SANTA SEDE

El Papa encomienda toda vida humana, especialmente la más frágil, indefensa y amenazada a la protección materna de María


 

Ayer domingo, día 16 de junio, una vez concluida la Santa Misa el Obispo de Roma recordó, antes de rezar a la antífona mariana del ángelus, al nuevo beato Odoardo Focherini, esposo y padre de familia, beatificado ayer en la localidad italiana de Carpi, quien salvó a numerosos judíos de la persecución nazi y murió en un campo de concentración.

El Papa también saludó a los participantes en el encuentro de motociclismo de Harley-Davidson así como al del “Motoclub” de la Policía del Estado, e invitó a encomendar toda vida humana a la protección de la Madre de Dios.

Alocución del Papa Francisco antes de rezar el ángelus dominical

Queridos hermanos y hermanas:

Al término de esta Eucaristía dedicada al Evangelio de la Vida, me alegra recordar que ayer, en Carpi, fue proclamado Beato Odoardo Focherini, esposo y padre de siete hijos, periodista. Capturado y encarcelado por odio contra su fe católica, murió en el campo de concentración de Hersbruck en 1944, a la edad de 37 años. Salvó a numerosos judíos de la persecución nazi. ¡Junto a la Iglesia que está en Carpi, damos gracias a Dios por este testigo del Evangelio de la Vida!

Agradezco de corazón a todos ustedes que han venido de Roma y de tantas partes de Italia y del mundo, en particular a las familias y a cuantos trabajan más directamente por la promoción y la tutela de la vida.

Saludo cordialmente a los 150 miembros de la Asociación “Grávida – Argentina”, reunidos en la ciudad de Pilar. ¡Muchas gracias por lo que hacen! ¡Ánimo y vayan adelante!
En fine, saludo a los numerosos participantes en el encuentro de motociclismo de Harley-Davidson y también al del Motoclub de la Policía del Estado.

Nos dirigimos ahora a la Virgen, encomendado toda vida humana, especialmente la más frágil, indefensa y amenazada, a su protección materna.

(María Fernanda Bernasconi – RV).