CARTA DEL OBISPO

JORNADA “PRO TEMPLOS”

El templo, casa paterna abierta a todos

Domingo 10 de agosto de 2014

 

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SANTANDER | 08.08.2014


Queridos hermanos:

            Desde hace años en el verano, nuestra Diócesis de Santander celebra una Jornada “pro templos”, en favor de su conservación, rehabilitación y restauración.

 La hacemos en el mes de agosto, porque en estas fechas muchos cántabros y paisanos nuestros se encuentran en su ciudad y en sus pueblos para descansar, reencontrarse con sus raíces y celebrar, en muchos casos, las fiestas patronales.

La Jornada tiene como finalidad crear conciencia comunitaria de la importancia de nuestros templos, iglesias y ermitas.

 El templo es el rostro histórico y el patrimonio recibido de nuestros mayores. El templo es la presencia eclesial en el territorio, lugar de la escucha de la Palabra, del crecimiento de la vida cristiana, del diálogo, del anuncio, de la caridad generosa con los pobres, de la adoración, de la celebración. El culto, la catequesis, la cultura han modelado el ambiente en el que el pueblo fiel y creyente aprende, celebra y vive la propia fe. Nada define mejor las ‘señas de identidad’ de un pueblo que su templo, iglesia o ermita.

Hemos elegido como lema para la jornada de este año 2014: El templo, casa paterna abierta  a todos. El templo es el rostro visible de la parroquia, comunidad de fieles. La parroquia es “la misma Iglesia que vive entre las casas de sus hijos y de sus hijas” ( Christifideles laici, 26); la fuente de la aldea. Es un lugar donde todo el mundo puede sentirse acogido, amado, perdonado, alentado a vivir según la buena nueva del Evangelio. “La Iglesia no es una aduana, es la casa paterna donde hay lugar para cada uno con su vida a cuestas” (Papa Francisco, Evangelii gaudium, 47).

Me consta el gran esfuerzo que están realizando los pueblos por mantener con dignidad los templos y ermitas. Son muchos los sacerdotes y los fieles que están trabajando con verdadero interés en este campo. Hay personas celosas y vigilantes que quieren reparar su iglesia, su templo y su ermita, porque en ello está en juego lo más preciado de sus raíces religiosas, humanas y culturales.

Para que los templos se rehabiliten y restauren, hacen falta medios económicos abundantes, porque nuestra Diócesis, que peregrina en Cantabria y el Valle de Mena, cuenta con unos 1.200 templos, capillas y ermitas.

Se ha fijado este año 2014, el domingo, día 10 de agosto, la colecta diocesana extraordinaria “pro templos”, con el objetivo de recaudar fondos para ayudar a la rehabilitación y  restauración de los mismos. El Sr. Vicario Episcopal para Asuntos Económicos y Administrativos envía propaganda y materiales para realizar bien esta Jornada.

            Me adelanto a daros las gracias por todo lo que estáis haciendo en este campo de la conservación de los templos, para que pueda celebrarse dignamente la fe, sean lugares de las asambleas litúrgicas y espacios de cultura.

            Con mi afecto de siempre, gratitud y bendición,

 

+ Vicente Jiménez Zamora
Obispo de Santander