«¡Ey!, mamá y papá, por acá todo bien»: una ecografía de 20 semanas

El Daily Mail trae una de esas historias «tan suyas». Paul Schofield  y Cheryl Stevenson, matrimonio treintañero presenciaba la ecografía de las 20 semanas, la imagen de su segundo hijo. LSN también se hace eco.

La criatura les «regaló» un ok con el pulgar hacia arriba cuando era movida para poder determinar el sexo. Parecía decir, «no fastidien, por acá todo bien». Las enfermeras del Saint Mary de Manchester dijeron a la pareja, que estaba tronchada de risa, que nunca habían visto una imagen así.

Los que somos padres sabemos de la emoción de esos momentos, de lo maravilloso que parece todo, incluso una foto de chiripa. Una risa floja de alegría que incluso se contagia al personal sanitario con tanto callo en estas situaciones.

Pensaba que así era, que el bebé estaba en el mejor de los mundos, en el seno de su madre, protegido, querido, cuidado.

Luego la realidad se encargó de abofetearme. Ese bebé tiene la suerte de unos padres como Paul y Cheryl, para muchos otros ese «lugar» no es tan seguro, y si tuviese alguna discapacidad, fuese mujer o cualquier otro motivo caprichoso, el gesto con el dedo sería el preámbulo de su exterminio. Quizá quemado con sal, decapitado, triturado con pinzas.

Y lo peor de todo, sus padres defenderán que hacer eso es «un derecho»