29.12.12

¿Qué haría Cristo hoy?

A las 12:50 AM, por Eleuterio
Categorías : General, Defender la fe

Panecillos de meditación

Llama el Beato Manuel Lozano Garrido, Lolo, “panecillos de meditación” (En “Las golondrinas nunca saben la hora”) a los pequeños momentos que nos pueden servir para ahondar en determinada realidad. Un, a modo, de alimento espiritual del que podemos servirnos.

Panecillo de hoy:

La esperanza supone, para los hijos de Dios, saber que el Padre nunca nos abandona.

Y, ahora, el artículo de hoy.

Es bien cierto que la política ficción, la economía ficción e, incluso, la religión ficción, poco van a colaborar a la solución de aquello que nos pasa porque, en realidad, sólo nosotros mismos seremos capaces de dar solución a nuestras cuitas si somos capaces de hacerles frente.

Sin embargo, tampoco es menos cierto que es posible que nos sirva, este ejercicio de “qué sería si…”, para alumbrar algo, dar luz, en el camino que nos lleva al definitivo reino de Dios.

Por ejemplo, si preguntamos ¿Qué haría Cristo hoy día? alguno dirá, ha dicho, por ejemplo, que seguramente estaría en las redes sociales porque es allí donde se cuece mucho de lo que nos pasa.

Sin embargo, y para que más de uno sepa a qué atenerse, podemos decir, sin temor a equivocarnos, que Jesús, de vivir ahora mismo (físicamente quiero decir pues está entre nosotros en espíritu y su fuerza de nota a poco que queramos ser capaces de abandonarnos al Hijo de Dios) diría, con no poda razón, que muchas de las realidades que ahora se defienden no son de recibo y estaría en contra las mismas con toda su fuerza, con todo su corazón y con todo lo que el Hijo de Dios puede oponer a lo malo y negativo.

Por ejemplo, no estaría a favor del imposible matrimonio entre homosexuales porque conocía, a la perfección, lo que las antiguas Sagradas Escrituras decían al referirse a ciertas prácticas sexuales.

Por ejemplo, no estaría a favor del divorcio porque Él mismo dijo aquello tan conocido (y tan poco tenido en cuenta) de que “lo que ha unido Dios que no lo separe el hombre” y, mientras que el hombre lo que hace, precisamente, es hacer todo lo posible para que la separación entre hombre y mujer se lleve a la práctica de la forma más rápida posible, no sería de extrañar que se manifestara muy en contra de determinadas leyes y determinados reglamente.

Por ejemplo, no estaría a favor del aborto porque comprendía que la creación de Dios, a su imagen y semejanza, no puede ser eliminada aunque haya normas que permitan hacerlo sin el menor cargo de conciencia. Estaría enfrentado de forma radical al aborto y sería un militante provida de los muchos que hay en el mundo y que tanto sufren al ver que hay personas que no tienen el más mínimo reparo en matar al prójimo beneficiándose, además, económicamente, de tal tipo de prácticas.

Por ejemplo, no estaría a favor de que se menguara la importancia de la enseñanza de la doctrina que Él transmitió y defendió y por la que, precisamente, dio la vida, Su santa y digna vida.

Por ejemplo, estaría al lado del pobre y del necesitado y procuraría, para tales personas, una mejor vida y un mejor pasar.

Por ejemplo, estaría al lado de quien sufre enfermedad y le ayudaría a sobrenaturalizar el dolor para llevarlo, directamente, al corazón de Dios.

Por ejemplo, estaría al lado de los que son perseguidos por ser discípulos suyos. Los confortaría y les haría llegar, plenamente, el Amor de Su Padre.

En fin… Cristo haría lo que hizo en su día. Por desgracia, hay muchos que creen que actuaría de una forma más acorde con los burdos intereses de los tergiversadores de la Verdad.

Y seguro que, en tal caso, tendría que volver a coger el látigo como hizo en el Templo aquella ocasión en la que, harto ya de ver ciertas cosas, tuvo que recordar que la Casa de Dios lo consumía de respeto hacia ella.

Eleuterio Fernández Guzmán