Diócesis
Por motivos personales relacionados con su salud

Esteban Escudero, obispo de Palencia, renunciará al cargo para trasladarse a Valencia en calidad de obispo auxiliar

Ocupará el nuevo puesto hasta su jubilación

Dentro del juego de ajedrez que se está produciendo, previo a la designación de obispos en las sedes vacantes españolas, inicio del proceso de renovación del episcopado español, se ha producido un nuevo dato que puede cambiar el mapa de la provisión de las diócesis españolas: la solicitud del obispo de Palencia, monseñor Esteban Escudero, de renunciar a su diócesis para trasladarse a Valencia, lugar en el que pasaría a ser obispo auxiliar hasta su jubilación.

Esta propuesta habría contado con la generosidad que caracteriza al arzobispo de Valencia, cardenal Antonio Cañizares, tal y como ya hizo en Toledo con monseñor Joaquín Carmelo Borobia. Monseñor Borobia Isasa fue obispo de Tarazona entre 1996 y 2004, año en el que fue nombrado obispo auxiliar de Toledo. Benedicto XVI aceptó su renuncia por motivos de edad el 3 de diciembre de 2010.

El actual obispo de Palencia, que aduciría motivos personales relacionados con su salud, fue nombrado por el Papa Juan Pablo II obispo auxiliar de Valencia el 17 de noviembre de 2000, recibiendo la consagración episcopal el 13 de enero de 2001. El 9 de julio de 2011, el Papa Benedicto XVI le nombró obispo de Palencia. Y el 29 de agosto del mismo año comenzó el ministerio episcopal en esa diócesis.

La diócesis de Palencia está considera como una diócesis compleja por la influencia que todavía sigue ejerciendo el que fuera su obispo, monseñor Nicolás Castellanos Franco, miembro de la Orden de San Agustín. En la biografía publicada en la página web de su Fundación, se describe así su paso por Palencia: “Como Obispo de la Diócesis de Palencia, Nicolás Castellanos siguió una vida sencilla, sin cambiar su domicilio habitual en la Plaza San Miguel para ir a vivir al Palacio Episcopal, ejerciendo el Ministerio de Obispo y Pastor al estilo evangélico, siempre al lado de los más débiles, cercano y amigo de todos. Disfrutaba visitando zonas marginales, compartiendo con la gente humilde, los ancianos; saludando con ternura y cariño a todos los niños huérfanos y vivió cada rincón marginal de su Diócesis”.

Monseñor Castellanos, que goza de una amplia presencia mediática en esa provincia, fue nombrado obispo de Palencia el 27 de julio de 1978 y el 30 de septiembre recibió la ordenación Episcopal. Juan Pablo II aceptó su renuncia al gobierno pastoral de Palencia el día 4 de septiembre de 1991, “accediendo así a su deseo de dedicarse al trabajo misionero en Bolivia”, según informa en su nota biográfica la Conferencia Episcopal Episcopal.

También fue obispo de Palencia, en sustitución de monseñor Castellanos, el actual presidente de la Conferencia Episcopal, cardenal Ricardo Blázquez.