ZENIT

El mundo visto desde Roma

Servicio diario - 22 de agosto de 2013

La frase del día jueves 22

"Nutre la mente solamente aquello que la alegra"

San Agustín de Ipona (354 - 430)

 


El papa Francisco

Bergoglio: 'Voy a rezarle a Dios que si alguien tiene que morir ese sea yo'
Al cura antidroga de la Villa 21: ustedes tienen que seguir el trabajo. Entrevista con el padre José María 'Pepe' Di Paola, con temas inéditos

¿Hola, quien habla? Soy Francisco, podemos tutearnos'
El papa llama por teléfono a un estudiante universitario italiano que le escribió una carta

Mirada al mundo

El cardenal Castrillón homenajeado por el Congreso de Colombia
Y le respondió a las FARC: 'Ustedes no son los buenos de la partida, ni le van a decir a la Iglesia lo que tiene que hacer'

Una intervención internacional en Siria: el Vaticano frena
Mons Tomasi pide que los observadores de la ONU confirmen el uso de armas químicas. Recuerda resultados contraproducentes en las intervenciones en Irak y Afganistan

Egipto: mantener viva la esperanza de una primavera de libertad, especialmente religiosa,
El cardenal Sandri lo considera posible gracias a la responsabilidad y contribución de sus habitantes

Internet entra en el currículum de una de las facultades de teología más importantes de la Iglesia católica

Así en la Rusia soviética la luz resplandecía en las tinieblas
Vladimir Vorob'ev, rector de la universidad de Tichon recordó las persecuciones anticristianas y el heroísmo del clero ortodoxo

Catequesis para la Familia

Somos cristianos, es decir misioneros
Catequesis para toda la familia

SANTOS Y BEATOS: EPOPEYAS DE AMOR. EJEMPLO DEL DÍA

San Felipe Benizi
«Siervo de María, en cuya Orden ingresó a instancias de Ella. Fue un extraordinario apóstol de la concordia, restaurador de la paz. Cristo crucificado fue el libro de su vida»


El papa Francisco


Bergoglio: 'Voy a rezarle a Dios que si alguien tiene que morir ese sea yo'
Al cura antidroga de la Villa 21: ustedes tienen que seguir el trabajo. Entrevista con el padre José María 'Pepe' Di Paola, con temas inéditos

Por H. Sergio Mora

RIMINI, 22 de agosto de 2013 (Zenit.org) - El padre José María 'Pepe' Di Paola, párroco de la Villa 21 en Buenos Aires, en el marco del Meeting de Rimini para la Amistad entre los Pueblos dialogó con ZENIT. Sobre el papa Francisco cuando era arzobispo de Buenos Aires y esa amistad que creció, del deseo de Bergoglio de que se trabaje en las periferias, participando en primera línea, y también cuando al párroco 'Pepe' le amenazaron los narcos. Además sobre su estilo que no imponía sino que incentivaba los buenos proyecto. Habló de los barrios marginales en donde no existe la fiesta cívica, en donde la festividad del pueblo es la religiosa. Celebraron, dijo, la elección de Bergoglio con la alegría de un mundial de fútbol. Fueron diversos temas, algunos inéditos, y que presentamos aquí a nuestros lectores.

¿Cómo nació su amistad con el papa Francisco?

Padre Pepe: Yo soy diocesano, Bergoglio es jesuita, llegó en los años noventa y algo. Me conoció porque yo trabajaba con los niños y los jóvenes, también buscando esta opción por los pobres. El me fue acercando a la villa, a la ciudad oculta, y después me nombró párroco en la Villa 21. Y pude llevar mi sacerdocio con mucha plenitud porque allí convergían el trabajo de los jóvenes con los pobres. No es que te decía vayan que les apoyo, porque él se implicaba con el trabajo en la villa. Él venía, caía inesperadamente para tomar mate. Entre el 97 y el 2001, la única persona importante que visitaba las villas era Bergoglio. Hasta ese momento había gente que se dedicaba a la política y mandaba representantes, pero el único importante era él. Después del 2001 inició a vivirse otra situación con más interés del mundo social y político.

¿Cómo seguía Bergoglio el trabajo de ustedes?

--Padre Pepe: Escuchaba nuestras propuestas. 'Si lo ven empiecen' decía, como cuando fundamos el centro de recuperación de adictos. Cuando veía que nos jugábamos por alguna cosa que valía la pena y que tenía que ver con nuestras convicciones, inmediatamente nos apoyaba. Y nos dejaba. Confió mucho en nosotros.

La droga en las villas: se diría que los narcos la venden a los ricos

--Padre Pepe: El narcotráfico en América Latina tiene diseñado planes para gente de clase alta, media y baja, para los pobres ofrecen el estiramiento de la cocaína, que la llaman 'el paco'.

Ud. ha indicado hoy que que los resultados que obtuvieron deberían hacer reflexionar a quienes consideran que la religión es el opio de los pueblos

--Padre Pepe: Sí, por ejemplo la lucha por las escuelas, la superación de la propia vida de las personas, muchas que vinieron sin nada y que de pronto aprendieron un oficio, se pusieron a trabajar. Y todo es en base a la espiritualidad, no en base a un Estado que le dijo 'tenés que hacer esto'.

¿Por qué los habitantes se quedan en la villa?

--Padre Pepe: A veces se quedan allí porque es el barrio que les vio nacer, le tienen afecto aunque querrían que fuera de otra forma. La superación individual y grupal se da en la vida comunitaria de la villa cuando tiene como motor la fe, ni siquiera el factor económico es suficiente. Más aún, todo lo que son planes pueden funcionar un tiempo pero después... Lo que les hace perseverar es cuando hay una Iglesia que les da realmente un contenido, un ámbito de encuentro para esta gente que viene de otros países o provincias. Y porque encuentran una Iglesia que los reúne como familia y les da la posibilidad que ellos hagan su propia historia.

¿Cómo están las cosas ahora?

--Padre Pepe: Se salió de la emergencia hay programas que son buenos, pero en cuanto superación estamos muy lejos, no soy economista y no se si se puede hacer. Entretanto creo que las realidades argentinas no podemos medirlas sin entender lo que pasa en el Cono Sur, porque si muchos van a Argentina es porque tiene una salud pública, instrucción. Etc.

¿Hay algún hecho particular que le haya quedado impreso junto al obispo Bergoglio?

--Padre Pepe: Cuando yo le comenté: 'monseñor me amenazaron de muerte', estábamos así conversando como nosotros ahora. Él estaba muy atento, se puso la mano en la cabeza y dijo: 'lo único que le voy a pedir a Dios es que si tiene que morir alguien, que ese sea yo y no ustedes. Porque ustedes tienen que seguir en las villas haciendo lo que hacen'. Y eso me lo dijo a mi, no delante de la gente para quedar bien. Realmente son cosas que uno no se puede olvidar nunca.

Y entonces que pasó?

--Padre Pepe: Me quedé un año y medio más, me nombró vicario de las villas, y después vi que las amenazas ponían el peligro la vida de quienes me acompañaban, de mis colaboradores. Ahí le dije, monseñor, tengo que irme porque temo que pase algo, no conmigo visto que todos ya me conocen, pero, ¿quién defiende a un niño de las villas ante estos tipos que no tienen ningún tipo de escrúpulos?

¿El problema se arregló?

Es difícil decirlo pero al menos se descomprimió. Y ahora volví a trabajar en este carisma.

En el video durante su conferencia en el Meeting se veía que en las villas se realizaban fiestas religiosas con una fuerte devoción popular típica del mundo andino.

--Padre Pepe: Las villas de Capital Federal sobre todo tienen una gran componente de migración de los países limítrofes, sean paraguayos, bolivianos y peruanos. En cambio en la villa de San Martín, en donde estoy ahora, hay más componentes del norte argentino.

¿Cómo celebran sus fiestas la gente de las villas?

--Padre Pepe: En estas villas de Capital no existe la fiesta cívica, la fiesta del pueblo es la fiesta religiosa. El 8 de diciembre por ejemplo todo se para para celebrar. Es una caminata que dura todo el día en todo el barrio y la gente sale para festejar. Al menos en las villas de la Capital. Ahora estoy empezando a conocer las villas de San Martín pero allí me parece que la realidad es diversa.

¿Y Begoglio como se movía en la villa?

--Padre Pepe: El papa en la villa se movía con libertad absoluta, si uno le decía: 'le vamos a buscar al colectivo'  al máximo le dabamos el consejo porque si no se enojaba. Recuerdo que una vez le esperaba en un sector del barrio que se llama Zavaleta, estábamos armando un escenario improvisado y me llamó la atención que Bergoglio aún no hubiera llegado. Cuando terminamos lo veo salir de un pasillo donde vivía un grupo bastante complicado. Le pregunté y me dijo: 'llegué hace un rato, los vi trabajando y como ellos me pidieron que bendijera las casas, fui'. Y esa gente solamente se dio cuenta que era el obispo cuando Bergoglio se puso la mitra. Ellos pensaban que era un cura mayor que había venido a acompañar la misa. Todas estas cosas durante años, hicieron que cuando lo eligieron papa la gente dijera, 'este es el papa villero'.

Cuando fui a la plaza de Mayo en la vigilia de la misa de inicio del pontificado, mucha gente había llevado la foto del momento en el que Bergoglio les confirmaba, les bautizaba etc. Era una alegría, se festejó como si fuera el mundial de fútbol. La gente salía a festejar, ponía música, un festejo muy grande en la Villa 21, porque lo sentían como alguien del lugar.

Desde el punto de vista espiritual cómo les trataba?

--Padre Pepe: Tenía un gran respeto por nosotros, solamente nos preguntaba. Yo hablaba mucho con él porque era coordinador del grupo, me tocó estar muchas veces a su lado hablando, consultándolo, manifestando inquietudes, él sugería.

¿Les organizaba retiros, por ejemplo?

--Padre Pepe: No, él esperaba que nosotros lo hiciéramos. De hecho hicimos retiros, le invitamos a alguna reunión. Eramos un grupo de gente grande. No era un tipo que viniera a imponerte nada, esperaba que la iniciativa viniera de nosotros.

Ver también: La teología de la liberación entra en Meeting de Rimini

Video sobre el tema

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¿Hola, quien habla? Soy Francisco, podemos tutearnos'
El papa llama por teléfono a un estudiante universitario italiano que le escribió una carta

Por Redacción

ROMA, 22 de agosto de 2013 (Zenit.org) - Un joven de 19 años que entregó una carta para el papa Francisco durante una visita a Castel Gandolfo, fue contactado telefónicamente por el santo padre. Francisco conversó ocho minutos con el muchacho y definió ese día como el más lindo de su vida.

Stefano Cabizza, estudiante de ingeniería de 19 años, apasionado de fútbol y residente en la ciudad veneta de Padua, se quedó casi mudo cuando el papa le llamó por teléfono. Lo reporta el diario Il Gazzettino, del noreste de Italia, a quien el joven indicó que “nos hemos reído y bromeado por unos ocho minutos. Me llamó ayer hacia las 17 horas, y me había buscado antes pero no me había encontrado.

 “Me dijo que lo podía tutearlo precisando: '¿Crees que los apóstoles lo llamaran de Ud. a Jesús? ¿O lo llamarían excelencia? Eran todos amigos como lo somos tú y yo, y a mis amigos les llamo del tú”. 

"Y visto mi que nombre es Stefano que le rezara a san Esteban y que rezara también por él. Me dio su bendición y sentí crecer una gran fuerza. Claramente fue el día más lindo de mi vida”.

“He querido hablar de esta experiencia fantástica solamente para dar a conocer este gesto de gran humildad y cercanía del papa Francisco hacia hosotros los jóvenes”, explicó Stefano con gran emoción.

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Mirada al mundo


El cardenal Castrillón homenajeado por el Congreso de Colombia
Y le respondió a las FARC: 'Ustedes no son los buenos de la partida, ni le van a decir a la Iglesia lo que tiene que hacer'

Por Redacción

ROMA, 22 de agosto de 2013 (Zenit.org) - El el cardenal Darío Castrillón Hoyos, recibió este martes del Congreso de la República de Colombia, la orden del Congreso en el grado de Gran Oficial, en reconocimiento a la excelsa labor pastoral y social realizada.


Durante la ceremonia de condecoración, el senador Carlos Barriga Peñaranda, dijo: “Reciba usted este reconocimiento a su ardua labor, a su trabajo espiritual y a ese apoyo permanente que ha dado para conseguir en un futuro no muy lejano la paz para todos los colombianos".

El cardenal Castrillón Hoyos, al agradecer el galardón indicó que la iglesia católica cree en el valor de la democracia como una expresión de la persona humana, en su dignidad. Exhortó a los senadores a "convertir en formulas las soluciones". Y concluyó diciendo "trabajemos por la paz, siendo custodios del hermano, no olvidemos que el dolor no es sólo de las víctimas".

El cardenal en su visita a Colombia, respondió también a las declaraciones que realizaron en La Habana, miembros del grupo narcoguerrillero Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, que acusaron a la Iglesia: "No ha contribuido con la reconciliación del país".

El cardenal, según una noticia publicada por un cotidiano colombiano respondió: “Queridos amiguitos de las Farc nos hemos encontrado muchas veces, no nos hemos encontrado en un club, nos hemos encontrado a caballo, he cabalgado en campamentos”.

De hecho un par de años atrás, en una conferencia realizada en residencia del embajador de Colombia ante la Santa Sede, el entonces embajador César Mauricio Velásquez, el purpurado recordó todo un trabajo de mediación realizado, yendo personalmente a hablar con líderes de la guerrilla en zonas absolutamente inhóspitas y peligrosas. Además como arzobispo de Bucaramanga, dijo que había dado orden a los sacerdotes que atendieran a todos los fieles, incluso a aquellos que estaban relacionados con la guerrilla.

Más adelante el prelado en las declaraciones reportadas indicó: “Amiguitos de las Farc ustedes no son los buenos de la partida, no se conviertan ahora en los que le van a decir a la Iglesia lo que tiene que hacer, hagan ustedes lo que tienen que hacer, la Iglesia nos llama a la convivencia, a la fraternidad”.

El cardenal Castrillón dirigiéndose directamente al jefe negociador de las Farc, Iván Márquez, le exigió que no digan mentiras sobre el papel que siempre ha realizlado la Iglesia Católica.

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Una intervención internacional en Siria: el Vaticano frena
Mons Tomasi pide que los observadores de la ONU confirmen el uso de armas quí­micas. Recuerda resultados contraproducentes en las intervenciones en Irak y Afganistan

Por Redacción

ROMA, 22 de agosto de 2013 (Zenit.org) - Una intervención internacional se perfila más probable después de las fotos horribles que el miércoles han dado la vuelta al mundo, que hacen suponer el uso de armas químicas contra la población civil, matando indistintamente hombres, mujeres y niños.

Ante esa posibilidad, el observador permanente de la Santa Sede ante las Naciones Unidas, con sede en Ginebra, Mons. Silvano Tomasi, invitó a la prudencia. Lo hizo hoy en declaraciones a la Radio Vaticano.

"No hay que acelerar un juicio sin tener las pruebas suficientes. La comunidad internacional, gracias a los observadores de las Naciones Unidas que ya están presentes en Siria, deberían hacer luz sobre esta nueva tragedia".

"No se puede -según entiendo- partir de un juicio previo, diciendo que éstos o aquellos son los responsables. Tenemos que aclarar los hechos, también porque desde el punto de vista de los intereses inmediatos, sabemos que al gobierno Damasco no le convienen estos tipos de tragedias de las que será acusado directamente".

E indicó: "¿Como en las investigaciones sobre homicidios hay que preguntarse: quien gana con este tipo de crimen inhumano?" 

Sobre la posibilidad de una intervención armada en caso de que el ataque químico fuera confirmado, Mons. Tomasi fue todavía más rotundo: "La experiencia de intervenciones armadas, similares en Oriente Medio, Irak, Afganistán, han demostrado que no han aportado ningún resultado constructivo. Queda válido el principio: con la guerra se pierde todo".

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Egipto: mantener viva la esperanza de una primavera de libertad, especialmente religiosa,
El cardenal Sandri lo considera posible gracias a la responsabilidad y contribución de sus habitantes

Por Redacción

CIUDAD DEL VATICANO, 22 de agosto de 2013 (Zenit.org) - El cardenal Leonardo Sandri, prefecto del dicasterio de las Iglesias Orientales, declaró al diario vaticano L'Osservatore Romano que “sigue con viva preocupación la terrible situación que está pasando Egipto, y compartiendo la oración del santo padre por las víctimas”.

El cardenal argentino “en unión con el papa” invita a Egipto a la vía y consolidación de “aquel diálogo que lleve a la reconciliación y al restablecimiento de la paz civil, a retomar la vida social, a reconstruir las áreas tan golpeadas por los eventos”.

Expresó además su “cercanía fraterna” al patriarca copto ortodoxo Tawadros II y a su comunidad y “un particular pensamiento” a los coptos católicos guiados por el patrairca Ibrahim Sidrak, así como a los obispos, sacerdotes y fieles.

“El Señor les sostenga en esta prueba tan dura para toda la nación, confortando a quienes sufren en el cuerpo y en el espíritu, especialmente a los inocentes, y acoja en su paz las numerosas víctimas. Sus lágrimas son lágrimas de todas las Iglesias orientales difundidas en el mundo”.

El cardenal invita además a mantener viva la esperanza de que “Egipto pueda tener una profunda primavera de humanidad y libertad, especialmente religiosa, viviendo en la justicia y en la solidaridad, gracias a la responsable contribución de sus habitantes”.

Pide también que “sea protegida la dignidad de los individuos y comunidades” que define como “un admirable entrelazarse de religión, cultura e historia” así como la “mutua comprensión entre cristianos y musulmanes”.

Solicita que además a cada uno “se le garantice serenidad, educación, salud, habitación y lo necesario para una vida digna de tal nombre”.

Y retomando la exhortación del papa Francisco, pone “a Egipto y a todos sus habitantes” bajo la protección “de la Sagrada Familia, que vivió como exiliada en esa tierra, considerada durante los siglos justamente bendita por la hospitalidad que le brindó al Redentor”.  

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Internet entra en el currículum de una de las facultades de teología más importantes de la Iglesia católica

Por Jorge Enrique Mújica

ROMA, 22 de agosto de 2013 (Zenit.org) - El programa de estudios de la Pontificia Universidad Gregoriana (la universidad eclesiástica de los jesuitas en Roma) presenta una novedad que no ha pasado desapercibida para el curso 2013-2014: en la página 55, como parte de los cursos propios para la licenciatura en teología fundamental aparece uno dedicado a la «Cyberteología: pensar el cristianismo al tiempo de la red». ¿El profesor titular? El ya célebre cyberteólogo y director de la conocida revista La Civiltá Cattolica, padre Antonio Spadaro, S.J.

El curso se presenta de la siguiente manera: «La red y la cultura del ciberespacio ponen nuevos retos a nuestra capacidad de formular y escuchar el lenguaje simbólico que habla de la posibilidad y de los signos de la trascendencia en nuestra vida. Tal vez ha llegado el momento de considerar la eventualidad de una cyberteología entendida como la inteligencia de la fe en el tiempo de la red. Esta sería el fruto de la fe que comunica desde sí un impulso cognoscitivo en un tiempo en el cual la lógica de la red determina la manera de pensar, conocer, comunicar y vivir» (p. 162).

La nueva asignatura teológica toma como base bibliográfica un libro homónimo al de la nueva disciplina y del cual también es autor el padre Spadaro. Se deducen de ahí los temas que comprensiblemente se tratarán durante el curso: «Internet: entre teología y tecnología», «El hombre decodificado y la búsqueda de Dios», «Cuerpo místico y conectivo», «Ética hacker y visión cristiana», «Liturgia, sacramentos y presencia virtual» y «Los retos teológicos de la “inteligencia colectiva”».

Más allá de la novedad que supone la incursión de una nueva disciplina que dice relación con algo tan actual como la web y algo tan longevo como la teología, está el parte aguas posiblemente histórico del nacimiento de una nueva ciencia que, de ahora en adelante, deberá abrirse paso, justificando epistemológicamente su existencia, para hacerse con un lugar en la teología. De ahora en adelante habrá que mirar a la experiencia de la Pontificia Universidad Gregoriana para partir de ella ante posteriores desarrollados de la cyberteología.

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Así en la Rusia soviética la luz resplandecía en las tinieblas
Vladimir Vorob'ev, rector de la universidad de Tichon recordó las persecuciones anticristianas y el heroísmo del clero ortodoxo

Por Luca Marcolivio

RIMINI, 22 de agosto de 2013 (Zenit.org) - Vladimir Vorob'ev es sacerdote ortodoxo, rector de la Universidad Ortodossa de Tichon, en la cual preside el Departamento de Historia Moderna de la Iglesia Ortodoxa. Es también rector de la iglesia de San Nicolás de Moscú, y miembro de la comisión sinodal para la canonización de los santos. Y de la redacción científica de la Orthodox Encyclopedia.

Su testimonio fue esta mañana en el 'Meeting de Rimini para la Amistad entre los Pueblos' que se combinó con la exposición: “Luz en las tinieblas: el testimonio de la Iglesia ortodoxa rusa en los años de la persecución soviética. La relación de Comunión y Liberación con el cristianismo ruso tiene 50 años. Se remonta a cuando el fundador de dicho movimiento católico, Don Giussani, hacía rezar a sus jóvenes delante del ícono de la Trinidad.

El testimonio más importante de la resistencia cristiana al comunismo fue la del padre Vsevolod Spiller (1902-1984), que profetizo que en pocos años caería el sistema soviético y se volvería a la Rusia de la fe.

Il rector de la universidad de Tichon contó como el régimen soviético en sus inicios había planificado científicamente exterminio y anulación de la fe ortodoxa a partir de sus sacerdotes y obispos. A tal propósito, dijo, existe una carta de Lenín que documenta este intento.

El momento más violento y negro de las persecuciones anticristianas fue entorno al 1937-38 y se lo llama el período del “grand terror”. Lo que distinguirá al régimen soviético respecto a otras dictaduras fue la voluntad exterminar no solamente miles de personas sino a también enteras categorías sociales.

El tragicómico paradoxo de aquellos años, contó Vorob'ev, es que el régimen a un cierto punto llegó a difundir por las calles un cartel con la propaganda “La vida se ha vuelto mas alegre" e insistía en modo obstinado sobre el mito marxista de que “la religión es el opio de los pueblos”...

¿Cómo fue posible entre tanto que la Iglesia en Rusia haya podido sobrevivir casi 70 años de persecuciones, con sus más altos representantes fusilados, encarcelados, mandados en los gulag o en la mejor de las hipótesis obligados a vivir en la clandestinidad? “Gracias a que existió un pequeño grupo que conservó en la fe y que la trasmitió a las generaciones sucesivas”, explico Vorob’ev.

La fuerza de la oración hizo florecer miles de testimonios de mártires o de sobrevivientes, muchos de los cuales con carismas especiales.

Algunos de ellos tenían poderes taumatúrgicos, otros tenían el don de la profecía, otros aún podían leer en la mente de su interlocutor respondiendo todas las preguntas que iban a recibir. Todos entretanto tenían una virtud, la incapacidad de odiar y la constante misericordia por el propio perseguidor.

Vorob've dijo que la ideología que había perseguido a los cristianos en la Rusia soviética era la misma ideología que persigue a los cristianos de hoy en todo el mundo.

Al despedirse con gratitud al público del Meeting de Rimini, Vladimir exhortó a “conservar la memoria de estos mártires” y concluyó que “quien vive segundo la fe será perseguido. Y que solamente la fe puede permitir al mundo de seguir viviendo”.

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Catequesis para la Familia


Somos cristianos, es decir misioneros
Catequesis para toda la familia

Por Luis Javier Moxó Soto

TOLEDO, 22 de agosto de 2013 (Zenit.org) - En esta 20ª semana del Tiempo Ordinario se nos invita a reflexionar sobre nuestra misión de cristianos, su sentido, urgencia e implicaciones básicas.

El sentido de esta misión es la universalidad del cristianismo, la difusión de una caridad y una paz que no conoce el mundo y que ha sido vivida, anunciada y mandada previamente por Jesucristo. El deseo o celo por la misma es la clave del Evangelio del domingo de esta semana (Lc 12, 49-53).

La urgencia del apostolado viene marcada por la segunda lectura (Heb 12, 1-4). Pertenecemos a una cadena de testigos y, fijándonos en Jesús, hemos de seguir dando testimonio en medio de la prueba, hasta el final, cuando Él vuelva.

Implicaciones básicas: Jesús se presenta como señal de contradicción ante el que sólo cabe un amor preferente, por encima de todo y todos; cargar con la propia cruz, concreción de la propia vocación; una confianza u obediencia total para la entrega de la vida del modo que el Señor disponga cada día; y acogida u hospitalidad con todos, especialmente los más sencillos y necesitados, con quien Él se identifica.

Todos los demás días de esta semana también podemos vivirlos desde la misión a la que nos convoca Jesús. Quiero resaltar especialmente tres.

El día 22 tenemos la memoria de Santa María, Reina, que es Nuestra Madre y Maestra. Reina en la Iglesia y en nuestro corazón misionero. Además de recordarla así en el Salve Regina, Regina Coeli,.., la dedicamos especialmente las advocaciones que como Reina tiene en el Santo Rosario: Reina de los ángeles, de los patriarcas, de los profetas, de los apóstoles, de los mártires, de los confesores, de vírgenes, de todos los santos, concebida sin pecado original, del santísimo rosario y de la paz.

El sábado 24 tenemos la fiesta de San Bartolomé, apóstol. Dice el martorologio Romano que “después de la Ascensión del Señor, es tradición que predicó el Evangelio en la India y que allí fue coronado con el martirio”.

Si ha habido un papa que ha anhelado y trabajado por la paz, ése ha sido San Pío X, cuya memoria tenemos el día 21. Su máxima fue: “La paz de Cristo en el reino de Cristo”. Predijo la primera gran guerra europea de 1914. Dijo: “Gustoso daría mi vida, si con ello pudiera conseguir la paz en Europa”. Tuvo también gran celo por extender el Evangelio a los que no lo conocían y eso le empujó a dar un gran empuje a la actividad misionera de la Iglesia.

Imploremos al Espíritu Santo, con María Reina, la fuerza y valor para cumplir el mandato misionero de Jesús en el mundo de hoy, empezando por nuestro entorno más inmediato.

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SANTOS Y BEATOS: EPOPEYAS DE AMOR. EJEMPLO DEL DÍA


San Felipe Benizi
«Siervo de María, en cuya Orden ingresó a instancias de Ella. Fue un extraordinario apóstol de la concordia, restaurador de la paz. Cristo crucificado fue el libro de su vida»

Por Isabel Orellana Vilches

MADRID, 22 de agosto de 2013 (Zenit.org) - Procedía de la ilustre familia de los Benizi, de Florencia, donde nació el 15 de agosto de 1233. Ese día se fundó la Orden de los Servitas, un hecho providente que involucraría en su momento a Felipe. Fue hijo único, y muy deseado durante años. De su formación se ocupó un preceptor, y después cursó estudios en París y en Padua. Y aquí puede que se hubiera doctorado en medicina y filosofía a los 19 años, si bien la doble graduación académica es un dato que precisa ser corroborado. Inclinado a la vida espiritual asiduamente visitaba la iglesia de la Annunziata, regida por los servitas, ubicada en el barrio florentino de Cafaggio. Hallándose en templo, mientras se oficiaba la misa en la pascua de 1254 le aconteció un hecho extraordinario que supuso un giro copernicano para su vida. El texto evangélico que le movió a actuar está reflejado en los Hechos de los Apóstoles 8, 29, y pertenecía a la lectura del día. Cuando Felipe es instado por el Espíritu Santo para que evangelice al ministro de la reina de Etiopía con estas palabras: «Acércate y camina junto a su carro». Benizi las acogió como suyas. Vio en ellas un signo de la providencia que le llamaba por ese camino, lo cual fue corroborado cuando más tarde hallándose orando en sus aposentos tuvo un éxtasis. En él se halló transitando por un sendero farragoso y suplicó ayuda. Nuevamente escuchó la voz de la Virgen que iba al frente de un carro repitiendo las mismas palabras oídas en el templo, mientras le mostraba el hábito de los servitas. Un religioso que debía cerrar el templo, interrumpió el celeste instante justo cuando Felipe se disponía a dar cumplida respuesta a María. Se marchó algo incomodado por el hecho y estando en su casa volvió a escuchar la misma proposición de la Virgen. Estaba claro que la Madre le ampararía dentro de la Orden. Así que al día siguiente narró el hecho al prior de la comunidad ingresando en el convento de Cafaggio.

Fue recibido por Bonaldi, uno de los siete fundadores de la Orden, aunque buscando sosiego hubo de partir a Monte Senario. Allí se curtió en la oración y en las mortificaciones. Le agradaba la austeridad que llevaba siendo lego, trabajando en labores humildes, pero fue trasladado a Siena. Un día, el hermano que viajaban con él constató el rigor y altura de los argumentos que esgrimió para defender los dogmas, en una discusión entablada con unos dominicos. Quedó tan deslumbrado, especialmente porque la comunidad ignoraba la excepcional formación que poseía, que a pesar de sus reiteradas peticiones para que fuera absolutamente discreto, el religioso lo comunicó a los superiores. Éstos determinaron que la sabiduría de Benizi, unida a su modestia y piedad, era apta para otras misiones. Y en 1259, aunque hubiera preferido seguir una vida de anonimato, fue ordenado sacerdote. Luego sería maestro de novicios, definidor general, y general, aunque siempre tendió a ser eximido de estas responsabilidades que únicamente aceptó por obediencia. Siendo general reformó los estatutos de la Orden, y trabajó incansablemente por la conversión de todos.

Tenía una gran visión que era enriquecida por la gracia, de otro modo no habría vaticinado, como hizo, la santidad de personas que conocía tanto las que pertenecían a la Orden como otras foráneas. En 1269 estuvo a punto de ser elegido pontífice, sucesor de Clemente IV, pero movido por su sentimiento de indignidad, huyó y buscó refugio en una oquedad del monte Amiata. Allí entendió que debía difundir el amor a María. Volvió a reaparecer cuando se hizo pública la elección de Gregorio X. Después de viajar a Francia y Alemania en visita apostólica, regresó a Italia en 1272. Participó en el Concilio de Lyon con intervenciones memorables. A fuerza de insistente oración y fe libró a la fundación de la supresión que se cernía sobre ella junto a otras órdenes mendicantes. Inocencio V, tras el Concilio de Lyon de 1274 del que había emanado la indicación, comunicó al santo en 1276 la abolición de los servitas. Benizi tuvo la luz oportuna para enfocar la situación ante la Santa Sede de un modo que no peligrara su carisma inicial. Y lo logró. Se trasladó a Roma, pero Inocencio V falleció. Fue Juan XXI quien mantuvo la Orden con sus pilares primitivos.

El santo tuvo un papel esencial en la pacificación de varios estados italianos que se hallaban enemistados. Y con esta misión conciliadora viajó a Alemania a petición de Nicolás III. En 1283 fue maltratado en Forli con insultos y golpes como respuesta a una predicación en la que defendió la moral frente a la depravación. Con su virtud arrebató el arrepentimiento y conversión de su ofensor Peregrino Laziosi, que luego sería ejemplar religioso servita. Su ayuda fue decisiva para que Santa Juliana Falconieri pudiera fundar la Tercera Orden de las Siervas de María que impulsó por distintos puntos de Europa. Felipe abrió en Todi una casa para mujeres arrepentidas de su mala vida. Dos de ellas, que se hallaban entre las primeras acogidas, anteriormente habían querido tentarle, y él las convirtió. Incansable en su apostolado y en la confirmación de la fe de sus hermanos como no podía ir a pie porque su salud estaba ya muy debilitada viajaba en un borriquito que le proporcionaron. La Orden tenía diez mil religiosos cuando sintió que llegaba su última hora. Se refugió en Todi, musitando ante el altar de María: «Este será para siempre el lugar de mi reposo». Tenía un pequeño crucifijo, recuerdo de sus padres, que tomó en sus manos, diciendo: «Este es mi libro. Aquí es donde he aprendido el camino del cielo». Abrazado a la cruz, sintiendo la presencia de María, murió el 22 de agosto de 1285. Clemente X lo canonizó el 12 de abril de 1671.

Hoy la Iglesia celebra también la festividad de Santa María Reina.

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