18.02.14
Poca cosa hay más falaz que presentar la disidencia pura y dura con la doctrina de la iglesia bajo capa de mansedumbre, humildad, bonhomía, deseo de autenticidad y vuelta al más puro espíritu del evangelio, en el camino del Vaticano II, y en la confianza de que “volverá a reír la primavera, que por cielo, tierra y mar se espera”. Echo en falta lo de “arriba hermanos a vencer, que en la Iglesia empieza a amanecer”, pero lo dejo como sugerencia por si a alguno le vale.
Otra vez con el cuento de la iglesia de base que dice, que piensa, que profetiza. En esto R D es un manantial inagotable. Hace apenas unos días nos cuentan que “La Iglesia de base se “rebela” contra la política de la jerarquía en materia de familia y moral sexual”.
Lo primero en estas cosas es tratar de comprender qué leches es eso de la iglesia de base, porque la cosa tiene su guasa. Un servidor ya hizo en su momento sus reflexiones sobre el particular en las que hoy me ratifico plenamente. Pues bien, lo que RD entiende en esta ocasión por “iglesia de base” son sus lectores y los seguidores de una cosa que se llama “Església Plural”, tan monolítica en su pensamiento que tiene que denominarse “plural” pare despistar. Plural, plural, la parroquia de doña Rafaela, donde caben todos.
Pues lo que hemos podido ver en ese artículo de RD es que sus lectores de forma mayoritaria andan en las antípodas de la doctrina y moral de la Iglesia. Lo que hemos podido comprobar es que los frutos de “Església Plural” son exactamente los mismos: disidencia, confrontación y echar por tierra básicamente el sexto mandamiento. Y tienen la verdad porque para eso son la iglesia de base, la que está con el pueblo, la cercana a los pobres, la humilde, sencilla y franciscana iglesia. Pues si esos son los frutos de unos y otros… qué quieren que les diga.
¿Y los que no pensamos como ellos? Pues evidentemente antievangélicos, aferrados al poder, inmovilistas, carcas, cavernarios, neocon e infocatólicos. Vale. Con su pan se lo coman.Rafaela es pura base, y lo que dice es que la doctrina no es mala, lo que pasa es que no nos gusta porque cuesta, y que menos protestar y más confesarse. Antón y Pilar, cinco años casados, dos hijos, no tienen problema. Carmen, con su edad más que provecta, tampoco se siente disidente. Las misioneras de la caridad pidiendo a Dios fuerza para vivir sus mandatos. En la parroquia lo que veo, lo que hablo con la gente, es que hay situaciones que nos duelen, que muchas cosas cuesta comprenderlas, pero que no se arreglan con un referéndum sobre la validez actual del no cometerás adulterio.
Pero claro, es que nosotros somos iglesia de altura. Porque una parroquia donde el Santísimo es adorado de manera perpetua, donde se confiesa y se celebran los sacramentos según manda la iglesia, y encima tiene por párroco un bloguero de Infocatólica, tiene que ser necesariamente de altura, de mucha altura, y la verdad está en la base y en la opción por los pobres por más que tengan en Cáritas lo que tengan.
Ya está bien de alentar toda disidencia escudándose en que son la iglesia de base, y como tal profética, bíblica, evangélica, apocalíptica, mesiánica, modélica y fundamentalmente estética. Dice Rafaela: pero nada católica y completamente insípida. Ya saben como es esta mujer.