IGLESIA EN ESPAÑA

Los Obispos de la provincia eclesiástica de Oviedo lanzan un mensaje de esperanza y de agradecimiento a los sacerdotes por su sacrificio


 

En la mañana del martes 14 de mayo se celebraba la reunión de la provincia eclesiástica de Oviedo en el Obispado de Astorga en la que ha participado por primera vez el Obispo auxiliar de la Iglesia asturiana, monseñor Juan Antonio Menéndez Fernández. El Arzobispo de Oviedo, monseñor Jesús Sanz; los Obispos de Santander y León, monseñores Vicente Jiménez y Julián López; junto con el de Astorga, monseñor Camilo Lorenzo, han reflexionado sobre cuestiones muy importantes para las diócesis.

En la primera parte del encuentro han dado la bienvenida al Obispo auxiliar de Oviedo, monseñor Menéndez Fernández, quien ha ofrecido al resto de Obispos un testimonio sencillo y hermoso y ellos le han correspondido con fraterna acogida. Se le ha asignado a él el seguimiento del área del Apostolado Seglar en la provincia eclesiástica, al igual que el resto de Obispos se encargan de un sector pastoral dentro de la misma. “Parece ser ya una tradición que el auxiliar de Oviedo se encargue del mundo del laicado” ha afirmado monseñor Jesús Sanz.

Por otra parte, se ha tratado sobre el próximo encuentro de Obispos, Vicarios y Arciprestes que tendrá lugar en noviembre en Monte Corbán (Santander) cuya temática será el sacerdocio. El Arzobispo de Oviedo ha destacado que: “Nos preocupa que quienes hoy estamos ejerciendo el ministerio sacerdotal, tengamos una serie de desafíos que nos retan profundamente. Pertenecer a una generación, la del mundo actual, que adolece todavía de un pensamiento débil y esta carencia nos plantea poder ser testigos de algo que es sólido y que sin embargo es actual, que tiene que ver con las preguntas de nuestra generación. Sin participar en esa debilidad de este pensamiento vulnerable de nuestro tiempo. Al mismo tiempo hay una carencia moral”.

Monseñor Jesús Sanz hizo hincapié en una idea del poeta ingles Thomas Stearn Eliot que dice que cuando hemos anulado al verdadero Dios a las personas siempre les quedan tres ídolos: el poder, el tener y el placer. Ante la herida moral que esto implica los Obispos quieren evitar el trepismo de quienes caen en el poder, el consumismo de quienes caen en el tener y la frivolidad de quienes caen en un placer que no tiene alma.

Los sacerdotes han sido los protagonistas de uno de los aspectos centrales del encuentro a los que, los Obispos de la provincia eclesiástica, lanzan un mensaje de esperanza y de agradecimiento por su sacrificio.

En este aspecto el arzobispo de Oviedo, que ha ejercido como portavoz, ha reseñado que “El ninguneo que a veces se observa por parte de la sociedad, donde hemos pasado de la consideración llena de prestigio y veneración hacia el sacerdote, a una nueva etapa en la que el sacerdocio no cuenta, y casi la Iglesia en general y el cura en particular es alguien a excluir. Hay sacerdotes que ante toda esta hecatombe de heridas se sienten perplejos y no dejan el sacerdocio, pero quizás tampoco arriman el hombro como debieran”.

El tema más a fondo que se ha tratado en este encuentro han sido las misiones. Los Obispos han compartido las realidades de las diferentes diócesis en relación a las misiones diocesanas. De la misma manera, han barajado la hipótesis de fortalecer y favorecer una misión como provincia eclesiástica. Monseñor Jesús Sanz ha ofrecido la posibilidad, al resto de diócesis de la provincia que no tengan misión, de colaborar con la misión diocesana de Oviedo en Benín (África) y así fortalecer ésta como provincia eclesiástica.

Para finalizar la jornada, han dedicado un momento de oración y compartir fraterno ante la situación de crisis económica, donde las personas más desfavorecidas son las principales víctimas de una crisis que es económica, pero que también es moral. Una crisis de significado y de sentido: personas que pierden la casa, el trabajo, la esperanza y que sufren la soledad.