ZENIT

El mundo visto desde Roma

Servicio diario - 04 de septiembre de 2013

La frase del día

Da lo que tienes para que merezcas recibir lo que te falta.

San Agustín (354 - 430)

 


El papa Francisco

El papa alienta a los jóvenes a ser la esperanza del mundo
En la primera audiencia general tras el descanso del verano, Francisco invita además a participar en la jornada de ayuno y oración por la paz en Siria

Palabras del papa Francisco en la audiencia de hoy
¡Vayan, salgan de ustedes mismos para llevar la luz y el amor del Evangelio a todos, hasta los extremos periféricos de la existencia!'

Las 'vacaciones' de Francisco
Una multitud de compromisos han ocupado el mes de agosto del santo padre

El gran mufti de Damasco le escribe al Papa: Trabajemos juntos por la paz
Y agradece el apelo basado en la fe, para ayunar y orar juntos a Dios Todopoderoso

Mirada al mundo

El rey de Jordania: cristianos y musulmanes, unirse contra del sectarismo
Encuentro internacional en Amman. Abdullah II: 'El derecho de los cristianos a su fe debe ser defendido'

Congreso Latinoamericano de la Familia en 2014, empezó la cuenta regresiva
Con un mensaje alentador el CELAM invita a todos a Panamá

Testigos de la Fe

Las diócesis españolas se unen al papa en oración por la paz
Los obispos invitan a los fieles a participar en las distintas vigilias que se están organizando para el sábado

¿Cómo hacer el ayuno y oración en la jornada convocada por Francisco?
El beato Juan Pablo II también convocó una jornada similar tras el atentando de las Torres Gemelas

Juventud

La importancia de la castidad antes del matrimonio
'Si nos amamos y nos vamos a casar, ¿por qué no podemos tener relaciones sexuales?'. ¿Qué dice la Iglesia?

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El papa Francisco


El papa alienta a los jóvenes a ser la esperanza del mundo
En la primera audiencia general tras el descanso del verano, Francisco invita además a participar en la jornada de ayuno y oración por la paz en Siria

Por Rocío Lancho García

CIUDAD DEL VATICANO, 04 de septiembre de 2013 (Zenit.org) - El santo padre Francisco ha retomado hoy las audiencias generales de los miércoles tras la pausa del mes de agosto. Un mes previsto para el descanso del pontífice en el que, aunque con menos compromisos en la agenda, ha seguido trabajando.

Esta mañana una gran multitud se ha reunido en la plaza de San Pedro para acompañarle y escuchar su catequesis. Jóvenes, grupos de parroquias, peregrinaciones de distintas partes del mundo, familias... Todos esperaban a Francisco en la plaza agitando sus banderas y animando la espera con cantos. El papa ha entrado en la plaza montado en el jeep blanco descubierto a las 10 de la mañana y durante media hora ha pasado por los pasillos saludando a los fieles, besando y bendiciendo a niños. También hoy, como en muchas otras ocasiones, una persona que estaba entre el público tenía un solideo blanco se lo ha dado al papa y el santo padre le entregó el que llevaba puesto. 

La de hoy ha sido la quinceava audiencia. En las catorce primeras - desde el 27 de marzo hasta el 26 de junio - han participado 825.000 fieles, tal y como informa la Prefectura de la Casa Pontificia. Este dato hace referencia solo a grupos y particulares que han enviado un petición de participación. Y al cual, por tanto, es necesario añadir el gran número de personas que cada miércoles acude a la audiencia general sin inscripción previa.

Ha pasado más de un mes, pero el santo padre ha querido hablar hoy sobre el viaje realizado en julio a Río de Janeiro en ocasión de la Jornada Mundial de la Juventud y ha dado las gracias a Dios porque todo ha sido posible por su providencia. Así como a Nuestra Señora Aparecida por acompañarles durante todo el viaje. También ha tenido palabras de agradecimiento para todas las personas que hicieron posible que este evento tuviera lugar. "¡Buena gente estos brasileños!", ha afirmado el papa Francisco.

Sobre el viaje a Brasil ha dado tres palabras clave: acogida, fiesta y misión. El pontífice ha señalado que por esta acogida "nacen uniones que permanecen sobre todo en la oración". Del mismo modo ha hablado de la fiesta subrayando que "sin el amor de Dios no hay verdadera fiesta". Y por último ha hecho referencia la misión, recordando que esta JMJ estaba marcada por un tema misionero 'id y haced discípulos a todas las naciones'. Y ha invitado a  los jóvenes a "salir de vosotros mismo, de cualquier cierre para llevar la luz y el amor de Evangelio a todos ¡hasta los extremos periféricos de la existencia!".

Y por eso el papa Francisco ha interpelado a los jóvenes preguntándoles "¿Queréis ser esperanza?, ¿queréis ser esperanza para la Iglesia?". Les ha invitado a abrir las puertas hacia un nuevo mundo de esperanza y les ha pedido "tenéis que ser esperanza para todos nosotros".  Finalmente les ha preguntado de nuevo"¿tenéis la valentía de acoger este desafío?". Los jóvenes presentes respondieron con fuerza un 'sí' y a coro, animados por el santo padre.

"Somos amados por Dios que es nuestro Padre y ha venido a salvarnos. Él siempre perdona porque es bueno y misericordioso" ha recordado Francisco.

A los peregrinos presentes de lengua española les ha dirigido estas palabras: "Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española, en particular al grupo de oficiales venidos desde Colombia, así como a los fieles provenientes de España, Argentina, México y los demás países latinoamericanos. Invito a todos a que la acogida, la fiesta y la misión vividas en Brasil no sean un mero recuerdo, sino el alma de nuestras vidas y comunidades. Gracias".

Al finalizar los saludos en las distintas lenguas, el santo padre ha hecho un llamamiento recordando que "el próximo sábado viviremos juntos una jornada especial de ayuno y de oración por la paz en Siria, en Oriente Medio, y en el mundo entero. Renuevo la invitación a toda la Iglesia a vivir con intensidad este día, y, desde ahora, expreso reconocimiento a los otros hermanos cristiano, a los hermanos de otras religiones y a los hombre y mujeres de buena voluntad que quieran unirse, en los lugares y en el modo propio, a este momento".  "La paz comienza en el corazón", ha recordado el santo padre y a continuación ha invitado a los fieles a participar en la vigilia de oración que iniciará en la plaza el sábado a las 19 horas, para pedir a Dios el gran don de la paz. "Se alce fuerte en toda la tierra el grito de la paz" ha exhortado Francisco.

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Palabras del papa Francisco en la audiencia de hoy
¡Vayan, salgan de ustedes mismos para llevar la luz y el amor del Evangelio a todos, hasta los extremos periféricos de la existencia!'

Por Francisco papa

CIUDAD DEL VATICANO, 04 de septiembre de 2013 (Zenit.org) -  Este miércoles, ante una Plaza de San Pedro abarrotada de fieles, el santo padre centró su catequesis en las implicancias que tuvo su reciente viaje a Brasil, con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud.

A continuación la enseñanza del papa.

Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días!

Continuamos nuestro camino de las catequesis después de las vacaciones de agosto, y hoy quiero contarles acerca de mi viaje a Brasil, con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud. Ha pasado más de un mes, pero creo que es importante volver sobre este evento, que a la distancia del tiempo permite captar mejor el sentido.

En primer lugar quiero dar gracias al Señor, porque es Él quien ha guiado todo con su Providencia. Para mí , que provengo de las Américas, ¡fue un bonito regalo! Y por esto agradezco también a Nuestra Señora de Aparecida, que acompañó todo este viaje: hice la peregrinación al gran santuario nacional del Brasil, y su venerada imagen estaba siempre presente en el escenario de la Jornada Mundial de la Juventud .

Yo estaba muy feliz por eso, porque Nuestra Señora de Aparecida es muy importante para la historia de la Iglesia en Brasil, pero también para toda la América Latina; en Aparecida los obispos latinoamericanos y del Caribe tuvieron una Asamblea General, con el papa Benedicto: una etapa muy importante del camino pastoral en esa parte del mundo, donde vive la mayor parte de la Iglesia Católica.

Aunque ya lo he hecho, quiero renovar el agradecimiento a todas las autoridades civiles y eclesiásticas, a los voluntarios, a la seguridad, a las comunidades parroquiales de Río de Janeiro y de otras ciudades del Brasil, donde los peregrinos fueron recibidos con gran fraternidad. De hecho, la recepción dada por las familias brasileñas y las parroquias fue una de las cosas más bellas de esta Jornada Mundial de la Juventud. Gente buena estos brasileños... ¡Buena gente! Tienen realmente un corazón muy grande.

La peregrinación siempre implica malestar, pero la acogida ayuda a superarlos y, de hecho, lo transforma en ocasión para el conocimiento y la amistad. Nacen lazos que luego se mantienen, sobre todo en la oración. También así crece la Iglesia en todo el mundo, como una red de verdadera amistad en Jesucristo, una red que a la vez que te toma, te libera. Por lo tanto, acogida: esta es la primera palabra que surge de la experiencia del viaje a Brasil. ¡Acogida!

Otra palabra resumen puede ser fiesta. La Jornada Mundial de la Juventud es siempre una fiesta, porque cuando una ciudad se llena de muchachos y muchachas que van por las calles con banderas de todo el mundo, saludándose, abrazándose, esto es una verdadera fiesta. Es una señal para todos, no solo para los creyentes. Y después está la celebración más grande que es la fiesta de la fe, cuando se alaba juntos al Señor, se canta, se escucha la Palabra de Dios, se permanece en una silenciosa adoración: todo esto es el culmen de la Jornada Mundial de la Juventud, es el verdadero propósito de esta gran peregrinación, y se vive de una manera particular en la gran Vigilia del sábado por la noche y en la Misa final. He aquí la gran fiesta, la fiesta de la fe y de la fraternidad, que se inicia en este mundo y no tendrá fin. ¡Pero esto solo es posible con el Señor! ¡Sin el amor de Dios no hay verdadera fiesta para el hombre!

Acogida, fiesta. Pero no puede faltar un tercer elemento: la misión. Esta Jornada Mundial de la Juventud se caracterizó por un tema misionero: "Vayan, pues, y hagan discípulos a todas las naciones". Hemos escuchado la palabra de Jesús: ¡es la misión que Él le da a todos! Este es el mandato de Cristo resucitado a sus discípulos: ¡"Vayan", salgan de ustedes mismos, de cada cerrazón para llevar la luz y el amor del Evangelio a todos, hasta los extremos periféricos de la existencia! Y fue este mandato de Jesús lo que les he confiado a los jóvenes que llenaban completamente la playa de Copacabana. Un lugar simbólico, a la orilla del mar, que hacía pensar en la orilla del lago de Galilea. Sí, porque aún hoy en día el Señor repite: " “Vayan…" y agrega: "Yo estoy con ustedes, todos los días...". ¡Esto es fundamental! Solo con Cristo podemos llevar el Evangelio. Sin Él no podemos hacer nada --nos lo ha dicho él mismo (cf. Jn. 15,5) . Con él, sin embargo, unidos a él, podemos hacer mucho. Incluso un niño, una niña, que a los ojos del mundo cuenta poco o nada a los ojos de Dios es un apóstol del Reino, ¡es una esperanza para Dios!

A todos los jóvenes quisiera preguntarles en voz alta: pero no sé si hay gente joven hoy en la Plaza: ¿hay jóvenes en la Plaza? ¡Hay algunos! Me gustaría, a todos ustedes, preguntarles en voz alta:¿quieren ser una esperanza para Dios? [Jóvenes: “¡Si!”]  ¿Quieren ser una esperanza para la Iglesia? [Jóvenes: “¡Si!”]  Un corazón joven que acoge el amor de Cristo, se convierte en esperanza para otros. ¡Es una fuerza inmensa! Pero ustedes, chicos y chicas, todos los jóvenes, ¡ustedes tienen que transformarnos y transformarse en esperanza! Abrir las puertas a un nuevo mundo de esperanza. Esta es su tarea. ¿Quieren ser la esperanza para todos nosotros? [Jóvenes: "¡Sí!"]. Pensemos en lo que significa aquella multitud de jóvenes que han encontrado a Cristo resucitado en Río de Janeiro, y llevan su amor en la vida de cada día, lo viven, lo comunican. No terminan en los periódicos, porque no cometen actos violentos; no hacen escándalos, y por lo tanto no son noticia. Pero si permanecen unidos a Jesús, construyen su reino, construyen fraternidad, el compartir, obras de misericordia, son una fuerza poderosa para que el mundo sea más justo y más hermoso, ¡para transformarlo! Pido ahora a los niños y niñas que están aquí en la Plaza: ¿tienen el coraje de asumir este reto? [Jóvenes: "¡Sí!"] ¿Tienen el coraje, o no? No he escuchado bien… [Jóvenes: "¡Sí!"]. ¿Se animan a ser esta fuerza de amor y de misericordia que tiene el coraje de querer cambiar el mundo? [Jóvenes: "¡Sí!"].

Queridos amigos, la experiencia de la Jornada Mundial de la Juventud nos recuerda la verdadera gran noticia de la historia, la Buena Noticia, a pesar de que no aparece en los periódicos ni en la televisión: somos amados por Dios, que es nuestro Padre y que envió a su Hijo Jesús para hacerse cercano a cada uno de nosotros y salvarnos. Ha enviado a Jesús a salvarnos, a perdonarnos todo, porque Él siempre perdona: Él siempre perdona, porque es bueno y misericordioso. Recuérdenlo: acogida, fiesta y misión. Tres palabras: acogida, fiesta y misión. Que estas palabras no sean solo un recuerdo de lo que sucedió en Río, sino que sean el alma de nuestra vida y de la vida de nuestras comunidades. ¡Gracias!

Traducido del original italiano por José Antonio Varela V.

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Las 'vacaciones' de Francisco
Una multitud de compromisos han ocupado el mes de agosto del santo padre

Por Redacción

CIUDAD DEL VATICANO, 04 de septiembre de 2013 (Zenit.org) - El santo padre Francisco decidió pasar el mes de agosto en el Vaticano en vez de trasladarse a Castelgandolfo tal y como hacían sus predecesores. Su agenda fue más reducida pero sí continuó trabajando y teniendo varios encuentros durante las vacaciones. Unas 'vacaciones' que nadie hubiera deseado tener. 

Durante todo el mes se mantuvo la oración del Ángelus de los domingos, incluyendo también el día 15, festividad de la Asunción, fecha que acudió a Castelgandolfo. El día 4 de agosto el papa rezó para que los jóvenes de la JMJ traduzcan esta experiencia en su vida cotidiana y dio las gracias por la calurosa acogida recibida en Brasil. El domingo siguiente, habló del deseo del cristiano de encontrarse con Cristo y recordó que las fatigas, las caídas y el pecado encuentran sentido en el amor de Dios. El día de la Asunción, Francisco señaló que María está cerca de las comunidades que sufren y que nunca nos deja solos. Así mismo, ese domingo el santo padre rezó por Egipto y afirmó que fe y violencia son incompatibles: "El Evangelio no autoriza la fuerza para difundir la fe. La fuerza del cristiano es la verdad y el amor", dijo. Finalmente el domingo pasado, exhortó a no tener miedo de entrar por la puerta de la fe en Jesús, y apeló a la comunidad internacional por la situación de Siria.

Doce han sido los mensajes y telegramas que el papa Francisco ha enviado durante el mes de agosto. Uno de ellos fue el mensaje a los musulmanes de todo el mundo con motivo de la fiesta del final de Ramadán con el tema “La promoción del respeto mutuo a través de la educación”. Con motivo de la LXXXVII Jornada Misionera Mundial envió un mensaje en el que recordó a los cristianos que en varias partes del mundo tienen dificultades para profesar abiertamente su fe y ver reconocido su derecho a vivirla dignamente. Realizó también un vídeo mensaje a los participantes en la fiesta de San Cayetano en Argentina, patrón en ese país del “Pan y del trabajo”, en el que invitó a salir al encuentro de los más necesitados. Para el Meeting de la Amistad entre los Pueblos (Rimini, Italia, 18-24 agosto) dedicado esta vez al tema “Emergencia hombre", el papa escribió sobre la urgencia de restituir el hombre a sí mismo y a su dignidad, al carácter único y precioso de toda existencia humana desde la concepción hasta la muerte natural.

En las audiencias que han tenido lugar durante el mes de agosto, el obispo de Roma ha recibido a distintas personalidades eclesiásticas y miembros de la Curia; así comoa los reyes de Jordania y a las selecciones de fútbol italiana y argentina, que acudieron a Roma para jugar un partido en honor al pontífice. A ellos les invitó a vivir el deporte como un don de Dios y una oportunidad para hacer fructificar sus talentos pero también como una responsabilidad ya que son un referentes para muchas personas, especialmente para los más jóvenes.

El día 21, el papa saludó a los estudiantes y profesores del Colegio Seibu Gakuen Bunri Junior High School de Saitama (Tokyo, Japón) y subrayó el valor del diálogo como propulsor de la paz. Y el 28, Francisco dirigió unas palabras a quinientos jóvenes de la diócesis italiana de Piacenza-Bobbio que participaban en la peregrinación “Sobre esta piedra” en ocasión del Año de la Fe y les invitó a apostar por los grandes ideales y a ir contracorriente. Ese mismo día, en la basílica romana de San Agustín en Campo Marzio, el papa celebró la misa para la apertura del 184 capítulo general ordinario de la Orden de San Agustín y en su homilía propuso una reflexión sobre la inquietud agustiniana: inquietud de la búsqueda espiritual, inquietud del encuentro con Dios, inquietud del amor.

Además, el día 8 de agosto se publicó un nuevo Motu Proprio del papa sobre las finanzas del Vaticano que continua la línea de transparencia emprendida por Benedicto XVI. Un documento sobre la prevención y la lucha al blanqueo de dinero, el financiamiento del terrorismo y la proliferación de las armas de destrucción de masas que amplia la aplicación de las leyes vaticanas en materia, refuerza la función de vigilancia y regulación de la Autoridad de Información Financiera e instituye la función de vigilancia prudencial de los entes que desarrollan profesionalmente una actividad financiera, así como el Comité de Seguridad Financiera para coordinar las autoridades competentes en esas materias de la Santa Sede y del Estado de la Ciudad del Vaticano.

Entre los nombramientos más destacados de este mes, está el de monseñor Pietro Parolín, actual nuncio apostólico ante Venezuela, como nuevo secretario de estado y el de monseñor Fernando Vergez (LC), director de Telecomunicaciones, como el número dos del Estado Ciudad del Vaticano.

Y con todos estos compromisos, el santo padre también ha sacado tiempo para acercarse y mostrarse cercano de forma muy personal con algunos fieles, como lo ha hecho desde el inicio de su pontificado. Una señora argentina de 44 años que denunció a un policía por haber abusado sexualmente de ella, fue sorprendida por una llamada telefónica que le hizo el papa Francisco, que conocía su situación gracias una carta que ella le había enviado contándole lo sucedido. 

Además de otras cartas, también llamadas por teléfono como la hecha al italiano Michele Ferri, hermano de Andrea, un emprendedor propietario de algunas gasolineras que fue asesinado a disparos hace dos meses. Michele escribió un carta al papa y Francisco cuando le llamó le dijo que había llorado al leer lo que había escrito.

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El gran mufti de Damasco le escribe al Papa: Trabajemos juntos por la paz
Y agradece el apelo basado en la fe, para ayunar y orar juntos a Dios Todopoderoso

Por Redacción

ROMA, 04 de septiembre de 2013 (Zenit.org) - En la Plaza de San Pedro (si es posible) o en la gran mezquita de los Omeyas en Damasco, el Gran mufti de Siria, Ahmad Badreddin Hassou, líder espiritual del Islam sunita, acogiendo el apelo del Papa, estará orando y ayunando por la paz en su país.

El mufti ha enviado, a través de la Nunciatura Apostólica en Damasco, una carta oficial al papa Francisco y se prepara para participar en la jornada especial pro-Siria, del 7 de septiembre, proponiendo a la Santa Sede que se organice un encuentro interreligioso, informó hoy la Agencia Fides que dio a conocer el texto.

En la misiva el gran mufti define el llamamiento del Papa Francisco como “hijo de las leyes celestiales”, alabando la iniciativa de “orar por la paz en Siria”, como “buena y un bien para la humanidad”.

“Santidad - dice el texto – le damos las gracias por este apelo de gran humanidad, basado en la fe, para ayunar y orar juntos a Dios Todopoderoso para que pueda traer paz a la tierra y nos proteja de la fuerza del mal y la opresión”. Contrariamente ocultaríamos "la luz resplandeciente de la fe, la caridad, la misericordia y la paz, que usted pide y todos nosotros pedimos, como lo hicieron los Profetas y Mensajeros de Dios”.

Mostrando su “profunda gratitud por su atención espiritual”, el mufti expresa el deseo de “estar junto al Papa en el momento en que la oración se elevará al Dios Altísimo”, y afirma: “Estaremos juntos de todos modos, el 7 de septiembre, para elevar nuestra suplica a Dios”, y propone a la Santa Sede “organizar una cumbre espiritual con los líderes religiosos en Damasco o en el Vaticano: así tal vez podamos detener el fuego de los que quieren destruir la tierra de Abraham, Moisés, de Jesús, de Mahoma”.

“Vamos de la mano - continúa la carta - en la difusión de la paz y la seguridad para todos los pueblos del mundo, para hacer frente a los extremistas y a las divisiones sobre la base de la religión o el origen étnico. Continuamos nuestro viaje tras las huellas de los profetas, los santos, los justos y los hombres de buena voluntad”. “Que usted pueda permanecer, Santidad - concluye el texto que ha llegado a la Agencia Fides - bajo la protección, la guía y la providencia de Dios, así llegaremos juntos al lugar de la plenitud de la fe y de la luz”.

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Mirada al mundo


El rey de Jordania: cristianos y musulmanes, unirse contra del sectarismo
Encuentro internacional en Amman. Abdullah II: 'El derecho de los cristianos a su fe debe ser defendido'

Por Redacción

CIUDAD DEL VATICANO, 04 de septiembre de 2013 (Zenit.org) - El encuentro celebrado en Amman, Jordania, durante los días 3 y 4 de octubre bajo el título "The Challenges of Arab Christians" (el desafío de los árabes cristianos), querido por el rey de Jordania, Abdullah II, ha tratado temas como la guerra, atentados, profanaciones, emigraciones teniendo como fondo el conflicto sirio y fue una ocasión de hacerse escuchar en la escena internacional para las Iglesias en Oriente Medio.

"La protección de los derechos de los cristianos en los conflictos de matriz religiosa que afectan a Medio Oriente --ha declarado el rey de Jordania durante la cumbre-- no es una cuestión de cortesía, sino un deber también porque los cristianos árabes han ejercido un rol clave en la construcción de la sociedad árabe en la defensa de las justas razones de nuestra nación".

El monarca durante su discurso ha subrayado la necesidad de una alianza entre cristiano y musulmanes para afrontar y derrotar juntos las divisiones sectarias que alimentan los conflictos en toda la región, presentadas como un cuerpo extraño respecto a "nuestras tradiciones y a la herencia humanitaria y cultural. Cristianos y musulmanes --ha añadido el rey Abdullah II-- deben coordinar los esfuerzos y la plena cooperación acordando un 'código de conducta unificador', porque precisamente el asilamiento entre los seguidores de las diferentes religiones puede socavar el edificio social", publica el periódico del Vaticano.

Entre los posibles terrenos de colaboración entre cristianos y musulmanes, el monarca ha propuesto también la común defensa de la fisionomía plural de la Ciudad Santa: "Todos nosotros tenemos el deber de defender la identidad árabe de Jerusalén y proteger sus lugares santos islámicos y cristianos".

A la cumbre internacional han participado unas setenta personas entre patriarcas, delegados patriarcales, obispos, sacerdotes y otros responsables religiosos, los cuales han dado su contribución a las diferentes sesiones de estudios, dedicadas de forma particular al desarrollo de la situación en Egipto, Siria, Irak, Líbano, Jordania y Jerusalén.

Lo informó hoy el periódico de la Santa Sede, el Osservatore Romano, precisando que estaban presentes el cardenal Jean-Louis Tauran, presidente del Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso; el nuncio apostólico en Jordania y en Irak, arzobispo Giorgio Lingua; el patriarca de Jerusalén de los Latinos Fouad Twal, el patriarca de Jerusalén, Theophilos III; el patriarca armeno ortodoxi Nourhanne Manougian; el patriarca greco-ortodoxo de Antioquía, Yohanna X al-Yazigi, residente en Damasco y hermano del metropolita de Aleppo, Boulos al-Yazigi (secuestrado el pasado mes de abril junto al metropolita siro-ortodoxo de Aleppo, Gregorios Yohanna Ibrahim, por individuos hasta ahora desconocidos).

El pasado 29 de agosto el monarca jordano se reunió en el Vaticano con el santo padre. En este encuentro se abordaron algunos temas de interés común, en particular el fomento de la paz y la estabilidad en Oriente Medio, con especial referencia a la reanudación de las negociaciones entre israelíes y palestinos y la cuestión de Jerusalén. Una especial atención se reservó a la trágica situación en Siria y se  reafirmó que la vía del diálogo y la negociación entre todos los componentes de la sociedad siria, con el apoyo de la comunidad internacional, son la única opción para poner fin al conflicto y la violencia que cada día causan la pérdida de tantas vidas humanas, sobre todo entre la población civil.

Por su parte, el Vaticano por su parte expresó el agradecimiento al rey Abdullah por los esfuerzos que está llevando a cabo en el campo del diálogo interreligioso y por la iniciativa celebrada en Amman.

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Congreso Latinoamericano de la Familia en 2014, empezó la cuenta regresiva
Con un mensaje alentador el CELAM invita a todos a Panamá

Por Redacción

ROMA, 04 de septiembre de 2013 (Zenit.org) - A poco menos de un año para la gran cita de las familias latinoamericanas en Panamá, los participantes del Pre-congreso de pastoral familiar de la región México y Centroamérica reunidos en San José, Costa Rica, del 19 al 23 de agosto de 2013, enviaron un fraterno saludo a toda la Iglesia de la región, "especialmente a todas las familias y a quienes anuncian la buena nueva de Nuestro Señor Jesucristo a la familia como agentes evangelizadores".

Convocados por el Departamento de Familia, Vida y Juventud del CELAM, los obispos, sacerdotes, agentes de Pastoral Familiar y Pastoral Juvenil de la región reconocieron que "la familia en México y Centroamérica se encuentra inmersa en un contexto social, económico y político, que pone en riesgo su naturaleza e identidad".

Por tal motivo, recordaron que "para reconocer, apoyar, proteger y promover a la familia, necesitamos ayudarla a construir una sociedad más humana, fraterna y solidaria". 

Ante estos desafíos, expresa el documento "nuestros retos son formar, fomentar, coordinar y acompañar a las familias en su desarrollo humano, espiritual, psicológico y social, para revitalizarlas en su entorno cultural que cada nación necesita". Invitaron por ello a todos los miembros de la Iglesia, a los gobiernos y a la sociedad civil en general "a unir esfuerzos en defensa del matrimonio, la familia y la vida". 

El I Congreso Latinoamericano de la Familia se realizará en Panamá en agosto de 2014, donde se espera una asistencia numerosa proveniente de todos los países de la región.

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Testigos de la Fe


Las diócesis españolas se unen al papa en oración por la paz
Los obispos invitan a los fieles a participar en las distintas vigilias que se están organizando para el sábado

Por Redacción

ROMA, 04 de septiembre de 2013 (Zenit.org) - Desde todos los rincones de España se preparan para la jornada de ayuno y oración por la paz en Siria, en Oriente Medio y el mundo entero, convocada por el papa Francisco, el próximo 7 de septiembre, víspera de la Natividad de María, Reina de la Paz.

En la Catedral madrileña de la Almudena, el cardenal arzobispo Antonio Mª Rouco Varela celebra el domingo 8 de septiembre a las 19.00 una misa por esa misma intención.

Por su parte, monseñor Julián Barrio, arzobispo de Santiago, invita a los fieles de su diócesis a una vigilia de oración esa misma tarde en la Catedral y ha propuesto a las parroquias a que también organicen actos litúrgicos con esa misma intención. Y desde el oeste de la península hasta el este, en Barcelona el cardenal Lluís Martínez Sistach ha anunciado una eucaristía y vigilia de oración por la Paz en la Catedral de Barcelona el sábado, desde las 19.00 y hasta las 21.00.

La archidiócesis de Sevilla también se ha sumado a la convocatoria por la paz, y también la catedral será lugar de encuentro a las 20.00 ante la imagen de la Virgen de los Reyes. Así lo ha confirmado el arzobispo de Sevilla, mons. Juan José Asenjo, en una carta remitida a los sacerdotes, diáconos, miembros de la vida consagrada, movimientos, asociaciones, hermandades y fieles de la archidiócesis. En la carta, el prelado sevillano subraya la “gran preocupación” con la que se siguen las noticias procedentes de Siria, “donde la crueldad se acrecienta con el uso de armas químicas contra la población civil. Una vez más –añade-, se ahonda el horrendo foso de la violencia de la que es capaz el hombre moderno, empleando los adelantos científicos y técnicos contra sus semejantes

Del mismo modo, monseñor Osoro, arzobispo de Valencia, ha invitado a todas las parroquias valencianas a sumarse al llamamiento del papa. El arzobispo presidirá una misa en la Catedral a las 19.00. A continuación, el arzobispo celebrará otra eucaristía en la Basílica de la Virgen, a las 20.30, seguida del rezo del Rosario y un tiempo de silencio y oración. El prelado ha señalado en un escrito que “la Iglesia no puede permanecer en silencio ante todo este sufrimiento que provoca la guerra y la violencia” sino que “debe alzar la voz en defensa de los más débiles e inocentes, y pidiendo la paz”.

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¿Cómo hacer el ayuno y oración en la jornada convocada por Francisco?
El beato Juan Pablo II también convocó una jornada similar tras el atentando de las Torres Gemelas

Por Rocío Lancho García

CIUDAD DEL VATICANO, 04 de septiembre de 2013 (Zenit.org) - Frente a los dolorosos momentos que está sufriendo la nación Siria provocados por la violencia, el santo padre ha propuesto un día de ayuno y oración en el que invita a cristianos, fieles de otras religiones y hombres y mujeres de buena voluntad a que participen de esta jornada. Pedir por la paz en el mundo y especialmente en este momento por la paz en Siria, unirá el corazón y los deseos de multitud de personas este sábado día 7 de septiembre.

El beato Juan Pablo II tuvo una iniciativa similar en el 2001 tras los atentados de las Torres Gemelas de Nueva York cuando invitó a vivir el 14 de diciembre de ese año como un día de ayuno y oración para que Dios concediera al mundo "una paz estable, fundada en la justicia" e invitó a representantes de las religiones del mundo a ir a Asís el 24 de enero de 2002 a rezar por la superación de las contraposiciones y para la promoción de la auténtica paz".

Ayunar también significa hacerse solidario y comprender la situación de las miles de personas que cada día pasan hambre en el mundo. Este sábado puede ser además un momento para explicarle incluso a los más pequeños de la casa el sentido de hacer este sacrificio, que dista mucho de ser un acto vacío de significado.

En una nota que difundió la Oficina de Celebraciones Litúrgicas en esa ocasión, ofrecieron algunos puntos de reflexión sobre el significado del ayuno y la oración.

El día de ayuno, indica, no debe ser entendido exclusivamente según las formas jurídicas del Código de Derecho Canónico; "sino en un sentido más amplio, que implique libremente a todos los fieles: los niños, que voluntariamente cumplen renuncias a favor de sus coetáneos pobre; los jóvenes, muy sensibles a la causa de la justicia y de la paz; todos los adultos, menos los enfermos, sin exclusión de los ancianos".

"En todas las grandes experiencias religiosas el ayuno ocupa un puesto importante", explica. "El ayuno implica una actitud de fe, de humildad, de total dependencia de Dios. Ya en el Antiguo Testamento se encuentran ejemplos donde se recurre al ayuno para "prepararse al encuentro con Dios; antes de afrontar una tarea difícil o pedir el perdón de una culpa; para manifestar el dolor causado por una desgracia doméstica o nacional; pero el ayuno, inseparable de la oración y de la justicia, está orientado sobretodo a la conversión del corazón, sin la cual, como denunciaban ya los profetas, no tiene sentido". Del mismo modo encontramos el ejemplo en la vida de Jesús, cuando ayunó durante 40 días en el desierto antes de comenzar su vida pública.

En la nota también explica que "fieles a la tradición bíblica, los santo padres han tenido en gran consideración el ayuno. Según ellos, la práctica del ayuno facilita la apertura del hombre a otro alimento: el de la Palabra de Dios y del cumplimiento de la voluntad del Padre; y en estrecha conexión con la oración, fortifica la virtud, suscita misericordia, implora el socorro divino, conduce a la conversión del corazón".

El documento al finalizar explica que "la práctica del ayuno está dirigida al pasado, al presente y al futuro: al pasado, como reconocimiento de las culpas contra Dios y contra los hermanos, de las cuales todos estamos manchados; al presente, para aprender a abrir los ojos hacia los otros o la realidad que nos rodea; al futuro, para acoger en el corazón la realidad divina y renovar, a partir de don de la misericordia de Dios, la comunión con todos los hombres y con la entera creación, asumiendo responsablemente la tarea que cada uno de nosotros tiene en la historia".

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Juventud


La importancia de la castidad antes del matrimonio
'Si nos amamos y nos vamos a casar, ¿por qué no podemos tener relaciones sexuales?'. ¿Qué dice la Iglesia?

Por Padre Anderson Alves

ROMA, 04 de septiembre de 2013 (Zenit.org) - Si nos amamos y vamos a casarnos, ¿por qué no podemos tener relaciones sexuales? Esta es una pregunta que algunos enamorados (y novios) cristianos pueden hacerse. Si experimentan un amor real, ¿por qué no podrían expresarlo con un gesto de intimidad que ayudaría a aumentar el afecto entre ellos? Si la unión de los cuerpos será un poco más adelante, algo en común, ¿por qué no empezar cuando el amor parece estar ya maduro? Ciertamente, la mayoría de los cristianos está de acuerdo que una relación entre personas que apenas se conocen sea irresponsable y pecaminosa. ¿Pero no es quizás exagerado darle la misma medida a un acto entre enamorados sinceros, fiel el uno al otro, y a punto de casarse?

Para responder a esta pregunta hay que recordar que la Iglesia no tiene autoridad para cambiar lo que Dios ha revelado. La Palabra de Dios es siempre viva y eficaz, es una luz que guía nuestros pasos. Y su Palabra nos dice: "El cuerpo no es para la fornicación, sino para el Señor, y el Señor para el cuerpo"; "¡Aléjate de la fornicación! Cualquier otro pecado que el hombre cometa, están fuera del cuerpo; pero los pecados impuros actúan contra su propio cuerpo" [1] .

Estos textos expresan el alto valor del cuerpo humano, que es templo del Espíritu Santo, y no es algo de lo que se pueda usar y abusar. Y la fornicación (es decir, el acto sexual fuera del matrimonio) es un acto pecaminoso, ya que reduce el valor del cuerpo humano a una "cosa" que requiere un "uso", y por lo tanto degrada el cuerpo del hombre y de la mujer.

Las relaciones sexuales no pueden considerarse un mero acto físico, deben ser más bien una expresión de algo mucho más profundo: se trata de una entrega total e incondicional de una persona a otra. Esta donación es real y se vuelve concreta con la alianza matrimonial. Esta entrega es real y se concretiza con la alianza matrimonial. Por ello, el acto sexual es justo cuando busca el bien de la pareja y está abierto a la procreación y a la transmisión de la vida [2] . Estos son los dos fines del matrimonio.

¿Pero cómo aceptar estas enseñanzas en nuestros días? ¿Hay realmente una razón que nos pueda convencer de la verdad de estas enseñanzas? En realidad, hay varias razones. A continuación presentamos cuatro de ellas.

1 . La relación sexual en el matrimonio defiende sobre todo a la mujer y el resultado posible de esta relación: el niño. ¿Si el nacimiento de un niño se produce antes de la boda qué sucede? Este nuevo ser es visto más como un problema que como un regalo. De hecho, la concepción de un hijo no obliga al hombre (el padre) a casarse. Si el padre tiene un claro sentido de la justicia, se atendrá a sus obligaciones de apoyar al niño y a la madre. Pero todo esto no es suficiente para un niño. Todo niño tiene derecho a nacer dentro del equilibrio de un matrimonio, donde los padres buscan la felicidad juntos. Al interior del matrimonio el niño es el fruto natural, social y legalmente protegido, ya que es visto como un don, y no como un objeto o un resultado no deseado.

2. En general, los que viven la castidad en el noviazgo, tendrán menos dificultades para vivir la fidelidad en el matrimonio. Actualmente, el “permisivismo” moral es enorme. La “educación sexual", transmitida por los medios de comunicación de masas, y también por la escuela, dice : "Haz lo que quieras, con o sin preservativo y en secreto, sin decirle nada a tus padres". Para ganarle a este ambiente tan hostil e irresponsable se necesita una verdadera educación a la castidad, para proteger precisamente el amor auténtico. Y el período de enamoramiento o noviazgo sirve precisamente para esto: para hacer crecer a la pareja en el conocimiento mutuo es esencial elaborar proyectos conjuntos, con el fin de alcanzar las virtudes indispensables para la vida matrimonial. Si la pareja vive bien en este periodo, sin llegar a tener intimidad típica de la vida matrimonial, se formará en la escuela de la fidelidad. En otras palabras, se mantendrá una mayor fidelidad al interior del matrimonio, si se conserva la pureza de la relación durante el enamoramiento o noviazgo.

3. El amor conyugal no se reduce a ser un mero ejercicio físico, sino se convierte en comunión total de vida. Chesterton dijo una vez: "En todo lo que vale la pena hacer, incluso en cada placer, hay un punto de dolor o de tedio que debe ser preservado, a fin de que el placer pueda revivir y durar. La alegría de la batalla viene después del primer temor de la muerte; el placer de la lectura de Virgilio viene después del tedio del aprendizaje; la alegría del bañista, después del primer golpe del agua fría; y el éxito del matrimonio viene solo después de la decepción de la luna de miel" [ 3 ]. Lo que dijo este autor, hombre felizmente casado, es una verdad indiscutible. El placer del acto sexual sin duda existe, pero no se reduce a esto la vida matrimonial. El acto sexual es --al igual que todo acto humano--, siempre ambiguo, ya que en el mismo momento en que se hace, causa una cierta frustración. Esto sucede porque el corazón humano está hecho para el infinito y no se conforma con los actos individuales. Cada joven es capaz de reconocer todo esto, ya que es parte de cada proceso de maduración. Y lo mejor es que esto ocurra dentro del matrimonio. Sólo aquel que supera la "decepción" inicial puede ser feliz en el matrimonio, porque la felicidad viene de Dios, del amor fiel y responsable, renovado de modo cotidiano en actos de mutua entrega. El amor no es lo mismo que el placer, sino la donación voluntaria y fiel que trasciende todas las dificultades.

4 . La mayoría de las parejas que participan en proyectos serios de matrimonio, se terminan separando antes de que se realice la boda. Ni el compromiso, ni el simple enamorarse recíprocamente permiten el mismo nivel de compromiso que puede surgir en el matrimonio. Por esta razón, los que se entregan a las relaciones sexuales antes del matrimonio corren el riesgo de entregarse a alguien, con quien al final, no se unirán en el sacramento. Y este pecado, sin embargo, marcará y manchará profundamente el alma, con la consecuencia de ocasionar heridas graves, sobre todo afectivas, pero también cognitivas, antes de ser perdonado por Dios a través de una buena confesión. Actualmente las personas "utilizan" el sexo como si fuera un juego. ¿Y qué pasa? Cada vez menos personas son capaces de llegar a la oportunidad de tomar decisiones definitivas, y cada vez menos personas se casan. El acto matrimonial, al que Dios quiere combinar un placer sensible, debe producir un placer superior, de carácter espiritual: la alegría, es decir, de saberse unido a la voluntad de Dios. Y el acto de producir un niño es algo que tiene de milagroso, en la que se completa la combinación de las partes materiales de los padres, a la creación de una nueva alma humana, directamente y mediante Dios. El placer que tienen los padres de saber que son parte del plan de Dios es algo maravilloso y único.

La respuesta a la pregunta nos dice, por lo tanto, que el amor no es solo una sensación de incertidumbre, ni tampoco se reduce al mero placer. Sino que es algo práctico y exigente, que implica la voluntad concreta de cooperación a los planes de Dios, quien concibió  el matrimonio como expresión perfecta de una donación mutua e integral de dos personas, un hombre y una mujer, colaborando así con la misma obra creadora de Dios.

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Notas

[1] 1 Cor. 6,13 y 18; cfr.: Tob. 4,13; Hch. 21,25; Ef. 5,3.

[2] Cfr. Catecismo de la Iglesia Católica, § 2361-2363.

[3] Chesterton, O que há de errado no mundo, Editora Ecclesiae, Campinas 2012.

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SANTOS Y BEATOS: EPOPEYAS DE AMOR. EJEMPLO DEL DÍA


Beata María de santa Cecilia Romana (Dina Bélanger)
«Joven pianista, primera canadiense en ser beatificada. Es una mística de nuestro tiempo, modelo para quien se proponga alcanzar la perfección»

Por Isabel Orellana Vilches

MADRID, 04 de septiembre de 2013 (Zenit.org) - Dina Bélanger, la hermosa joven canadiense que tuvo la fama al alcance de la mano por sus excepcionales dotes musicales, no hallaba en el santoral una mujer canonizada que llevase su nombre, pero ella se propuso cubrir ese vacío con su propia entrega: sería santa. Así lo confió a su educadora cuando constató que buscaba en vano otra Dina. Para ello no tenía más que «amar y dejar hacer a Jesús y a María». Apenas tuvo 33 años de plazo para amasar las virtudes, pero fueron más que suficientes.

Nació en Québec, Canadá, el 30 de abril de 1897. Hubiera sido la primogénita de Olivier y Seraphia, pero un varón nacido con posterioridad murió pocos meses después de nacer, por lo cual fue la única hija del matrimonio. En este hogar acomodado recibió una exquisita educación seguida atentamente por sus padres. Velaron para que ciertos rasgos de su apasionado y temperamental carácter, apreciados cuando aún era una niña, no le ganaran la batalla. Y ciertamente los templó a tiempo, poniendo todo de su parte. Eso hizo de ella una persona entrañable, dócil, humilde y obediente. Tanto Olivier como Seraphia le transmitieron junto a la fe excepcionales cualidades como la responsabilidad, el orden, el sentido del trabajo, la discreción, la piedad, la constancia, la abnegación y otros valores que también detectaron profesoras y alumnas. Desde los seis años estudiaba en el colegio de las religiosas de Nuestra Señora y allí recibió la Primera Comunión. Entonces la experiencias místicas, que iban a marcar su vida, se hallaban en el umbral de la misma. Como previamente había entrañado a Dios en su corazón, lo aguardaba como algo natural y así tomó el Cuerpo de Cristo: «Mi felicidad era inmensa. Jesús era mío y yo era suya. Esta unión íntima causó en mi alma, entre otras gracias: el hambre de su Cuerpo y de su Sangre, que ha ido creciendo con las comuniones siguientes».

En 1905 inició los estudios de piano. Las altas calificaciones que obtenía, el dominio instrumental y su capacidad para ejecutar con maestría las piezas le auguraban un futuro profesional espléndido. Las inagotables ansias de perfección marcaban sus jornadas. Durante varias veces al día suplicaba esa gracia. En el centro de su vida: la Eucaristía y María. En 1910 se vinculó a las Hijas de María y algo más tarde se consagró a la Virgen. Completó esa ofrenda entregándose por completo a Dios, llevada de la «sed de entregarse a su amor». Era parte de un intenso programa que le fue conduciendo firmemente a la unión divina. Cómo sería que a sus 14 años pudo decir con propiedad: «Jesús y yo ya no son dos, somos uno. Sólo Jesús hace uso de mis facultades, de mis sentidos, mis miembros. Él es quien piensa, actúa, ora, busca, habla, camina, escribe, enseña, en una palabra, es Él quien vive ...». Según confió ella misma, Cristo la denominaba: «mi pequeño yo».

El estallido de la Primera Guerra Mundial en 1914 hizo que crecieran sus ansias de martirio: «Como he oído hablar de esta donación, conocido como el ofrecimiento heroico, inmediatamente me ofrecí, me abandoné por completo a la voluntad de Jesús, ya que soy su víctima». Dos años más tarde la enviaron a completar su formación musical de piano, armonía y composición musical al conservatorio de Nueva York. Se alojó en el selecto pensionado Our Lady of Peace, de la calle 14, propiedad de las religiosas de Jesús y María. Allí coincidió con pianistas consumadas como la chilena Rosita Renard. Hasta 1918 estudió en un formidable piano Steinway, piano que en 1990 se enviaría a Sillery por haber sido utilizado por ella ya que el instrumental existente en el convento había sido pasto de las llamas en el incendio que sufrió el convento en 1983. Todo ese tiempo siempre vinculada a Cristo puso mucho cuidado en no envanecerse y sostener firmemente la vocación al amor que latía en su corazón.

Regresó con sus padres en 1918, y en 1921 ingresó en el noviciado que estas religiosas de Jesús y María tenían en Sillery. Se acrecentaba su ardiente anhelo de vivir unida a Dios con una perfecta oración continua y para ello en su itinerario espiritual, a sus habituales ayunos, renuncias y mortificaciones añadía la meditación de las llagas de Cristo. «La práctica de la unión con mi Dios seguía siendo el objeto de mi examen particular. Añadí que quería actuar por amor; sólo por Jesús».La superiora advirtió que se hallaba frente a un alma singular, y le indicó: «Usted debe escribir su vida, mi querida hermana». Aunque Cristo en una locución le dijo que haría mucho bien con sus escritos, ella ignoraba que éstos no eran más que el compendio de su vida, aunque fue autora de otros textos y poesías. Esta petición exigió por su parte un notable esfuerzo. Le contrariaba profundamente hablar en primera persona, viéndose obligada a escribir repetidamente el pronombre «yo». Reconoció que era lo que más le había costado en la vida. Por fortuna obedeció, y gracias a ello se conservan las profundas huellas que el amor de Dios iba trazando en su espíritu. En la redacción se percibe alegría y esperanza, una confianza y fe inalterables. Al profesar en 1923 tomó el nombre de Cecilia, por su vínculo con la música. Fue profesora de esta disciplina en el colegio.

Un día en medio de su «noche oscura» percibió sobrenaturalmente que Cristo se llevaba su corazón, quedándose Él en su lugar. Y en otra ocasión volvió con esta víscera purificándola con tanto amor que quedó abrasado en él; ella misma pudo soplar las cenizas, signo de la ruptura completa con su pasado. Después, volvió a ocupar su espacio en el pecho. Cuando Cristo le hizo entender que moriría el 15 de agosto de 1924 aludía a una muerte mística, no física. Ésta llegó el 4 de septiembre de 1929 tras una tuberculosis que le produjo incontables sufrimientos. Había dicho: «En el cielo yo seré mendiga de amor, esa es mi misión y la comienzo inmediatamente, daré la alegría». Juan Pablo II la beatificó el 20 de marzo de 1993.

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Foro


Los jóvenes e internet
Análisis del documento 'La Iglesia e Internet', que no ha perdido actualidad

Por Santiago Casanova Miralles

MADRID, 04 de septiembre de 2013 (Zenit.org) - No hace mucho que me encontré con el documento “La Iglesia e Internet”, publicado por el Pontificio Consejo de las Comunicaciones Sociales nada menos que en ¡2002! Me parece un documento imprescindible para entender la postura de la Iglesia ante la realidad de la red y de las redes sociales. Luego, es verdad, el mismo Papa Benedicto XVI, y ahora Francisco, le han dado una continuidad arrolladora a este asunto.

No voy a pararme en muchos de los puntos del documento. ¡Hay tanto que vale la pena! Pero sí quiero dedicar hoy unas líneas a su parte final, a las recomendaciones que se hacen a los dirigentes eclesiales, agentes pastorales, catequistas y educadores, padres y, finalmente, niños y jóvenes. Y en estos últimos quiero centrar mi atención.

La Iglesia es muy clara con los jóvenes y con sus formadores en cuanto a internet y a las redes sociales:“Internet pone al alcance de los jóvenes en una edad inusualmente temprana una inmensa capacidad de hacer el bien o el mal, a sí mismos y a los demás.”

La Iglesia llama a los jóvenes a usar Internet adecuadamente, a enriquecerse con él y enriquecer la vida de otros, a prepararse con responsabilidad para su futuro, a usarlo como un medio privilegiado para hacer el bien. No sólo eso: la Iglesia llama los jóvenes a ir contracorriente, ejercer la contracultura y prepararse para ser perseguidos por defender lo verdadero y lo bueno también en este medio. Muy fuerte.

Esto que la Iglesia pide no es automático. Requiere de discernimiento, educación, formación y, también, de la fuerza del Espíritu. Lo último sólo se puede pedir incesantemente en la oración y llevando un vida cristiana plena, en comunidad y participando de los sacramentos. Lo primero sólo requiere determinación y manos a la obra.

Discernimiento: Nuestros chicos y chicas deben saber discernir. Discernir lo que es bueno y lo que es malo, lo que les conviene y lo que no. Discernir qué fotos compartir, qué mensajes publicar. Discernir qué retuitear y a quién seguir. Discernir qué webs visitar. Discernir cuándo hablar y cuándo callar. Discernir su tarea concreta como cristiano en la red, su llamada particular, su misión. Discernir qué haría Jesucristo en cada situación que se les presente. Esta tarea requiere aprendizaje, escucha y silencio. Discernir requiere haber aprendido a hacerlo. Por eso necesitan nuestra ayuda. Sus educadores, padres y catequistas debemos acompañarlos, vivir cerca de ellos en su “estar” en internet y en las redes sociales. Debemos acostumbrarles y ayudarles a hacer lo mismo fuera de internet y hacer del discernimiento una constante en su vida.

Educación: Antes nuestros padres nos enseñaban a manejarnos y actuar en la calle, en el colegio, en casa… No ir con extraños, con quién no hablar, qué situaciones evitar, cómo actuar con nuestros mayores, el respeto a la autoridad… Ahora se sigue haciendo todo esto (cuando se hace) pero nadie ha afrontado la parte de la red. ¿Quién educa para estar en la red? ¿Quién enseña a niños y jóvenes cómo estar, con quién relacionarse? ¿Quién habla de la amistad en las redes y conoce a los amigos de nuestros chicos en las redes? ¿Quién enseña cómo actuar ante un ataque, cómo defender al débil, cómo levantar la mano cuando se necesita? Hay una laguna que debe ser cubierta de forma urgente. Para ello es imprescindible que padres, educadores y catequistas nos movamos en la red con soltura y entendamos sus resortes.

Formación: Internet es un lugar con una potencialidad enorme. Hay que conocerlo. No basta con estar. Hay que conocer su funcionamiento, sus reglas, las leyes que lo regulan, las implicaciones que tiene un desliz, los detalles de la privacidad, las huellas que uno deja cuando se mueve en sus rincones… Nuestros jóvenes sólo serán buenos testigos del Evangelio si son prudentes como serpientes y sencillos como palomas. No sirve la buena voluntad, la ingenuidad… Cuando un joven quiere conducir, va al autoescuela. Cuando queremos trabajar, antes pasamos por la universidad o por los planes de formación profesional. No puede ser distinto aquí. Y ya que esta formación, por ahora, no se aborda en planes de estudios en la escuela habrá que ser audaces y hacer propuestas creativas para formar a los nuestros.

Internet es tarea y misión para todos. La Iglesia nos pide que estemos y que lo hagamos como creyentes. No llega con compartir una bonita frase en Facebook o tuitear un versículo del salmo del día. No llega con querer estar. Si no sabes discernir y no estás educado o formado, no eres un cristiano útil. La red te devorará.

No podemos abandonar a los jóvenes en este duro camino. Abandonarlos sería claudicar y no seguir las directrices de la Iglesia. Como un día dijo Pablo VI, cada uno deberá responder ante Dios por sus acciones también en este medio. Tomemos nota y seamos valientes. No hay excusas.

* Santiago Casanova Miralles es laico escolapio y miembro del staff de iMisión

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Los obispos no somos príncipes
Reflexiones del obispo de San Cristobal de las Casas

Por Felipe Arizmendi Esquivel

SAN CRISTóBAL DE LAS CASAS, 04 de septiembre de 2013 (Zenit.org) - La gran mayoría de los obispos mexicanos procedemos de clase humilde; desde nuestra infancia hemos estado acostumbrados a la austeridad y a una vida simple, como fue en el Seminario. Muchos obispos viven en diócesis pobres, conviven con el pueblo y no le ponen precio a su servicio en las comunidades. Comemos lo que nos ofrecen, muchas veces un sabroso caldo de pollo de rancho, con tortillas calientitas; en algunos lugares ni cuchara usan y nos adaptamos a la realidad, sin exigir privilegios. Nuestro pueblo nos atiende con todo su corazón y nos ofrecen lo mejor que tienen, dentro de sus limitaciones. En algunos casos, quisiera no aceptar una moneda de diez pesos, unos huevitos que me lleva una pobre mujer, frutas o verduras, no por desprecio, sino porque en su pobreza nos dan lo que ellos necesitarían para su alimento. El amor entre el pueblo sencillo y su pastor, sostenido por la fe, es algo que nos alienta y sostiene. Nos dejan a veces su camita, para que podamos pernoctar, aunque ellos se acuesten en el suelo; y si no aceptamos, se sienten rechazados.

Sin embargo, es real la tentación de subir de categoría social y de considerar como “normal” que se tome en cuenta nuestra jerarquía. Algunos laicos de buena posición social nos comparten sus bienes, nos ofrecen banquetes en los que, quienes procedemos de ambientes rurales, no sabemos ni usar los diferentes tipos de cubiertos, y existe el peligro de considerarnos algo así como “príncipes”, con una serie de derechos para una vida muy holgada, semejante a la de los líderes mundanos. Podemos olvidarnos de nuestras raíces y ubicarnos en una posición que no era la nuestra. Hay personas que se imaginan que la vida de los obispos está al nivel de los gobernadores, o al menos de los presidentes municipales de ciudades importantes.

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Al respecto, el Papa Francisco ha sido muy claro. Dijo a los nuncios, que colaboran con él para proponer candidatos al episcopado: “En la delicada tarea de llevar a cabo la investigación para los nombramientos episcopales, estad atentos a que los candidatos sean pastores cercanos a la gente. Este es el primer criterio. Pastores cercanos a la gente. ¿Es un gran teólogo, una gran cabeza? Que vaya a la universidad, donde hará mucho bien. ¡Pastores! Los necesitamos. Que sean padres y hermanos, que sean mansos, pacientes y misericordiosos; que amen la pobreza, interior como libertad para el Señor, y también exterior como sencillez y austeridad de vida; que no tengan una psicología de príncipes. Estad atentos a que no sean ambiciosos, que no busquen el episcopado. Los que buscan el episcopado…, no, no funcionan. Y que sean esposos de una Iglesia, sin estar en constante búsqueda de otra. Que sean capaces de guardar el rebaño que les será confiado, o sea, de tener solicitud por todo lo que lo mantiene unido; de velar por él, de prestar atención a los peligros que lo amenazan, pero sobre todo capaces de velar por el rebaño, de estar en vela, de cuidar la esperanza, que haya luz y sol en los corazones; de sostener con amor y con paciencia los designios que Dios obra en su pueblo. Que los pastores sepan estar ante el rebaño a fin de indicar el camino, en medio del rebaño para mantenerlo unido, detrás del rebaño para evitar que nadie se quede atrás. El pastor debe moverse así”.

Y ante los obispos directivos del CELAM remarcó: “El Obispo debe conducir, que no es lo mismo que mandonear (sic). Los Obispos han de ser pastores, cercanos a la gente, padres y hermanos, con mucha mansedumbre; pacientes y misericordiosos. Hombres que amen la pobreza, sea la pobreza interior como libertad ante el Señor, sea la pobreza exterior como simpleza y austeridad de vida. Hombres que no tengan ‘psicología de príncipes’. Hombres que no sean ambiciosos y que sean esposos de una Iglesia sin estar a la expectativa de otra”.

COMPROMISOS

Ayúdenos a los obispos a vivir un estilo de vida sencillo y austero. Por favor, no nos mal acostumbren a otra forma de vida que no nos corresponde. Corríjanos, si es necesario, pero nos ayudarán más si lo hacen en una amistad cercana y sincera. Oren por nosotros.

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