Les recibe en audiencia

El Papa agradece a los Caballeros de Colón el apoyo que ofrecen siempre a la Santa Sede

 

«Quiero expresaros mi gratitud por el incesante apoyo que vuestra Asociación ofrece desde siempre a la Santa Sede». Con estas palabras el Santo Padre ha agradecido a los Caballeros de Colón, sus oraciones y su testimonio de fe, esta mañana al recibirlos en audiencia en la Sala Clementina del palacio apostólico vaticano, en ocasión de un encuentro que están celebrando en Roma.

10/10/13 6:54 PM


(VIS/EWTN) El Papa señaló que el apoyo de los Caballeros de Colón «encuentra una expresión particular en el Fondo Vicarius Christi, que es una señal elocuente de su solidaridad con el Sucesor de Pedro en su preocupación por la Iglesia universal, pero también es visto en las oraciones diarias, sacrificios y trabajos apostólicos de tantos Caballeros en sus Concilios locales, sus parroquias y sus comunidades».

El Santo Padre expresó su deseo de que «la oración, el testimonio de la fe y la preocupación pornuestros hermanos y hermanas en necesidad siempre sean los tres pilares que soporten su trabajo, tanto individualmente como colectivamente».

Nuevos caminos para ser levadura del evangelio

El Papa les ha pedido que «En fidelidad a la visión del Venerable Padre Michael McGivney (el fundador de los Caballeros de Colón)», «continúen buscando nuevos caminos para ser levadura del Evangelio y una fuerza para la renovación espiritual de la sociedad».

«Como el presente Año de la Fe se acerca a su fin, les encomiendo a todos ustedes de forma especial a la intercesión de San José, el protector de la Sagrada Familia de Nazaret, que es un modelo admirable de esas muchas virtudes de fuerza tranquila, integridad y fidelidad con la que los Caballeros de Colón están comprometidos a preservar, cultivar y pasar a futuras generaciones de hombres católicos».

Antes de impartir a los Caballeros de Colón y a sus familias su Bendición Apostólica, el Santo Padre les pidió que le recordaran en sus oraciones y les aseguró su «gran afecto en el Señor».