Consecuencias de enviar armas a la llamada oposición siria

Denuncian la destrucción de unas 20 iglesias en Siria

 

Unas 20 iglesias han sido destruidas en Siria por parte de los grupos opositores armados que luchan para derrocar al gobierno del presidente Bashar al-Assad, destacan hoy medios de prensa nacionales. Lo anterior fue revelado la víspera por Gregorio III Laham, patriarca de Antioquía y todo Oriente para los católicos melquitas, durante un discurso en Beirut sobre la crisis siria y la ayuda humanitaria.

03/08/13 5:29 PM


(Ecclesia/InfoCatólica) Durante su disertación, el líder religioso advirtió sobre las consecuencias de enviar pertrechos bélicos a la llamada oposición armada siria, de acuerdo con la decisión de varios países, entre ellos Estados Unidos, subrayó la agencia de noticias SANA.

Enfrentaremos más problemas debido a la insistencia de algunos países a enviar armas, como si el mundo solo entendiera el lenguaje de las armas, la guerra, la destrucción y la violencia, criticó Gregorio III Laham.

Al mismo tiempo cuestionó: ¿no son suficientes las guerras del pasado para demostrar a los Estados que las armas no solucionan los problemas?

El patriarca exigió frenar el flujo de armas y trabajar con seriedad en la búsqueda de una solución pacífica a la crisis en esta nación mesoriental sobre la base del diálogo y el respeto a las decisiones de los ciudadanos sirios.

Al mismo tiempo, lamentó que muchos medios de comunicación todavía siguen sin reflejar la magnitud de la trágica situación de los civiles.

Aludió al secuestro de religiosos por los cuales se piden altos rescates, la destrucción de una veintena de iglesias, además del desplazamiento de más de cuatro millones de personas por las acciones hostiles de los irregulares.

En varias ocasiones las autoridades han denunciado a la ONU y a organizaciones internacionales relacionadas con el patrimonio la destrucción de lugares sagrados y de culto por parte de los calificados como rebeldes y luchadores por la libertad.

Integrantes del Frente al-Nusra, afiliado a la red terrorista Al Qaeda, incendiaron el 19 de junio la iglesia al-Waha de la comunidad siríaco-cristiana en la ciudad de Deir Ezzor, a unos 460 kilómetros al noreste de Damasco.

Los recintos de la religión musulmana tampoco han escapado a los actos vandálicos de los mercenarios y radicales islámicos que pretenden imponer aquí un califato.

En abril, los irregulares volaron el emblemático minarete de la Gran Mezquita de los Omeyas de Alepo y de Omari, una de las más antiguas en el mundo islámico, ubicada en la sureña ciudad de Deraa.

Bandas mercenarias profanaron el Santuario del Sepulcro de la Señora Sakina, en la localidad de Dareya, próxima a esta capital, luego de convertirlo en estado mayor desde donde lanzaban ataques.

Recientemente, grupos opositores armados provocaron grandes daños a la mezquita de Khaled Bin al-Walid, en la central ciudad de Homs, uno de los sitios importantes para los musulmanes por encontrarse allí la tumba de Bin al-Walid, uno de los compañeros del profeta Mahoma.