30.10.12

Pistas pastorales para bien morir en Jaén

A las 6:00 AM, por Tomás de la Torre Lendínez
Categorías : General

Hace unos meses, escribí en este Blog un post titulado: Las cenizas mortuorias y el respeto a los difuntos. Era el pasado 1 de abril. Quien desee releer puede hacer clic aquí.

Ahora, en los días previos a la Fiesta de Todos los Santos y la conmemoración de los Fieles Difuntos, acaba de publicarse en la diócesis de Jaén un librito que recoge buena parte de las sugerencias provenientes de Roma.

El título de esta obra es: “Orientaciones pastorales y legislación diocesana sobre exequias y columbarios”, que consta de dos partes, una pastoral y otra jurídica.

Tras su lectura he encontrado lo siguiente:

La publicación comienza con las orientaciones pastorales sobre la respuesta que los cristianos han de dar ante el hecho de la muerte. Tras constatar los cambios producidos en el contexto socio-cultual actual, y proclamar la victoria de Jesús sobre la muerte, el Obispado de Jaén se propone dar luz acerca del asunto de la muerte en la misión pastoral de la Iglesia de hoy.

Estas orientaciones pastorales concluyen con unas consideraciones acerca de la donación de órganos y sobre la incineración.

La segunda parte del documento lo constituye la normativa diocesana sobre las exequias y los columbarios. A modo de resumen podemos destacar estas ideas:

- El lugar ordinario de las exequias será la Iglesia parroquial del difunto, aunque puede elegirse otro templo, previo consentimiento del rector de dicho templo y la comunicación al párroco del difunto.

- Se pueden celebrar exequias en las capillas de tanatorios siempre que cumplan con la legislación general de la Iglesia para estos casos.

- La Misa Exequial podrá celebrarse los días que señalan las Normas Litúrgicas y en las condiciones que allí se especifican.

- En los casos de incineración, las exequias se celebrarán preferentemente antes de la cremación del difunto.

- Las cenizas merecen el mismo respeto que el cadáver puesto que son restos de la persona que espera la resurrección.

- Para la Iglesia Católica no es lícito guardar las cenizas en las casas, ni dispersarlas en lugares no bendecidos.

- En la diócesis de Jaén podrá promover la construcción de un columbario eclesiástico cualquier persona jurídica pública canónica conforme a la normativa diocesana para este particular.

Conclusión

Es posible que estas indicaciones pastorales recuperen el tiempo perdido, donde cada familia ha tomado decisiones, en algunos casos tan cursis como raras, con las cenizas de su familiar fallecido.

Es posible, también, que todos miremos a la hermana muerte, a imitación de San Francisco de Asís, como lo que es un gran misterio, que tomado con ojos de fe en la Muerte y Resurrección de Cristo, nos prepare al gran día en que dejemos este mundo en paz y caminemos hacia la Casa del Padre.

Tomás de la Torre Lendínez