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El mundo visto desde Roma

Servicio diario - 26 de octubre de 2013

El papa Francisco

Las familias festejaron su jornada junto al papa Francisco
Tantos testimonios, y la alegría de miles de familias que llenaron la plaza y vía de la Conciliación

El discurso completo del papa en la Jornada Mundial de la Familia
Los cristianos se casan sacramentalmente, porque son conscientes que necesitan la gracia, no para decorar la vida pero para hacernos fuertes

El santo Padre Francisco recibe al presidente de Panamá
Martinelli obsequia al papa Francisco una imagen de Sta. María de la Antigua

'Cuando visite Argentina, iré a Chile y Uruguay. No creo antes del 2016'
El papa Francisco lo confía en el Vaticano al recibir a una delegación uruguaya de ex-alumnos jesuitas

Santa Sede

Las homilias de Francisco en Santa Marta se vuelven un libro
Se suma a otros cuatro ya publicados de la colección 'Las palabras de Francisco'

Premio Ratzinger de Teología: El papa lo entrega
Benedicto XVI siguió la voz del Señor en su conciencia iluminada al escribir los libros sobe Jesús de Nazaret

Venezuela: nuevo nuncio apostólico
Es Mons. Aldo Giordano. Nombrados también los dos obispos auxiliares de Guayaquil

Mirada al mundo

Shangai: la primer carta del obispo arrestado fue oscurecida
Era una reflexión de mons. Ma Daqin sobre la Lumen Fidei

Familia

El prelado del Opus Dei encuentra en Roma a varios cientos de familias
En el marco de la Jornada Mundial de las Familias, con preguntas y respuestas

La Jornada de las Familias testimonia un proyecto de Dios posible y real
Es necesario una pastoral familiar transversal cuyo eje sea la vocación al amor

SANTOS Y BEATOS: EPOPEYAS DE AMOR. EJEMPLO DEL DÍA

Beata Celine Chludzinska Borzecka
«Polaca. Fundadora, junto a su hija, de las Hermanas de la Resurrección; es el primer caso que se da en la Iglesia. Perdió varios hijos y esposo, viendo en ello la mano de Dios que le permitió ser religiosa, como siempre anheló»


El papa Francisco


Las familias festejaron su jornada junto al papa Francisco
Tantos testimonios, y la alegría de miles de familias que llenaron la plaza y vía de la Conciliación

Por H. Sergio Mora

CIUDAD DEL VATICANO, 26 de octubre de 2013 (Zenit.org) - La Jornada Mundial de la Familia fue una fiesta junto al papa Francisco. El santo padre ingresó acompañado por tantos pequeños. Al lado del altar presidía la ceremonia un ícono de la Sagrada Familia.

La niña Federica, de unos diez años en el micrófono le dijo al papa “Te quiero mucho” y le muestró un dibujo, le confió que su mamá le ha enseñado a cocinar algunas cosas, y a rezar por los otros. Cientos de globos fueron dejados libres y volaban mientas los diversos coros entonaron sus cantos y los fieles agitaban sus brazos.

Mons. Paglia le llamó: “papa, Francisco, o mejor papá Francisco”. Y recordó que los papás abuelos y niños allí presentes en la plaza le hicieron “recordar el sueño del profeta Zacarías” y de la alegría de la fe, por la que “hacemos fiesta”, junto "con la presencia de familias de más de 75 países". Recordó también a las familias en dificultad como las de Siria, probadas por la guerra y a quienes la plaza les envió un aplauso de apoyo. En la celebración festiva participaron por algunos minutos acróbatas circenses y artistas de calle que amenizaron la fiesta con algunas demostraciones.

Una mamá recordó la gran aventura que es la familia, y varias pareja de jóvenes indicaron la fecha en que se van a casar y las dificultades que deberán enfrentar, como una de romanos al confiar que a pesar de no tener un trabajo seguro y no saber como van a pagar el alquiler, decidieron casarse en primavera.

También el testimonio de unos abuelos que desde España vinieron a Roma con toda la familia, sobrinos incluidos. En medio de todo esto el santo padre le bendijo el niño a una madre en cinta. 

Se ecuchó el testimonio de una mujer siria, que contó el drama y el miedo que les empujó a escapar a Jordania y que viven el drama del exilio y de la guerra. Y su esposo agradeció al santo padre la vigilia de oración por la paz en Siria'.

Las familias en misión estuvieron presentes, fue leída la carta de una familia italiana, de Florencia, en misión en tierra musulmana; y de otra familia con una niña, del Camino Neocatecumenal, que ahora están Albania y que dejaron sus trabajos y vida en Italia para servir allí a la Iglesia.

No faltaron dos abuelos, directores de películas, de convicciones diversas, que quisieron presentar su testimonio al papa Francisco. Fueron Pablo y Victorio Taviani, quienes sufrieron la barbarie del nazi-fascismo en la Segunda Guerra Mundial, sobre la cual hicieron un film, como otro sobre el genocidio del pueblo armeno.

También estuvo el testimonio de una familia, suegros incluidos, que habían llevado a vivir con ellos a la otra abuela, a pesar de que la casa era pequeña y de las dificultades que esto significaba.

Una familia joven de Lampedusa, de pescadores, contaron cuando les llamaron para ayudar a los desesperados que desembarcaban, con particulares tremendos. Junto al de un ingeniero agrario de Nigeria que se escapó de África y en la estiva de una barca vio morir a 25 inmigrantes, entre los cuales un primo suyo, antes de llegar a la isla italiana.

Hacia el final del evento, el papa dirigió sus palabras al público, que lo interrumpió varias veces con sus aplausos. Al concluir el santo padre dio su bendición y dijo: "No podemos irnos sin pedirle a la Virgen que nos proteja a todos", y rezó un Ave María

A continuación el papa Francisco saludó a diversas personas y por más de media hora pasó con el jeep abierto, para saludar a las familias presentes en la plaza y vía de la Conciliazione, desde donde mucha gente siguió la ceremonia gracias a las pantallas gigantes.

Leer el texto completo de las palabras del papa

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El discurso completo del papa en la Jornada Mundial de la Familia
Los cristianos se casan sacramentalmente, porque son conscientes que necesitan la gracia, no para decorar la vida pero para hacernos fuertes

Por Redacción

ROMA, 26 de octubre de 2013 (Zenit.org) - ¡Queridas familas, ¡'buona sera' y bienvenidas a Roma!

Han venido aquí como peregrinos desde muchas partes del mundo, para profesar la fe delante del la tumba de San Pedro. Esta plaza les acoge y abraza: somos un sólo pueblo, con una sola alma, convocados por el Señor, que nos ama y sostiene. Saludo también a todas las familias que están unidas a través de la televisión y de internet: una plaza que se extiende sin confines.

Quisieron llamar a este momento “¡La familia vive la alegría de la fe!”. ¡Me gusta este título! He escuchado las experiencias de ustedes, los casos que han contado. Vi tantos niños, tantos abuelos... Sentí la tristeza de las familias que viven en situación de pobreza y de guerra. He oído a los jóvenes que se quieren casar, aún entre mil dificultades. Y entonces nos preguntamos: ¿Cómo es posible, hoy, vivir la alegría de la fe en familia? ¿Es posible o no es posible vivir esta alegría? 

En el evangelio de Mateo, hay una palabra de Jesús que nos ayuda: 'Venid a mí todos los que están cansados y oprimidos, que yo les aliviaré'. Muchas veces la vida es pesada y tantas veces trágica, lo hemos apenas escuchado. Trabajar es fatigoso; buscar trabajo es fatiga y encontrar trabajo hoy nos pide tanta fatiga.

Pero, aquello que más pesa en la vida, no es esto, lo que más pesa es la falta de amor. Pesa no recibir una sonrisa, no ser acogidos. Pesan ciertos silencios, a veces aún en familia, entre marido y esposa, entre padres e hijos, entre hermanos. Sin amor, el cansancio se hace más pesado. Pienso en los ancianos solos, a las familias en dificultad porque no tienen ayuda para sostener a quienes en casa precisan de especiales atenciones y cuidados. 'Venid a Mí todos los que están cansados y oprimidos', dice Jesús.

Queridas familias, el Señor conoce nuestros cansancios, los conoce y los pesos de nuestra vida. Pero conoce también nuestro deseo profundo de hallar la alegría del alivio. ¿Se acuerdan? Jesús dijo: 'Vuestra alegría sea plena'. Jesús quiere que nuestra alegría sea plena.

Lo dijo a los apóstoles, y hoy lo repite a todos nosotros. Así, esta es la primera cosa que quiero compartir con ustedes en esta tarde, y es una palabra de Jesús: 'Venid a mi, familias de todo el mundo --dice Jesús-- y yo les aliviaré para que vuestra alegría sea completa'.

Y esta palabra de Jesús llévenla a casa, en el corazón, compártanla en familia, él nos invita a ir hacia él para darnos a todos la alegría.

La segunda palabra, la tomo del rito del matrimonio. En este sacramento, quien se casa dice: 'Prometo serte fiel, amarte y respetarte, en la alegría y en el dolor, en la salud y en la enfermedad, y de honrarte y amarte todos los días de nuestra vida'. En aquel momento, los esposos no saben qué sucederá, no saben cuáles son las alegrías y las tristezas que les esperan. Parten, como Abrahan; se ponen juntos en camino. Esto es el matrimonio, partir y caminar juntos, de manos dadas, entregándose en la mano grande del Señor. Mano en la mano por toda la vida y sin hacer caso de esta cultura de lo provisorio que nos corta la vida a pedazos.

Con esta confianza en la fidelidad de Dios, todo se enfrenta, sin miedo, con responsabilidad. Los esposos cristianos no son ingenuos, conocen los problemas y los peligros de la vida. Pero no tienen miedo de asumir la propia responsabilidad, delante de Dios y de la sociedad. Sin huir ni aislarse, sin renunciar a la misión de formar una familia y traer al mundo hijos.

Pero hoy, santo padre, es difícil. ¡Seguro que es difícil! ¡Por eso, es necesaria la gracia del sacramento! ¡Los sacramentos no sirven para decorar la vida; ¡que lindo matrimonio, que linda la ceremonia, que linda la fiesta! Eso no es la gracia del sacramento, eso es una decoración y la gracia no es para decorar la vida pero para hacernos fuertes en la vida, para hacernos corajosos y poder ir adelante! Sin aislarse, siempre juntos.

Los cristianos se casan sacramentalmente, porque son conscientes que necesitan el sacramento. Necesitan a este para vivir unidos entre sí y cumplir la misión de padres. 'En la alegría y en el dolor, en la salud y en la enfermedad'. Así dicen los esposos en el matrimonio y rezan juntos y con la comunidad, ¿por qué? Solamente porque es costumbre hacerlo así? No, lo hacen, porque les sirve para el largo viaje que deben hacer juntos, no a tramos, necesitan de la ayuda de Jesús, para caminar juntos con confianza, para acogerse uno al otro cada día y perdonarse cada día.

Y esto es importante en las familias, saber perdonarse, porque todos nosotros tenemos defectos, todos y a veces hacemos cosas que no son buenas y le hacen mal a los otros. Tener el coraje de pedir perdón en familia cuando nos equivocamos. Hace pocas semanas atrás recordé en esta plaza que para llevar adelante una familia es necesario usar tres palabras, quiero repetirlo, tres palabras: permiso, gracias y perdón. Tres palabras claves.

Pidamos permiso para no ser invasores. En familia: ¿Puedo hacer esto, te gusta que haga esto? El leguaje del permiso. Demos gracias, gracias por el amor, pero dime tú, cuántas veces al día le dices gracias a tu mujer o a tu marido? Cuántos días pasan sin decir esta palabra: gracias.

Y todos nos equivocamos, y a veces alguno se ofende en la familia, o en el matrimonio. A veces, digo, vuelan los platos, se dicen palabras fuertes, pero escuchen este consejo: no terminen la jornada sin hacer la paz, cada día. Disculpa y se recomienza. Permiso, gracias, perdón. ¿Lo decimos juntos?: Permiso, gracias, disculpa, usemos estas tres palabras en familia, perdonarse cada día.

En la vida, la familia experimenta muchos momentos hermosos: el descanso, la comida juntos, el paseo hasta al parque o por los campos, la visita a los abuelos, o a una persona enferma... Pero, si falta el amor, faltará la alegría, faltará la fiesta. Porque el amor nos lo da siempre Jesús: él es la fuente inagotable y se da a nosotros en la Eucaristía. Allí en el sacramento, Jesús nos da su palabra y el pan de la vida, para que nuestra alegría sea completa.

Y para concluir, está aquí delante de nosotros, este ícono de la presentación de Jesús en el templo. Es un ícono verdaderamente bello e importante. Contemplémoslo y dejémonos ayudar por esta imagen. Como todos ustedes, también los protagonistas de la escena tienen su camino: María y José se pusieron en camino, yendo como peregrinos a Jerusalén, obedeciendo a la ley del Señor; y también el viejo Simeon y la profetisa Ana, también ella muy anciana, van al templo impelidos por el Espíritu Santo. La escena nos muestra este entrecruzarse de tres generaciones: el entrelazarse de tres generaciones,

Simeon toma en los brazos al niño Jesús, en quien reconoce al Mesías, y Ana es representada en el gesto de alabar a Dios y anunciar la salvación a quien esperaba la redención de Israel. Estos dos ancianos representan la fe como memoria.

Y les pregunto: ¿Ustedes escuchan a los abuelos?, ¿le abren el corazón a la memoria que nos dan los abuelos? Los abuelos son la sabiduría de la familia, la sabiduría de un pueblo, y un pueblo que no escucha a los abuelos es un pueblo que muere. Hay que scuchar a los abuelos.

María y José son la familia santificada por la presencia de Jesús que es el cumplimiento de todas las promesas. Cada familia, como la de Nazaret está insertada en la historia de un pueblo y no puede existir sin las generaciones anteriores. Y por ello tenemos aquí a los abuelos, los abuelos, y los niños. Los niños aprenden de los abuelos y de las generaciones anteriores.

Queridas familias, también ustedes son parte del pueblo de Dios. Caminen felices, juntamente con este pueblo. Permanezcan siempre unidas a Jesús y llévenlo a todos con vuestro testimonio. Gracias por haber venido. Juntos, hagamos nuestras estas palabras de san Pedro, que nos dan fuerza y continuarán a darnos fuerza en los momentos difíciles: '¿Señor, de quién iremos? ¡Tú tienes palabras de vida eterna!'. ¡Con la gracia de Cristo, vivan la alegría de la fe! ¡El Señor les bendiga y María, nuestra Madre, les proteja y acompañe!

(RED/HSM)

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El santo Padre Francisco recibe al presidente de Panamá
Martinelli obsequia al papa Francisco una imagen de Sta. María de la Antigua

Por H. Sergio Mora

CIUDAD DEL VATICANO, 26 de octubre de 2013 (Zenit.org) - El santo padre Francisco recibió esta mañana en el Vaticano en audiencia privada, al presidente de Panamá, Ricardo Martinelli. Un encuentro marcado por el regalo de una imagen de la Virgen Santa María de La Antigua que fue bendecida poco antes en su nuevo lugar, situado en los jardines del Vaticano.

Antes de la audiencia, a las 10 de una mañana soleada y cálida del otoño romano, el cardenal Giuseppe Bertello, presidente de la Gobernación del Estado Ciudad del Vaticano bendijo la imagen que representa a la Virgen María, en esta advocación con la que es venerada en Panamá.

Estaban presentes en esta zona de los jardines, cercana a la Gruta de Lourdes, el arzobispo de Panamá, José Domingo Ulloa; el arzobispo emérito, José Dimas Cedeño, y monseñor José Luis Lacunza, presidente de la Conferencia Episcopal Panameña. 

En la placa al pié de la imagen está escrito: “Generosa donación del presidente de la República y del pueblo panameño. Santa María la Antigua, patrona de Panamá. 1513 – 2013). La fecha 1513 se refiere a la creación de la primera diócesis en tierra firme americana y María bajo esta advocación fue proclamada la patrona del país el año 2000 por la Conferencia Episcopal Panameña.

Estaba allí el presidente Martinelli, acompañado por su esposa Marta Linares. Estaba también la ex presidenta Mirella Moscoso (1999-2004) y las personas del protocolo. Es la segunda visita oficial de Martinelli, puesto que en septiembre de 2009 fue recibido por Benedicto XVI en la residencia de verano de los papas, Castel Gandolfo.

Concluida la ceremonia, la delegación se acercó al Palacio Apostólico, siempre en el Vaticano, donde el presidente fue recibido por el santo padre Francisco.

A la llegada del presidente, el papa fue a recibirle con un ¡Bienvenido! El mandatario le preguntó ¿Y cómo le está yendo con este nuevo puesto? A lo que el papa riendo le respondió: “¡Vaya pregunta!”. Martinelli le interrogó también sobre cómo iba su equipo, el san Lorenzo. “Bueno, ayer perdimos”, le dijo el papa. Después se quedaron a solas 25 minutos.

En el intercambio de regalos, el presidente le ha dado una réplica bañada en oro, de una especie de escultura de la época pagana realizada en oro macizo por los indígenas panameños, relacionada a las deidades del agua.

El papa en cambio, le regaló un mosaico con un medallón central que representa un proyecto de la plaza de San Pedro que no se concluyó. Y le ha entregado un libro sobre el documento de Aparecida. “No lo lea de golpe --le dijo el papa-- porque va a ser pesado, vaya leyendo las partes que más le interesan”.

La Sala de prensa del Vaticano indicó en un comunidaco que "en las cordiales conversaciones, se trataron algunos temas relacionados con la situación actual en el País, en particular sobre las políticas sociales puestas en marcha por el Gobierno, y los proyectos de desarrollo para la nación. Se recordó asimismo la larga tradición cristiana del País, las históricas relaciones bilaterales, con especial interés en las actuales relaciones entre la Iglesia y el Estado. En este contexto, también se expresó gratitud por el regalo de una estatua de Santa María La Antigua, Patrona de la Nación, ofrecida al Pontífice por el Jefe de Estado y colocada en los jardines del Vaticano."

El presidente después estuvo con 'ministro de exteriores' del Vaticano, 'Dominique Mambertí', secretarios para las Relaciones con los Estados.

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'Cuando visite Argentina, iré a Chile y Uruguay. No creo antes del 2016'
El papa Francisco lo confía en el Vaticano al recibir a una delegación uruguaya de ex-alumnos jesuitas

Por Redacción

CIUDAD DEL VATICANO, 26 de octubre de 2013 (Zenit.org) - Hoy a medio día, en la Sala de los Papas del Palacio Apostólico, el santo padre Francisco recibió en audiencia a un grupo de ex-alumnos jesuitas de Uruguay, indicó la Sala de prensa del Vaticano.

"Nuevamente les quiero agradecerles la visita y el saludo. ¡Me traen tantos recuerdos de allá! Lo único que me extraña es que no haya ninguno con el mate. ¿No se animaron? Ahí les faltó la veta uruguaya. Porque cuando vino el Presidente de ustedes estábamos con el mate. Bueno, gracias en serio" dijo el santo padre.

"Veo --prosiguió el pontífice-- que hay muchos chicos; es una promesa y una esperanza. A mí esto me trae muchos recuerdos de los compañeros que han organizado esto, y cosas lindas".

"No sé cuándo está planeado ir allá" indicó el papa refiriéndose a un viaje Montevideo y precisó que no antes del 2016. "Antes del dieciséis no, seguro. Pero lo que sí es seguro es que si visito Argentina, tengo que visitar Chile y Uruguay, los tres juntos. Así que estaremos allí".

"Bueno, les agradezco todo de nuevo, y les pido un favor, que recen por mí, ¿eh? Porque acá la gente es muy buena, son buenos compañeros y todos trabajan juntos, pero el trabajo es mucho, y no se da abasto. Recen por mí --concluyó-- por los colaboradores, para que podamos seguir adelante. ¿Eh? Gracias, muchas gracias.

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Santa Sede


Las homilias de Francisco en Santa Marta se vuelven un libro
Se suma a otros cuatro ya publicados de la colección 'Las palabras de Francisco'

Por Redacción

CIUDAD DEL VATICANO, 26 de octubre de 2013 (Zenit.org) - “Homilias de la mañana” es el título de la nueva publicación del Librería Editora Vaticana que contiene las palabras del papa Francisco durante las misas celebradas cotidianamente en la capilla de la residencia de Santa Marta, en el Vaticano,

Incluyen las realizadas en el periodo del 22 de marzo al 6 de julio, más las tres homilías en la residencia del Sumaré, en Río de Janeiro, durante la Jornada Mundial de la Juventud de este año.

El libro propone los textos publicados diariamente el periódico del Vaticano, L’Osservatore Romano y las “Homilías de la mañana” se suman a una serie de otras cuatro obras de la colección “Las palabras de Francisco” y sus títulos son: “Les pido que recen por mí”; “No se dejen robar la esperanza”; “Que bien se está aquí”; “La alegría de evangelizar”. Los tres primeros ya traducidos en español.

La introducción fue escrita por el teólogo Inos Biffi, que destaca la originalidad del estilo de Francisco, con su lenguaje “fácil”, pero a la vez “vivaz”, rica de metáforas y define las homilías como “un precioso manual de vida espiritual”, en las que el papa da una reflexión interior perspicaz a partir de situaciones humanas habituales, familiares a partir de “una convivencia lúcida con los problemas, las reacciones y los sentimientos de las comunidades y de las personas en general”.

Las homilías tratan de incontables temas que dicen respeto a la vida cristiana, como el perdón, la salvación ofrecida por Cristo, el rechazo al carrerismo, o sobre la hipocresía al misterio de Cristo.

“La obra, por lo tanto, constituye una invitación a la reflexión, ofreciendo al lector una variedad de consejos y de orientaciones ascéticas”, se lee en el comunicado de la LEV en que anuncia la publicación de las “Homilias de la mañana”.

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Premio Ratzinger de Teología: El papa lo entrega
Benedicto XVI siguió la voz del Señor en su conciencia iluminada al escribir los libros sobe Jesús de Nazaret

Por Redacción

CIUDAD DEL VATICANO, 26 de octubre de 2013 (Zenit.org) - El papa Francisco ha hecho entrega hoy en la Sala Clementina, en el Vaticano, de los premios Ratzinger 2013 de teología. Los dos galardonados con el Premio Ratzinger, establecido en 2011 por la "Fundación Vaticana Joseph Ratzinger-Benedicto XVI",  este año son: el profesor Richard A. Burridge, biblista inglés, decano del King College de Londres, y ministro de la Comunión Anglicana y el profesor Christian Schaller, laico, docente de teología dogmática y vicedirector del instituto Papa Benedicto XVI, de Ratisbona (Alemania). 

El papa Francisco quiso subrayar el don verdaderamente único que el papa emérito concedió a la Iglesia con los libros sobre Jesús de Nazaret. Cuando se publicó el primer volumen, recordó el santo padre, “algunos dijeron, que un papa no debía escribir libros sobre teología, sino encíclicas... Ciertamente, Benedicto XVI se había puesto este problema, pero incluso entonces como siempre, siguió la voz del Señor en su conciencia iluminada”.

“Con estos libros él no hizo magisterio, en el sentido propio, y tampoco un estudio académico. Él --precisó Francisco-- hizo un regalo a la Iglesia y a todos los hombres, de aquello que tenía de más preciado: su conocimiento de Jesús, fruto de años y años de estudio, de confrontación teológica, de oración, porque que Benedicto XVI hacía teología de rodillas, y todo ello lo puso a disposición de todos de la forma más accesible”.

Y consideró: “Nadie puede medir el bien que ha hecho con este don el papa Benedicto, sólo el Señor lo sabe. Pero todos tenemos la percepción, que muchas personas, gracias a los libros sobre Jesús de Nazaret, han alimentado su fe, han profundizado sobre ella o incluso se han acercado a Cristo por primera vez de manera adulta, combinando las exigencias de la razón con la búsqueda del rostro de Dios”.

Y al concluir felicitó a los galardonados también en nombre de su amado predecesor, con quien ha estado hace pocos días.

(RED/HSM)

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Venezuela: nuevo nuncio apostólico
Es Mons. Aldo Giordano. Nombrados también los dos obispos auxiliares de Guayaquil

Por Redacción

CIUDAD DEL VATICANO, 26 de octubre de 2013 (Zenit.org) - El santo padre Francisco nombró como nuncio apostólico en Venezuela a monseñor Aldo Giordano, quien era observador permanente de la Santa Sede ante el Consejo de Europa, informó hoy la oficina de prensa del Vaticano.

El arzobispo de Tamada remplazará así al anterior nuncio, Mons. Parolín que ahora ha sido nombrado Secretario de Estado del Vaticano, el encargo de mayor importancia en la curia romana. 

Giordano nació el 20 de agosto de 1954 en Cuneo, Italia. Fue ordenado sacerdote el 28 de julio de 1979. El 15 de mayo de 1995 fue elegido secretario general del Consejo de las Conferencias episcopales de Europa y en el 2002 capellán del papa. En 2006 se le nombró prelado del pontífice. El 7 de junio de 2008 fue nombrado observador permanente ante el Consejo de Europa en la ciudad de Estrasburgo.

 En ecuador, en cambio, el papa nombró a dos obispos auxiliares de Guayaquil: Mons. Giovanni Battista Piccioli, hasta ahora párroco de San Vicente, en la arquidiócesis de Portoviejo, asignándole la sede titular de Patara; y Mons. Bertram Víctor Wick Enzler, hasta la fecha Vicario episcopal y párroco de Santa Elena, en la misma Arquidiócesis de Guayaquil, asignándole la sede titular de Carpi.

(RED/HSM)

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Mirada al mundo


Shangai: la primer carta del obispo arrestado fue oscurecida
Era una reflexión de mons. Ma Daqin sobre la Lumen Fidei

Por Redacción

ROMA, 26 de octubre de 2013 (Zenit.org) - Mons. Tadeo Ma Daqin está aún en arresto domiciliario. Su reflexión sobre la encíclica "Lumen fidei", publicada en su blog, fue oscurecida. El pasado 8 de octubre, el obispo auxiliar de Shanghai había escrito una larga y profunda reflexión del título "la Lumen fidei nos ilumina", con su foto y su firma.

Lo indicó ayer la agencia Asia News, precisando que a pesar de ello en muchos blog y sitios web del mundo ha sido publicado.

La reflexión de mons. Ma recibió muchos comentarios positivos por lectores católicos de China. Algunos la juzgan como su "primer carta pastoral" y piden a las las autoridades que  liberen a mons. Ma, aislado desde el día de su ordenación, por haberse salido de la Asociación patriótica.

Un artículo de corte religioso, sobre el cual entrentato, e régimen de China comunista no quiere sentir hablar. El artículo con más de 13 mil caracteres chinos, comprende una introducción y cuatro secciones. 1. La fe y la felicidad que Dios nos ha donado, 2. Hemos conocido a Él en la fe, 3. Él nos ha dicho: no teman, 4. Como María, sigamos en modo decidido.

En el artículo, mons. Ma cita abundantemente la "Lumen fidei" y pide a los católicos agradecer a Dios por el don de la fe y sostenerla. Al final, el obispo invoca la intercesión de María, de Nuestra señora de Sheshan.

En estos últimos días, mons. Ma retomado la publicación de pequeñas notas en su weibo- el microblog chino- con algunas reflexiones cotidianas.

Los arrestos de mons.  Ma frenan o bloquean la vida de la diócesis. El 24 de octubre, Xie Huimin, un seminarista de Shanghai fue ordenado diácono y el día después fue ordenado sacredote. Pero la ordenación se hizo en Haimen y no en Shanghai y no fue celebrada por mons. Ma, sino por el obispo de Haimen (Jiangsu), mons. Shen Bin.

(RED/HSM)

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Familia


El prelado del Opus Dei encuentra en Roma a varios cientos de familias
En el marco de la Jornada Mundial de las Familias, con preguntas y respuestas

Por H. Sergio Mora

ROMA, 26 de octubre de 2013 (Zenit.org) - El prelado del Opus Dei, Javier Echevarría encontró este sábado por la mañana a cientos de familias, mayoritariamente residentes en Roma, pero algunas que vinieron a esta ciudad para la Jornada Mundial de la Familia y el encuentro con el papa Francisco en la plaza de San Pedro.

Se lo indicó a ZENIT, uno de los portavoces de la oficina de prensa del Opus Dei, Manuel Sánchez, que precisó como al inicio del encuentro “el prelado le ha pedido a los presentes que recen por el papa Francisco, porque el santo padre no busca nada para sí y en cambio necesita nuestra ayuda, y nuestro afecto”.

En el Gran Teatro de Roma, cercano a Saxa Rubra, las aproximadamente tres mil personas, le plantearon a Mons. Echevarría, preguntas sobre educación, transmisión de la fe y la vida cristiana en Familia, precisó el portavoz.

El dirigente de la oficina de prensa añadió que “el ambiente, a pesar de la gran cantidad de público era muy familiar” y que el prelado respondió a varias preguntas de los presentes y que les invitó a “empeñarse por las periferias del mundo y las que están alrededor nuestro”.

Respondiendo a un universitario de filosofía, el español Echevarría indicó que es necesario “ir entre la gente con la humildad de quien se pone gratuitamente al servicio de los otros, no para enseñar sino para aprender”.

Una pareja de esposos le preguntó qué contribución pueden dar los papás a los hijos y a los otros cónyuges. “Para hacer apostolado con otras familias y con los propios hijos ante todo es necesario ser una pareja feliz, donde el amor crece cada día y se vea como el marido y la mujer se quieran mutuamente”. Y el prelado precisó: “Acuérdense que la vocación matrimonial no tiene ungrado inferior, para quien no fue llamado a la vida consagrada”.

Hacia el final del encuentro con las familias, Mons. Echevarría respondió a una pregunta sobre don Alvaro del Portillo, el sucesor de san José María Escribá, y que será beatificado en breve. Recordó “que se hacía querer bien por su disponibilidad y simplicidad” y que “una vez cuando era universitario fue agredido al regreso de una catequesis, golpeado en la cabeza con una llave inglesa” y que supo transformar “su sufrimiento en ofrecimiento al Señor”.

Manuel Sánchez añadió que al final del encuentro, Mons. Echevarría se detuvo para saludar a diversos matrimonios con sus hijos, que por la tarde iban a participar al encuentro del papa con las familias.  

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La Jornada de las Familias testimonia un proyecto de Dios posible y real
Es necesario una pastoral familiar transversal cuyo eje sea la vocación al amor

Por Rocío Lancho García

CIUDAD DEL VATICANO, 26 de octubre de 2013 (Zenit.org) - Dentro del itinerario de encuentros organizados por el Año de la Fe, este fin de semana es el turno de las familias. Un momento con una importancia singular porque los matrimonios y las familias cristianas necesitan verse juntas y con el sucesor de Pedro, para afianzar todo lo que significa el potencial de la familia. Así lo confirma el obispo de Alcalá de Henares, monseñor Juan Antonio Reig Pla, que se encuentra en Roma para formar parte de esta celebración.

Tal y como nos recuerda el obispo, Juan Pablo II organizó dos tipos de Jornadas Mundiales: la de la Juventud y la de las Familias, la última celebrada en Milán con Benedicto XVI.

Estos no son solamente encuentros festivos, sino que al verse juntas todas estas familias se sienten reforzadas y se toma confianza al darse cuenta que el proyecto de Dios es posible. Y además de reforzar a los que ya viven la fe, puede animar a otros en un momento de dificultad; en una sociedad en la que la nupcialidad está descendiendo y las separaciones ascendiendo.

El prelado español también destaca el momento de los testimonios como clave en estos encuentros, ya que sirve para que se den cuenta de que no estamos solos y que hay personas viviendo circunstancias similares y podemos aprender cómo las superan. Y el encuentro con el papa es del mismo modo una ocasión, en la cual las palabras del sucesor de Pedro dan luz y pistas para continuar en estos momentos llevando adelante la obra de evangelización.

Reig Pla indica también una dificultad importante que se está viviendo en estos años: la ruptura de la transmisión de la fe que de generación en generación venía haciendo la familia. Esto es un drama serio en la vida cristiana. "Hoy nuestros niños, incluso muchos de los que acuden a solicitar el sacramento de la eucaristía, constatamos que no han sido educados en la fe por sus padres", señala.

Poner en evidencia el gran potencial que tiene la familia para ser espacio que visibilice la fe, siendo coherentes y transmitiendo la fe a los hijos. Una clave en la que Juan Pablo II insistió muchos, incluso habló de una 'catequesis familiar', en la que los padres sean también protagonistas.

Y la pastoral familiar adquiere, por tanto, un rol importante en las iglesias particulares. Por eso el obispo de Alcalá cuenta cómo ha sido el proceso en España. "Ha habido un desarrollo paulatino desde los inicios del post concilio cuando se miraba simplemente como preparación al matrimonio, lo que se llamaba tradicionalmente cursillos prematimoniales, hasta entender que la pastoral familiar es seguir a las personas en su vocación al amor que es el eje mismo de la vida de las personas", indicó el prelado.

La pastoral familiar debe ser transversal porque atraviesa toda realidad de la misión de la Iglesia. Uno no deja de ser un ente familiar aunque esté como niño recibiendo catequesis o como joven en un movimiento juvenil... La dimensión familiar atraviesa todas las situaciones de la vida, cuyo eje es la vocación al amor. Esta vocación es lo que habría que despertar en el mundo de la infancia, ayudar a discernirla, y acompañarla toda la vida.  Por eso explica monseñor Reig que la pastoral familiar no debe ser nunca solamente una pastoral de solucionar problemas, sino más bien la propuesta del Evangelio del matrimonio y la familia, lo que es el Evangelio del amor; para desde ese eje poder desarrollar todas las etapas de la vida de la persona.

Para concluir, el obispo de Alcalá señala dos buenas noticias que han surgido en torno a la familia. Por un lado la iniciativa Uno de Nosotros que ha movilizado a los ciudadanos europeos para defender la vida desde su concepción y hasta ahora ya se ha conseguido que el Tribunal de Estrasburgo afirme que no se pueden utilizar los embriones para investigación.

Otra buena noticia es la que ha surgido en torno a la propuesta llamada Estándares para la Educación Sexual promovida por la Organización Mundial de la Salud. Ha habido una iniciativa de presentar por parte grupos desde los llamados Institutos de la Mujer, donde proponían todo un mundo que pasaba por la manipulación del lenguaje. No se puede definir el aborto como salud reproductiva. Todo este programa presentado ha sido votado en contra en el Parlamento Europeo por la mayoría de los eurodiputados.

Experiencias como estas, señala el obispo, son una muestra de que las aguas no están estancadas. No podemos pensar que estas batallas están todas perdidas. En la medida en la que haya una respuesta social, y en este caso es la Iglesia que tiene la potencia y la luz que le da la fe; vemos que hay muros que se pensaba no podían caer y sí lo están haciendo. Monseñor Reig Pla se muestra convencido de que poco a poco las cosas van fermentando porque con la gracia de Dios se puede.

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SANTOS Y BEATOS: EPOPEYAS DE AMOR. EJEMPLO DEL DÍA


Beata Celine Chludzinska Borzecka
«Polaca. Fundadora, junto a su hija, de las Hermanas de la Resurrección; es el primer caso que se da en la Iglesia. Perdió varios hijos y esposo, viendo en ello la mano de Dios que le permitió ser religiosa, como siempre anheló»

Por Isabel Orellana Vilches

MADRID, 26 de octubre de 2013 (Zenit.org) - La vida de esta beata, de cuya muerte se cumple hoy el primer centenario, es una historia de fidelidad en la espera. Nunca dudó de que la voluntad divina guiaba sus pasos, aunque durante un tiempo otras personas la condujeron por una vía distinta a la añorada, que no era otra más que la consagración religiosa. Al final, se cumplió su honda impresión, y aunque había dado un gran rodeo, llegó al destino soñado.

Nació el 29 de octubre de 1833 en Antowil, antigua ciudad polaca, que pertenece en la actualidad a Bielorrusia, en el seno de una acomodada familia. Era la pequeña de dos hermanos. Con una infancia feliz, que calificó como «años de oro», rodeada de afecto y sintiéndose llamada a ofrendarse por completo a Dios, a los 21 años contrajo matrimonio con Józef Borzęck en la catedral de Vilna. No le fue posible oponerse a la voluntad de sus padres y del prelado, o no lo vio conveniente. Ellos consideraban que lo mejor que podía hacer esa desposarse, y sometió su criterio que siempre se movió con la certeza de que Dios estaba en medio de lo que iba aconteciéndole.

Se afincó en Obremszczyzna, pero no se olvidó de su vocación. Sus quehaceres cotidianos no la apartaban de la oración. Su ascesis estaba impregnada también con el sacrificio. Además, fue golpeada por el dolor en lo que más afecta a una madre: sus hijos. El primero de ellos, Casimiro, nacido en 1855, murió ese mismo año. Tras un periodo de gozo por la llegada al mundo de su hija Celine en 1858, nuevamente en 1861 pasó por el duro trance de tener que enterrar a otra hija, María, que no sobrevivió. Finalmente, en 1863 nació Hedwig, que iba a recorrer junto a ella el sendero religioso al que siempre aspiró. Ese año Celine se involucró en la lucha para rescatar a los prisioneros que iban a ser ejecutados en medio de los conflictos bélicos desatados en una dividida Polonia. Las autoridades rusas la detuvieron y dio con sus huesos en la cárcel, llevando con ella a la pequeña recién nacida.

En 1869 otro zarpazo recayó sobre la familia. Llevaba dieciséis años casada cuandoJózef sufrió un derrame cerebral y quedó paralítico.Buscando para él los mejores especialistas, todos partieron a Viena,confiando en su recuperación. Celine le proporcionó atenciones y ternura a raudales, pero en 1874, hallándose en su domicilio de Obremszczyzna, murió. Tomó a sus hijas Celine y Hedwig, y partió a Roma al año siguiente segura de que estos dolorosos acontecimientos obedecían a un plan divino. Aún recorrió Polonia, Viena y Roma junto a ellas, atendiendo a su educación, pero siempre en un estado de búsqueda, a la espera de entender la previsión de Dios sobre su vida. En 1879 la joven Celine contrajo matrimonio con un muchacho polaco, y la beata coincidió con el cofundador y superior general de la Congregación de la Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo, el siervo de Dios P. Piotr Semenenko, que aspiraba a poner en marcha la rama femenina. En esa época, 1881, ella y Hedwig se disponían a fundar un convento de inspiración carmelita. Pero las conversaciones con Semenenko les hicieron cambiar de plan. En 1882, madre e hija, comenzaron a ser parte de su sueño, preparándose junto a otras cinco aspirantes para acometer la vida religiosa.

En 1884 se asentaron en una casa que tres años más tarde dio lugar a una escuela para niñas sin recursos. Se daba la circunstancia de que en el edificio vivía la familia della Chiesa, hallándose entonces en el domicilio, Mons. Giacomo della Chiesa, que sería pontífice Benedicto XV. Y mientras el P. Semenenko auxiliaba a Celine y a su hija alentándolas en la misión, algo que hizo hasta su muerte en 1886, ellas también contaban con la admiración del que llegaría a ser Vicario de Cristo en la tierra, que fue su capellán y catequista. A estas intrépidas mujeres les enardecía saber que había infinidad de personas a quienes la esperanza parecía darles la espalda, que nunca habían tenido la gracia de que alguien les transmitiera la fe, que les hablara del Dios vivo. La beata conocía muy bien el drama humano plagado de sufrimiento y de injusticias a mansalva. Estaba convencida de que debían «llevar la moral y el renacimiento religioso a la sociedad». La fundación que por primera vez en la historia de la Iglesia acometían una madre y una hija al unísono, surgía de la confianza en Dios; sabían que Él las acompañaría. Contaron con la ayuda del cardenal Parocchi, entonces vicario de Roma.

El 6 de enero de 1891 ambas emitieron los votos perpetuos, y otras tres religiosas tomaban el hábito; esa fecha la consideraron como el día en el que surgía la Congregación de las resurreccionistas, con el objetivo de proporcionar educación a las niñas pobres, que se hizo extensivo después al cuidado de los enfermos. Hedwig fue su primera superiora general. Fueron abriendo casas rápidamente en países del Este. En Polonia tuvieron que extremar la prudencia. Aún quedaban restos de la ocupación rusa, y trabajaron clandestinamente, estableciendo la fundación en Czestochowa, cerca de Jasna Góra, y en Varsovia. Fueron momentos de grandes recuerdos para Celine que había vivido de lleno el inicio de la invasión. Luego dieron el salto a América, donde en 1900 abrieron una casa y una escuela en Chicago. En 1905 la fundación recibió el decretum laudis.

Hedwig, que tiene abierta causa de beatificación, murió repentinamente en Kety, Polonia el 27 septiembre de 1906; contaba con 43 años. Celine no solo volvió a sufrir la pérdida de otro de sus hijos, sino la de su fiel compañera y hermana en religión. Fue un durísimo golpe. En 1911 el primer capítulo general de la Orden la eligió superiora general, misión que asumió hasta el final de sus días. Entregó su alma a Dios el 26 de octubre de 1913 en Malopolskie, Cracovia, cuando iba de camino a Varsovia en visita apostólica; estaba a punto de cumplir 80 años. Fue beatificada el 27 de octubre de 2007 por el cardenal Saraiva que actuó como Delegado de Benedicto XVI.

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