El Departamento de Pastoral de la Carretera, vinculado a la Comisión Episcopal de Migraciones, en la Conferencia Episcopal, ha concluido sus Jornadas Anuales de Delegados Diocesanos 2013.
Han tenido lugar en Madrid, del 7 al 10 de octubre, días en los que, disfrutando de un ambiente acogedor y en fraternal alegría, se ha tenido tiempo para compartir las diversas realidades diocesanas, para informarse y también formarse en lo referente a esta peculiar y necesaria pastoral.
El día 8 de octubre, con la presencia de Mons. Ciriaco Benavente, Obispo Presidente de la Comisión de Migraciones, Mons. Robinson Wijesinghe, del Pontificio Consejo de Migraciones de Roma y el Subdirector de la DGT, D. Federico Fernández, ante la presencia de los Delegados Diocesanos, se inauguraba en la Delegación General de Tráfico (DGT) una exposición titulada “HUELLAS DE LA PASTORAL DE LA CARRETERA”. Los carteles y el material expuestos, constituyen un buen espejo retrovisor para mirar lo mucho que la Iglesia, a lo largo de estos 50 años, ha hecho en el tema de la carretera.
De la mano del Subdirector de la DGT, se visitó la sala de pantallas en la Delegación y se recibió amplia información sobre su funcionamiento y seguimiento del tráfico a nivel nacional. No ha faltado, por parte del Subdirector, el agradecimiento a la Iglesia por su trabajo en bien de la Educación y Responsabilidad Vial, como demuestran sobradamente los materiales expuestos.
En la misma sede de la DGT, Dª Mónica Colás, Subdirectora General de Intervención y Políticas Viales, impartía la primera ponencia de las Jornadas, titulada “LA SEGURIDAD VIAL, UNA RESPONSABILIDAD COMPARTIDA”. Ya por la tarde, Mons. Robinson Wijesinghe, del Pontificio Consejo de Migraciones de Roma, impartía la segunda ponencia, “LA PASTORAL DE LA CARRETERA Y LA NUEVA EVANGELIZACIÓN”.
A media tarde se producía la visita de la Directora de la DGT, Dª María Seguí, que trasladó a los participantes al encuentro el trabajo y preocupaciones de la DGT para disminuir, cada vez más, los accidentes en las carreteras. Tuvo unas palabras de agradecimiento y de aliento para la Iglesia y, en particular, para el Departamento de Pastoral de la Carretera, por el empeño y trabajo de estos casi cincuenta años. En un ambiente relajado, Dª María Seguí respondió a cuantas preguntas la formularon los presentes.
Durante la mañana del 9 de otubre se ofrecieron dos nuevas ponencias. Una a cargo del diácono permanente D. Bienvenido Nieto, Consejero Asesor de Educación Vial, con el título “LA EDUCACIÓN VIAL EN LA FAMILIA”, y la otra correspondió a D. Julio Aparicio, Presidente de la editorial AEOL, titulada “EDUCACIÓN VIAL ESCOLAR- VALORES MORALES Y ÉTICOS”. Ambas ponencias fueron seguidas con gran interés por los participantes, insistiendo los ponentes en la la necesidad de la educación vial desde la escuela y la propia familia. Ciertos comportamientos no requieren solo de las palabras sino que precisan el propio ejemplo, donde puedan mirarse los hijos; de ahí, que ambos ponentes insistieran mucho en la necesidad vital de que sea en la propia familia y en la escuela, donde los niños aprendan los valores de la seguridad vial.
Por la tarde era D. Lorenzo de Santos, profesor del I.S.P. de la Universidad Pontificia de Salamanca, quien daba una interesante ponencia titulada “EL CAMINO EN LA BIBLIA: DESCUBRIR A DIOS, ENCONTRAR AL HERMANO”. En su exposición ofreció un recorrido por las Sagrada Escrituras, en ambos testamentos, y se refirió a los grandes personajes bíblicos.
Por las tardes, al término de las sesiones, los paticipantes pudieron intercambiar opiniones y trasladar las variadas experiencias en las distintas diócesis, así como avanzar los proyectos inmediatos en los que se trabaja pastoralmente.
El día 10 se dedicó, como ya va siendo costumbre, a la convivencia entre los delegados asistentes, procedentes de Andalucía y Galicia, de Extremadura y Aragón, sin olvidar a quienes venían desde Castilla y La Rioja. Así, a primera hora, los Delegados Diocesanos de Pastoral de la Carretera se trasladaron hasta la cripta de la Almudena para celebrar la Eucaristía, que estuvo presidida por Mons. Robinson. El resto de la mañana se dedicaba a visitar el museo y la catedral de la Almudena.
(José Aumente Domínguez- Director de la Pastoral de la Carretera)