivo. Por eso animo a los lectores a que los disfruten, y que por su cotidianidad no los dejen pasar inadvertidamente.

La contemplación de la belleza ¿puede salvar del envilecimiento o la locura? ¿por qué?

--Prof. Freire: Sí. Pero más que un antídoto es un síntoma de la madurez interior. La percepción de la belleza y la conmoción emocional o estética, surgen como una manifestación de que la persona atiende a unas solicitaciones que traspasan las apetencias exclusivamente corporales. Disfrutar con la naturaleza, la música, la pintura, la belleza de una película, el apagado resplandor de una puesta de sol… es señal de que las entretelas de la persona se activan por el regusto de la belleza, un trascendental del ser.

El humor tiene una función en la psicología. ¿puede explicar cuándo el humor hace más humana a una persona?

--Prof. Freire: El humor puede tener múltiples orígenes. Desde lo chabacano o rudo, hasta representar un chispazo de la exquisitez de la inteligencia humana. De todos esos posibles orígenes el más humano es el humor que germina en el amor: cuando una persona utiliza todos sus recursos para aliviar el sufrimiento de otro, para ayudar a otro sin ser notado. Así, el humor brota espontáneo, afable y expansivo. Muchos malos momentos de la vida se pueden esconder en el hueco interior de una sonrisa.

¿La dignidad humana tiene una gran relación con el saber gobernarse a sí mismo?

--Prof. Freire: Sí, porque en la intimidad anidan las bridas del comportamiento. Si una persona actúa siguiendo el dictamen de su coherencia interior, mantiene una fuerza y constancia más intensa que si actuara en función de los movedizos y tornadizos intereses de los requerimientos o instigaciones externos a su dignidad.

¿Qué entiende por aceptar la limitación de lo real?

--Prof. Freire: Una cosa muy sencilla, que nos suele alejar de la felicidad. La felicidad absoluta –completa y total- no existe por la limitación inherente al ser humano. Si anheláramos esa felicidad viviríamos con una sensación de desencanto habitual. Hay que convencerse que la única felicidad razonable, real, es la que permite disfrutar de la vida, con sus alegrías y bonanzas, en el espacio realista de los problemas, enfermedades, fracasos, dificultades, obstáculos… Todo lo demás pertenece al terreno de la fantasía.

Su última propuesta en este libro es una invitación a superar el desencanto en la vida de cada uno. Entonces, ¿la felicidad se construye día a día?

--Prof. Freire: El desencanto ha de entenderse en el sentido de la pregunta anterior: situarse en el espacio de la limitación de lo real. La vida puede ser un experimento fantástico, engatusante y engatusador, siempre que no perdamos de vista las coordenadas de lo real. Y para disfrutar de la vida hay que zambullirse de bruces en el único tiempo capaz de sentir la hondura de vivir: ahora, hoy.

¿A lo largo de la investigación o de la elaboración del trabajo ha encontrado algo inesperado o que le sorprendiera especialmente?

--Prof. Freire: Sí, y mucho. La inicialmente impensable cantidad de rosas frescas (bondad humana) que cuajaron y crecieron en aquel atroz estercolero.

*José Benigno Freire es doctor en Pedagogía (Universidad de Navarra), licenciado en Psicología (Universidad Complutense), en Filosofía y en Ciencias de la Educación (Universidad de Navarra). Profesor de Psicología de la Personalidad en el Departamento de Educación y en el Master de Matrimonio y Familia (Universidad de Navarra). Ha publicado en Eunsa: ¡Vivir a tope!; Lo humanístico en la logoterapia de Viktor Frankl; Un veneno que cura.Y en Ediciones Internacionales Universitarias la novela La dulzura de una desilusión.

El libro se puede encontrar en: http://www.amazon.es/Felicidad-inadvertida-Astrolabio-Benigno-Freire/dp/8431328770/ref=sr_1_3?ie=UTF8&qid=1349698927&sr=8-3&tag=zenit058-21

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