18.03.13

Sugerencias para titular sobre el Papa Francisco

A las 8:04 AM, por Tomás de la Torre Lendínez
Categorías : General

Desde la elección del nuevo Papa Francisco he venido observando cómo se rotula su nombre en los titulares de prensa. Existe de todo como en botica que se precie.

Anoche compartí la cena con tres periodistas en ejercicio. Fuimos conscientes de cómo un mal titular puede inducir al éxito o fracaso de una noticia. O una aparente falta de respecto a una persona o institución determinada.

Por estas tierras andaluzas, donde contar chistes y chascarrillos es un deporte regional, están surgiendo algunos que han sido colgados como ahora ocurre con todo en la Red, donde el Papa está siendo objeto de mofa.

Estos pasos no me gustan en absoluto. Anoche llegamos a estas conclusiones sobre cómo titular los variados despachos de prensa que ha dado y nos dará el nuevo Papa:

Primera, creemos que nunca se debe titular, como es aceptado por todos, de este modo: Francisco I, hasta que hubiera otro Papa que tomara el mismo nombre.

Segunda, consideramos que titular: Francisco……..se presta a sacar las gracietas del titular, como si el nombre del Papa fuera el vecino de al lado, o el portero de la finca donde habita cualquiera.

Tercera, proponemos que los titulares lleven siempre el título que le distinguen como sucesor de Pedro, de este modo: El Papa Francisco…….. Nuestra sugerencia es que se coloque delante de Francisco el cargo: Papa, Santo Padre, Su Santidad…..suprimir tales cargos delante del nombre supone desacralizar excesivamente a la figura y la persona de un Papa que acaba de llegar al cargo de ser Vicario de Cristo en la tierra.

Cuarta, hemos notado que en las publicaciones de adjetivo confesional es donde más se está dando estos intentos de secularización de la persona y de la función del Papa actual. Alguien de los reunidos apuntó a que a lo mejor no se dan cuenta de la gravedad de la generalización de esa materialización de la misión del Santo Padre.

Quinta, tras el programa de vida profesional y moral que el Papa Francisco explicó a todos los periodistas del mundo con un aplauso cerrado el pasado sábado, se impone que todos los que escribimos sobre su persona, su pensamiento y sus acciones, lo hagamos con el correspondiente respeto que supone un servicio tan esencial dentro de la Iglesia Católica.

Conclusión

Nuestra reunión acabó con la siguiente sugerencia: Nunca escribir un titular que pueda mal interpretar la figura, la persona, el cargo, el servicio, la jerarquía, del Papa Francisco, sobre todo en estos primeros días para sentar unos cimientos de práctica periodística, tan necesaria en los momentos actuales de secularización de todo lo sagrado bajándolo hasta el último escalón que raya en los profano.

Tomás de la Torre Lendínez