Expropiando tierras a sus propietarios

El gobierno de Sri Lanka construye a la fuerza tempos budistas en una región donde solo hay cristianos e hinduístas

 

Con la complicidad del ejército, el gobierno de Sri Lanka está construyendo templos y monasterios budistas a la fuerza fuerza en los distritos norteño de Mullathivu y Kokilai, habitados por tamiles hinduístas y cristianos. La población local acusó a las autoridades de querer complacer a la mayoría cingalesa y budista, y el 5 de junio se manifestó también en contra de esta iniciativa. La policía detuvo a cuatro de los organizadores de la manifestación, liberándolos sólo gracias a la intercesión de algunos políticos locales y la promesa de no planear más protestas similares.

10/06/15 7:28 AM


(Asia News/Infocatólica) La mayoría de los habitantes de la zona se compone de antiguos desplazados internos, que sólo recientemente están empezando a recuperar sus tierras perdidas durante la guerra.

Anthony Jesudasan, activista Tamil católico por los derechos humanos, dijo a AsiaNews: «Incluso si están acompañados por los militares, no se puede construir lugares de culto budistas permanentes, quitándole las tierras a los propietarios. Es realmente deshonesto. Aquí viven sólo hindúes y cristianos. Podemos aceptar la construcción de templos budistas sólo si decidieran crear un nuevo pueblo multiétnico».

Sin sentido

Incluso varios sacerdotes tamiles católicos y presbíteros anglicanos han criticado la iniciativa del gobierno: «Miles de personas aún no han recibido la tierra, y los utilizan para construir lugares de culto que no pertenecen al credo de estas comunidades. ¿Qué sentido tiene este comportamiento?».

«No estamos en contra de los budistas - aseguran algunos residentes de la zona - no los molestamos. Entonces, ¿por qué el ejército hace esto? ¿Cuándo volveremos a tener un poco de paz?».

El conflicto, que comenzó como una guerra civil para derrotar a los rebeldes separatistas del Liberation Tigers of Tamil Eelam , que intentaban crear un Estado tamil en el noreste del país. Pero con el tiempo ha asumido los contornos de un verdadero conflicto étnico.