1.12.12

Precisión necesaria al arzobispo de Granada

A las 7:53 AM, por Tomás de la Torre Lendínez
Categorías : General

Conozco bien los parámetros culturales del episcopado de don Javier Martínez, como arzobispo de Granada. Centros claves como el edificio de la Curia diocesana, frente a la catedral; o la antigua abadía del Sacromonte han sido convertidos en lugares de encuentro y oferta de la cultura oriental y la fe católica, buscando prestar una formación esencial a las personas que acuden a las citas variadas que se ofrecen al público.

Ayer, el mismo arzobispo presentó a los medios de comunicación, en una anunciada rueda de prensa, el nuevo edificio construido en el polígono de Almanjayar, al norte de la ciudad, donde se ubica el Centro Studium Granatense et Sacromontanum concebido como una “gran casa”, ya que desde el principio se ha querido sea un lugar en el que los alumnos se encuentren como en casa.

Ahora mismo alberga el Centro de Magisterio “La Inmaculada”. Con el paso del tiempo tendrá una parroquia dedicada al Beato Juan Pablo II. Está previsto que la consagración de la parroquia sea en el mes de febrero y en ella se instalará la escultura de Juan Pablo II, de 2,15 metros de altura hecha en bronce, obra del escultor Ramiro Mejías

¿Qué motivo ha llevado a monseñor Martínez a elegir al Beato Juan Pablo II como titular de esa iglesia parroquial?

Aquí es donde la información ofrecida en la Web del arzobispado comete un error que voy a tratar de aclarar.

La información publicada dice así:

“La parroquia estará dedicada a Juan Pablo II, que visitó la Diócesis de Granada en el año 1982 y presidió una Eucaristía muy cerca de donde se encuentra el Centro del Arzobispado.”

Aquí está el error garrafal. El que suscribe estas líneas estuvo aquel día de noviembre de 1982, bajo un sol otoñal, en el polígono de Almanjayar, esperando la llegada del Papa Juan Pablo II, quien apareció en el estrado preparado al efecto bastante tarde, debido a la rotura del papamóvil, lo que obligó a tomar un autobús de la empresa Alsina.

Con el Sumo Pontífice iban los obispos de Andalucía. Llegado hasta la tarima levantada no celebró la Eucaristía, sino que se tuvo una breve paraliturgia, donde habló improvisando, pues había perdido los papeles, el entonces arzobispo granadino monseñor don José Méndez.

El Papa dedicó su palabra a todos los educadores que estábamos allí. Glosó las figuras de Pedro Poveda, fundador de las Teresianas, el padre Manjón, fundador de las escuelas del Ave María, y alguno más.

Impartió la bendición papal y todo acabó ante miles de personas que nos encontramos reunidas allí.

De esta precisión que deseo que el actual arzobispo la tome con buen humor, me alegro que cuando han pasado treinta años se dedique una parroquia al Beato Juan Pablo II. Es una sabía decisión pastoral de monseñor Martínez.

Para saber más hagan clic aquí.

Tomás de la Torre Lendínez