El capellán de los emigrantes españoles en Holanda recibe la Medalla de Isabel la Católica recordando que “otro mundo es posible”


 

El religioso carmelita Theo Beusink lleva 50 años entregado en cuerpo y alma a los emigrantes españoles en Holanda. Por este motivo, este carmelita holandés ha merecido la medalla de Isabel la Católica, en el grado de encomienda, condecoración que fue otorgada por el Rey Juan Carlos.

El pasado 21 de septiembre tenía lugar en la casa del embajador de España en Holanda el acto de imposición al P. Theo Beusink de este reconocimiento. Se celebró en La Haya junto a la condecoración de la Orden del mérito civil concedida al ciudadano español Fernando Abril García por su compromiso cívico social.

El embajador de origen asturiano, Francisco Javier Vallaure de Acha, tuvo la amabilidad de abrir las puertas de su hermosa casa en La Haya para otorgar, en una promoción extraordinaria, estas dos condecoraciones en palabras del embajador, a estos dos hombres renacentistas, ocupados y dedicados al ser humano, comprometidos socialmente, y en el caso del P. Theo también pastoralmente que reúnen sobradamente los méritos para llevar estas distinciones.

El consejero laboral José Joaquín Gomá Torres leyó los diplomas de concesión y el embajador España ante numerosos invitados entre los que se encontraban el Nuncio del Vaticano en Holanda y su canciller, el cónsul de Amsterdam, y el director del Secretariado de la Comisión Episcopal de Migraciones, el P. José Luis Pinilla, S.J. en nombre del Obispo presidente de la Comisión, monseñor Ciriaco Benavente, Obispo de Albacete, que ante la imposibilidad de asistir envió un mensaje agradecimiento y felicitación.

El diplomático Vallaure recalcó la importancia de los colores de la encomienda conferida, blanco y amarillo, los colores de la Santa Sede (elegidos a propósito como símbolo de Santa Teresa de Jesús, San Juan de la Cruz e Isabel la Católica) con los que Theo, sacerdote católico y religioso carmelita, siempre representará a España.

Acto seguido, el embajador pidió permiso para sacar la “chuleta” y no olvidarse de los detalles de la intensa y dedicada vida del Padre Theo. Explicó cómo fue un pionero en todo lo relativo a la vida de los migrantes españoles en Holanda, especialmente en su acción pastoral: ofició la primera misa en español, fundó el primer servicio social para habla hispana y organizó las primeras clases de holandés para hispanohablantes. “A pesar de estar jubilado sigue dedicado a los demás; es una persona querida y respetada, es una referencia, una institución en Ámsterdam y Holanda” señaló el diplomático.

No se olvidó de mencionar el extraordinario servicio de la Casa Migrante fundada por el P. Theo Beusink en 1961, A una primera oleada de trabajadores españoles contratados por Holanda le siguieron los refugiados políticos de América Latina y desde entonces se ha convertido en una casa abierta para personas de habla hispana provenientes de todas partes del mundo. Casa Migrante un refugio para aprender el idioma, una atención a sus practicas religiosas, un apoyo para solucionar problemas legales o, simplemente, para gozar de la compañía de hispanohablantes, atendiendo ahora al fenómeno de la re-emigración de muchas personas latinoamericanas que, debido a la crisis financiera en España y en otros países, vienen a Holanda buscando un futuro mejor. Tiene un número considerable de voluntarios. El mismo embajador la visitó y quedó impresionado de su labor (talleres de todo tipo, conversaciones en inglés, Yoga, español para niños , Cine y debate, Tertulia Biblica , servicios religiosos, etc)

A continuación el P. Theo tomó palabra y comenzó su discurso confesándonos que trataba de ordenar los pensamientos de sus 80 años de vida, 60 de carmelita y 50 años de ilusión con los emigrantes de España y de otras partes del mundo. “Moriré de “migrantista”, inventándome esta nueva palabra. Conscientemente pronuncio ese neologismo en castellano… dentista, ecologista, tercermundista… migrantista… pues creo que otro mundo es posible, que ya está naciendo y esto deseo proclamar. Se va a terminar el valle de lágrimas, ¡ya no somos sólo peregrinos sino migrantes!”, afirmó con contundencia. Y añadió: “Otro mundo es posible: la tierra será de todos si nos ocupamos en servir a las migraciones y nos hacemos migrantes o… migrantistas…

La percha en que cuelgo y ordeno mis pensamientos es una visión del profeta Elías en el monte Carmelo: la visión, no la de espada, sino la de “la nubecilla”: tempestad que echa las olas al aire, en el aire las nubes se hacen nubecilla, la nube-cilla se hace lluvia, la lluvia cae en la tierra para fertilizarla… Hay porvenir si admitimos cambio. El mundo está de camino hacia la Tierra Nueva y Cielo Nuevo. Hay ” eschaton”: dicen aún los teólogos a los 50 años del Concilio Vaticano II”.

También explicó al público su primer encuentro con migrantes españoles en Ámsterdam: todo sucedió en 1961, nada más regresar de su primera visita a España de la que está enamorado, cuando escuchó hablar español a tres jóvenes mientras caminaba por Ámsterdam Sur con su hábito de carmelita. La hazaña terminó en un sótano que los españoles habían podido alquilar, bebiendo y comiendo vino y chorizo español que la familia de estos habían enviado por correo ese mismo día, hablando de esa necesidad que los jóvenes sentían de tener una misa en español y tomando tres decisiones que cambiarían su vida: el fin de semana los tres españoles le presentarían a más paisanos, él comenzaría un servicio de interpretación por teléfono y para Nochebuena se celebraría la primera misa en español en Amsterdam.

El P. Theo aprovechó la oportunidad para celebrar la memoria mucha gente española conocida con quienes trató, políticos, españoles que le ayudaron en tiempos difíciles , literatos, religiosos… Es su palabras y emociones no dejó de traslucir su vena de admiración hacia la veta mística de San Juan de la Cruz y Santa Teresa, delante también de sus Superiores religiosos.

Para concluir el acto, agradeció la presencia del señor Nuncio en Holanda y su canciller, y mencionó a la Comisión Episcopal de Migraciones de España, “¿Qué sería de la pastoral de los hispanohablantes en Europa sin ella?, ¿existiría la organización que hay?, Se extendió en grandes elogios de la misma. Recordaba luego entre los presentes sus trimestrales encuentros con los Delegados de las Misiones Católicas de habla Hispana en Europa, que son un servicio ejemplar de la Iglesia y que se abren ahora a los emigrantes hispanos ya los nuevos españoles emigrantes ..Y como viaja a España con frecuencia para seguir estableciendo lazos fraternos con mucha gente que trabaja con los migrantes. A todos siempre nos transmite su amor hacia España Hizo mención también a la revista “Ventana Europea”, la gran revista que es el órgano de comunicación y de difusión entre los migrantes de habla Hispana en Europa y en España con una gran tirada y que recoge temas, reportajes, noticias de índole pastoral, social, cultural .En ella colabora de manera habitual así como también lo hace con su servicio en la Asociación Europeos (ASE) , asociación civil al servicio de las Misiones católicas de emigrantes de habla hispana en Europa , de la que es vocal d e la Junta directiva….

Para terminar mencionó a “compañeros que trabajan con él y a quienes considera como “pastores y colaboradores de la casa abierta Migrante, – que invita a conocerla bien en persona bien por internet- a través de la cual han conseguido que los migrantes ya no sean grupo-objeto sino compañeros-sujetos”.

“Vivo agradecido, terminó, haciendo con mi condecoración ese gesto –ya pasado de moda– del torero en la arena: dedico mi condecoración – y extendió su mano como si de un brindis se tratara – a todos ustedes. Gracias!”.

Con estas palabras concluyó Theo Beusink su discurso al recoger esta nueva condecoración que puede añadir a las muchas otras distinciones ya -recibidas, como el reconocimiento de caballero de la orden de Oranje Nassau, la medalla de honor a la migración o el título de ciudadano de honor de la ciudad le Ámsterdam.

A continuación se sirvió un vino español para las personas invitadas al acto. Se recordó y se conversó mucho sobre la Fundación Migrante que está basada en la hospitalidad, en la orientación a personas según las necesidades que éstas tengan, que por lo general son: trabajo, alojamiento, educación, temas legales y migratorios, y generando un espacio de opinión abierta y acción social. Y por supuesto cuidando de la acción pastoral que atiende el desarrollo espiritual del hispanohablante en la Iglesia de San Nicolás.

La Orden de Isabel la Católica es una condecoración española instituida por el rey Fernando VII el 14 le marzo de 1815 con el fin le premiar la lealtad a España y los méritos de ciudadanos españoles y extranjeros en bien de la Nación. Se trata de una de las condecoraciones más importantes del Estado español y su función es premiar aquellos comportamientos extraordinarios de carácter civil, realizados por personas españolas y extranjeras, que redunden en beneficio de la Nación o que contribuían, de modo relevante, a favorecer las relaciones de amistad y cooperación de la Nación Española con el resto de la Comunidad Internacional.