A través de diversas instituciones misioneras -diócesis, órdenes religiosas, asociaciones-, cuatro jóvenes de Albacete se van a otros países, movidos por la alegría de anunciar el Evangelio y trabajar por la promoción humana. Los jóvenes marchan hacia Guatemala y Santo Domingo. Maricarmen Alfaro es orientadora en Dominicas de la calle Salamanca, tiene dos hijos y siempre ha tenido deseos de tener esta experiencia en misiones, ella estará en un colegio en Teleman en Guatemala. Mientras que maestros de los colegios Dominicas Ntra. Sra. del Rosario, Alejandra Roca, y del colegio El Ave María, Mercedes y Miguel Martínez estarán un mes en la escuela hogar Armando Rosemberg en el barrio sabana perdida de Santo Domingo. Miguel ya estuvo el año pasado en Bolivia y ahora repite en una misión diferente junto a su novia y hermana. 

-Alejandra, ¿por qué este deseo de salir y tener una experiencia en misiones?

-A veces la comodidad nos vuelve egoístas, con derecho a todo y todo nuestro bienestar pende de un hilo. Sentíamos la necesidad de ayudar aquellos que no tienen una vida tan favorable como la nuestra.

Además, creemos que esta experiencia nos ayudará a crecer como personas, en valores y actitudes que lamentablemente a día de hoy se están perdiendo.

Quizás la pregunta que deberíamos hacernos es: ¿Y por qué no?

-Mercedes, ¿cuál es vuestra misión?

-Nos vamos a Santo Domingo, República Dominicana, con las religiosas Operarias del Divino Maestro de las religiosas Avemarianas.

Nuestra misión será la de atender las necesidades de la Escuela Hogar Armando Rosemberg. Una escuela dónde los niños también son internos ya que no tienen familias o sus familias son muy desfavorecidas.

Visitaremos a las familias para evaluar su situación, ayudaremos en la construcción de una nueva parte de la escuela y visitaremos a otras comunidades en las que hay misión.

-Miguel, ¿Cómo os habéis preparado?

-Nuestra formación misionera empezó el curso pasado, en el grupo misionero de la diócesis. Nos juntamos una vez al mes en la parroquia del Buen Pastor para dar respuesta a nuestras inquietudes misioneras. Los misioneros Javieranos son los encargados de guiar este “curso” misionero. Además de este grupo hay otro en Hellín y desde aquí nos gustaría animar a todos aquellos que tengan inquietudes misioneras a que nos conozcan y puedan unirse a este grupo.

En estos encuentros tratamos temas de misión, de actualidad, recibimos formación misionera y son muchos los misioneros que pasan para dar su testimonio de vida y de fe.

Además de este grupo misionero, al irnos con una congregación religiosa, recibimos un pequeño curso de formación sobre el sitio dónde vamos a ir y cosas concretas de la misión de Santo Domingo 

-Mari Carmen, ¿dónde vas?, ¿qué vas a hacer allí?  

-Voy a un pueblo de Guatemala llamado Teleman, a un centro educativo donde las hermanas dominicas de la Anunciata dan servicio al pueblo Maya-Qeqchi de la zona del Polochic en la Verapaz al norte de Guatemala, acogiendo a niños, niñas y jóvenes de escasos recurso.

Las hermanas lo cuentan así:” Nuestra misión puede resumirse en el sueño hecho proyecto de nuestro fundador el Padre Coll: “Iluminar con la sana doctrina las tinieblas de la ignorancia”. Es para nuestra congregación religiosa el imperativo característico que nos envía y propone la escuela como lugar privilegiado por la vivencia y el anuncio de la Buena Noticia de Jesús que vino para que tengamos vida y vida en abundancia”.

Voy a trabajar en el colegio, en principio para hacer lo que en el centro donde trabajo, FEFC Ntra. Sra. del Rosario en Albacete, atender a alumnos con dificultades, compartir con profesores, hablar con las familias, charlas a jóvenes sobre alcohol, drogas, sexualidad,…..intentando colaborar en la Misión de las Hermanas.

-Y, ¿qué esperas de esta experiencia?

-Un enriquecimiento personal, que se producirá por el contacto con otras personas y cultura, y espiritual. El hecho de tomar distancia de mi estilo de vida, comodidades, ritmo,… que a veces me dificulta tanto el pararme a pensar el sentido de las cosas que hago, pienso que va a ser muy gratificante. Sobre todo la experiencia de ayuda mutua desde la acción y en comunidad.        

 (Diócesis de Albacete)