3.05.13

Eppur si muove - ¿Revoluciones eclesiales?

A las 12:32 AM, por Eleuterio
Categorías : General, Eppur si muove

Panecillos de meditación

Llama el Beato Manuel Lozano Garrido, Lolo, “panecillos de meditación” (En “Las golondrinas nunca saben la hora”) a los pequeños momentos que nos pueden servir para ahondar en determinada realidad. Un, a modo, de alimento espiritual del que podemos servirnos.

Panecillo de hoy:

El Creador confía en su creación. Lo malo es cuando su creación no confía en Él.

Y, ahora, el artículo de hoy.

Sabemos que por “revolución” se entiende un cambio brusco de determinada realidad. Así, por ejemplo, cuando se produjo la llamada Revolución Rusa ya sabemos qué tipo de mal advino para la humanidad de entonces y, por desgracia, de ahora misma.

Por eso cuando alguien reclama un cambio revolucionario quiere decir que la realidad en la vive no le gusta y que preferiría, con mayor o menor violencia, que, como se dice popularmente, “cambiase la tortilla” y lo que estaba arriba, pase a estar abajo y al revés…

En fin, a lo largo de la historia del ser humano se han producido muchas revoluciones. Unas habrán sido buenas para la criatura de Dios; otras no tan buenas sino pésimas y contrarias a la Verdad. Y es que es muy propio del ser humano equivocarse, meter la extremidad hasta el fondo y no querer sacarla de ahí por no enmendalla pues no vaya a decirse que nos desdecimos de lo que hemos dicho. ¡Faltaría más!

Pues bien, no vayan a creer ustedes que eso no pasa en materia eclesial. ¡Qué va! Aquí abundan aquellos que quieren una auténtica revolución dentro de la Iglesia católica y así lo dicen, venga o no a cuento, en toda ocasión que se les deja o que, sin dejarles, hacen lo que mejor les parece.

Esto lo decimos porque, al parecer, hay por ahí una encuesta que dice que más de la mitad de los católicos españoles quieren, dicen, eso dicen, cambios “revolucionarios” en el seno de la Iglesia católica.

Como diría aquel ¡Menos lobos, Caperucita!, pues más de uno se ha creído que porque el Papa Francisco lavó los pies a alguna mujer en Jueves Santo o porque habla de los pobres o cosas por el estilo, la tierra está bien preparada para sembrar cizaña en el campo donde trabaja y labra la Iglesia católica.

Y es que la noticia decía esto:

“La lucha contra la pederastia, la opulencia de la Iglesia, su anacronismo y el trato fiscal preferente que recibe por parte del Estado español, serían los puntos de partida de dicha ‘revolución’, siendo el papa Francisco, en su declarada opción por una “Iglesia de los pobres”, según explica Toharia, la oportunidad, para los católicos españoles, de que ese profundo cambio se pueda operar.

El estudio revela que los católicos españoles piden que su Iglesia se sostenga exclusivamente con las aportaciones voluntarias, que la jerarquía eclesiástica practique una absoluta intransigencia en los casos de pederastia, que el papa viva permanentemente en una residencia modesta (cosa que ha comenzado a hacer), que la Iglesia deje de tener banco propio y que se ponga fin a la existencia del Estado Vaticano.

Asimismo, según Toharia, el 52% de los católicos practicantes considera que el concepto de familia no se refiere exclusivamente a la constituida por un hombre y una mujer y el 50% de ellos defiende que una pareja del mismo sexo está tan capacitada para criar a un niño como lo pueda estar una pareja heterosexual.

Por otra parte, de acuerdo con el estudio, el 84% de los españoles (católicos o no), desean un nuevo Concordato entre la Santa Sede y el Estado español y el 73% de ellos piden que se ponga fin al trato preferente que la Iglesia Católica española recibe del Estado en general y, específicamente, en materia fiscal. De otro lado, el 88% de los católicos (y el 73% de los que se definen como practicantes) reclaman que se acabe con la actual discriminación de la mujer en el gobierno de la Iglesia y con su “intransigencia mojigata” hacia el divorcio y los anticonceptivos.”

¿Qué les parece?

Resulta extremadamente curioso que los resultados de la encuesta tengan mucho que ver con las posiciones eclesiales de los llamados “progres” y que, seguro que no por casualidad, las preguntas deben haber estado preparadas para que de la citada encuesta más de la ¡mitad! de católicos españoles quieren que la Iglesia católica se sostenga con las aportaciones voluntarias cuando es eso, exactamente eso, lo que pasa con la Declaración de la Renta pues el dinero que el Estado entrega a la Esposa de Cristo no es del Estado sino de los contribuyentes que “a título particular” quieren que el Estado entrega el 0’7% de su renta (que, además, no le descuentan ni nada de nada) a la Iglesia católica.

¿Opulencia de la Iglesia? ¡Amos, hombre!, si no hay más que ver los bienes de los que gozan los sacerdotes o los propios obispos para darse cuenta de que viven, en efecto, en la más inexistente opulencia.

¿Qué se ponga fin a la existencia del Estado Vaticano? Claro, hombre, porque estamos más que seguros que más de la ¡mitad! de los católicos quieren que el Papa vague por el mundo sin un lugar físico desde donde pastorear a la Iglesia católica. ¡Qué raro que haya tantos españoles católicos que quieran tal situación de inseguridad, incluso jurídica, para el Vicario de Cristo!

Y, además, para acabar de aderezar este pestilente guiso, que si la mujer en la Iglesia católica, que si el divorcio y que si los anticonceptivos…

Para mí que le deben haber preguntado a los mismos de siempre. Así ya sabían qué iba a salir…

Eleuterio Fernández Guzmán