Santiago Mata, blog La Catedral de los Mártires

Enric Salvà Ministral (fray Carmel de Colomers), de 62 años y nacido en esa localidad gerundense, fue asesinado en Valls (Tarragona) el 25 de agosto de 1936, víctima de la primera gran saca del barco prisión Río Segre, de 5.000 toneladas, donde llegaron a estar encerrados 300 presos, de los cuales, según Antonio Montero, salieron 218 sentenciados a muerte. Las fechas con mayor número de ejecuciones fueron las del 25 y 28 de agosto y el 11 de noviembre. El primero de esos días salieron 60 personas en cuatro sacas, por la mañana, a mediodía, por la tarde y por la noche. La más nutrida de clérigos fue la de las 18 horas, en un camión con toldo escoltado por cuatro coches, que llevaba a 12 presos: diez sacerdotes seculares -cuatro beatificados-, más fray Carmel de Colomers y el claretiano Vilamasana; y que había dejado en un comité de Tarragona a tres lasalianos que serían ejecutados al día siguiente. En Valls, a esta docena se le unió otra de jóvenes católicos, y atravesaron las calles de la Muralla cantando, bajo la dirección de Pere Farrés Valls, chantre de la catedral de Tarragona, el credo y un himno de perseverancia (Amunt germans!), mientras los milicianos explicaban que traían “curas o perros de esa clase”. Pasado el cementerio, en el kilómetro dos de la carretera del Pla, fusilaron a los 24, “en presencia del comité y de numerosos vecinos de Valls convocados al efecto, iluminada la escena por dos potentes faros de automóvil”, según Montero. Mientras los ejecutores lo celebraban en un bar de la calle Portal Nou, el sepulturero llegó con un camión para llevar al cementerio a las víctimas, alguna de las cuales aún vivía. Ver sobre la última saca del Río Segre el artículo del 11 de noviembre.

Fusilamiento público en Valls