«De la educación de los chicos de hoy depende el futuro»

Mons. Aguer denuncia la decadencia educativa en Argentina

 

El arzobispo de La Plata y presidente de la Comisión Episcopal de Educación Católica, monseñor Héctor Aguer, advirtió que el carácter integral de la educación «está en peligro», expresó su preocupación por la «muy grave» decadencia educativa en la Argentina y volvió a criticar el carácter ideológico de algunas materias. En su columna semanal en el programa Claves para un Mundo Mejor, que se emite por el canal de cable América 24, el prelado atribuyó este problema a la falta de reconocimiento a los docentes, la ausencia de seguimiento de la escolaridad de los niños por la familia y los cambios en los contenidos, entre otras cosas.

05/05/14 6:53 PM


(Aica/InfoCatólica) «La educación es algo más que la instrucción. Entonces: ¿con qué universo mental salen los chicos de la escuela? Podemos añadir aquí que el problema que se plantea es de carácter ideológico, con la orientación de algunas de las nuevas asignaturas que se han ido introduciendo en el currículum», indicó.

Ideología de género

Monseñor Aguer se refirió puntualmente a materias como Construcción de Ciudadanía y Amor y Adolescencia, en las que denunció «cómo se ha introducido allí la ideología de género, cómo se da acceso al conocimiento de las cosas sexuales y con qué orientación. Se observa la falta de una antropología es decir de una idea del hombre centrada en el orden natural; lo que el hombre es por su naturaleza, por la creación de Dios en definitiva».

El futuro depende de la educación

El arzobispo platense aludió a la responsabilidad de los políticos y de toda la dirigencia en un tema en el que se juega el futuro del país, y concluyó: «No pienso solamente en los gobernantes –agregó-, sino en la dirigencia general del país, que tiene que plantearse en serio que va a pasar dentro de unos años porque de la educación de los chicos de hoy depende el futuro de la Argentina. Y depende el mañana muy cercano de la Argentina que quizás lo vamos a sufrir nosotros mismos».

Texto completo de la reflexión de Mons. Aguer.