Conferencia Episcopal
El arzobispo es gallego

El cardenal Rouco Varela peregrinará a Santiago con más de tres mil jóvenes para celebrar las bodas de plata de la JMJ

El cardenal arzobispo de Madrid, monseñor Antonio María Rouco Varela, quiere conmemorar las bodas de plata de la IV Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) peregrinando. Lo hará en agosto y partirá desde Sarria.


 

Acompañado de tres mil jóvenes de la diócesis que ahora dirige, el que hasta hace poco era presidente de la Conferencia Episcopal Española pretende rememorar el espíritu de un encuentro que en 1989 consiguió reunir en Monte do Gozo a casi medio millón de jóvenes de todo el mundo y en cuya organización tuvo un papel especial monseñor Salvador Domato, el hombre que preparó las tres visitas de dos Papas a Galicia.

Las Jornadas Mundiales de la Juventud nacieron en 1984 por iniciativa de Juan Pablo II. La primera se celebró precisamente aquel mismo año en Roma, coincidiendo con el domingo de ramos. Ante el éxito de la convocatoria, el pontífice decidió consolidar este tipo de macroencuentros y, en agosto de 1989, Compostela se convertía en la primera ciudad española que acogía una JMJ. Entonces monseñor Rouco era arzobispo de Santiago y ejerció de anfitrión de la marea de fieles que se acercó a la capital gallega para ver al papa Juan Pablo II. Muchos de los participantes llegaron a la ciudad del Apóstol a pie, después de recorrer cientos de kilómetros a lo largo del Camino.