Presidente del Consejo de la Juventud de España

Ricardo Ibarra: «No hay que culpabilizar a la juventud porque son igual que el resto de la sociedad»

 

El presidente del Consejo de la Juventud de España (CJE), Ricardo Ibarra, ha pedido, tras la muerte de cuatro chicas en la macrofiesta de Halloween en el Madrid Arena, que no se «demonice» a los jóvenes por su forma de divertirse y ha advertido la juventud «repite patrones tristemente generalizados en la sociedad» en cuanto al consumo de drogas y alcohol.

05/11/12 3:36 AM


(EP) En declaraciones a Europa Press, Ibarra ha dicho que las administraciones públicas tienen que «apostar» por políticas «no tanto persuasivas, sino educacionales», que deberían garantizar una forma de ocio «más sano», aunque estas iniciativas no tengan un efecto inmediato. «No hay que culpabilizar a la juventud porque son igual que el resto de la sociedad», ha apostillado.

Respecto al «trágico» suceso ocurrido en la madrugada del jueves en Madrid, Ibarra ha lamentado la muerte de las jóvenes y ha pedido que «de verdad» se investiguen los hechos para conocer lo que realmente sucedió y si se cumplió la normativa. En el caso de que no fuera así, el presidente del CJE solicita que se «depuren responsabilidades» y se garantice en el futuro el cumplimiento de la ley.

«Ahora son todo rumores y no hay nada claro, pero sí consideramos que un caso de esta envergadura debería investigarse y, en el caso de que no se cumpla la normativa, se impongan las sanciones oportunas», ha aseverado, para añadir que la ley actual es «suficientemente estrica» sobre la prohibición de entrada a menores de edad, el uso de material pirotécnico o el consumo de drogas. «No tiene ningún sentido hacer leyes más duras que luego no se vayan a cumplir», ha advertido.

A su juicio, cuantos más jóvenes hay en un evento, «más exigente tiene que ser la Administración» con la organización de este tipo de fiestas porque «los riesgos son aún mayores». Si no se puede garantizar este cumplimiento, Ibarra propone que se impida la celebración del evento para «no tener que lamentar más muertes».