Apoyo del Papa al referéndum profamilia en Eslovaquia

AFP/AFP/Archivos - Una mujer pasa en frente a una valla con el retrato del Papa Francisco, en Bratislava el 3 de febrero de 2015. La leyenda instando a las personas a votar en el referéndum para mantener o prohibir el matrimonio homosexual en Eslovaquia

Al lobby gay le ha sentado muy mal el saludo del Papa Francisco en la audiencia del 4 de febrero:

Saludo a los peregrinos procedentes de Eslovaquia y, a través de ellos, quiero expresar mi agradecimiento a toda la Iglesia eslovaca, animando a todos a continuar sus esfuerzos en defensa de la familia, célula vital de la sociedad.

Y es que mañana se vota en Eslovaquia un referendo con tres preguntas:

  • Matrimonio. ¿Está Vd. de acuerdo que ninguna otra forma de cohabitación excepto la unión entre hombre y mujer sea calificada de matrimonio?
  • Adopción. ¿Está Vd de acuerdo que ni parejas del mismo sexo ni otro tipo de grupos deben poder adoptar y educar a los niños?
  • Educación sexual. ¿Está de acuerdo en que los colegios no pueden ofrecer educación sexual sin el consentimiento de sus padres con el contenido de esas lecciones?

La consulta ha sido impulsada por la Alianza por la Familia (AZR), que agrupa a un centenar de asociaciones. Logró reunir unas 420.000 firmas, un 8% de toda la población. La movilización ha seguido la estela francesa de la «Manif por Tous» y esperan cosechar los mismos éxitos recientes de  Croacia o Macedonia. El famoso pulmón europeo oriental, en palabras de San Juan Pablo II, podrá oxigenar esta sociedad: Polonia, Hungría, Croacia, Serbia, Montenegro, Bulgaria, Letonia, Lituania, Bielorrusia, Ucrania y Moldavia, tienen constituciones que  protegen a la familia natural.

Por primera vez en Eslovaquia, como antes ocurrió en Croacia, la Iglesia Católica ha desempeñado un papel fundamental, animando al voto y facilitando la financiación y logística de la campaña, permitiendo que las parroquias se usaran como punto de recogida de firmas.

La progrez suspira porque no se llegue al 50% de participación y por lo tanto el referéndum no sea vinculante. De ahí la importancia de las palabras de apoyo del Santo Padre en la víspera.  No les queda otra dado que los últimos sondeos muestran que el 89% de los eslovacos están a favor de la definición del matrimonio natural y el 79% en contra de la adopción por parejas homosexuales.

En junio casi el 70% de la Naródná Rada (Cámara Nacional de Eslovaquia) votó a favor de la reforma constitucional que define el matrimonio como el «vínculo único entre un hombre y una mujer. La República de Eslovaquia protege absolutamente el matrimonio y procura el bien del mismo».

Con esta medida, el partido de izquierdas gobernante, quería poner fin a los reiterados intentos de 1997, 2000 y 2012, de introducir el gaymonio en el país por la vía directa o por la puerta de atrás. La reforma apostilla en las motivaciones que «no es posible que los derechos y obligaciones derivados del matrimonio le sean conferidos a algo que no sea la unión legalmente reconocida entre un hombre y una mujer», que no sólo cierra el paso a las uniones civiles, también protege a los niños.


 

Nota:

En CitizenGO hay una campaña de apoyo al pueblo eslovaco por el referendum.